Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Matrimonio de lobos por Bleryaoi

[Reviews - 90]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Woooola!, ¿Cómo han estado? han tenido un buen inicio de semana después del puente?, espero que sí.

Cuantas ganas tengo de spoilearlas sobre la historia, pero no lo haré D:, resistire y seré fuerte...

En fin, aún no tengo el capitulo siguiente, pero no creo que sea un problema terminarlo para el siguiente lunes, no considero que tenga una mala calidad a pesar de la "Velocidad" con la que actualizo XD la verdad es que no es mucha, considerando que grandes escritores escriben toda su obra en una sentada...

Pero si les molesta, actualizo cada mes XD no se preocupen jajaja (mentira me gusta actualizar cada semana, es la medida ideal) 

Wow! los malos se acercan por cierto!

TT__TT ya no las interrumpo, gracias por leer...

No creo que funcione—Theon limpiaba con ímpetu una de las mesas del gran comedor, pero no hacía más que alterarse ante las palabras de la anciana que se transformaba en joven. Ella le pedía acercarse más a Robb, que fueran como los inseparables amigos “íntimos” que habían sido antes, algo complicado, pero no del todo imposible—Robb no me permite ni acercarme…—Recordó. Después de la última visita a su habitación, el Lord le había llamado solo para ordenarle que no hiciera ninguna labor relacionada con él e incluso le evitaba cuando le veía en las lejanías—además, deberías tener más cuidado, no sé como puedes moverte sin que nadie te vea—Dijo mirando de reojo el vestido largo y carmín de la mujer tras él, completamente calmada en la sala común, paseándose por todo el salón como si fuera la dueña.

 

Nadie quiere acercarse a un traidor, no corro peligro—La mujer roja permanecía derecha, con las manos entrelazadas, como toda una dama, mofándose de su desgracia—dime príncipe Greyjoy, ¿Odias al príncipe?—Preguntó avanzando a pasos lentos y finos hacia una ventana, reconociendo al hombre que se acercaba tras ella.

 

Theon se quedo quieto, pensativo, hace más de una década que convivio plenamente con los Stark, observando como un pequeño Jon Snow era molestado por Sansa. Bromas crueles de su origen, palabras dolorosas para un bastardo que eran aliviadas por la protección de su padre y su hermano mayor.

 

Por supuesto …—Hablo nuevamente regresando su atención hacia el presente—no es más que un mestizo con mucha suerte que no para de regodearse por un linaje que no le pertenece—Contesto empezando a lavar otra vez, pero un golpe con fuerza sobre la mesa que insistía en limpiar lo hizo desistir. Los ojos verdes de la mujer brillaban al dejar caer un fragmento de cristal aparentemente pesado.

 

No lo odias, si fuera así, el ya no estaría aquí—La pelirroja toco su rostro con demasiado cuidado y Theon casi vomita cuando un pedazo de piel cayó sobre la mesa que limpiaba. Nunca lo había notado, pero de cerca, esa mujer tenía un olor nauseabundo—pero ya me encargare yo de arreglar eso—Hablo acariciando un extraño dije brillante en su cuello. Escuchando como los pasos firmes de un hombre se acercaban por el pasillo principal—haz lo que te digo—Finalizo apresurándose a salir en la dirección contraria que el hombre que llegaba.

 

El Lord de Winterfell estaba preparándose para salir en busca de Jon, necesitaba hablar con él acerca del día prometido, estar listos. Asistirían nuevamente casas de las cuales desconfiaba y no quería ningún altercado, pero su rostro cambio al entrar al salón principal.

 

—¿Qué haces aquí?—Reclamó al ver a Theon dentro de la casa principal—te deje bien en claro que no quiero verte—Robb lo miro desde arriba, no le ganaba por demasiados centímetros, pero aún así era lo suficientemente alto para imponerse.

 

Lo-lo lamento—Tartamudeo el Greyjoy, viejo habito que había adquirido en su estancia cautivo—solo estoy limpiando esta estancia, no quería interrumpirte—él isleño pensaba cada palabra para no enfadarle. La mujer roja le había indicado con precisión sus acciones, pero acercarse a él, era una tarea que lo involucraba demasiado.

 

No me interesan tus palabras, ya te había dicho que no estuvieras a mi alrededor—Habló en alto pasando junto a él al ver que Jon no estaba allí. Theon era demasiado para soportar.

 

—¡Robb!—El brazo del mencionado fue sujeto y por primera vez desde que Jon llego a Winterfell se sintió realmente enojado, ¿Cómo podía tocarle después de todo lo que había echo en su contra?. Después todo lo que habían pasado juntos—Lo siento…se que no estas cómodo con mi estancia, pero…en serio lo siento—bajo la mirada, aflojando la mano que lo sostenía pero sin llegar a soltarlo. Un gesto que si bien podía ser interpretado como agresión por cualquier otro no lo sería para Robb, definitivamente no después de todo lo que vivieron.

