La próxima semana el padre de Taehyung llegaría a su hogar, esa era mi máxima oportunidad. Debía aprovechar la sutil buena impresión que había logrado la primera vez que hablamos, a pesar de no estar preparado. Ahora debía ser perfecto.
Estuve hablando durante estos días con Seokjin y la información que logré sacar era:
- El hombre gustaba de participar en conversaciones que trataban sobre su campo laboral.
- Si se hablaba de negocios, mejor aún.
- No le gustaban los regalos así que nada de presentes.
- Todos los días las personas estaban a prueba, no porque le haya parecido un buen tipo la primera vez que me vio seguirá pensando eso cuando me vuelva a ver.
- Aunque no lo pareciera, Taehyung era su tesoro.
Así que, como supondrá, ya no estoy tan confiado.
Como el único campo de información que tenía eran los videojuegos me he dedicado todos estos días a investigar más internamente estas glorias de la creación humana, cómo los hacían, las personas involucradas en ellos, los de más renombre y sus por qué. Estudio más que cuando tengo examen.
Y por otro lado, también me han pasado nuevas cosas con Taehyung.
Con el tiempo ya la vergüenza me ha abandonado, porque mis compañeros saben, mis amigos saben, incluso algunos maestros lo están sospechando, menos usted, maestra, es bastante despistada según lo que noto, pero con respeto.
Cuando me siento de muchos ánimos no puedo evitar besar a Taehyung en los pasillos antes de entrar a las clases, o tomar su mano en los descansos, aprovechando de ver sus adorables sonrojos y como sus lindos ojos cafés brillan cuando me ven.
Estoy sonando muy cursi, pero de verdad... es mucho mejor de cómo lo cuento.
Sé que le gusto y él también me gusta demasiado, se lo dije hace dos días cuando lo invité a comer y se me salió sin pensarlo.
¡Quería que eso fuera más especial y lo arruiné mientras se atoraba con una albóndiga por la sorpresa!
Fue divertido, bueno no... en realidad Taehyung se atoró de tal manera que de verdad no podía respirar y yo me levanté corriendo para hacerle la maniobra heimlich, como mamá me había enseñado para casos como esos. Los empleados corrieron a ayudarnos y cuando la albóndiga salió disparada al plato de la mesa continua a la nuestra, Taehyung se puso tan rojo que casi lloró de la vergüenza cuando se acercó a la pobre familia que había recibido ese proyectil de carne.
El restaurant le regaló un vaso de jugo y un té para que se calmara, la familia no puso mayores problemas porque había sido un accidente, y yo me salvé porque me moría de vergüenza.
"Hoseok, ahora que no tengo nada en la boca, ¿podrías repetir lo que dijiste?"
Si, como bien lo está pensando, ahí si me mató.
Estaba avergonzado, así que lo repetí bajito y Taehyung sonrió tan ampliamente que su sonrisa llegaba a ser deslumbrante, se sentó a mi lado y me abrazó fuerte, diciendo que también le gustaba más de lo que pensaba.
Me podía perfectamente morir en ese momento y no importaba.
Así que luego de eso pensé, debía pedirle ser mi novio de una manera linda, tan linda como Taehyung, pero no tan exagerada porque podía asustarlo o alejarlo de lo empalagoso que podría ser.
Y como no quería fracasar en ello, tuve que pedirle ayuda a mis tres grandes amigos: Yoongi, Seokjin y Jimin. Aunque a Jimin tuve que casi pagarle porque el desgraciado era bastante soplón cuando quería y podía decir mis planes por accidente frente a Tae.
Yoongi me decía cosas ñoñas como contratar mariachis o invitarlo a una cena en un mirador lleno de velas, pero había algo en eso que no me convencía, además Jimin casi se desmayó diciendo que a Taehyung de verdad no le gustaría algo así.
"Puede que lo ames y todo, pero aunque no lo parezca no quiere verse como una princesita, ya me lo ha dicho."
Gracias a Jimin, no lo arruiné.
"Puede que sea la propuesta de matrimonio más linda de todas, pero si no tiene ese "algo" que la haga diferente, algo que la relacionara verdaderamente con Taehyung, él no lo va a sentir especial."
"Le gusta que le regalen cosas que no sean obvias, que se note que la persona de verdad está atenta a sus gustos a pesar de no decirlo"
Seokjin era verdaderamente la persona que más conocía a Taehyung, esos dos concejos eran oro y Jimin concordó con ellos inmediatamente, Yoongi suspiró porque eso era un problema y yo sólo comencé a romperme la cabeza desde el principio porque no tenía nada.
Me daba cuenta que no conocía tanto como quería a Taehyung, así que todo lo que restó de la semana me mantuve apegado como lapa a él sin que sospechara... tanto.
Jimin se reía de mi a mis espaldas siendo apoyado por Yoongi, ese par de desgraciados.
Lo acompañé a su casa muchas veces, me invitaba a quedarme y yo aceptaba para aprovechar de saber más cosas de él.
Por primera vez me había fijado que el hogar realmente estaba lleno de flores, en especial por unas muy particulares, incluso en su habitación habían tres floreros distintos con aquellas lindas flores. Pensé en seguida en su padre, pero cuando se lo pregunté sutilmente a Seokjin por mensajes éste me envió un emoticón de una sonrisa y me dijo que eran a petición de Taehyung, eran las flores de su madre.
Indagaré más cuando termine el informe que me queda y comience a estudiar, los lunes son horribles, más cuando es la semana más desastrosa de mi vida universitaria.