Eran cerca de las 7 de la mañana cuando el auto de Hayato se estacionaba frente a la guarida donde un pelinegro rogaba salir con vida de lo que se le avecinaba, como siempre liderando el grupo el peliplata avanzo sin dudar llegando a la entrada quien era esperado por un serio Kojiro que se intimido frente al cuarteto, pero siguiendo las indicaciones de Makoto no mostro rastro de miedo.
-Buenos días Kurosawas-san –Kojiro saludo al cuarteto quienes se sorprendieron ante el saludo del chico, sus semblantes se endurecieron dándole a entender que estaban en el lugar correcto.
-Veo que sabes quienes somos –Hayato hablo mirando al chico quien asistió- Eso nos ahorra tiempo, Makoto Hanamiya nos espera.
-Así es –Abrió la puerta a su espalda- Adelante.
-Gracias –Dijo el peliplata pasando con el trio quien no perdía detalle de la guarida teniendo sus manos listas cerca de sus armas en caso de ser una emboscada, pero al entrar no se esperaron ver al líder de la banda sentado en un sofá con un café frente suyo y a sus espaldas sus hombres quienes estaban con un serio semblante.
-Hanamiya Makoto debemos hablar –Kudo no pregunto sino que ordeno al pelinegro quien trago en seco.
“Es hora de comenzar las negociaciones” Pensó el pelinegro quien se levantó para afrontar el gran obstáculo que tenía delante.
………
En el hospital los amigos del cachorro en compañía de shiba y sora desayunaban ya que sus estómagos luego de tanta tensión les reclamaba por algo de alimento, trasladándose así todo el grupo a la cafetería vacía del recinto, todos comían conversando del nuevo compañero de cuarto del cachorro que según el trio no pudieron conocer mucho ya que estaba dormido cuando fueron, pero la pantera sin reservarse dio su opinión sobre el rubio desabrido como lo llamaba.
-Pero Aominecchi –Kise sonreía ante la mueca molesta del moreno quien no aceptaba al rubio como compañero del chihuahua- Debes ver el lado positivo de esto.
-¿Qué tiene de positivo? –Pregunto alzando una ceja- Era mejor dejar al chihuahua aislado no era necesario meterlo con ese desabrido que ni conocemos.
-Cálmate Ahomine –El tigre trago al ver la mirada de la pantera, pero siguió- Por lo menos furi estará con alguien las 24 horas del día.
-Bueno, bueno calma –Sora sonrió débilmente- Nosotros ya hablamos con Nash-san y les aseguro que no es una mala persona.
-Lo que dice sora es cierto –Dijo una voz a sus espaldas, sora al escucharlo se giró encontrándose con Sato y Yoru quien entraron en el preciso momento.
-Chicos –Shiba se levantó- ¿Que hacen despiertos? –Pregunto con una cálida sonrisa al dúo, el grupo solo se limitaba a mirar como siempre.
-Un estomago nos despertó –Respondió Yoru con una sonrisa maliciosa mirando a shiba que frunció el ceño.
-Pero shiba no fue hacia el dormitorio –Naru siguió la broma del pelinegro que amplio su sonrisa- No me digas que tienes un nuevo don shiba, ahora despiertas a los demás a distancia, increíble –Dijo fingiendo asombro.
-Naru idiota –Shiba golpeo al rubio quien esquivo el golpe sonriendo.
-Hehhe no fue shiba esta vez quien nos despertó –Satoru se reía ante la reacción de sus amigos- Fue otro el culpable.
-Me imagino que fue Reo –Eikichi comento siendo apoyado por el dúo a sus espaldas.
-Acertaste –Yoru sonrió y es que desde que hablo con satoru se sacó un peso de encima arrancando esa rabia en su pecho convirtiéndola en solo una llama determinada en su pecho.
