Tenía calor.. Demasiado calor.
Sentía mi cuerpo arder, como si en cualquier momento me fuese a incendiar, y ya no pude soportarlo más, por lo que abrí los ojos desesperado buscando un poco de aire fresco, más los brazos de alguien rodeándome no me dejaban la tarea fácil.
-Estas bien?- un somnoliento Hoseok alzó la cabeza y me observó atento.
-Si.. Solo tengo un poco de calor- mi voz estaba ronca por la falta de líquido.
Se movió un poco dejándome en libertad y sentándose en la cama se despojó de su camiseta y la lanzo lejos.
-Qu..Que haces?- pregunté sorprendido por su acción.
Sin embargo, Hoseok se levanto de la cama y como un fantasma desapareció de la habitación sin responder a mi interrogante.
Aturdido, me quede ahí tendido, mientras dejaba que un poco de aire fresco llegará hasta mi, más no fui capaz de llegar a cerrar los ojos y volver al mundo de los sueños, pues mi desconocido favorito no me lo permitió.
-bebe.. Así podrás dormir mejor- sentándose en el camarote me tendió un vaso de refrescante agua.
Agradecido me alce lo suficiente como para poder beber y cuando ya me lo había terminado todo, Hoseok tomo el vaso otra vez y lo dejo lejos de nosotros.
Cuando se volvió hacia mí, se quedo un momento observándome y luego volvió a acostarnos como estábamos antes, pues me atrajo hacia su pecho y se acomodó en la almohada, más yo ya no fui capaz de conciliar el sueño.. Su pecho desnudo era fuerte y sentía la esencia de su piel chocar contra mi nariz con más intensidad que cuando estaba usando su playera... Era cautivador y sin poder evitarlo, curioso, subí mis dedos hasta sus clavículas y las acaricie, nervioso porque él estuviera despierto, más no hubo reacción de su parte, y fue un gran alivio, así que continúe con mi exploración, bajando lentamente por el camino medio de su pecho, sintiendo en gran magnitud la suavidad de su piel.
Ya más aventurero que nunca, decidido acerqué lentamente mis labios a uno de sus hombros y delicadamente deposite un beso en el, deje otro en su clavícula y uno más muy cerca de su pezon, dejando en mis labios una sensación agradable de satisfacción.
-Si sigues con eso acabarás con mi resistencia bonito- murmuro Hoseok escabullendo sus manos atrevidamente bajo mi playera, hasta subirla y dejar a la vista la mitad de mi torso -Y créeme, no sabes cuánto he resistido ya- gruñó bajo, y se alejó de mí.
Asustado por haberme visto descubierto, lo deje alejarse, más sus planes eran otros, pues no tardó mucho en acomodarme de lleno en el colchón y subirse sobre mis caderas a horcajadas.
-Quiero probarte también.. Taehyung- acerco su rostro a mi abdomen y con la ayuda de una de sus manos termino de subir mi playera hasta el cuello -Hueles tan bien...- sus labios rozaron suaves la piel cercana a mí ombligo, para después con su lengua hacer un camino hasta el inicio de mis costillas -Y cielos.. No creo haber probado algo mejor en mi vida-
Mi espalda dejo de sentir el colchón por el brusco movimiento al ondearse mi cuerpo, y mi cabeza choco contra la almohada con fuerza, más Hoseok era un siniestros provocador y mordiendo mi primera costilla me hizo casi gritar.
-Sssss..- aspiro las eses con su boca pegada a mi pecho -Déjame probarte bonito...- me observó desde el lugar en el que estaba y me pareció la cosa más sexy que jamás vi -Déjame hacerte sentir bien..- y sonrío, terminando así con todo mi autocontrol.
Su cuerpo estirado sobre el mío me volvía loco, e hizo parecer que el calor que tenía antes de despertar fuera una simple llamita en comparación al fuego interno que estaba viviendo justo en ese instante.
-Convénceme..- susurre escondiendo mi rostro en mi antebrazo por la vergüenza.
Hoseok carcajeo y apartó mis barreras para comenzar a besarme de forma delicada mas no dejaba de ser hambrienta.
Terminó por despojarme de la única prenda que cubría mi torso y se enfocó en acariciar cada esquina de mis cueros con suaves cariños.
