Capítulo 17
Culpa… ¡Maldita culpa!
¡Gracias al cielo el doctor había insistido en que se quedará el mes completo en el hospital! Por qué de otro modo seguramente su padre ya lo habría asesinado, ya que por mucho que hubiera aceptado de palabra lo de la dichosa emancipación sabía que por dentro debía de estar ardiendo en furia, sobre todo porque a pesar de los intentos de sus padres por hacerlo desistir de su plan había logrado mantenerse en lo dicho, ¡Por dios! Incluso habían enviado a Amber para tratar de persuadirlo.
Hacia unos días había iniciado la demanda y eso solo tenía tensos a todos, quería desesperadamente hablar con Castiel, quería verlo… Pero eso sólo pondría pero las cosas, ya se sentía mejor, aún le faltaba bastante pero al menos ya respiraba sin ayuda y mover mejor el brazo que le había dislocado, según el médico su recuperación iba perfecta… Y agradecía por ello aunque sin duda hubiera sido mucho más feliz si hubiera conseguido un cambio de doctor, cada ve se sentía más incómodo por como lo miraba, casi sentía que quería abrirlo para estudiarlo, estar en ese hospital era un arma de dos filos en ese punto.
Y de nuevo “esa” hora del día, cuando aparecía su madre para fingir preocupación y tratar sutilmente de que dejará la demanda, como detestaba la hora de visitas y sólo iba a la mitad del tiempo de hospitalización y ese día era peor… El abogado le había llevado la primera versión de un acuerdo para que lo siguieran manteniendo, por lo menos en lo básico, podría buscar un trabajo de medio tiempo para pagar sus gustitos, cuando ella entró a la habitación tomo el folder con el acuerdo y se lo extendió sin decir una palabra, no sabía que decir
-¿Qué es esto Nathaniel?- como si no lo supiera por amor a dios…. –¿Sigues con tus tonterías?-
-No son tonterías…- susurro, su proceso era especial, la manutención era la condición que él había pedido a cambio de su silencio con servicios sociales aunque eso solo lo sabían ellos –Ya les había dicho que lo haría… Dáselo a papá por favor…- susurro –Necesito que lo regrese firmado o con alguna corrección si la tiene…- necesitaba eso para poder fijar la fecha de la audiencia con el juez, sintió esa mirada despectiva de su madre sobre él, siempre lo miraba así… Ahora se preguntaba si todo lo que había vivido era por su condición…
-No estará nada feliz cuando vea esta sarta de tonterías….- tomo el folder de sus manos –Deberías recapacitar tu hermana es la que más está sufriendo con todo esto- apretó los labios sin decir nada, solo desvió la mirada, eso lo sabía y era la única razón por la que a veces dudaba de seguir, a pesar de cómo era ella la quería, era su melliza a fin de cuentas –Adiós Nathaniel…- y salió de ahí, dejó salir el aire que había estado reteniendo.
Ahora solo esperaba que no pusiera muchos peros… Solo quería que firmará el papel ese y ser libre… Se dejó caer en la cama y cerró los ojos, estaba dando un par de pasos hacía el pelirrojo, solo un poco más y ya no tendría por qué esconderse… Por qué esconder eso que sentía por el contrario, eso de algún modo lo hacía sentir más ligero, más feliz incluso… Esa clase de pensamientos lo reconfortaban en momentos como esos.
Se quedó profundamente dormido sin darse cuenta siquiera, aunque el gusto no le duró mucho, por no decir nada por qué unos minutos después entró la enfermera, tenía el sueño ligero así que abrió los ojos despacio, era extraño que entrará a esa hora, estaba seguro que no le tocaba ningún medicamento ni nada parecido, solo la miró esperando a que le dijera lo que tenía que decir
-Tiene otra visita joven…- alzó una ceja curioso, él había solicitado que le avisaran si era alguien fuera de sus padres o su hermana –una señorita… Dice que es de su instituto- ¿quién podría ser? ¿Melody? ¿Iris? Suspiro
-Dígale que pase…- susurro al final, esperaba que la castaña no fuera estaba un poco resentido con ella por todos los problemas... Pero por supuesto… Nada salía como debía y la chica apareció ahí, suspiró pesadamente –Melody…- susurró tensó -¿Qué haces aquí?
