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Costoso Error por Takishima

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Notas del capitulo:

Palabras de Autor:


*Entra en silencio y se arrodilla*


Mis querid@s lectores, antes de comenzar este nuevo capitulo quiero disculparme con todos ustedes por estos meses sin publicar nada y es que seré honesta del porque, como sabrán quede sin trabajo y tenia planeado usar ese tiempo para terminar el fic, pero me salio una oportunidad de hacer una especialización en mi carrera por lo que estuve 4 meses en una zona rural del país cumpliendo con esta especialización, no avise por el simple hecho que no llegaba señal de internet o señal telefónica teniéndome incomunicada y solo pude conectarme cuando bajaba al pueblo a buscar los insumos médicos para la consulta. (Que era una cada dos meses y super poco tiempo)


Se que puede que estén molest@s conmigo pero era una oportunidad única para mi y gracias a dios la termine hace poco, regrese solo hace unos días a la cuidad y a mi hogar.


Por ello quiero disculparme con tod@s ustedes y en especial a mi querida Ryuko-san quien me ha apoyado en este momento. (Ryuko muchas gracias, i love xD) 


Muchas gracias por su paciente y ayuda en todo los comentarios que me enviaron a lo largo de mi desaparición, es por ello que tratare de subir constantemente los capítulos para agradecer su infinito apoyo en esta historia, solo este mes les pido un poco de paciencia todo esto de mi carrera termina este mes cuando presentare mi tesis, después de ello les juro que estaré full en terminar Costoso Error devolviendoles todo lo que me han dado estos meses juntos. 


Bueno no quiero aburrir@s mas con mis palabras y vamos a lo que muchos esperaron un NUEVO CAPITULO. 


Ryuko.san como siempre tus correcciones quedaron maravillosas, muchas gracias. 


Sin más, disfruten la lectura nos vemos abajito... xD

Un imponente silencio reinaba en el grupo que se sacrificó para que Satoru y compañía pudieran entrar a ver el estado del cachorro que nuevamente estaba luchando por su vida, Kagami que fue el que más pelea dio, se sobaba el brazo lastimado en una esquina rodeado por los demás quienes no paraban de moverse al saber del nuevo estado de salud de su compañero. 

Kise que era el más inquieto miraba a cada segundo la puerta en espera de que algún medico saliera y dijera algo pero sus ganas se veían frustradas poniéndolo más ansioso, de pronto la puerta principal fue abierta dejando ver a los hombres de Yoru que llegaron en tiempo récord gracias a la extrema carrera que Hayato realizó dejando a Lyon con espasmo de las veces que casi pierde la vida.

El peliblanco de inmediato comenzó a buscar a los amigos de su jefe ubicándolos en un rincón, con decisión avanzó viendo como la gente se apartaba de ellos dejándoles el camino libre ya que el aura que los rodeaba los delataba como hombres de temer.

Kagami se levantó al notarlos, como era de esperarse Lyon fue el primero en hablar haciendo que el tigre le explicara todo lo que estaba sucediendo cosa que hizo detallándole completamente los sucesos desde que llegaron, los peliblancos al escucharlo no daban crédito de la nueva información siendo Lyon el primero en romper la conversación y dirigirse a la puerta con la intensión de visitar a sus castaños, pero antes de que pudiera tocar siquiera los guardias que vigilaban al grupo irrumpieron cortándole el paso.

-Deténgase por favor -dijo el guardia que le cerró el paso -No puede ingre...aghh - No pudo terminar de hablar ya que Lyon lo redujo en menos de un segundo dejándolo desmayado.

Los compañeros al ver esta acción se abalanzaron sobre Lyon pero Hayato entró en escena acabando con los restantes dejando el camino libre, ambos peliblancos abrieron la puerta siendo Hayato el primero en ingresar, Lyon se giró al grupo que observaba a los caídos.

-¿Vendrán o se quedarán aquí?- preguntó siguiendo a su compañero sin esperar la respuesta.

