Después de que Dino confirmara el hecho, todos aquellos que no estaban enterados mostraban una sorpresa aún mayor de la que ya habían reflejado con anterioridad, tanto así que Dk cayó desmayado por la noticia de que sería “tío”.
— Otra vez no por favor — exclamó Hoshi al ver como su compañero desplomaba en el sillón más cercano. — Supongo que a él le impactó demasiado la noticia.
Los involucrados esperaban respuesta de sus parejas, pero luego de un rato de no obtenerla se fueron corriendo a sus habitaciones. Al ver esto, Hoshi, decepcionado de sus compañeros, decidió romper el silencio.
— ¡No puedo creer su falta de tacto! — les recrimino — ¿Se imaginan lo duro que debe ser para ellos?
— Aún no lo asimilo, sigo siendo demasiado joven para ser padre — respondió Vernon.
— Eso debieron pensarlo antes de “pasar horas extras ensayando las coreografías” — continuó Hoshi entrecomillado la frase para no traumar más al menor (o eso pensaba él).
— ¡Ahhhh! ¡Mejor me voy antes de que el trauma aumente! — El menor se fue corriendo a su habitación a intentar superar el trauma.
Hoshi volteó a ver nuevamente a sus compañeros y prosiguió — ¿Y bien? ¿No piensan ir a verlos?
Después de ese pequeño sermón, el primero en ir a ver cómo estaba su novio fue Jisoo. Tocó la puerta de la habitación y se encontró con un Jeonghan, recostado sobre la cama en posición fetal tocándose el vientre.
— Mi ángel… ¿Cómo se encuentran? — preguntó el caballero.
— No tengo ganas de hablar, además no hables en plural si sólo estoy yo — dijo el mayor de ambos.
— Vamos, no seas así. Sólo que es algo difícil de asimilar que mi ángel está esperando un angelito.
Jeonghan al oír esas palabras se soltó a llorar y se arrojó a los brazos de Joshua. Éste consternado le pregunta.
— Ya, ya. No hay porqué llorar, saldremos de esto juntos ¿Acaso no lo crees?
— Joshua… Seremos padres — junto con esas palabras el joven de larga cabellera, alzó dos dedos a manera de indicar que serían gemelos.
— No me digas que… — Joshua no pudo terminar la frase cuando su ángel asintió con la cabeza e interrumpió.
— Sí, serán dos angelitos.
En la sala de estar, seguían con el mismo dilema de ir o no ir, hasta que Hansol se levantó para ir. Al llegar a la habitación, se encontró con su novio viendo tranquilamente el televisor; se podía observar que había estado llorando y llevaba poco tiempo de haberse tranquilizado.
— ¡Qué bien! Están pasando Weekly idol — dijo Vernon al entrar al cuarto olvidando el motivo por el que iba.
— Eres increíble. Te importa más el programa que yo — le recriminó la diva.
— Ya, ya .Perdón — Hansol se sentó en la cama junto con su novio. — Boo… Tú y los chicos… Están jugando, ¿cierto?
Seungkwan, al escuchar las palabras de su novio le comenzó a gritar ofendido.
— ¡¿Cómo puedes decir que es una broma?! ¡Vernon, esto es en serio!
— No me grites. ¿Cómo quieres que no lo piense? ¡Dios! ¡Somos demasiado jóvenes para ser padres aún! — contestó el rapero.
— ¡Como no te voy a gritar, gringo con complejo de artista de Hollywood!
— el menor lanzaba cosas mientras gritaba — ¡Eso lo hubieses pensado antes de hacerlo sin protección! — al borde de lágrimas otra vez.
Mientras tanto, Dk ya había recuperado la consciencia y observó que en la sala sólo quedaban Hoshi, quien miraba su celular, y Dino, quien había regresado por el suyo.
— Dino… ¿Es cierto que voy a ser “tío” ? — preguntó entrecomillando la última palabra. Cuestionamiento que sacó a Hoshi de concentración en lo que estaba haciendo.
— DK, ya despertaste — contestó sorprendido el menor — Serán “tíos” de 6 chamacos próximamente — agregó calmado.
— ¿Seis? — preguntó Hoshi.
— ¿No se supone que son cinco? — agregó Dk.
— No, seis, Jeonghan y Joshua están esperando gemelos. — continuó tranquilo el menor.
