Era la tercera vez que su celular sonaba y juró que mataría a quien fuese que lo molestaba un día sábado tan temprano. Estiró su mano hasta la mesita junto a su cama y presionó el botón de contestar
- ¿Estás son horas de dormir Chimchim? –
Jimin abrió los ojos y se incorporó en su cama, hace mucho tiempo que nadie lo llamaba de esa forma, se quitó el celular de su oreja para verificar quien era quien lo llamaba y lo confirmó, el único que lo llamaba de esa manera era su mejor amigo.
- ¡¿Tae?! – Gritó - ¿Eres tú? –
- ¡Oh! Vamos Chim – reclamó - ¿Ya te olvidaste de mi dulce voz? – preguntó con un tono infantil
Los amigos conversaron durante algunos minutos, preguntándose cómo estaban y algunas cosas típicas de dos personas que no se ven en varios años.
- ¿Y a que se debe tu llamada Tae? –
- Pues para que nos veamos por supuesto – dijo – Estoy en Corea -
Jimin nuevamente dio un gritó dejando casi sordo al chico tras en teléfono quien soltó una carcajada al oír la reacción de su amigo.
A los minutos ya habían quedado de acuerdo en juntarse ese mismo día, Jimin dejó sus planes de matar a la persona que lo despertó de lado, y fue a tomar una ducha para luego desayunar.
- Pensé que no te vería madrugar hoy hijo – lo recibió su madre cuando entró a la cocina
- Saldré con Tae más tarde –
- ¿Taehyung está en Corea? - preguntó y el menor asintió – Eso es genial –
Jimin se acercó a su madre para ayudarle a preparar el desayuno, la mujer lo observó y le pasó algunas cosas para que pusiera en la mesa.
- ¿Y qué tal tus notas cariño? – preguntó sin mirarlo
Jimin trató de pensar en algo para desviar el tema de sus notas, pero nada se le vino a la cabeza, al menos nada que no tuviese relación con el club de música, lo cual no servía porque terminarían hablado de sus notas de igual manera.
- Pues… -
- Jimin ya hemos conversado sobre tus prioridades – lo regañó – Si no obtienes buenas notas, no podrás seguir en el club –
- Lo sé mamá – respondió sin ánimos
La mujer asintió y continuó preparando el desayuno para ambos. Mientras comían la mujer le habló sobre su último viaje de negocios, cosa que a Jimin no le interesaba demasiado, pero como era la mujer que le dio la vida, se quedó escuchando.
Luego de por fin librarse de las historias de su madre, subió a su habitación para cambiarse de ropa y arreglarse para salir. En eso su celular comenzó a sonar, miró quien era y dudo en responder.
-¡Park Jimin contéstame! – escuchó un grito desde afuera
Dio un vistazo por su ventana y vio al mayor apoyado en el marco con el teléfono en una de sus orejas. Jimin cortó la llamada y se acercó para hablar con el mayor como siempre lo hacían.
- Jin, algún día los vecinos reunirán firmas para echarte del vecindario –
- Si me contestaras rápido no tendría que gritarte –
- Si si – dijo rodando los ojos - ¿qué quieres? –
- ¿Tienes planes para hoy? –
- Si – respondió – Saldré con Tae –
El mayor guardó silencio un momento, tratando de recordar de donde conocía ese nombre, entonces lo recordó.
- ¿Taehyung volvió? – preguntó sorprendido
- Solo está de visita, se irá en unos días –
- Entiendo, entonces diviértete – dijo entrando a su casa
Jimin también regresó a lo que estaba haciendo. Se probó muchas combinaciones de ropa, pero ninguna le convencía, y no es que fuese vanidoso ni le interesara verse bien, solo que Taehyung siempre lucía como un idol y él no quería ser opacado.
Finalmente se puso unos pantalones negros rasgados en las rodillas, una sudadera con gorro y una chaqueta negra sobre esta. Cuando estuvo listo, salió de su casa para encontrarse con su amigo.
Sentado en una banca estaba un chico delgado, su pelo de color rojo chillón lo hacían imposible de ignorar, sin contar lo lindo que era. Sonrió ampliamente cuando vio a Jimin acercarse y corrió a abrazarlo.
