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Amistad se escribe con S por maikyuc

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Washington DC era una ciudad muy ocupada que llenaba su calles con una sinfonía de ruidos de motor, gente caminando a toda prisa sonidos de claxon y pláticas entre habitantes de la ciudad, dentro del cuarto de un hotel muy pocos e esos ruidos hacían eco, la mayoría eran acallados por ronquidos provenientes de uno de los habitantes

Con algo de trabajo Bruce se puso en pie y se dirigió a las cortinas—mucho sol…— las cerró de un solo tirón y miro la cama, de modo borroso pudo ver un enorme bulto—¿Qué fue lo de ayer? ¡Ay! Mi cabeza…—según todo indicaba que había bebido de mas, se regresó a la cama con algo de trabajo y se volvió a meter entre las sabanas—cinco minutos más…

Bruce se acomodó y miró por debajo de las sabanas unos mechones rubios ¿cabello corto?, espalda ancha; ¿Qué clase de mujer había metido en su habitación? —¡¿Pero qué?! — Bruce quito las sabanas de un solo golpe dejando ver la figura de un hombre bastante fornido y rubio

El hombre estaba únicamente vestido con esos tradicionales boxers blancos y que parecían sacados de los años 60, Bruce se miró la vestimenta igual estaba en ropa interior—tiene que ser una broma…— Steve comenzó a removerse y se acomodó en posición fetal para comenzar a temblar, comenzó a tantear buscando la sabana

—Tengo frio…— dijo entre sueños el hombre que aún estaba en la cama—¡Aum! —dijo bostezando y estirándose con pereza—buenos días…—Steve se incorporó mientras se acomodaba los musculos y comenzaba rascar diversas partes de su cuerpo

—¡pero que!

—Si bueno…es que no había otra cama y no pensé que te molestara…— Steve se puso de pie y miró a Bruce que lucía algo confundido—¿estás bien? —Bruce apenas pudo asentir discretamente antes de comenzar a aguantarse las ganas de vomitar

—Voy a… —corrió hacia el baño, Steve sabía lo que iba a pasar cuando vio que el pobre moreno se dirigía al baño dando tumbos, escucho el líquido salir de su boca y chocar con el agua del inodoro al ritmo de arcadas.

—Típico…— el rubio camino con cautela y se asomó a la puerta—¡Wow! — Bruce al parecer había perdido algo de fuerzas y estaba casi dentro de la taza del baño—con cuidado amigo…

—No …¡ug! Me siento…¡gh! Bien

—Se llama resaca… a todos nos pasa…— explico Steve mientras le ayudaba a incorporarse un poco—¿te sientes mejor? —Bruce asintió y luego volvió a sentir esas incontrolables ganas de sacar lo que había en su estómago, esta vez Steve lo sostuvo con fuerza por la cintura.

—¡Dios que asco! —se quejó Bruce mientras se limpiaba la boca con la palma de la mano

—Ten… bebe un poco de agua— el rubio le acercó un vaso con agua de la llave

—¡Ugh! —Bruce acabó de beber—Gracias Stu…

—Steve… ¿Qué? ¿Sigues ebrio?

—no… es solo que… ¡Ugh! —Bruce eructó — la cabeza me da vueltas, la boca me sabe a caño y tengo mucha sed…y…

—¿y? —Steve estaba aguantado las ganas de reír —¿no bebes mucho verdad? —Bruce negó con la mano —jejeje que simpático… yo opinaría lo contrario

—Te dije que no soy un hombre de muchas salidas… bueno creo que te lo dije… —Bruce hizo gárgaras con el agua y luego escupió —mi cabeza esta revuelta

—y tu peinado perfecto también—Steve pudo ver como el Wayne se regresaba a la cama—venga Bruce… yo me siento igual

—¿Cómo es que tute ves como si nada?

—Una vida de buena vida universitaria— explicó el militar— creci rodeado de amigos a los que les gustaba beber…

—Qué envidia…—dijo Bruce con algo de sarcasmo—¿Qué hora son?

—Deben ser como las nueve…—lo cual es estar despierto muy temprano para después de un dia de buena bebida

—¡Maldición! —mascullo Bruce desde la cama mientras se removía con pereza— tengo una junta a las once de la mañana… ¡No quiero ir!- si Alfred lo hubiera visto de esa forma seguro que le reprendía por intentar dejar de lado sus responsabilidades

—Vamos Bruce no es para tanto… —Steve se sentó junto a la cama y le dio un par de golpesitos en la pantorrilla —anda, si te hace sentir mejor yo tengo una reunión al medio día

—Si claro por qué no, mal de muchos… —Bruce se incorporó con algo de trabajo—escucha coronel— el militar se quedó mirando curioso a Bruce

—Solo Steve ¿sí?