Todos rieron ante los comentarios que siguieron lanzando dejando un agradable momento para todos quienes estaban a flor de piel hace solo unas horas atrás, estaban tan concentrados en las bromas de Naru hacia shiba que no se percataron la desaparición de uno de sus integrantes. (A que no adivinan quien es :D, comenten antes de que bajen para ver cuantas aciertan)
………
En las afuera de esa cafetería un chico de celestes cabellos esperaba que alguien al otro lado de la línea le contestara, sabía que estaba arriesgando mucho con ello pero sentía que debía conversar con cierto pelirrojo que lastimo a su compañero en persona, ya que él había ayudado al emperador a tener al cachorro como pareja, ahora que conocía una parte de la historia solo le faltaba conocer la versión del pelirrojo siendo esta de vital importancia para decidirse ayudarlo o no.
-K…k…kuro…ko –Murmuro un pelirrojo entre sollozos sin poder salir aun del shock, de milagro logro conectar la llamada y es que se sentía la peor mierda del mundo, Kuroko se quedó congelado unos segundos antes de contestar.
-Akashi-kun –Murmuro sin creérselo, por primera vez escuchaba ese lamentable tono de voz de su ex capitán, pero no se dejaría ablandar por ese tono- Debemos hablar –Dijo con frialdad notable en su voz, no recibió respuesta, justo iba a volver a hablar pero una petición lastimera lo detuvo.
-Ku…Kuroko, necesito tu ayuda –El emperador temblaba y es que solo una idea estaba clavada en su mente, necesitaba ver a su castaño con sus propios ojos- Ayúdame –Rogo entre llanto y es que no podía creer que su chico estuviera en coma por toda su estupideces, no despejaba la vista del informe médico y es que la forma en la que encontraron a su cachorro le destrozaba el alma.
Kuroko apretó el móvil con fuerza, cerro sus ojos y ese tono solo le confirmo algo que en su mente pasaba, el comentario de yoru cuando tomaron el mando de la conversación anterior le dio mucho que pensar y solo rogaba para que estuviera equivocado.
-No te ayudare aún –Respondió y es que no accedería tan fácil a ayudar a su ex compañero, primero debía conocer algunas cosas- Primero necesito que me respondas, ¿Tu tuviste que ver con el ataque de furihata-kun? –Pregunto sin rodeos dejando mudo al emperador que aún estaba en shock.
Un silencio en el otro lado se instaló, Akashi quien solo pensaba en su castaño se congelo al escuchar la voz del peliceleste, apretando su mano con impotencia por lo estúpido que era se volvió a sentar, sabía que si quería la ayuda de la sombra debía ser honesto aunque con esto se arriesgaba a perder el único que lo podría ayudar.
………
En el barrio gion los integrantes de la banda no sabían que mas hacer para encontrar al peliplata, su jefe estaba al borde del paro cardiaco y es que el tiempo que les habían dado los kurosawa se acabó hace una media hora, sus hombres seguían buscando pero todo rastro del bastardo de shogo desapareció.
-MIERDA, MIERDA –Grito golpeando su mesa- SHOGO BASTARDO DONDE MIERDA ESTAS
-Sawada-sama –Saiki entro a la oficina de su jefe que le dirigió una mirada que si pudiera estaría en el infierno.
-DIME QUE TRAES BUENAS NOTICIAS –Exigió gritando.
-Lo siento sawada-sama –Se inclinó asustado- Pero haizaki desapareció sin dejar rastros, no sabemos dónde más buscar.
-Maldición –Se levantó pateando su silla- Estamos acabados, nada nos librara de los kurosawa maldición, maldición.
-P…pero no podemos hacer nada –
-Es que no lo entiendes –Respondió mirando al chico quien tembló con miedo- Kurosawa es el clan que maneja todo el bajo mundo de Japón y es muy respetado por todos los clanes del mundo, si alguien lo desafía no tiene un futuro que vivir, jugar con Akira Kurosawa o cualquier persona en su clan es un suicidio sin retorno, ahora entiendes en el problema que estamos.