-Vine a verte, en la escuela dijeron que estabas internado… Estaba preocupada por ti, hay muchos rumores en el instituto…- frunció ligeramente el ceño
-¿Qué clase de rumores Melody?- sabía que debía estar furioso con la castaña pero la curiosidad le podía más
-Algunos dicen que te asaltaron…- susurró, eso era normal, esa era la versión que el mismo había dado a todo el mundo –Pero algunos dicen que fue Castiel…- abrió los ojos un poco más algo sorprendido –Muchos los vieron discutir y además tu padre discutió con él y luego desapareció del instituto…- No podía creer que de verdad la gente pensará algo como eso –Y como él no ha confirmado ni desmentido nada…- se mordió el labio inferior ¡Mierda Castiel! Estaba dejando que hablaran de él…
-Él no me hizo esto Melody…- casi apostaba que la chica pertenecía al bando de los que dudaban del pelirrojo –Me asaltaron… Él me encontró y me trajo aquí…- susurro y respiró profundo –Melody… yo… Yo salgo, bueno, salía con él…- por primera vez lo decía en voz alta a alguien más, se sentía extrañamente liberador decirlo, ella apretó los labios hasta convertirlos en una línea, suspiró, sabía lo que ella sentía.
-Ya lo sabía…- eso si lo sorprendió
-¿Qué dijiste?- estaba molesto, si ella lo sabía…
-Lo sabía… Los vi… En la sala de delegados…- Eso tenía que ser una muy mala broma –Tú me gustas Nath… Tendrías muchos menos problemas si estuvieras conmigo…- se cubrió el rostro con una mano –Yo le envíe un mensaje ese día en la mañana…- ¿Por qué estaba diciéndole eso?
-¿Por qué…?- no sabía que decir… No sabía cómo expresar la frustración que sentía en ese momento, nunca había creído que Melody pudiera llegar a esos extremos -¿Por qué me lo dices…?-
-Culpa…- admitió ella despacio –Me sentí mal por ti… Te veías mal cuando lo viste ahí…- se revolvió el rubio cabello
-Vete- susurro finalmente
-Nath… Yo…
-¡Vete Melody!- alzó la voz sin querer –No quiero verte ahora… Solo déjame solo…- se notaba que la castaña quería responder pero se quedó callada y salió de la habitación a paso lento, había querido creer que había sido un intento “inocente” de ella para darle a entender sus sentimientos pero no… Ella lo había hecho para alejar al pelirrojo.
Quiso arrancarse el cabello de la cabeza, si tan solo hubiera escuchado un poco más al pelirrojo en lugar de desestimar lo que le decía como simples celos irracionales tal vez no hubieran llegado a eso en primer lugar… Y de nuevo esa sensación de contradicción, si eso no hubiera sucedido nunca hubiera decidido salir… Si tan solo fuera más valiente se hubiera decidido desde el principio, no habrían llegado a eso…
Como siempre llegaba a la misma conclusión, la culpa de todo era suya… Toda esa cadena de sucesos se hubiera evitado si hubiera seguido los consejos del pelirrojos, sacudió la cabeza y se repitió esa oración que ya era casi un mantra para él “una cosa a la vez…” Primero solucionar su situación legal, luego podría pelearse con sus culpas y complejos a gusto.
Mal que bien las cosas iban saliendo, iban mejorando… Con lo que Melody le había confesado podría lograr algo con Castiel… Ahora sí que necesitaba verlo, tomó su celular, seguía roto pero podía enviar un mensaje “Te extraño…” miro la pantalla unos segundos antes de enviarlo “¿Puedes venir?” envió en seguida, esperaba que estuviera menos molesto… El teléfono vibró de inmediato “Mañana…” era una respuesta seca pero al menos no se había negado.