-Abre un poco las piernas, bonito- murmuro en mi oído y mi sangre se convirtió en lava.
Un bajo gemido escapó de mis labios sin remedio, y Hoseok me miro con ojos llameantes, más no espero a que obedeciera su orden, y tomo mis muñecas y las llevo sobre mi cabeza, aprisionarme ferozmente entre él y su cama.
-Hazlo otra vez..- gruñó, y lentamente con sus propias piernas abrió las mías y se posicionó en medio -Hazlo- exigió y movió sus caderas hacia arriba creando una enloquecedora fricción entre nuestras partes íntimas.
-Ah~- gemí alto al no poder controlar mi cuerpo.
-Me enloqueces Taehyung..- canturreo mirándome con ojos gatunos, bajo su flequillo mojado por el sudor.
Se movió nuevamente y lleve mi cabeza hacia atrás dejando mi cuello expuesto a su merced, lo que aprovechó pues mordió la piel húmeda con fuerza, sacándome un grito de dolor y pura excitación.
Sus movimientos se volvieron constantes y cada vez más fuertes aun manteniendo nuestra ropa interior intacta. El vaivén de su cuerpo, el roce incesante y sus besos apasionados por todo mi pecho y cuello me tenían en otro planeta y yo solo podia mantener mis ojos cerrados enfocándome en todas esas enloquecedoras sensaciones.
-Te gusta, bonito?- susurro con voz entrecortada y abrí los ojos buscando los suyos -te ves hermoso..-
Me entrego su boca y me aferré a el, soltándome y pasando mis brazos por sus espalda para que no hubiera un solo centímetro que nos separara. Con una de sus manos tomo mi mejilla y la acaricio alejándose y sonriendo.
-Creo que me gustas mucho Hoseok.. y me siento perdido- admití luego de que sus ojos se comieran los míos con su intensa mirada.
-Shh~ ahora no Taehyung- acomodo lejos mi flequillo húmedo -Solo vamos a querernos y olvidarnos de todo-
Beso mi frente y continuó con el movimiento de su zona inferior, la cual había tenido cuando nos besamos, más esta vez fue más lento, mucho más lento y alucinante. Como nuestros pechos estaban unidos, el roce se hizo más íntimo y abriendo mis piernas todo lo que pude le indique que lo disfrutaba.
-No quiero que lleguemos tan lejos.. no todavía -admitió mirándome con ojos de depredador.
-Como..?- cuestione confundido.
Hoseok se carcajeó un poco sin detenerse y bajo una mano por entre medio de nosotros hasta que la sentí posarse traviesa sobre mi ropa interior.
-Estas duro Taehyung...- gruñó alto y excitante -Pero solo llegaremos hasta esto- y apenas terminó su frase, apretó con fuerza mi miembro y no fui capaz de nada más que de gritar de placer.
Mi vista se perdió y lo único que era capaz de ver eran manchones blancos y brillantes por doquier. Su boca me volvió a atacar y no creía haber sentido tanto éxtasis en mi vida.
La mano que se mantenía aprensando mi miembro, lentamente se fue escabullendo bajo mi ropa interior y los colores vinieron a mi rostro.
-No, espera- dije, deteniendo su mano súbitamente -No tienes que hacerlo... y..yo lo ha..haré- lo mire avergonzado y su rostro de confusión no se hizo esperar.
-No es que deba o no deba Taehyung- su voz severa me alarmó -Quiero hacerlo, Dios! Vaya que quiero hacerlo- murmuro, tomando mi mano con la suya y la dirigió a su propia virilidad -Si es esto no es prueba suficiente de que quiero hacerlo.. entonces no que se más hacer- río levantando la comisura de sus labios de forma sensual.
Y es que el tacto de su miembro, levantado y duro no hizo otra cosa más que hacer que el mío propio vibrara ansioso. Siguiendo su sonrisa, hice lo que el antes había hecho y apreté su virilidad con maldad y en respuesta Hoseok echo su cabeza hacia atrás ronroneando, lo que sin dudas me dejo descolocado por lo malditamente sensual que podía llegar a ser ese hombre.
-Vamos a hacerlo los dos, si?- canturreo volviendo a mi oído y depósito un beso.
