--¡Felicitaciones! ¡Serán gemelos! –decía el doctor, dando un par de palmaditas en mi estómago.
--¿M-me p-podría r-repetir l-lo q-que d-dijo? –me sentía algo nervioso; pero creo que debe ser un error.
--Dije que la operación fue todo un éxito, logramos su fecundación—
--¿E-está seguro de que no se equivocó? – debe ser una equivocación, sí; eso es…
--No… estoy segurísimo de que no… ahora si me permite, revisare las cicatrices de su abdomen; ¿puede levantarse la camiseta? –
--S-si…--
Levante suavemente mi camisa, llegando hasta la altura del ombligo; y…
--Al parecer las cicatrices ya han sanado… aunque debe procurar no hacer demasiado esfuerzo por lo menos una semana más; le recomiendo quedarse aquí para la observación, en un momento más lo llevaremos a realizar un ultrasonido—
No puede ser, esto debe ser un error…
En la parte baja de mi vientre, a cada lado de donde comienza mi cadera, había dos marquitas pequeñas… demostrando algo que no debía ser…
--D-doctor… e-esto debe ser un error—mi voz se escuchaba entrecortada, estaba nervioso, asustado.
--¿Está bien, joven Namikaze? Se ve algo pálido—
--C-creo que acaban de cometer una gran equivocación—
--¿Qué dice? Yo nunca me he equivocado en mi vida, señorito Namikaze…--
--Uzumaki…--
--¿Qué? —
--¡Mi nombre es Naruto Uzumaki! —ya no podía, estaba molesto con todos.
--N-no puede ser… y-yo nunca me equivoco—pues al parecer esta vez sí.
El doctor salió corriendo de la habitación, dejándome ahí; hecho un manojo de nervios.
--Relájate Naruto; respira…—honestamente, creo que si alguien se me acercara en este momento se quedaría sin mano.
--¡¡Les dije que era una mala idea hacer una zona de maternidad justo al lado de la sala de emergencias!!—escuche una voz masculina, gritando a través del pasillo; se notaba algo molesto.
--¡¡Necesitábamos una sala de maternidad y lo sabes!!—la otra voz era de una mujer, parecían tener una pelea.
--¡Lo sé perfectamente! ¡Pero teníamos que esperar un poco para hacerlo! ¡No improvisar y remodelar un almacén de medicamentos! —
--¡Cierra la boca de una vez! ¡Hablaremos de esto luego! —
--¡Bien! —
¡Wow! Y yo que pensaba que tenía problemas…
¿Qué dices Naruto? ¡¡Es obvio que tienes problemas!!
--Sé que no es la mejor manera de presentarnos, pero lo hare de todos modos; mi nombre es Sasuke Uchiha, dirigente del hospital—exclamo una de las cinco personas que entraron a mi habitación; todas vestidas con una bata blanca—Y estoy seguro de que tu nombre es Naruto Uzumaki, ¿me equivoco? —
Era alto, fuerte, de ojos y cabello negro; su rostro era serio; pero era realmente guapo.
¿¡Que dices, Naruto!? ¡¡Concéntrate!!
--S-sí, soy yo… ¿Qué…? —
--¿Qué haces aquí? —solo asentí ante su declaración, era obvio que eso preguntaría—Pues mira, creo que debes recordar el accidente que tuviste; resulta que tu saliste ileso, y las enfermeras te llevaron a la sala de descanso; pero lamentablemente, es la misma donde se encuentran los registros de maternidad; confundieron sus boletas y.…—de repente se silenció; parecía pensar algo antes de hablar.
--Y…--en serio pe estaba exasperando.
--El paciente Deidara Namikaze estaba destinado a una intervención de fecundación asistida, y gracias a la confusión de las nuevas enfermeras de esta zona; la intervención fue realizada, pero en el paciente incorrecto…--
--Queremos pedir perdón por parte de todo el hospital—decía una mujer rubia, haciendo una reverencia.
Okay, Okay… me sentía… confundido…
--¿Entonces qué voy a hacer? —las lágrimas comenzaron a abordarme; esto no podía pasarme a mí.
--Estuvimos hablando de ello, y lo sentimos; es imposible para nosotros realizar un aborto; ni ahora ni nunca—
Eso no me importaba ahora, es decir, yo nunca acabaría con una vida; estos niños que crecen en mi vientre no tenían la culpa de el gran error que cometieron.
--N-no dije eso… quiero saber si no hay problema con esto, digo; con Deidara-nii—Deidara era mi primo mayor, si sabía que quería tener un hijo; pero no sabía que tan pronto.
--No lo sabemos, aun no despierta; ya que el anestésico que se les pone dura al menos una semana, creo que despertara esta tarde…--
--¿Y mis padres, Menma? ¿¡Cómo están ellos!?—quería saber que estaban bien; lo necesitaba, demasiado…
--Lo sentimos mucho, pero fuiste el único sobreviviente…--
No podía creer lo que escuchaba, ¿Por qué?
Esto no podría ser peor…
--¿Q-que? —mi voz se ahogaba con mi llanto, dejando de lado todo lo que tenía en mente--¿Por qué? —
--Tranquilícese, les hará daño a los bebes—
--Lo siento… lo siento mucho…--sostuve mi vientre, abrazándome protectoramente.
Necesitaba llorar, lo necesitaba demasiado.
--Lamentamos mucho su perdida, pero necesitamos que llene las fichas de sus padres y hermano; los costos de velación, piso y transportación corren por cuenta del hospital, y por parte de nosotros; le será permitido ver la ficha del banco de esperma, para que conozca al “padre” de sus hijos, solo de reconocimiento general—decía la rubia doctora, entregándome unos papeles.
--Sí, no se preocupe…--
--Bien, eso es todo; dentro de dos días vendrá mi abogado, el resolverá algunos problemas con el error que cometimos—decía el azabache, sosteniendo su barbilla—Si no hay más problema, volveré después del almuerzo, yo seré su médico personal durante su estadía; junto con mi compañero Gaara, encargado del área de maternidad—decía, mientras un pelirrojo asentía a su comentario—Nos vemos esta tarde, señorito Uzumaki—
El pelinegro salió, seguido de los otros; dejándome ahí, en medio de mis lamentos.
--Ya no llores, Naruto; le harás daño a los bebes--
Llene las formas de mis padres, de Menma; y las deje a un lado, quería hundirme en mi propia tristeza; aunque el choque de emociones no me favorecía.
--Estúpidos cambios de humor; me hacen sentir triste y feliz al mismo tiempo—
Recordé lo que había dicho la doctora, y tomé el sobre en donde venía la información del padre de mi hijo.
--Espero que sea lindo… ¿Qué digo? ¡¡Concéntrate Naruto!!--¡¡Aghh!! ¡Malditos cambios de humor!
Abrí la carpeta, y vi el nombre del sujeto; junto con su fotografía…
--¡Oh mi Dios! —no era lindo, ¡era súper guapo! —Aunque… se me hace conocido…--cabello negro, piel blanca… ¡No me digan que…!
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
--Me pregunto qué dirá cuando sepa que su doctor es el padre de sus hijos…--
--¿Qué dijiste Tsunade? —
--Nada…--