Taemin que salió corriendo sin rumbo alguno, decidió adentrarse en el baño de hombres mas cercano de su facultad, no tenia ningún lugar mas donde ocultarse, después de todo si lo veían caminando por los pasillos en horario de clases recibiría una sanción, cosa que evitaba a toda costa desde que había ingresado a la institución.
Sabia que no se salvaría de un castigo seguro con el nuevo profesor, mas si continuaba en clases todos se darían cuenta del olor peculiar que expedía, ese que solo provenía de un omega en celo, todo representaría un problema si se daban cuenta ya que podían utilizarlo como un juguete sexual, porque la mayoría tenia esa definición de los omegas.
Respiro agitadamente con una mano en su pecho tratando de regular su respiración por la pequeña carrera que había hecho momentos atrás. Se dirigió a los lavados y mojo su rostro con insistencia. Se sentía envuelto por el aroma del mayor lo que provocaba que sus feromonas estuviesen saltando como locas y el tuviera en ese momento una notable erección entre sus pantalones que le avergonzaba. Nunca le había sucedido eso, el siempre se aseguraba de tomar unas pastillas especiales para controlar su celo. Esta vez esta no tuvieron efecto alguno, al parecer.
Sus piernas flaquearon repentinamente provocando que cayera al suelo, sus piernas habían perdido fuerza y su cuerpo aumentaba de temperatura, su olor cada vez se volvía mas fuerte.
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Minho quien desde momentos antes de que Taemin saliera corriendo, había quedado prendado a el cuando sus miradas chocaron solo por unos cuantos segundos, quedo completamente asombrado de su belleza y de esos brillantes ojos avellana. Algo dentro de el le decía que ese pequeño cambiaria gran parte de su vida de un momento a otro.
Trato de seguir con sus lecciones con normalidad mas su mirada siempre recaía sobre ese estudiante que en ningún momento de la clase levanto la vista y aunque hubiera quedado encantado con su presencia no podía permitir que no prestara atención a la materia que impartía. Cuando estaba por llamarle la atención, este sorpresivamente había salido corriendo de la clase bajo su estupefacta mirada. No paso por alto el olor que emanaba ese pequeño cuando paso frente a su escritorio, su experiencia como alfa lo hicieron identificar rápidamente ese aroma peculiar.
Frunció el ceño claramente confundido ¿Que rayos hacia un Omega en una universidad de alfas? y en primer lugar...¿Que hacia en su época de celo fuera de casa? sin duda era un asunto muy peculiar.
Su lobo le gruñía demandando que fuese tras ese chiquillo de piel pálida y por primera vez estuvo en total acuerdo con el. Pidió a los demás alumnos de terminar algunas paginas del libro antes de salir presurosamente tras su estudiante, cuando estuvo en el pasillo miro hacia ambos lados tratando de averiguar por donde pudo haber ido, pensó que lo mas razonable serian los baños que estaba situados cerca, así que no dudo en ir a esa dirección. Entro con precaución y sus ojos se abrieron en sorpresa al verlo tirado en el suelo, notando como su cuerpo temblaba levemente, todo el baño estaba perfumado de ese dulzón aroma provocando que sintiera una punzada en su miembro a pesar del gran auto control que tenia.
-Ey...-tomo la altura del menor tomando su brazo con cuidado.- ¿Te encuentras bien?.- pregunto aunque sabia muy bien el 'por que' de su estado.
-¡No me toque! - hablo apresuradamente dándole un manotazo en el brazo para que lo soltase, cosa que con su mínima fuerza no ocurrió. Su cuerpo había reaccionado exageradamente con solo ese toque.
Minho rodo los ojos fastidiado, simplemente lo quería ayudar y este ya se estaba quejando. Debería agradecerle por estar haciendo eso y no saltándole encima para desnudarlo.
-No seas maleducado y déjame ayudarte.- Le regaño severamente.- Ya se que eres un omega así que lo mejor serán que te dejes ayudar en un momento como este.
El menor con sus ojos llorosos le miro sorprendido aunque en cierta parte sabia que en cualquier momento se daría cuenta por su fuerte olor. No pudo hacer que asentir tímido aun sin ponerse de pie, sus piernas estaban aun mas débiles con la presencia del mayor presente.
Minho rápidamente entendió la situación y los cargo en sus brazos estilo princesa. Ninguno de lo dos paso por alto el gemido que soltó el peli castaño al estar pegado a la anatomía del contrario. El mayor lo paso por alto, si le ponía mucha atención terminaría por perder la cordura.
A pasos grandes lo llevo hasta su propia oficina, no podía dejar que nadie los viera en esa situación, provocarían malentendidos y corrían el riesgo de que a uno lo despidieran y al otro lo expulsaran. Taemin simplemente jadeo leve sintiendo su cuerpo demasiado caliente, no podía evitar hundir su rostro el cuello del mayor y olerlo sin siquiera disimular un poco. Minho simplemente apretaba la mandíbula controlándose, no le llamo la atención ese actuar en ningún momento porque sabia que lo hacia de manera inconsciente.
Lo dejo sentado en el sofá que tenia en su oficina no sin un poco de resistencia por parte de Taemin, Minho simplemente sonrió divertido, primero no quería que lo tocara y después era todo lo contrario.
-Ahora si. Me explicaras que haces aquí cuando claramente puedo notar que eres un Omega.- se sentó frente a el, mirándolo amable como muy pocas veces hacia, pero ese joven despertaba su lado protector.
-No puedo costearme un Instituto para omegas...Usted debe saber que ellos son costosos.-Murmuro un poco mareado.
Minho suspiro comprendiendo un poco, no podía sacarle toda la información en un sentón.
-Bien.- se puso de pie y se dirigió hacia a la puerta.-Te quedaras aquí hasta que acaben las lecciones, tratare de arreglarlo con el director.-sabia que se estaba tomando atribuciones que no debía, pero simplemente hacia lo que quería y le parecía mejor.- Por el momento tengo que volver a dar la clase. Tu te dedicaras a controlar tu celo.- Tomo el pomo de la puerta y la abrió, antes de salir volvió a girarse.-Y ni se te ocurra salir de aquí, aun tienes que cumplir con el castigo por interrumpir mi clase.-Sonrió ladino y salió sin mas.
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Taemin se había quedado callado sin poder creer que alguien había descubierto su naturaleza, y mucho menos pensaba que esa persona fuera justamente su nuevo profesor de historia. Agradecía internamente que este no hubiese hecho comentarios negativos o abusado de su vulnerabilidad. Aun así no podía sentirse completamente tranquilo ya que este podía cambiar su opinión de ayudarlo en cualquier momento.
Sus mejillas se tornaron de un color rosáceo cuando recordó el gemido que soltó cuando este lo tomo en brazos, era algo que había hecho involuntario y ahora estaba demasiado avergonzado por su comportamiento.
-Eres un tonto Taemin.- susurro golpeando su frente repetidamente.
Ahora que al fin podía pensar con un poco mas de tranquilidad, se dio cuenta que su profesor no sabia siquiera su nombre. Como había llegado atrasado no le había dado tiempo de pasar la lista de clase o simplemente el no había puesto atención. De todos modos tendría que presentarse adecuadamente después y agradecerle su ayuda, sino fuera por el cualquier otro estudiante lo pudo encontrar en esa situación y aprovecharse de el.
Pero ahora que se suponía que hiciera estando en la oficina de su profesor, sin tener derecho a salir de ella. Y sin recalcar que el bulto entre sus pantalones seguía presente...