Los chicos que estaban impresionados por el incidente al escuchar las palabras del peliblanco se miraron y en conjunto avanzaron detrás del dúo quienes no perdieron tiempo llegando hasta el piso donde el menor descansaba.

Caminaron sin detenerse y al llegar al cuarto del castaño se encontraron con una escena que los dejó sin palabras sobre todo a un tigre que abrió los ojos por la revelación.

 

..........................

-D...Du...ele - jadeó el castaño al sentir como ese pelirrojo lo abrazaba con fuerza mandando a su cuerpo una dolorosa sensación que lo hizo querer alejarse de inmediato, sus ojos se llenaron de lágrimas ya que el dolor era tan intenso como el mismo infierno -S...S...Suelt...eme...aghh- Pidió tratando de alejarse pero no pudo sintiendo como se acercaba más a su cuerpo.

Los presentes ardieron en furia al ver tal descaro del pelirrojo y al escuchar el gemido de dolor del castaño los hizo reaccionar siendo Nash el primero en tomarlo del brazo y alejarlo.

- LET HIM GO! SON OF A BITCH! (SUELTALO HIJO DE PUTA) -
gritó poniendo sus manos en el pelirrojo tratando de separarlo pero su mano estaba lastimada dificultándole la tarea.

-Kou, mi Kou perdóname por favor, te amo, perdóname- rogó entre gritos resistiéndose a separarse del menor quien claramente sufría por su toque gimiendo de dolor, pero otras manos tomaron su cuerpo separándolo del castaño quien fue rodeado de inmediato por sus ex amigos y Satoru que lo abrazó protectoramente mientras el médico se acercó alarmado por el grito de dolor del menor.

-Ko- Satoru vio la expresión del menor quien recuperaba la respiración mientras el médico lo revisaba- ¿Qué te pasa bebé? -Tocó el rostro de su hermanito notando la fría sudoración, sus mejillas rojas y la respiración acelerada haciendo que el miedo se apoderara de su cuerpo.

Nash ignorando al pelirrojo se centró en el castaño que sufría en los brazos de Satoru, sin darse cuenta tomó su mano a la vez que el médico se movía revisándolo sintiendo lo helada que estaba, sin pensar apretó más tratando de trasmitirle su calor cosa que el castaño respondió el gesto ante la cálida y suave sensación en su mano.

 

Mientras a su espalda los demás se encargaban del emperador quien tocaba su adolorido rostro cortesía de Aomine quien le propinó un fuerte golpe rompiéndole el labio.

-¡ALÉJATE DE EL MALDITO!- Aomine no se reprimió y nuevamente golpeó el rostro del emperador tirándolo al suelo -¡NO TIENES DERECHO A TOCARLO CON TUS ASQUEROSAS MANOS BASTARDO!- gritó con claras intenciones de tirarse encima, pero antes de conseguir su objetivo Kuroko apareció cortándole el paso para así proteger al emperador que tocaba su rostro limpiando el rastro de sangre que emanaba de su boca.

-Detente Aomine-kun - exclamó con temor el peliceleste ya que su cuerpo reaccionó sin su consentimiento, sabía que estaba en problemas desde el momento que fue descubierto por sus amigos, pero no podía echarse atrás, no ahora que su ex capitán era golpeado frente a sus ojos, él era el culpable por dejarlo entrar y no poder controlarlo, por lo que asumiría la responsabilidad de sus actos, solo rogaba que su novio entendiera sus razones ya que no podría soportar perder a su luz, de solo pensarlo las lágrimas de dolor se apoderarían de sus ojos, pero debía ser fuerte para arreglar este problema -Cálmate, por favor-.

