Las puertas del hospital Taeko se abrieron con fuerza irrumpiendo la tranquila noche en la sala de urgencias, asustando a las enfermeras y médicos que al ver la camilla se pusieron en alerta.
-Ko, resiste vas a estar bien –Satoru corría a un lado de la camilla en la que el castaño yacía inconsciente, la preocupación y lágrimas eran evidentes en el rostro del mayor que no quitaba los ojos del rostro de su hermano.
-Kouchan no me hagas esto, abre tus ojitos –Reo a otro lado de la camilla estaba en la misma condición.
-¿Que sucedió? –El medico de turno se acercó a los paramédicos que estabilizaban al paciente.
-Paciente de 16 años fue encontrado en una bodega abandonada, con múltiples contusiones en el rostro y cuerpo, posible violación, signos vitales decayendo y en estado de shock, se trata de estabilizar pero no responde.
-Llévenlo a intensivo, Yui prepara el equipo –Se giró hacia la enfermera que corrió hacia la sala para prepararse- Ustedes deben esperar en la sala de espera –Se dirigió a los dos chicos que trataban de seguir a los paramédicos.
-Doctor, por favor salve a mi hermano –Satoru tomo por los hombros al médico que palmeo la mano apartándola con delicadeza.
-Hare todo lo posible–Se inclinó un poco para perderse tras la sala donde el castaño fue llevado.
-Ko –Satoru golpeo la puerta donde el cuerpo de su hermano estaba siendo tratado, con lágrimas se deslizo para quedar arrodillado apoyando su frente en la fría puerta- K…es…mi…culpa…si..yo.. –Las palabras no salían al recordar el estado en el que estaba su pequeño, reo se acercó al mayor que se deshacía en llantos, su corazón estaba destrozado y solo podía brindarle un poco de calor que no fue rechazado por satoru, quien se abrazó a su cuerpo ocultando su rostro.
-Kouchan –Susurro con dolor acariciando la castaña cabellera justo al momento que la puerta fue abierta dejando entrar al grupo de chicos que siguió la ambulancia en auto.
-¿Cómo está el chihuahua? –Grito el moreno acercándose a los dos que estaban abrazados en el suelo, reo bajo su mirada mordiéndose el labio- Respondan –Se adelantó molesto por el silencio, pero fue detenido por Midorima.
-Aomine –El tirador arreglo sus lentes- Recién acabamos de llegar, lo están atendiendo, nanadayo.
-Pero-
-Ahomine, no eres el único preocupado por furi –El tigre apretaba sus manos con impotencia- Guarda silencio –Se mordió el labio, su cuerpo temblaba furioso.
-Maldición –Exclamo golpeando la pared a su espalda, los demás se acercaron a las dos personas que lloraban en el suelo, todos estaban preocupado por el estado del castaño.
..........
En otra parte de la ciudad Akashi llegaba a su mansión luego de una cena con los diversos directores de ambas empresas, que se unieron a la celebración del compromiso luego de dar a conocer la noticia a todo el mundo.
-Que agotador día, hijo –Masaomi entro detrás del menor con una sonrisa de oreja a oreja- ¿Quieres tomar un café conmigo?
-No padre me iré a dormir –Subió la escalera dejando a su padre solo, antes de llegar a su habitación su celular sonó avisando la llegada de un mensaje, con rapidez lo abrió para revelar lo siguiente.
“Akashi-sama, junto con saludar informo que el trabajo está realizado, furihata kouki se encuentra en el hospital en desconocido estado, cualquier noticia se le informara a la brevedad, Atte. Sawada”
Al terminar de leer el mensaje una extraña sensación se apodero de su pecho, el rostro del castaño vino a su mente preocupándolo, con rapidez sacudió su cabeza frunciendo el ceño molesto “¿Por qué me preocupo por esa puta?, Se lo merece” Tiro su celular hacia la cama dirigiéndose al baño para tomar una ducha y dormir luego de ese largo día.
..........
Pasaron cerca de 2 horas desde que Kouki fue ingresado a intensivos, los nervios de todos estaban al borde del colapso y las preguntas de quien causo ese daño al cachorro se repetía sin tener alguna pista, Satoru junto a sus amigos estaban apartado de los demás donde el castaño se enteró de la amenaza del pelirrojo de lastimarlo con lo que más le duele.
-Ese hijo de puta, lo matare –Satoru se dispuso salir para matar al pelirrojo, pero fue detenido por shiba y yoru.
-Cálmate sato, no estamos seguros de que es el culpable –Shiba lo agarraba por la cintura evitando que se soltara.
-Que me calme, como quieres que lo haga con lo que me dijiste –Bramo furioso revolviéndose para liberarse llamando la atención de la Kiseki y los demás.
-Nosotros investigaremos, pero cálmate –Yoru forcejeaba para detener al castaño.
-No, iré a matar a ese mal nacido, suéltenme -
-Sato tienes que estar aquí, ko te necesita –Sora sabía que con eso calmaría al castaño, que al escuchar el nombre de su hermano se congelo- Necesitas estar cuando despierte.
-Sora tiene razón, furitan te necesita aquí, nosotros nos encargaremos de investigar –Soltó al castaño dándole espacio- Confía en nosotros, tu solo preocúpate de furitan.
-P…pero –Lagrimas de impotencia empañaron sus ojos- Si hubiera estado con él.
-Sato –Le toco el hombro- Quédate aquí, con Sora iremos a investigar, avísanos cuando despierte Furi-chan.
-Está bien, gracias –Levanto la mirada sonriendo agradecido por el apoyo de sus amigos.
Los demás que estaban pendiente de la conversación escucharon pocos fragmentos de la disputa, de reojo vieron como shiba y sora salían del hospital, siendo seguidos por kotaro y eikichi mientras los otros se quedaban esperando noticias del cachorro.
-Es mi culpa –Satoru estaba sentado al lado del rubio luego de que sus amigos se marcharan- Si hubiera ido con ko…
-No es verdad, Satocchi –Kise miraba ansioso la puerta donde el castaño ingreso, esperando que algún medico saliera y le dijera la condición del castaño que llevaba más de 3 horas en intensivos.
Como si su deseo fuera escuchado, la puerta se abrió al fin dejando paso al médico de turno, quien salía con una carpeta en la mano y con claras ojeras en su rostro.
-Familiares de Furihata Koki –Llamo mirando el nombre del expediente, haciendo que todos se levantaran al escuchar el nombre del cachorro.
-Aquí, soy su hermano y ellos sus amigos –Explico señalando a los chicos a sus espaldas- ¿Cómo está mi ko, se encuentra bien?
-El paciente llego en malas condiciones pero logramos estabilizarlo, tiene varias contusiones en su rostro y cuerpo.
-E…entonces –Reo recordaba los chupetones en el cuerpo del castaño- ¿Fue violado? –Pregunto con un nudo en el pecho.
-No, los estudios realizados demostraron que no alcanzo a ser violado –Reo sintió que el nudo se aflojaba un poco, pero no desapareció del todo.
-Menos mal –Kise lloraba aliviado al saber eso abrazándose al halcón.
-Pero –El medico bajo la mirada ante la noticia que debía dar- Debo informar que a raíz de la tensión y lo sucedido tuvo un ataque de ansiedad grave, que obligo a su cerebro apagarse en defensa, por lo que no podemos estimar algún otro daño hasta que despierte y no sabemos cuándo lo haga…
-¿Q…que? –
Continuara…