-Y…y…yo-
-Si no tienes nada mejor que hacer sigue buscando hasta que los kurosawa vuelvan, es todo lo que podemos hacer antes de desaparecer del mapa –Ordeno furioso.
-S…si-
………
En el jardín una calurosa conversación se estaba llevando a cabo, el peliceleste no podía creer lo estúpido que fue su antiguo capitán hasta la fecha cosa que la sombra no se iba a callar.
-Para vengarte de satoru-san mandaste a golpear a furihata-kun, como no pensaste las consecuencias de esas órdenes, por tu culpa furihata-kun está en coma, aunque no tuvieras que ver directamente con este ataque tu eres culpable de igual manera-
-Pero como soy culpable, Kuroko te juro que no tuve nada que v… -No termino para ser interrumpido por el peliceleste.
-Claro que tienes que ver, sabes quién ataco a furihata-kun esta vez –Un silencio se formó al otro lado, por lo que siguió- El mismo bastardo de haizaki shogo que ataco a nuestro compañero la primera vez, se obsesiono tanto con furihata-kun que solo desea completar lo que no pudo la primera vez.
-N…no –
-Ahora sabes que eres culpable, por culpa de tu estúpida decisión nuestro compañero está en peligro ya que haizaki logró escapar, puede volver en cualquier momento…-
-K…kuroko, yo lo siento –Nuevas lagrimas salían de sus ojos, por su maldita culpa su chico estaba pasando por todo esto, su maldita soberbia y rabia había provocado todo, como fue tan estúpido de caer en la trampa de su padre conociendo al castaño como lo conocía, porque no escucho a sus amigos que ahora con razón lo ignoraban, pero tenía que reparar las cosas aunque tuviera que humillarse para conseguirlo, por lo que tragando su orgullo dijo- Se que hice mucho daño a kouki y no merezco hablar contigo-
-Exactamente Akashi-kun, no mereces hablar conmigo sobre furihata-kun, ni siquiera deberías mencionar su nomb –Pero fue detenido antes de seguir.
-L…LO SE –Grito y es que estaba arrepentido de todas las decisiones que había tomado hasta hace poco, todo por dejarse domar por su otro yo- Sé que no tengo derecho a preguntar por kouki pero….pero –Se mordió el labio con furia sacando sangre de ellos.
Kuroko escucho la desesperación de su voz, estaba enojado con su ex capitán pero sabía que estaba más que arrepentido por todo lo que estaba pasando, sus amigos estaban todos del lado del cachorro y él también lo estaba, pero las personas cometen errores que tarde o temprano deben pagar, no sabía si era por lastima pero no podía dejar de lado a ese pelirrojo que lo ayudo en un momento de su vida que pensó era un inútil, el que sacó a relucir su don cuando todos se dieron por vencidos, con un suspiro miro el jardín para responder.
-Se que me arrepentiré de esto, pero te ayudare un poco Akashi-kun –Camino hacia el árbol- Ahora escúchame –Se apoyó en el árbol- Antes de que veas a furihata-kun debes dejar de comportarte como un estúpido, sé que sabes quién es el culpable de todo esto, primero ocúpate de él y yo te avisare cuando podrás ver a furihata-kun.
-P…pero yo-
-Yo nada, en estos momentos el hospital está siendo vigilado por toda la seguridad posible, no será fácil que puedas pasar sobre todo estando nosotros acá, no alcanzarías a llegar a la puerta sin que Aomine-kun o alguien más te mate a golpes-
Akashi escuchaba el razonamiento del peliceleste y sabia que estaba en lo cierto, aunque su alma deseaba estar junto a su castaño sus ex amigos no lo dejarían acercarse y menos satoru y sus amigos quienes eran chicos de cuidado.
-E…esta bien –Apretó con impotencia sus manos pero no podía hacer nada.
-Se paciente que no será fácil que puedas acercarte, te avisare como avanza su salud con eso te debes conformar.