-T...Tetsu- Aomine no podía creer que el peliceleste cubriera al pelirrojo y al igual que Reo sintió como la furia crecía en su interior- ¿Qué me calme? -Exclamó con asco- ¿Qué me calme dices? ¡QUÉ MIERDA ESTÁS HACIENDO TETSU, COMO MIERDAS ESPERAS QUE ME CALME TENIENDO A ESTE HIJO DE PUTA EN FRENTE! -Avanzó -¡TU MEJOR QUE NADIE SABES TODO EL DAÑO QUE LE CAUSÓ AL CHIHUAHUA Y TÚ AHORA LO DEFIENDES!-

-Yo...-

-¡YO NADA! - Aomine interrumpió al peliceleste furioso por todo este suceso- ¡SERÁ MEJOR QUE EXPLIQUES TODO ESTO ANTES DE QUE SE ME OLVIDE QUE ERES MI MEJOR AMIGO Y TE ROMPA LA CARA JUNTO A ESE BASTARDO! ¿¡PORQUE MIERDA LO DEFIENDES!?- Tetsuya tragó nervioso colmando a la pantera- ¡HABLA DE UNA PUTA VEZ TETSU!

-Y...yo - Kuroko tragó en seco ya que la mirada de la pantera era fulminante, sabía que estaba perdido así que tomando un respiro habló -Yo ayudé a Akashi-kun a entrar para ver a Furihata-kun, yo...- Iba a explicar sus razones pero no previó que un grupo de recién llegados los escuchaba a su espaldas, solo sintió un escalofrió recorrer su cuerpo y al girarse se encontró con la fría mirada de su amigos y por sobre todo de un tigre que miraba atónito por lo revelado.

-K...k...kaga...mi-kun- Kuroko sintió como toda la sangre se esfumaba de su cuerpo, el tigre lo miraba con una furia y una decepción en sus ojos que nunca había visto.

En el otro extremo de la habitación Kouki se recuperaba después de sentir como su cuerpo había pasado por el peor dolor de su vida, pero gracias al cálido calor de su hermano y esa extraña calidez de su mano salió de ese sufrimiento para regresar a la realidad.

-¿Está seguro doctor? - preguntó por tercera vez Sato al médico que les informó que solo fue una reacción inesperada, pero que ya se encontraba fuera de peligro.

-Sato- Shiba le tocó el hombro al castaño para tranquilizarlo -Confía en el doctor- dijo sonriendo, su mirada se posó en el adorable castaño que aunque tuviera golpes no perdía su dulzura -Bienvenido Kou, al fin vuelves a nosotros -Sonrió con cariño viendo como la confusión pasaba en esa dulce cara.

-Ya era hora, Koutan - Naru le acarició el dócil cabello ignorando los gritos a su espalda ya que estaban con un asunto más importante de momento, luego se encargarían de poner orden -No sabes todo lo que soportamos a Torutan mientras estabas con Morfeo- bromeó tratando de sacarle una sonrisa al castaño, pero este aún tenía su mano en su boca tratando de suprimir las lágrimas, Yoru solo se limitaba a apoyar sus manos en los hombros ajenos con un sentimiento de dolor y felicidad ya que al fin el menor había regresado con ellos.

-S...Shiba-nii, Naru-nii - se incorporó con dificultad quedando sentado -Chicos -Vio a todos los amigos de su hermano mayor alrededor de su cama, de pronto sintió como su hermano lo abrazaba con fuerza -S...Sato-nii - murmuró con dificultad ya que su garganta estaba reclamando por agua pero no le importó al sentir las lágrimas de su hermano en su hombro.

-K...Ko gracias a Dios- Satoru apretó el cuerpo de su hermanito con cuidado apoyando su cara en el hombro de este, al fin después de tanto tiempo escuchaba la voz de su bebé y eso hizo que toda la angustia y dolor que sufrió salieran a flote, no podía dejar de sentir como las lágrimas escapaban de su cuerpo.

Kouki al notar las lágrimas de su hermanito se las arregló para corresponder el abrazo pasando su brazo por la espalda del mayor.

-S...sato-nii - Le acarició la espalda con cariño ya que una de las cosas que no le gustaba era ver a su hermano llorar -¿Por qué lloras? ¿Qué pasa? - Le preguntó en un murmullo, Satoru no respondió, solo se limitó a abrazarlo aún más fuerte causando que un deje de malestar pasara por sus costillas -C...cuidado - exclamó el cachorro provocando que el castaño alarmado se separara.