 

¡No! no lo haces—No se libero del agarre, al contrario, se acerco más al muchacho de las islas, atisbando de pronto su apariencia; gravemente trastocada por otros traidores como él—nunca sientes nada de lo que haces…—Theon alzo la mirada, Robb estaba cerca suyo, lo suficiente para que viera en sus ojos el rencor que le tenía, ¿Cuántas veces habían estado así y más cerca? Demasiadas para ser recordadas con precisión—siempre fuiste así Theon—Al pronunciar su nombre, por primera vez en mucho tiempo, Robb dejaba escapar el sentimiento lúgubre que tenía al verlo, sintiendo fresca aún la herida que lo apuñalo una vez por la espalda—…jamás te importo nada…—Bajo su mirada por uno segundo, un gesto demasiado rápido, pero lo suficientemente notorio para que el de enfrente notara su pesar—ni siquiera lo que una vez fue nuestro—Robb se alejo de él, separándose por fin de su mano.

 

No puedes juzgarme—Le dio respuesta mirando su espalda, intentando desesperadamente de parar su escape—no cuando tu y tu familia me tuvieron cautivo por tanto tiempo—Robb giro levemente el rostro, para escuchar con claridad, más no para mirarlo, no podía.

 

Yo jamás te tuve cautivo—Hablo pausado, grave, pero lo suficientemente nítido para que el otro atendiera—jamás haría algo como eso con un amigo—Recrimino entrando en aquel encuentro de palabras que tanto había postergado. Él trató a Theon como a un igual toda su vida, lo había querido ¿Y qué recibió como pago?. Nada, solo una espera interminable que termino convertida en las peores traiciones de su vida.

 

—¿No lo harías?—Le preguntó Theon llenándolo de duda.

 

Nunca—Afirmo obstinado.

 

¿Y que hay de tu hermano el bastardo?, ese que tanto presumes querer—Robb estuvo a punto de avanzar a él nuevamente para callarlo, pero el otro habló más rápido—¿Acaso crees que él quiere estar aquí por voluntad?, Yo no lo creo—Dijo bajando los hombro y haciendo ademanes con sus manos—¡Todos lo saben Robb!, pero nadie se atreve a decir nada por miedo a las represarías de las demás casas—Robb se sentía frustrado, la única razón por la que no hablaba con nadie más de su matrimonio es por que el mismo había notado la duda en la mirada de Jon—él no quiere estar aquí, todos lo notamos el día que la reina lo dijo, el no desea estar cont…!—Un golpe fuerte en la mesa que le indicaba el final de su paciencia.

 

—¡Cualquier asunto con Jon es problema mío y de nadie más!—Le gritó una última vez, dedicándole los ojos de lobo que tan distintivos eran de los Stark antes de marcharse.

 

Mientras tanto, la charla con la madre de Robb había terminado. Jon se sentía cansado de lidiar con ella, su arrogancia y todo su plan, incluso pensó en reportar esa información a los demás, pero era mejor evitarlo, al menos hasta que la ceremonia por fin fuera celebrada.

 

Tu puedes…—Habló apoyándose a si mismo al entrar en su habitación, pero una pieza brillante sobre su cama llamo su atención, un pedazo de cristal de dragón ¿Quién había llevado eso allí?—No importa—Se dijo quitándose unas prendas y acostándose, no había asistido a la comida y tampoco tenía deseos de asistir a la cena, tenía demasiado en que pensar y seguramente nadie le prestaría demasiada importancia. No cuando ninguna casa extranjera estaba presente.

 

Es lindo, ¿Quién te lo dio?—La voz de Robb lo saco de sus pensamientos, ahora se metía en su habitación sin siquiera preguntar. No le molestaba, pero en ese momento había irrumpido su tranquilidad.

 

Lo encontré sobre mi cama—Contestó sin tapujos, refiriéndose al cristal que se había quedado en su mano, incorporándose hasta sentarse y quedar recargado en la cabecera—¿Mal día?—Preguntó al ver como Robb le dada la espalda y se quedaba de pie frente a la ventana de su cuarto. Siempre era sí cuando había pasado algo malo, guardándose las cosas para él mismo, tratando de evitar los rostros ajenos.

 

Sansa hizo pieles para nosotros—Fue la desviación a su pregunta, pero Jon no insistió, y muchos lo habrían criticado por falta de interés, demasiado tímido y soso para conversar apropiadamente, pero Robb nunca, algo que secretamente agradecía—pieles para el día prometido—Termino de decir, recordándole lo que debía pasar entre ambos.