—Vale Steve… gracias por no dejar que me ahogue con mi vomito… y por ayudarme ayer por la noche

—De nada Bruce… para eso son los amigos…— Steve se le quedó viendo a Bruce que lucía un poco incómodo por lo que había mencionado —bueno, supongo que es un poco apresurado decir algo como eso después de todo nos conocimos ayer ¿cierto? Perdona si te incomodé

—No, no para nada es solo que … bueno—Bruce comenzó a rascarse la cabeza de manera nerviosa—bueno no tengo muchos amigos con los que vaya de paseo como lo hicimos ayer… lo que si hay que decir…

—¿Si?

—Eres muy agradable… pase una buena velada anoche…—Bruce sonrió y el ambiente entre el y Steve se relajó bastante.

—Si yo también… sabes para ser alguien que pertenece a la alta sociedad eres un sujeto muy sencillo, te agradezco mucho que me hayas dejado dormir aquí…—Steve se puso de pie de la cama—ahora… yo te devolveré el favor

—¿Cómo dices? —Bruce aún estaba eructando parte de su mala racha alcohólica

—Ven amigo, te llevare a que te cures la resaca— dijo Steve mientras se dirigía a donde había dejado amontonada su ropa, se puso su playera sin mangas y comenzó a meterse en sus pantalones— venga Bruce ¿qué esperas?

—que no me regresen las ganas de vo…—no alcanzó a decir nada más, el Wayne se bajó de la cama y emprendió la carrera al baño.

Bruce se puso el traje, no estaba para corbatas, asi que se fue sin ella, lucía mucho más casual igual que Steve que había dejado el saco pendiente de ponérselo, la verdad es que ambos lucían relajados—Demonios… cuanto sol…— se quejó nuevamente Bruce

—Y eso que tenemos puestos los lentes oscuros, por cierto gracias por prestármelos— ambos sentían que el usar las gafas contra el sol les hacía lucir no tan demacrados— recemos porque este abierto…

—Es un crimen caminar a esta hora— explicó Bruce mientras sentía más y más sed

— se ve que es tu primera resaca…

—Al menos una así de fuerte…— comentó el Wayne mientras caminaba detrás de su nuevo amigo—por cierto ¿a donde vamos?

—a desayunar…—Steve se detuvo haciendo que Bruce choque con el—jeje, lo siento…— Steve giró la vista como buscando algo—¡oh sí! Ahí está… Ven Bruce—sin poder reaccionar bien Bruce sintió que el coronel le tomaba de la muñeca y lo hacía cruzar la calle a prisa—¡Buenos días!

—¡Buenos días Coronel! — un hombre moreno de marcado acento latino le saludó de regreso—¿Cómo está?

—Bien señor Reyes— Steve se quitó los lentes y miro al hombre

—¿Los tacos de siempre? — preguntó el hombre

—Sí, dos órdenes y por favor uno de esos extraños estofados picantes—dijo Steve

—Supongo que ha tenido una buena noche—dijo el hombre —usted y su amigo… buenos días señor

—Buenos días…—Dijo Bruce con algo de pena, se sentía muy cansado y sediento

—Tranquilo señor, aquí podrá aliviarse "la cruda" — el hombre hizo una seña a un joven que estaba dentro del negocio—¡Hey Jaime!

—¿si papá?

—Prepara la mesa de siempre para el coronel y su nuevo amigo

—Gracias señor Reyes— el hombre asintió con un ademan amistoso mientras su hijo terminaba de limpiar una mesa de ese sencillo lugar—¿te agrada el lugar? —Steve miró a Bruce que lucía curioso

—Es simpático—dijo Bruce mientras se acomodaba en la silla frente a Steve— y se agradece que sea bastante oscuro y apartado…

—Jeje, es mi lugar favorito para venir a comer algo sencillo— Steve notó que le ponían frente a el y Bruce platos con tacos—Muchas gracias Jaime…

—De nada Coronel Trevor… recuerde que la salsa de la cuchara azul es la picante…— explicó el chico y Steve solo asintió