-G…gracias Kuroko, sé que no me lo merezco pero esto que haces me da algo de esperanza, cuida a mi kou y por favor cualquier cosa me avisas no importa la hora –Trago en seco ya que nada mas podía hacer más que solo esperar y encargarse de su progenitor.
………
En el comedor todos tenían sus comidas correspondientes y el dúo de yoru y satoru se preparaban para regresar con el desayuno de los chicos, cuando se levantaron la puerta de la cafetería fue abierta entrando por ella nada más y nada menos que Reo.
-Buenas chicos –Saludo caminando a la mesa.
-Hola –Respondieron al unísono.
-¿Que sucedió no estabas con furitan? –Pregunto yoru y es que el pelinegro minutos antes se negó a dejar al cachorro solo.
-Sí, pero… –Aparto la mirada sonrojado- Nash-chan tenía hambre así que vine a buscarle algo.
Satoru sonrió y es que supo con verlo que era mentira, miro a yoru que le guiño el ojo ante lo obvio que fue el peliplata.
-Me dices que dejaste al desabrido con el chihuahua –La pantera unió rápidamente las tuercas en su mente y no le gusto la conclusión a la que llego, el rubio al lado del sonrió ante lo sobreprotector que era el moreno.
Cuando reo iba a responder una melodía saco a todos de su mundo, cada uno busco el destino llegando a yoru quien saco el móvil delante de todos y en su pantalla marcaba un >>Haya llamando<<, satoru que estaba a su lado vio el remitente y puso una seria expresión, conocía a yoru y si hayato estaba llamándolo es que consiguieron noticias antes de lo esperado.
………
En la habitación del cachorro nash miro a su ahora compañero de habitación luego de que reo interrumpiera su lectura del ahora interesante libro en sus manos, por lo que el mencionado avergonzado fue a buscar algo para comer dejando al dúo completamente solo, el rubio siguió con su lectura hasta que unos golpes se sintieron en la puerta dejando paso a una enfermera que deseaba controlar al castaño durmiente.
-Buenos días furihata-kun –Dijo la enfermera colocando el aparato para medir sus signos vitales- Es un hermoso día, caluroso como siempre pero que se puede esperar del verano aquí ¿no? –Hablaba animosamente al menor que seguía en la misma postura, nash miraba a la chica como si estuviera loca a lo que la mujer al sentir la mirada sonrió y respondió a la pregunta mental del rubio.
-Los pacientes que están en coma en muchas ocasiones escuchan lo que pasa a su alrededor –Comento levantando la mirada encontrándose con la del rubio- Es por ello que suelo hablarles puede ayudarlos para que sepan que aquí los estamos esperando.
-¿En serio? –Pregunto mirando el semblante honesto de la chica quien asistió terminando su trabajo.
-Es bueno que conversaras con tu compañero –Siguió anotando los datos- Así puede adaptarse a ti más rápido cuando despierte.
-Gracias por el consejo –Respondió con educación mirando a su compañero y es que desde que satoru le conto millones de cosa de ese castaño no sabía por qué pero no le incomodaba su presencia, recordó cuando lo toco y es que siempre aborrecía tocar a las personas, pero con ese castaño fue distinto, tan metidos estaba que no se percató de la mirada de la enfermera que sonrió para dirigirse a la puerta, antes de irse carraspeo sacando al rubio de sus pensamientos.
-Termine mi trabajo, lo dejo a su cuidado nash-kun –Sonrió cerrando la puerta dejando al par solo nuevamente, nash después de un segundo aparto la mirada para centrarse en el libro en sus manos, cuando el comentario de satoru vino a su mente “Ese es el favorito de mi hermano también, tienen gustos parecidos”, el rubio levanto la mirada dirigiéndola nuevamente al castaño, no sabia que lo impulso pero volvió a la parte inicial del libro comenzando con la lectura pero ahora no en silencio sino que leia en voz moderada compartiendo el libro con su castaño.
………
Continuara…