Chiaki sentía que era lo correcto, esta mañana a su oficina habían llegado los papeles de divorcio, durante 16 años estuvo luchando por su matrimonio pero había perdido esa lucha hace poco, primero fueron peleas, Yoshiyuki lo culpaba de lo que había pasado aunque no se lo dijera, veía a su hijo como un estorbo, algo que él no deseaba, hasta que ese día que le había golpeado.
Tomo la pluma que tenía en sus manos para firmar, solo faltaba la firma de su aun esposo y por fin podría darle fin a su matrimonio.
-Presidente Kirishima- escucho como su secretaria entraba, dejo los papeles encima de su escritorio- los ejecutivos de la revista Usagi están aquí
-En unos momentos voy- contesto guardando los papeles en uno de los cajones
Esa tarde, Yoshiyuki firmaría los papeles. Yoshiyuki observo la foto de su esposo e hijo sonriendo hacia la cámara, se arrepentía de haber dejado que la ira lo cegara, ahora tendría que vivir con las consecuencias de sus actos.
-Soy un idiota- susurro mirando la foto- supongo el pago de mis malos actos en el pasado, es el perderlos a ustedes
Ritsu miro con el ceño fruncido el inventario, estaba seguro de que había hecho bien las cuentas, suspiro para recargarse en el respaldo de la silla, ser dueño de un negocio no es nada fácil, se sobo las cienes frustrado.
-Señor Takano- escucho que lo llamaban uno de sus empleados, levanto la mirada para encontrarse con un doncel
-¿Sucede algo, Yukishio?-pregunto a su empelado al verlo indeciso
-La señora Takano esta aquí- dijo el doncel hacia su jefe
Ritsu asintió para que la dejara entrar, Kotoko entro para caminar hacia su yerno que se encontraba sentado en su lugar. La azabache sonrió hacia el ojiverde para tomar asiento frente al castaño.
-Yukishio, nos podías traer dos tazas de café- pido Ritsu al doncel que asintió para ver a la mujer- No sabía que regresado de America, Takano-san
-Kotoko, Rit-chan sabes que puedes llamarme Kotoko- dijo la mujer sin dejar de lado su sonrisa- solamente fueron dos años que me fui pero ya extrañaba estar aquí
-Sí, Kotoko, ¿Y cómo le fue en su viaje?-pregunto sabiendo que la mujer fue aprender un poco de comida extranjera para ponerlo en su nuevo menú
-Bueno, aprendí diferentes recetas y tipos de cortes de carne- contaba la mujer hacia su yerno- Sus costumbres en si son algo extrañas pero son muy amigables
La puerta fue abierta por Yukishio que traía las dos tazas de café, Kotoko recibió la suya para darle un sorbo y continuar hablando- Pero dejando eso de lado, ¿cómo has estado?
-Bien- respondió Ritsu con una sonrisa-Hace unos momentos reabrimos la cafetería que está cerca de la bahía después de haber hecho unas remodelaciones
-Como esta Misaki?-pregunto Kotoko por su único nieto- supe que ya entro a la preparatoria
-Así es- respondió Ritsu recordando sus días en la escuela, antes de que su esposo fuera asesinado por su mejor amiga- Solo espero que no traiga novio
-Rit-chan, mi hijo se moriría de celos al ver a su bebe con novio- dijo Kotoko con una sonrisa nostálgica- Aun recuerdo a mi hijo cargando a Misaki cuando nació, su mirada era de cariño y amor, pero a veces el destino es cruel
Ritsu asintió mientras intentaba evitar las lágrimas, Kotoko tomo la mano del doncel para apretarla- Has hecho un buen trabajo, estoy agradecida que mi hijo haiga encontrado una persona que aún lo ama aun muerto
-Lo extraño- susurro Ritsu a su suegra- No sabe cuánto lo extraño
Kotoko apretó más el agarre dejando que el castaño liberara sus lágrimas.
Keiichi miro todo el lugar con una mirada brillosa, el lugar era lindo, los maid también.
-Wau, nunca pensé que dejarían así el lugar- dijo Nanamy a los chicos, pues ella venía muy seguido a ese lugar y cuando supo que lo estaban remodelando, iba al que estaba en la plaza central- Sí que los Takano se lucieron con el lugar
-¿Los Takano?-pregunto Shinobu dudoso, sabía que aquella familia tenía una cadena de restaurantes exclusivos en todo Japón- No sabía que este lugar les pertenecía
-En realidad, el nieto del dueño original está casado con el hijo de los Takano- respondió Yuzu a los demás secretamente- incluso tienen un hijo en común
-Misaki- respondió Nanamy recibiendo miradas impresionadas de sus amigos- lo conozco desde el jardín de niños, cuando me cambie a Fukawa, nunca perdí contacto con el
-No sabía que Misaki era nieto de los Takano- dijo Shinobu impresionado a su prima, pues conocía al doncel desde la primaria y secundaria
-Nadie más lo sabe- respondió Nanamy a sus amigos- Solo los más cercanos saben de la fortuna de este doncel
-Que fortuna- pregunto Aikawa interesada, dejando de verse en el espejo de mano
Nanamy miro hacia ambos lados esperando que nadie los escuchara- Misaki pertenece a dos familias más importantes e influyentes de Japón, los Izumi y los Onodera, contando el hecho que es bisnieto de Tsukishima Matsumoto, dueño de las tres cafeterías más populares de la cuidad y es nieto de los Takano, ese chico tiene suerte
-Ni contar de su amigo- dijo Shinobu recodando al doncel que seguía Misaki a todos lados pareciendo su sombra- Ryûirichiro Hatori, hijo del actual presidente de las industrias Hatori y el actual presidente de la empresa de publicaciones Kirishima, bisnieto del actual líder de la familia Kamujou y de los Takafumi, que son dueños de un hospital privado
-Nadie sabe cómo son, ni salen en revistas solo se sabe que su fortuna equivale a billones de dólares- dijo Shinobu a los chicos- Que suerte, imaginen al varón que se case con uno de ellos
Keiichi estaba asombrado por lo que los chicos habían dicho, escucho que la puerta se abría dejando pasar a dos varones y un doncel. Se confundió al ver al doncel junto a Asahina, le dio un codazo a Shinobu.
-¿Quién es el?-pregunto el doncel a su amigo, Shinobu dirigió su mirada hacia la puerta para ver al doncel
-Ah, es Ryûirichiro, tal vez venia para acá y se cruzó con ellos- respondió Shinobu para levantarse de su lugar y alzar su mano- Chicos por aquí
Keiichi vio como los varones se acercaban a la mesa, vio al doncel que caminaba hacia atrás de la cocina, perdiéndose de su vista, le preguntaría a su amigo de donde lo conocía.