—Um.. Dleciogso… —comentó el rubio con algo de trabajo mientras se metia de un solo bocado más de medio taco—¿pasa algo?-dijo mientras tragaba

—Nada…— Steve notó que Bruce lucía un poco incomodo

—Anda…. Este es tuyo— Steve tomó uno de los platos y lo colocó frente a Bruce—un poco de carne, grasa y picante te ayudará… adelante ponle salsa de la cuchara azul, pero no le pongas demasiada… jeje

—He comido cosas picantes antes…—dijo mu seguro el Wayne mientras aderezaba su comida con mucha confianza, para luego morder su taco con gusto— esta delicioso…

—Te lo dije—Bruce siguió comiendo ante la mirada picara de Steve—3, 2, 1…

—¡Oh! — Bruce soltó su comida con algo de asombro —picante, picante, picante…—comenzó a repetir desesperado…

—¡Hey Jaime! — Steve le hizo una seña al chico indicándole que le llevara dos bebidas— ten bebe— dijo el rubio cuando le llevaron dos vasos tamaño grande de agua de Limón

—¡Dios! Sí que es picante…— explicó Bruce—¿Qué? Eso no hace que deje de estar delicioso —ambos hombres empezaron a reir.

Los tacos se acabaron y llegaron inmediatamente después dos enormes platos con una especie de guisado con caldo que se veía algo condimentado—¿y esto es?

—No recuerdo el nombre—dijo el rubio mientras comenzaba a removerlo usando su cuchara—solo es que es bueno para la resaca…— explicó el rubio— anda con confianza…

—claro por qué no…—Bruce levantó su cuchara y saludo a Steve—bueno, a tu salud…— Steve respondió el ademan

Comieron unos segundos en silencio, Bruce estaba más animado después de unas cuantas cucharadas— esta delicioso— Steve sonrió de ver animoso al Wayne

—Sabes viniendo de alguien como tu eso vale mucho…

—¿Cómo que alguien como yo?

—Ya sabes un hombre de mundo…

—Hey tu no luces precisamente sencillo…

—Soy solo un soldado que ha tenido suerte…

—¿Por qué lo dices?

—Seré sincero Bruce… —Steve dejó la cuchara un momento y se limpió la boca—de no haberme encontrado a la mujer maravilla o bueno más bien si ella no me hubiera encontrado y la hubiera traído a Washington aun seguiría metido en alguna base de las fuerzas armadas—el rubio regresó a su guisado— tuve la oportunidad de mostrar lo que se y lo que puedo hacer gracias a ese evento…

—Vamos…no te menosprecies tanto—Bruce sonó un poco mas condescendiente—por lo que se ve eres una persona dedicada, con mujer maravilla o sin ella creo que tarde o temprano hubieras llegado alto … no tienes nada que agradecerle a ella..-Dijo Bruce de maner algo despectiva— excepto tal vez por la borrachera de anoche…

—Y el desayuno de hoy …— una nueva pausa se hizo entre ambos hombre— y ¿Qué planes tiene para hoy el soltero más rico de Gotham? Digo eres soltero ¿no?

—Si, si lo soy… ¿Por qué? ¿Planeas invitarme a salir? —comentó Bruce en tono de broma…

—Puede ser… necesito conocerte más…

—Me has conocido más que muchos después de haberme visto vomitar—Steve tuvo que aguantar la risa— bueno se supone que hoy tengo juntas… todas las putas juntas del mundo—comentó Bruce en un tono de fastidio muy evidente —perdón por aquello…—dijo refieriendose a la palabrota que acaba de emitir

—¿Por qué por lo de juntas? No hay problema—Bruce sonrió cómplice—te cambio las tuyas por las mías si gustas, creo que deben ser peores los políticos y militares que los hombre de negocios…

—podría comprarte la idea… ¿estarás en eso todo el día?

—Si no suena la alarma del fin del mundo si…

—¿Cosas con la liga?

—Si…— Steve tomó su enorme tazón y lo inclinó sobre sus labios para beber todo el líquido — ni siquiera quiero acudir— explicó el rubio

—No quieres verla a ella ¿no?

—Si bueno no es agradable trabajar con tu ex — comentó el rubio

—Me lo puedo imaginar…

—¿nunca has tenido ese problema? —Bruce negó con la cabeza—¿Cómo lo haces?

—Fácil…terminamos y luego las despido — Steve miró al Wayne con algo de inseguridad para luego comenzar a reír.