Al ser más alto que el de pelo negro, en medio del abrazo logró levantarlo unos centímetros del suelo, lo que hizo que el más bajito se quejara.
- Sigues tan pequeño Chimchim – le dijo cuando por fin dejó de abrazarlo
- No es mi culpa – se quejó, aunque con una sonrisa – ¿Y ese pelo Tae? ¿Es la moda en Japón? –
- Perdí una apuesta – respondió como si fuese natural – Pero me veo bien ¿no? –
Jimin rodó los ojos, su amigo seguía siendo el mismo bromista de siempre y eso lo hacía sentirse muy feliz.
Caminaron unas cuantas calles, recordando viejas anécdotas y contando de sus actuales vidas mientras buscaban un lugar donde comer. En eso Taehyung detiene el paso y pronuncia un leve “oh”. Jimin también se detiene con la mirada al frente.
- Hola Jin hyung – saluda Tae al rubio
- ¡Tae! – grita y lo abraza
A su lado Jimin los observa algo incómodo, pues Jin no andaba solo, frente a él estaba Yoongi quien parecía igual de incomodo que él, por lo que desvió su mirada del de pelo negro apenas estas se cruzaron.
- ¡Wooh! No te hubiese reconocido con ese color de pelo – comenta revolviendo el rojo cabello del menor
- Por favor hyung, no exageres – dijo tratando de quitarse las manos de encima
Cuando la mirada de Taehyung y la de Yoongi se cruzan, el menor desvía su rostro al suelo avergonzado y Yoongi, que reconoce al chico, se rasca la cabeza, nervioso.
- Soy Min Yoongi – se presenta
- Se quién eres – responde – Mi nombre es Taehyung, Kim Taehyung – dice con una sonrisa
- Bien, ya se conocieron – interrumpe Jimin – Ahora ¿nos vamos? –
- Claro Chim, muero de hambre –
- Ah, pero nosotros también vamos a comer – dice Jin - ¿Por qué no vamos juntos? –
Y ese momento podría contar como la única vez, hasta ese día, en que Yoongi y Jimin estaban de acuerdo en algo, ambos podrían matar a Jin en ese preciso instante, aunque Yoongi más que nada porque sabía que si estaba de acuerdo Jimin tendría otra razón para odiarlo
- Creo que es una buena idea – dijo Tae
- Yo no lo creo – comento serio
- Vamos Jimin, no seas amargado –
El mayor no espero a oír como el de pelo negro se quejaba y menos se quedó a ver como lo fulminaba con la mirada, simplemente tomó a Taehyung del brazo y lo impulsó a caminar. Yoongi miró a Jimin por unos segundos, pero este como siempre lo ignoró y siguió al par.
Entraron a un pequeño local de comida rápida y se sentaron en una mesa para cuatro, quedando Jimin frente a Jin, lo cual incomodaba de sobre manera al mayor. Esperaron unos minutos, pero nadie parecía querer atenderlos, entonces Jin se puso de pie.
- Iré a ordenar – agarró a Jimin del brazo – Ven acompáñame – le ordenó
-¡¿Qué?! – alcanzó a exclamar antes de ser arrastrado por el rubio.
Taehyung observó como los dos se alejaban, en su rostro se formó una expresión de confusión, entonces tragó saliva y regresó su mirada al frente, justo donde estaba Yoongi sentado.
-¿Qué crees que haces idiota? - preguntó Jimin enfadado
- Sigo siendo tu hyung mocoso – respondió dándole un golpe en la frente
- ¡Ahg! Lo siento hyung! – Se disculpó – Pero no entiendo que pretendes –
- Jimin, Yoongi me dijo que le contaste lo de Tae – suspiró fuerte – Y se siente un poco culpable, pensé que era una buena oportunidad para que se disculpe con él –
Jimin tragó aire y lo soltó mientras se frotaba la sien, estaba tratando de asimilar toda la situación.