-Estas bien, Ko, ¿te lastimé?- Miró el rostro de su hermano quien sonrió con cariño ante lo exagerado que era su hermano.

-Estoy bien - Contestó con una sonrisa disfrazando su malestar -Pero siento que me atropellaron con un camión, dónde...- Miró a su alrededor, reconoció de inmediato que estaban en un hospital por lo que las preguntas en su mente ya se estaban formulando y antes de que pudiera decirlas, su vista se clavó en el grupo que discutía en el otro extremo siendo el personal médico quien trataba de tranquilizar la situación.

¿Qué está pasando? - Logró preguntar haciendo que todas las miradas se enfocaran en los bulliciosos chicos que estaban frente la puerta.

-¡POR FAVOR ESTÁN EN UN HOSPITAL, MÁS RESPETO!- escucharon que gritó el médico, quien, harto de tanto escándalo se interpuso siendo completamente inútil ya que el ambiente era de tensión pura.

-No te preocupes, Ko - Satoru más sereno frunció el ceño ante el escándalo, todo rastro de la burbuja que se formó se esfumó y ahora claramente escuchaban los gritos del grupo -Yo me encargo, vuelvo en un segundo - Sonrió para tranquilizar a su hermanito, pero Yoru le tocó el hombro y sonrió antes de que se moviera.

-Yo me encargaré - exclamó mirando a los castaños -Ustedes tienen mucho que hablar, déjame a mi arreglar este pequeño asunto Sato -no le dio lugar a reclamar y avanzó al grupo con una aura oscura ahora sobre todo por el pelirrojo que ahora estaba de rodillas siendo encarado por los amigos del cachorro.

Yoru se percató de que sus hombres se encontraban en un rincón, por lo que con una mirada les dio a entender que se prepararan, el dúo asistió.

-¡ERES UN BASTARDO KUROKO TETSUYA NO ME VUELVAS A HABLAR EN TU VIDA, OLVIDA QUE ALGUNA VEZ FUIMOS ALGO, ESTO NO TE LO PERDONARÉ NUNCA! -Gritó el tigre ante los sucesos ocurridos, no podía creer que su novio hiciera la locura que hizo sabiendo todo el daño que causó el pelirrojo a su espalda, el dolor de la traición era algo que odiaba sobre todo si venía del chico que ama y en el que confió ciegamente.

-Por favor- Kuroko estaba con lágrimas en sus ojos -Escúchame Kagami-kun, puedo explicarlo- Se acercó tratando de razonar pero el tigre no escuchaba.

-¡NO TE ESCUCHARÁ NADA! -Aomine se interpuso antes de que la sombra tocara al tigre ocultándolo con su cuerpo -¡NOS TRAICIONASTE TETSUYA, NOS TRAICIONASTE POR ESTE HIJO DE PUTA! - gritó el moreno sorprendiendo a la sombra quien no sabía qué hacer, sus ojos se clavaban en el tigre que ni lo miraba asqueado por su acción, el dolor recorrió su corazón ya que estaba perdiendo a su ser amado y eso era peor que la muerte.

Yoru no quiso escuchar más estupideces, así que intervino ayudando al pobre personal médico que hizo lo posible para separarlos.

-¡DETENGANSE! - Ordenó Yoru callando a todos los presentes, terminó de acercarse quedando de frente a los amigos del cachorro -Kou acaba de despertar, así que no más escándalos ¿entendido? - Dijo con firmeza- Yo me encargo de esto-.

Sin esperar respuesta se giró para encarar al dúo; uno lo miraba con miedo y el otro ni siquiera lo miraba, solo enfocaba su mirada en la camilla donde un castaño los miraba confundido por toda la escena.

-Haya, Lyon - Habló al dúo que de inmediato avanzó -Saquen a este par de aquí, no son bien recibidos por lo que escóltenlos a la salida-.

-Sí, Yoru-sama - Gritaron ambos peliblancos tomando a los chicos, Akashi forcejeaba en los brazos de Hayato quien lo alejaba del castaño.