Después de unos cuantos tacos más para Steve y otro guisado para Bruce ambos se dieron por bien servidos, el coronel pagó la comida y salieron del local, después de haberse enchilado, hidratado y sudado ambos se sentían mucho mejor— Bueno hora de ir a trabajar—explicó Bruce mientras se estiraba y se acomodaba el saco

—Si para mala suerte… o buena suerte como sea que se vea—completó el rubio—bueno Bruce nuevamente ha sido un placer pasar el rato contigo…

—El placer ha sido mío Coronel… —Bruce le estrechó la mano— por cierto… ¿para dónde vas?

—La casa Blanca… ¿por?

—yo eh… bueno voy por ese rumbo no se pensaba que … —Bruce se veía algo apenado por alguna extraña razón

—¿quieres compartir un taxi? —dijo el rubio sinmas haciendo asentir al Wayne, el cual hizo una seña para detener un auto al cual ambos subieron—Bruce debes de practicar eso de sociabilizar con gente normal…

—Es más fácil en las fiestas de la compañía

—Creo saber por qué—Steve sonrió de medio lado pensando en que seguramente en el mundo de los negocios nadie podía negarle la palabra a Bruce pero platicando con alguien como él, con quien no tenía nexos de negocios o empleo corría riesgo de ser gravemente ignorado o peor aún rechazado— a mí me puedes decir lo que piensas

—¿en serio?

—Claro, para eso son los amigos, quedamos en que lo somos ¿Qué no? —Bruce asintió

—¿Bueno entonces te parece si nos vemos para cenar por la noche?

—¿te toca pagar ti? —Bruce asintió —entonces será un placer… conozco un lugar…

—No… yo conozco uno muy bueno… ¿Qué te parece una regla?

—Adelante señor Wayne…

—El que paga escoge el lugar —dijo Bruce muy seguro de si -¿Qué te parece?

—Suena a regla de un lugar de mujerzuelas —expresó el coronel en son de broma—pero me gusta… ¿Dónde te veré?

—Aún no se, te enviare un mensaje— Bruce sacó su teléfono—¿me das tu teléfono?

—No puedo—Bruce se contrajo un poco por lo que dijo Steve—si te lo doy como recibiré tu mensaje—Bruce se descolocó un momento—fue un chiste ¿sí? — Steve tuvo que aguantarse la risa—anda apuntale…— Steve comenzó a dictar el número de teléfono, Bruce le dio el suyo, añadidos a las libretas de direcciones de cada uno cada quien bajo en su destino.

El coronel entró como si se tratara de su propia casa en las oficinas de ARGUS y es que en realidad lo era pues pasaba más tiempo en ese sitio que en su propio departamento; y después de todo ¿para qué quería estar en casa? Eso solo le hacía pensar en ella, por eso era mejor trabajar.

—Coronel el General Lane le ha estado buscando—una mujer de cabello oscuro se acercó con premura— no ha parado de preguntar en donde esta…

—Genial… mucha diversión para el día de hoy ¿Qué demonios quiere?

—Revisar sus informes sobre la última misión de la liga de la justicia…

—Entonces que vaya y que le pida los datos a superman, si no estoy mal su hija se lleva muy bien o llevaba muy bien con el chico de azul…—Steve se notaba por demás incomodo al hablar de la justice league seguramente porque le traía malos recuerdos—como sea, le hablo en un momento… por cierto ¿tenemos aspirinas? —la chica que hablaba con Steve negó con la cabeza—eso es aún mejor… entonces solo bajémosle a las luces…

Si Steve con su vasta experiencia en tragos se sentía mal, era mejor no hablar de Bruce que con todo y las cortinas cerradas de la oficina aún mantenía puestos sus lentes oscuros—Señor Wayne…—quedamente una de las asistentes le llamaba, parecía que el CEO de Empresas Wayne se había perdido en los datos de las gráficas—¿señor Wayne?

—¿Qué? ¡Aum! —se le escapó un bostezo, no era que estuviese meditabundo era que se había dormido—disculpen…—Bruce se acomodó en su silla, un extraño rumor se levantó en la sala de juntas era verdaderamente extraño ver a Bruce Wayne tan descuidado era como si hubiera estado bebiendo de mas— si gustan continuar con la presentación…

—Si desea podemos suspender esto un momento señor Wayne, quizá quiera hidratarse…— dijo uno de los asistentes, Bruce se avergonzó un poco por dejarse ver de esa forma

—No, no es necesario— un sonido llamó la atención de Bruce, ese sonido irreconocible similar a un celular que nadie en la sala tenía— pensándolo mejor, unos momentos de descanso estarán bien— más rumores se levantaron en la sala—continuaremos después… con su permiso—Bruce se puso de pie y salió de la sala ¿el motivo? La liga de la justicia necesitaba a Batman

Y fue una suerte que Batman hubiera llegado a tiempo, ya que con su ayuda, la de Flash, Linterna Verde y Wonder woman habían logrado evitar que un grupo de villanos metahumanos robaran armas de una base militar de nuevo México.