- Le dije que no era necesario – dijo – Pasó hace tiempo –
- No lo culpes – posó una mano en el hombro del menor – Yoongi no es una mala persona, estas cosas le afectan –
- Como sea –
Observó por un instante la mesa donde estaban sentados los otros dos, y los vio conversando tranquilamente, dio otro suspiro para calmarse y se giró para por fin pedir algo de comer.
- No sabía que eras amigo de Jimin –
- No somos amigos – dijo apenado – En realidad no le caigo muy bien –
Taehyung miró a Yoongi sorprendido, ladeo la cabeza para mirar la expresión que se había formado en el rostro del contrario y entrecerró los ojos pensando, de pronto una idea se le pasó por la cabeza lo hizo saltar en su lugar.
- ¿No será por…? – Se llevó las manos a su boca – ¿Por mi? -
- Si, la verdad me contó lo que pasó hace tiempo con… contigo – tragó saliva – Yo quiero disculparme enser… -
- ¡Aish no!- lo interrumpió – No tienes que disculparte – dijo moviendo las manos – Pasó hace muchos años, ya está más que superado – sonrió
Yoongi sonrió también, de alguna forma sintió como si se sacara un peso de encima, pero aún así quería disculparse apropiadamente.
- De todas formas, no quise hacerte daño –
- Pues, si admito que dolió mucho en su momento – dijo bajando la vista – Pero si te hace sentir mejor, entonces te perdono -
- Gracias –
Taehyung le regaló nuevamente una gran sonrisa a Yoongi, y este no pudo evitar sonreír levemente también. Ese chico irradiaba paz, y de alguna forma a Yoongi le gustaba sentir eso.
- Por cierto… - dijo poniéndose serio - ¿Te gusta Jimin verdad? –
Yoongi sintió su cara encenderse levemente hasta que el calor se le hizo casi insoportable, abrió sus ojos de par en par y se ahogó con su propia saliva comenzando a toser. Taehyung lo miró y se largo a reír a carcajadas.
- Eres gracioso – dijo aun riendo – Creo que si hubiese conocido este lado de ti, no me hubieses gustado –
- ¿Qu… qué? –
- Me gustan los chicos malos – bromeó guiñándole un ojo
- ¡No, no! – Interrumpió – Co… cómo sabes que me gust… - no pudo terminar la pregunta
Taehyung miró disimuladamente a donde estaban los otros dos y se acercó un poco más a Yoongi para hablar.
- Ah no lo sabía – comentó – Pero me lo acabas de confirmar - comentó acomodándose en la silla
Y Yoongi se sintió el ser más idiota de la tierra en ese momento. A los segundo el par faltante llegó con unas bandejas llenas de comida y se sentaron junto a ellos.
- ¿Todo bien? – preguntó Jimin
- Sip – respondió Tae natural, tomando su comida.
Comieron tranquilamente, Jin y Taehyung eran los que mantenían la conversación viva, Yoongi comía un poco avergonzado aún, y Jimin se relajó un poco al ver que su amigo estaba igual que siempre, temía en el fondo que recordar aquella situación le afectara demás.
Al terminar de comer los cuatro se despidieron, y caminaron cada par por su cuenta.
- ¿Qué fue lo que hablaron? –
- Nada importante –
- ¡Tae! –
- Solo quería disculparse ¿sí? – Dijo – Ahora deja de comportarte como un tonto –
Jimin detuvo el pasó y lo miró extrañado, ¿en algún momento se perdió de la conversación? Porque no entendía a que se refería su amigo.
- Sé que no lo has estado tratando bien – dijo mirándolo con reproche
- ¿Y eso te afecta porqué...? –
- No me afecta Jimin – habló perdiendo la paciencia – Pero no es justo, él jamás te hizo nada –
- Como lo trate es mi problema – protestó – Además, por qué estamos hablando de Yoongi – dijo irritado
- Tú empezaste –
Jimin se rascó la cabeza frustrado y comenzó a caminar, Taehyung lo siguió con la mirada y sonrió para luego seguirlo y abrazarlo bruscamente, pasando un brazo por el hombro contrario y despeinando más el cabello negro del más bajito.