CAP 7 – Los Hermanos Eshiven …
- Zheiro hermano despiertaaaaaa! – Una voz retumbo detrás de la puerta.
- Nhng … que demonios quieres Shijirou – Respondí con voz perezosa mientras escuchaba aquellos gritos … no, alaridos que provenían de la boca de mi hermano menor.
- Zheiro déjame entrar, tengo información importante, información de “ese sujeto” – Me levante de un brinco al escuchar aquellas últimas cuatro palabras, sorprendido rápidamente abrí la puerta de mi habitación dejando a la vista a un tenso shijirou.
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Shijirou, como mencione antes es mi hermano menor, tiene 20 años, es alto de unos 1,82, su cabello es castaño oscuro, largo en la parte superior que siempre ata con una coleta, es de piel trigueña, bien constituido un poco musculado, tiene nariz perfilada, labios delgados y una pequeña barba en su mentón corta de algunos días.
Por mi parte, tengo 23 años, mido 1,87 siendo más alto que el, mi cabello castaño claro es corto con unos pocos flequillos, soy de piel blanca, bien constituido y musculado, tengo nariz perfilada y labios delgados.
Tenemos pocas similitudes, pero en lo que somos iguales es que ambos tenemos el mismo color de ojos. Un tono color miel con una sutil mezcla de verde en ellos.
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- Que fue lo que encontraste sobre “ese sujeto” Shijirou? – Pregunte calmado con una ligera mirada de odio tan solo de pensar en ese hombre
- Después de tanto tiempo, encontré uno de los lugares donde más frecuenta al parecer. Se trata de una casa bastante vieja, pero según mis informantes esconde algo importante allá, pero no se sabe que es. El lugar es bastante custodiado y siempre guardan unas cajas de madera bastante grandes- Respondió Shijirou.
- Maldito bastardo, debe haber bastante dinero allí ya que siempre usa esas cajas para esconderlo. Todo ese dinero sucio que consigue vendiendo drogas… desgraciado!
- Pero Zheiro, es extraño … pues no solo es el dinero lo que me preocupa; el aparece en ese lugar más de lo normal, más que en los otros refugios que descubrimos y destruimos los cuales tenían mucha importancia para él. Creo que oculta algo más que el dinero.
- Bueno pues vamos a destruir su nueva minita de oro y descubrir lo que oculta, además si tenemos suerte esta vez podremos ver su sucio rostro y vengar a nuestra madre.
- Te ayudare en todo mi querido hermano, te traeré toda la información necesaria.
- Esta bien Shijirou, yo me encargare de hacer algunas llamadas y organizare todo para ir a ese lugar – Terminé mis palabras para luego retirarme a proseguir con lo hecho, lo que mi hermano hizo enseguida también.
-*Tu fin llegara, te lo aseguro!* - Dije entre mis pensamientos.
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La noche estaba pronta a llegar, el sol se ocultaba escondiendo sus rayos como queriendo tenerlas solo para sí.
Mi hermano y yo nos encontrábamos camino a aquel lugar junto con 10 hombres más. Íbamos en 3 camionetas en las que llevábamos armas para el conflicto que se vendría.
La noche nos abrazó en su manto y a lo lejos pudimos divisar una casa no muy grande y algo vieja; al llegar, sin dar espera tomamos las armas y nos adentramos sigilosamente. Habían unos 15 hombres pero solo algunos estaban armados, se encontraban sentados hablando sobre banalidades y comiendo.. no, engullendo comida como animales hambrientos.
Pronto los rodeamos en silencio, los disparos empezaron y luego de no mucho tiempo nos deshicimos con la mitad, los que aún seguían de pie rápidamente tomaron sus armas haciendo el contraataque, aun así los vencimos fácilmente.
Como Shijirou había dicho, el lugar estaba repleto de cajas que contenían dinero, algunos comenzaron a llevar las cajas hacia las camionetas mientras otros hacían trisas el lugar.
Por otra parte mi hermano y yo ….
- Shijirou escuchaste? – Pregunte con intriga.
- si!, un ruido fuerte de algo tal vez metálico – confirmo mi hermano – Proviene de algún sitio subterráneo.
Buscamos alrededor encontrando una puerta escondida; al abrirla habían unas escaleras angostas hechas de piedra, por la poca luz que había se podía ver al final una especia de puerta de acero bastante grande y a su lado un pasadizo.
Bajamos rápidamente y al llegar hasta la puerta vimos una silueta moverse por el pasadizo.
- Vaya vaya!, mis pequeños retoños me han encontrado – Una voz burlona y sarcástica surgió del lugar. – Quien creería que mis pequeños me causarían tantos problemas durante todo este tiempo.
- CALLATE! – Grito Shijirou, un grito que me hizo helar la sangre, nunca había visto a mi hermano de esa manera tan alterada.
- Desgraciado, asesinaste a nuestra madre y lo pagaras, por eso y por todo el daño que le hiciste – Dije fuerte con voz gruesa.
- Hahahaha .. pero que niños más divertidos, intentando intimidar a su padre. – Menciono con burla.
- No eres nuestro padre, tan solo eres un maldito – Dije con todo mi odio hacia “ese sujeto” mientras le apuntaba con mi arma. – No tienes escapatoria, hoy vengaremos a nuestra madre.
- Ohhh mis pequeños pero claro que la tengo y de hecho ahora mismo me iré. – Pronuncio mientras sacaba un objeto de su bolsillo que luego lanzo cerca de nosotros.
BAAANG! .. un fuerte estruendo retumbo por el lugar, varias chispas aparecieron haciéndonos retroceder enceguecidos.
- Sigan intentando atraparme chiquillos por que hoy no será el día … - Termino con un suave susurro.
Cuando la explosión ceso y nuestra visión volvió, Torek había desaparecido del lugar.
- MALDITOOO! – Grite con toda la furia que tenía.
- Hermano.. – Pronuncio Shijirou en un susurro señalando la puerta de acero.