—Eso fue más fácil de lo que pensé— comentó Flash muy animado

—Si seguramente de no haber sido por tu "ayuda" solo nos hubiéramos tardado tres horas en lugar de seis…—explicó Batman de manera algo alterada

—¡Wow! Parece que alguien no bebió su sangre el día de hoy…—comentó el linterna en un tono amigable y bromista

—Me beberé la tuya si no paras con tus comentarios —contestó Batman de manera aún más agria

—Batman— la mujer maravilla se había acercado al caballero de la noche —¿está todo bien?

—Bastante, es solo que he tenido un mal día…—explico el caballero de la noche—por cierto ¿Dónde está Superman? Se quedó a preparar la cena supongo…—comentó con sarcasmo el encapotado de Gotham

—No sé de qué rayos hablas, pero no… —explicó Diana enojada, a Bruce se le acordaron algunos detalles de lo que había comentado Steve el día anterior, se sintió molesto al momento— si tanto quieres saber… iremos a cenar a algún sitio…—-un nuevo sonido fue el que llamó la atención de ambos héroes—¿Bats?

—Demonios… —Batan apretó los dientes al ver la alarma, apretó un botón de su cinturón y el batiavion apareció en segundos sobre su cabeza— debo irme

—¿Qué? ¿y ahora que pasa? — Diana se mostraba intrigada por las acciones de Bruce

—Nada grave… solo es que yo también tengo una cena— Bruce tomó el gancho que había bajado de su transporte y lo abordó, debía llegar o su rara cita de la noche seguro se marcharía.

Steve había llegado algo tarde a la cita, llegó al lugar que Bruce le había indicado en su mensaje de texto, había tenido un día muy aburrido entre pápelo, juntas y demás, estuvo tan monótono que cuando llegó a su departamento cayó dormido después de tomar una ducha, razón por la cual iba a tarde a su encuentro con Bruce—Maldición, maldición, maldición— se le hizo tarde solo por unas dos horas más o menos.

—Rayos, rayos, rayos— se había tardado más de dos horas en regresar, en momentos como ese Bruce deseaba poder correr tan rápido como Flash o como superman, había tardado dos horas en llegar al lugar donde vería a su nuevo amigo rubio

—¡Mierda! —llegó después de tomar un taxi y correr a toda prisa por varias calles; la visión del restaurante italiano que le agradaba a Bruce ver bajar su cortina daba mala señal: había llegado demasiado tarde—¡Carajo! ¡Estúpido! — pateo la lata y esta vino a ser pisada por un ajetreado hombre de negocios

—¡Hey! —un hombre de negocios que al pisar perdió el equilibrio para casi caer y ser sostenido por Steve —¿llego tarde?

—Para caer al suelo si— Steve le ayudó a incorporarse—solo un poco—Bruce puso una cara complicada—pero siendo sincero yo también llegue tarde…— el moreno sonrió reconfortado

—Menos mal, es decir… yo lo siento… pero ya sabes… las juntas se alargaron de más…

—Sí, es cierto, yo tuve el mismo problema…—una mentirilla blanca no haría daño a nadie ¿cierto?—aunque creo que hemos llegado tarde… lo siento creo que arruine la cena de esta noche

—No, no para nada… es mi culpa también—dijo Bruce disculpándose, se formó un silencio incomodo entre ambos hombres que solo se miraban curiosos—quisieras… no se… ¿ir a comer a otro lado?

—Si… podemos ver que hay por aquí…— Steve le indicó a Bruce que le siguiera.