Ahora ambas palmas viajaron entre nuestros cuerpos sudorosos y tomaron los inicios de mi bóxer y comenzó a sacarlo tomándose su tiempo. Lo ayude alzando mi cola y su sonrisa se ensanchó, sus dedos a propósito de pasearon por mis piernas desnudas e hicieron presión aquí y allá hasta que la prenda fue retirada completamente.
Siguiendo sus pasos, me senté en la cama obligándolo a alejarse, y cuando lo tuve de frente pasee distraídamente mis dedos por sus glúteos, sintiendo como su espalda de erizaba al tacto, continúe con eso y subí mis manos por su espalda contemplando su pecho y bese delicadamente una de sus tetillas arrastrando mi boca por todo su pectoral y cerré lo ojos ensimismado en el aroma tan único que su piel tenía. Lo acerque a mi apretándolo entre mis brazos, apoye mi cabeza en donde estaba su corazón y fui capaz de escuchar como este latía sin control y sonreí. Sonreí porque el mío estaba igual, saltando desbocado por todo lo que acontecía y con quién, porque estaría mintiendo si dijera que mi corazón no corría una maratón cada que Hoseok estaba cerca.
Me quede ahí un momento, abrazándolo con todas mis fuerzas, haciéndole sentir un poco del calor que aún había en mi alma, queriendo hacerle sentir tan bien como el me hacía sentir a mi. Mis cabellos fueron atendidos por sus dedos y un delicado beso fue depositado en mi coronilla.
-El aroma de tu piel... creo... creo que es mi favorito ahora- admití volviendo a besar su pectoral sin abrir los ojos.
El sonido de su carcajada baja, hizo vibrar su pecho y la anticipe antes de escucharla.
-Tu, tu aroma, sabor, tus besos, tu piel, tu cuerpo, tus manos, tus ojos, tus labios... todo de ti es mi cosa favorita ahora Taehyung...- tomo mi rostro entre sus palmas y mirándome a los ojos dijo todo eso -Eres precioso..- sus ojos brillantes y serios me robaban el aire y la oscuridad fue testigo de un beso celestial.
Volvió a recostarme y se estiró sobre mi otra vez, sin cortar el beso, nuestras manos recorrieron todos nuestros cuerpos ardiendo y todo se volvió tan suave, tan delicado y necesitado que me sentía morir. Atacó mi cuello y mis brazos viajaron a su espalda cuando sus dedos tomaron mi miembro desnudo y comenzó a moverlo de arriba hacia abajo, mientras sus caderas me envestían sin llegar a penetrarme. Gemí, gemí como nunca lo había hecho antes y rasguñe su espalda por el placer y la repentina desesperación.
-Ah~ Hoseok~- sus labios volvieron a los míos y sus movimientos se volvieron salvajes y supe que me quedaba poco.
-Arg Taehyung~ hazlo ahora- mordió mi hombro y apretó mi glande y fue mi fin.
Me corrí fuerte, tirando sus cabellos y echando mi cabeza hacia atrás, y volviéndome en seguida un manojo de temblores y pequeños saltos por lo magnífico que había sido. Hoseok no tardó mucho, se corrió con su propia mano manchando al igual que yo nuestros abdómenes, entretanto mordía mi hombro con fuerza, más cuando ya nos hubimos calmado un poco besó donde había lastimado y continuó con pequeños piquitos por todo mi cuello hasta llegar mi mandíbula, la cual mordió delicadamente.
-Estas bien?- me miró sonriendo.
-Si.. y tu?- no pude evitar sonreír también.
Hoseok asintió y sentí su felicidad brotar como un capullo en primavera.
Se acostó junto a mi y me atrajo hacia el haciendo una especie de cucharita muy apretada, su pecho firme chocando contra mi espalda y me pareció simplemente perfecto.
-Duerme, bonito- beso mi nuca -mañana será un día solo para nosotros- me atrajo más hacia el, como si ya no fuese suficiente y estuve de acuerdo con su plan -Buenas noches Taehyung-
-Buenas noches Hoseok-murmuré feliz.
Me quede un tiempo más despierto, asimilando todo, y a pesar de haber hecho algo así de íntimo con un desconocido, la verdad no me importaba y besando el brazo de Hoseok que pasaba por mi cabeza decidí que me sentía feliz y que esa había sido definitivamente la mejor noche de toda mi vida.
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VH