-AMOK: vaya creo me ganaste en cuanto domina idiomas… - sonríe – pero compartimos algo en común, y eso lo podemos usar a nuestro favor – se ríe –
-AOI: …! – un poco confundido - ¿y en que supuestamente lo podríamos ocupar a nuestro favor?
-AMOK: pues, podemos hablar de lo que queramos y sin tener que ocultarnos de los demás hablando alemán, puede ser incluso sobre los trabajos con el viejo o para hablar pestes de Jorsh – se ríe con maldad –
-AOI: … no sé si quiera hablar de él – vuelve a desanimarse –
-AMOK: ah… “maldición la cague” – piensa – pues podemos hacer las otras cosas si es que no quieres hablar del geistlos
-AOI: - sonríe – suena bien – al momento de decirlo saca sus manos de su cara, se levanta del escusado, saca el pestillo de la puerta del baño, suspira antes de poner su mano en la puerta y en ese momento la abre encontrándose al peliblanco con una sonrisa acogedora –
-AMOK: bien, de ahora en adelante le llamaremos geistlos – se ríe y luego le susurra – pero solo entre nosotros dos… será nuestro secreto entre amigos – le guiña el ojo –
-AOI: pfft… está bien – le sonríe –
-AMOK: bien… - mira la hora en su teléfono – creo que nos hemos pasado de la hora de entrada a clases, ¿quieres ir de todas maneras o prefieres saltarlas y que vayamos a otra parte para relajarnos? – mueve sus cejas de arriba a hacia abajo dándole a entender de qué quería escapar del instituto–
-AOI: - lo mira con su típico semblante serio e inmediatamente le contesta – a clases, no quiero estar repitiendo curso – rápidamente comienza a caminar a la salida del baño de hombres –
-AMOK: buuu eres un aburrido – sin más quejas sigue a Aoi hasta la sala que les tocaba –
Cada uno se fue a sus asientos correspondientes, mientras que Jorsh aún seguía en el mismo lugar y en la misma posición que había adoptado tras irse sus dos amigos.
Las horas para el peliblanco y el pelirrojo pasaron bastante rápidas, en pocos minutos terminarían las clases y se podrían ir a sus hogares, solo faltaba que el profesor les permitiera irse. El profesor comienza a dar un trabajo en grupo que es un debate en el cual Aoi, Amok, Damián el chico de la información y Damanigsa una de las chicas que informo sobre el Jorsh mujeriego hicieron grupos, su tema era sobre la amistad, el pelirrojo se incomodo bastante al saber el tema pero acepto de todas maneras hacerlo, y ya cuando todos se pusieron de acuerdo, toman sus cosas y se van a sus casas.
Amok y Aoi se van juntos para el peliblanco curar el ojo del pelirrojo. Una vez hecho su trabajo Amok se retira del hogar y se dirige a su humilde morada. Ya en su hogar, entra a un pequeño departamento el cual al abrir la puerta de este sale una peste, cuando entra a su vivienda se pueden ver varias bolsas de basuras acumuladas alrededor del pequeño cuarto, algunas bolsas se encontraban rotas y otras emanaban un olor pestilente, como si hubiera un cuerpo descomponiéndose en ese lugar, Amok suspira dejando su mochila en la mesa que se encontraba un poco mas desocupada y limpia que el suelo, se dirige luego hacia el cuarto que está a su derecha en donde se podía ver una pequeña cama con papeles y unos envases de comida instantánea tirados, se sienta en su cama, se acerca a un pequeño velador que tiene cerca de la cabecera, abre el primer cajón y de él saca unas tiras de pastillas, unas de capsulas con diferentes colores, otra pastilla celeste, otra roja y blancas, en total saca 7 pastillas que junta en su mano para luego llevársela a su boca, toma un vaso del mismo mueble el cual aún le queda un poco de agua y se toma los medicamentos, se saca sus zapatos y se recuesta en su cama, levanta su brazo y tapa sus ojos con él.
Ya es de mañana, lo primero que se siente en ese insalubre lugar es la música del que posiblemente es el celular de Amok, este se queja por el ruido y de su bolsillo lo saca, mira al culpable de su interrumpido descanso y furioso contesta:
-AMOK: - voz cansada y ronca -¡ ¿quién mierda es?!
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