Lo único que encontraron fue un carrito que tenía a la venta Hot dogs y para esas horas eso era mejor que nada—¿son tan buenos como los de Gotham? —pregunto el rubio a Bruce

—Son mejores… —contestó el Wayne mientras hacía una seña como para chocar lo que tenía en la mano con el rubio a modo de brindis— lo siento, ese restaurante es realmente bueno, quería invitarte a un buen plato de pasta

—Descuida… ya habrán otras oportunidades—Steve siguió mordiendo su comida— después de todo… dicen que hay mas tiempo que vida…

—Si eso dicen— Bruce entornó los ojos lo cual llamó la atención de Steve—descuida no es por ti— metió su mano en el bolsillo y sacó su celular—habla Bruce…

—Hola Pa…— la voz al otro lado del teléfono no era nada menos que la de Richard, su conocido hijo mayor, se oía con eco y resonancia, seguro que estaba en la cueva—estamos esperando por ti…

—Estoy ocupado Richard… ¿es algo importante?

—¿Algo más importante que patrullar la ciudad? No lo se quizá tu me lo puedas decir…— comentó Nightwing como no queriendo la cosa

—No estoy de humor para bromas Dick—Steve miraba de reojo al Wayne, no quería invadir su privacidad, comenzó a dar unos pasos para alejarse, pero Bruce le indicó que no había problema

—¿en cuantos minutos estas por aquí?

—Tt, dile que siempre nos recuerda esa tontería de ser puntuales…—comentó Damian lejos del comunicado de Dick

—Dami dice que está impaciente— el mencionado insulto verbalmente a Richard

—Siempre está impaciente… salgan y hagan lo que quieran… hoy no les "hare sombra"—la frase emitida por Bruce llamó la atención de Richard

—¡¿Qué?! ¡¿Estas bien?! —la visible alteración del primer robin llamó puso en guardia a Damian—tienes que estar bromeando, tu no venir… ver para creer ¿Qué puede ser más importante?

—Estoy cenando con alguien importante— Steve no pudo evitar sonreír cómplice— no lleguen tarde y lávense los dientes antes de dormir… buenas noches…—sin decir nada más Bruce colgó y siguió comiendo su Hot Dog

—Sabes mentir es malo…—dijo Steve en tono de broma—¿eran tus hijos? — Bruce asintió —¿todo bien con ellos?

—Sí, no hay nada de qué preocuparse… son lo suficientemente grandes como para cuidarse solos…

—Eres todo un padre moderno…

—Y ellos unos chicos milenial… pasan más tiempo fuera de casa que en la escuela… no sé qué les da por preguntar dónde estoy…

—Supongo que debe ser complicado, en fin todos necesitamos tiempo para relajarnos… eres más que un hombre de negocios y un padre de familia preocupado… —Steve termino su comida y pidió dos piezas más, le dio una a Bruce y se quedó con la otra—Así que … ¿cenas con alguien importante? ¿Quién es?

—Neh…—Bruce hacía un esfuerzo por no reir—un importante coronel del ejército—explicó el Wayne

—¿y que tiene de importante ese desabrido sujeto? Un militar … ¡Qué asco! — explico Steve en tono de broma

—No nada, es solo que tiene buena platica y hace que el tiempo pase rápido…—Bruce miró a Steve que negaba divertido el halago—además trabaja con la liga de la justicia, creo que puede conseguirme el autógrafo de Batman…

—Quizá lo haga— Steve le pasó una mano a Bruce por encima del hombro— lo pensaré mientras desayunamos mañana

—¿Desayunar mañana? — Bruce se mostro confundido comenzó a caminar junto con el coronel que lo tenía sujeto del cuello

—¡Claro! Me toca invitar… pero como soy pobre… te cocinare en mi departamento

—¡Oh! Coronel… ¿me esta invitando a su departamento?

—¿quieres postre no?

—Yo no soy ese tipo de hombres—dijo Bruce entre risas

—Ni yo… pero ayer dormimos en tu sitio, hoy toca en el mío… además como dije, me toca el desayuno… ¿ o prefieres el almuerzo?

—El desayuno está bien— Bruce rió y termino de comer el perro caliente, arrojó la servilleta al primer bote de basura que encontró en el camino— no sé si pueda estar disponible a la hora del almuerzo— Steve solo se encogió de hombros, Bruce pensaba en que su tiempo en Washington estaba terminándose y pronto debía regresar a Gotham, sin embargo por primera vez en mucho tiempo el Wayne no quería volver a su ciudad…

Notas finales:

Espero que les haya gustado, las aventuras de Steve y Bruce continuan... a todos los que leen esta historia muchas gracias por leer, a todos los que comentan muchas gracias por hacerlo, espero que nos leamos pronto, un muy buen septiembre para todos.

Paz y Bien.

See ya.


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