— ¡Y tan juicioso que se veía Jisoo! ¡Salió tremendo! — exclamó DK.
Las horas pasaban y ya todo estaba más tranquilo, sin embargo, Jun había salido apenas se enteró de la noticia y no había rastro alguno de él. Todo aquel rato Jeonghan, luego de hablar con Joshua, estuvo consolando a The8.
— Tranquilo Minghao, ya verás que pronto regresará y pedirá disculpas por haberse ido — repetía el mayor de ambos a modo de consuelo.
— Pero… ¿Y si en realidad no le importo? ¿Y si por eso se fue? — preguntó el chino al borde de las lágrimas, no era capaz de creer que su novio apenas escuchar la noticia se fuera corriendo sin explicación alguna.
— No te preocupes, si hace eso, lo mato — dijo Jeonghan molesto con el mayor de los chinos.
Al escuchar eso Joshua, quien también estaba presente consolando al menor de los chinos, reprochó aquellas palabras.
— Vamos no digas eso — dijo Jisoo.
— Yo por mis niños hago lo que sea — agregó el mayor de los 3.
En ese momento se escucha cómo la puerta de la habitación se abre y Jun se asoma por ella. Él traía una enorme bolsa y nadie se imaginaba cuál sería su contenido.
— Hablando del rey de Roma — dijo el chico de larga cabellera.
— Hani… mejor démoslos a solas — dijo Joshua llevándose a su novio de ahí.
— Gracias Joshua — dijo Jun.
— ¡Haces llorar a mi niño y te castro! — lo amenazó el ángel con un aura malvada alrededor.
Tanto Junhui como Jisoo quedaron perturbados por el comentario del mayor, por lo que Joshua se llevó a su novio y Jun sólo asintió con la cabeza.
— Minnie… ¿Por qué lloras? — preguntó el mayor de los dos chinos ya estando solos.
— Déjame. De por sí no te importo, por eso te fuiste — contestó dolido el menor de ambos.
— Mi amor, no digas eso. Me importas y mucho — recalcó la última frase — Es más, estoy tan feliz por la noticia que de la emoción fui corriendo a comprar unas cosas.
— No te creo nada — reprochó el menor.
— Bueno si no me crees — extendió su mano y le entregó una bolsa — Y ésta es la única que traje al cuarto, el resto están en la sala y en el auto.
Minghao abre la bolsa y ve en su interior un pequeño mameluco amarillo. Voltea a ver atónito a su novio y éste estaba con una sonrisa tierna en su rostro, no pudo evitar y lanzarse a sus brazos.
— Jun, perdón por dudar de ti. Es que te fuiste y… — se soltó a llorar — pensé que… realmente no me querías…
— Tranquilo bebé, yo te adoro — dijo mientras le limpiaba las lágrimas del rostro — Te amo demasiado y el hecho de que tendremos una pequeña parte de ambos pronto, me llena de alegría.
El menor dejó de llorar y ambos fueron a la sala a seguir viendo los regalos que Junhui había comprado.
— ¡¿Qué demonios es todo esto?! — gritó Jihoon al ver todas las cajas que estaban en la sala. Al mismo tiempo que regresaba de la cocina con un poco de hielo por el guitarrazo que le había propinado al líder.
— Jun… ¿Dónde compraste todo esto? — preguntó Wonwoo — Necesito una manera de que Ming me perdone y creo que esto ayudará un poco.
— No servirá de nada que lo intentes, Jeon. No tendrás mi perdón tan fácilmente — dijo Mingyu indignado llegando al lugar .
— Y el dinero para todo esto, ¿de dónde salió? — preguntó Seokmin curioso.
— Pss… se lo pedí a Heechul y él dijo que no había problema, que todo lo pagaba Siwon. Así que me dió la tarjeta— contestó Junhui casi riéndose.
— Quien quisiera unos suegros así Minghao — agregó Hoshi.
Un rato después a todos, quienes estaban esperando,les comenzó a dar hambre. Nadie quería lo mismo así que, Dk, todo angustiado y aturdido por las quejas y súplicas de los jóvenes embarazados, tomó el teléfono para llamar a Ryeowook y pedirle de favor que fuese a ayudar.
No cabe duda que los siguientes meses serían bastante pesados, pero llenos de amor y alegría para los 13 idols que tenían un futuro por delante gracias a los seis futuros miembros de esa gran familia.
¿Fin?