-Kou, por favor perdóname - Comenzó a gritar el emperador enfocando su vista en el menor quien lo miraba confundido -Perdóname, por favor Kou, déjame explicarte no me alejen de él, ¡KOUUU!

El grupo veía como Akashi imploraba dándoles a entender que ya sabía el error que había cometido, pero cumplirían su palabra y protegerían al menor sin importarles los sentimientos del emperador que hasta en el pasillo se escuchaban sus ruegos.

Yoru, Shiba y Sora siguieron al cuarteto con claras intenciones de solucionar todo este desorden dejando a Naru acompañando a Satoru quien no se apartaría del menor.

Kouki no entendía que sucedía, los gritos de ese chico aún resonaban en su mente, confundido miró a su hermano quien al sentir esa mirada en su persona sonrió con cariño, todo era muy confuso y miles de preguntas bombardearon su mente pero antes de que pudiera decir algo los brazos de Reo y Kise lo rodearon.

Los amigos del cachorro felices de su despertar se acercaron para ver mejor al menor quien avergonzado por tanta muestras de cariño se sonrojaba adorablemente borrando todo rastro de odio en los presentes quienes se limitaron a festejar el despertar del menor, Reo casi se desmaya de la emoción de ver a su bebé despierto negándose a soltarlo teniendo una batalla con Satoru quien también se negaba a separarse llevándolos a apoderarse de cada lado de un apenado Kouki.

Nash que estaba en un rincón se mantuvo en silencio dándoles el espacio al grupo eufórico no perdiendo de vista las expresiones del menor quien por alguna razón no dejaba de ver, su mano aún guardaba ese extraño cosquilleo producto de tocar al cachorro quien no dejaba de sonreír. 

 

................................

 

Mientras en la puerta este del hospital el grupo encargado de escoltar al dúo salió del hospital llegando al gran jardín, Hayato y Lyon seguían apresando a los chicos teniendo Hayato más trabajo ya que el emperador se negaba a quedarse quieto ya que al fin pudo ver a su novio despierto, necesitaba verlo y rogar por su perdón si era necesario pero no lo dejarían acercarse.

El trío salió siguiéndolos, Hayato estaba harto ya que deseaba noquear al idiota en sus brazos pero sabía que su jefe no quería dormirlo aún.

-Deja de moverte, maldición - ejerció más fuerza en la llave sacando un jadeo de dolor, pero el emperador no dejaría que eso lo detuviera.

-¡SUÉLTAME MALDITA SEA!- Akashi se removía lastimándose el brazo -NECESITO VER A KOU, ¡SUÉLTAME, TE LO ORDENO!

Yoru que lideraba el grupo molesto se acercó y sin delicadeza alguna tomó el rostro del emperador quien al ver esa intensa mirada dejó de forcejear.

-Tú no eres nadie para ordenarle algo a mis amigos, Akashi Seijuro - exclamó un furioso Yoru que no podía controlar su rabi ya que delante de él estaba el hijo del bastardo que tanto daño causó a su castaño, además de ser el causante del sufrimiento de Kouki, así que todo rastro de simpatía o piedad quedaba en el olvido, no volvería a cometer los errores del pasado.

-Kuro...sawa Yo...ru- Murmuró entrecortadamente el emperador, sabía lo peligroso que era el trío frente suyo pero nada importaba si volvía una vez más a tener a su castaño con él, se enfrentaría a quien fuera necesario con tal de lograrlo.

-Veo que hiciste tu tarea enano- sonrió con frialdad ya que ahora sabía quién era y eso le ahorraba trabajo -pero es demasiado tarde - lo soltó levantándose quedando al medio del grupo.

-Te advertimos muchas veces que no te atrevieras a tocar a nuestros castaños, pero tanto el hijo como el padre se atrevieron a poner sus asquerosas garras en ellos lastimándolos, ahora deberán pagar por ello - Shiba exclamó sin dejo de amabilidad.

-¿Qué quieres decir con eso?, ¿por qué mencionas a mi padre? - Preguntó negándose a mostrar algún signo de debilidad, la mención de su padre lo pilló desprevenido "¿Que tiene que ver mi padre, qué mierda hizo?" pensó con furia concordando con su álter ego que ardía de ganas de romperle la cara a su progenitor.

-Veo que tu inteligencia es limitada -Sora continuó con burla -pero no tenemos por qué explicarte nada ya que muy pronto entenderás todo, pagarán cada lágrima que derramaron, de eso nos encargaremos nosotros, desearás no habernos conocido.

-Si quieren destruirme solo háganlo- exclamó decidido mirando al trío no entendiendo nada, su padre nuevamente hizo algo que lo alejaba de su objetivo pero no era el momento de pensar en él -Destruyan la empresa, déjenme en la calle nada me importa solo permítanme hablar con Kou, permítanme arreglar toda la estupidez que provoqué - Casi rogó ya que nada le importaba, las riquezas o su estatus eran un precio que gustoso pagaría con tal de recuperar al único ser que lo hizo ser humano, a ese castaño que le dio sentido a su vida.

El trío no se esperaba esas palabras del pelirrojo que los miraba decidido, pero no les interesaba en lo más mínimo así que Yoru con firmeza demostrando ser el legítimo próximo líder Yakuza dijo:

-Haya, Lyon- Yoru miró al dúo con seriedad -Por favor encárguense de llevar a estas dos basuras fuera del hospital y de darles un pequeño adelanto de lo que les espera, Shiba encárgate de reforzar la seguridad del recinto, Sora coordínate con los chicos con la información que nos manden-.

-¡KUROSAWA YORU! - Gritó el pelirrojo ante las órdenes ya que su álter ego, harto de ver que su contenedor no conseguía nada, tomó el mando -No te atrevas a separarme de Kouki o sufrirás las consecuencias-.

Yoru avanzó tomando nuevamente el rostro ajeno.

-No vuelvas a pisar otra vez este hospital por que la próxima no será solo un adelanto lo que recibirás - Le apretó el rostro -Tus amenazas no me asustan en lo más mínimo enano, si hiciste bien tu tarea sabrás que eres insignificante frente a nosotros-.

-M...mald... -

-Pensé que cambiarías en algo- Sora avanzó interrumpiéndolo -Pero sigues siendo el mismo crío soberbio, te aconsejo disfrutar de tus últimos días de paz porque nos encargaremos que el infierno se quede corto ante lo que haremos con ustedes, tú y tu padre pagarán muy caro todo lo que han hecho-.

-Ahora llévenselo chicos - Yoru se apartó ignorando los reclamos del pelirrojo.

-De inmediato - Ambos asintieron ante la orden de su jefe acatándola sin más peros, Akashi no podía creerlo, negándose a irse siguió forcejeando con el peliblanco que apretaba aún más su brazo, la paciencia se le estaba agotando y Yoru lo sabía muy bien.

-Haya- Yoru llamó la atención del peliblanco -Después de encargarte de darles nuestro regalo encárguense de lo que les pedí, por favor-.

-Con gusto, Yo-san - El peliblanco sonrió entusiasmado.

-Nos encargaremos de todo, déjenlo en nuestras manos Yo-sama- Lyon no quedándose atrás empujó a su rehén quien no mostraba signos de resistencia aburriendo al sádico de los Kurosawa.

Kuroko se encontraba mudo en los brazos de Lyon, en su mente recordaba las duras palabras expresada por su ahora ex novio, el dolor de su pecho era brutal de todas las cosas que pudiera pasarle esto sin duda era la peor, el desprecio en la mirada de su luz se revivía una y otra vez en sus recuerdos, las lágrimas acudieron a sus ojos ya que no tenía nada ahora que perdió al único ser que lo hacía sentirse vivo.
Salieron del hospital donde encantados los hombres de yoru acatarían sus órdenes. 

Continuará...

 

Notas finales:

Palabras del autor:


Llegaron al final de este capítulo, ¿Les gustó?.


Espero que les gustará, subire el siguiente de inmediato nos leemos en breve. 


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