 

Deben ser buenas si Sansa las hizo—Robb no le daba la cara, pero ponía especial atención a su voz, sus respuestas tan desapegadas le recordaban su reciente pelea con el Greyjoy  “...él no quiere estar aquí…”.

 

—¿Puedes ir a dormir conmigo?—La pregunta descoloco al de negro, no entendía el porque de sus preguntas y palabras tan desviadas, saltando de un tema a otro de manera tan difusa—después de ese día quiero decir—Jon sabía bien que se refería. Él día de la unión se acercaba, y Robb evitaba los detalles carnales de su alianza por consideración a él, pero esta vez necesitaba escucharlo—después de ese día solo dormirás conmigo—Jon sintió como el vacío en su estomago escalaba hacía su garganta, lo sabía, lo entendía, en verdad que sí, pero que los demás lo mencionaran lo volvía demasiado real.

 

Sera extraño dormir con alguien todos los días—Seguía la charla a pesar de todo, desde su regreso a Winterfell. Robb pudo notar como el otro se esforzaba con él, siguiendo sus conversaciones, caminando a su lado, comiendo en sus horarios, solo para proteger a su gente, intentando convencerse de que era él mismo quien decidió estar allí.

 

—Jon ¿No deseas probar algo más antes de que llegue el día?—No quería hacer esa pregunta. La idea de que otro hombre o mujer pudiera colarse en su frágil relación, que lo hiciera disfrutara de esa compañía solo le atormentaba con pesadillas donde Jon se marchaba.

 

—¿Tu no lo deseas?—Preguntó de regreso desde su cama, tratando de no poner demasiado peso en sus palabras. Él, internamente sincero, no lo deseaba, no porque no pudiera hacerlo, pero algo en él, además de evitar el nacimiento de otro bastardo, guardaba un respeto demasiado grande por los Stark y por Robb—es decir…tampoco has estado con nadie desde Talissa—Jon continuo mencionado sin malicia a su primera esposa. A Robb no le molestaba, no siendo él, pero ese no era un tema que quisiera tocar en el momento.

 

Te hace falta experiencia—Insistió. Tratando de ofrecerle la oportunidad de probar algo más antes de estar a su lado de por vida—cuando estuvimos juntos no parecías saber que hacer—Agregó haciendo que Jon sintiera el rojo en su cara y la saliva en su boca. Tragándose sus primeras palabras para pasar al enojo ¿Quién se creía para recriminarle algo como eso?

 

Tu en cambio parecías un experto—Robb se giro, ¿En qué clase de charla se estaba convirtiendo?—demasiado para ser tu primera vez con otro hombre— Jon fue más soez, haciendo que Robb volteara el rostro, desviando su mirada con el seño fruncido.

Soy hombre…es normal—Trato de justificarse el más alto, pero la mirada de Jon,  incrédula de sus palabras, le decía que era en vano.

 

No mientas, eres el Lord de Winterfell y un Lord honorable no miente a sus semejantes—Robb se sintió en jaque, sus palabras eran todas ciertas y, como las de su padre cuando le pillaba en una travesura, lo hacían sentir demasiado responsable de sus actos—Vamos, ¿quién fue?—Preguntó Jon guardando aquel objeto cristalino en un cajón a falta de otra actividad que le permitiera ignorar adecuadamente a su visitante—¿Un hombre en el burdel?...alguien que haya conocido—Interrogo pensativo.

 

—¿En serio quieres saber?—“No” pensó Jon de inmediato, no deseaba imaginarse a su hermano de esa forma, ni siquiera intentaba violar su privacidad, pero no podía echarse para atrás cuando el mismo había incentivado esa charla—No fue un…hombre del burdel—hablo Robb midiendo sus palabras, sintiendo un pequeño pinchazo de ternura al mirar la cara que Jon ponía al intentar recordar a alguien. Ese chico bastardo en verdad desconocía mucho sobre él. Siendo un poco doloroso en realidad, comprobar lo mucho que se habían distanciado.

 

—¿Y bien?—Jon deslizo su mano lentamente por el cajón del estante, abandonando lo único que le daba un poco de firmeza en esa situación. Ya sospechaba que Robb se miraba con alguien en sus tiempos de juventud, e incluso imaginaba de quien podía tratarse pero nunca lo quiso entender, no hasta ese momento.

 

—…me acostaba con Theon—Fue lo mejor, rápido, sin rodeos, de esa forma la imagen de Jon dándole la espalda no le suplicaría guardar silencio por más tiempo.

 

En su lugar, Jon pretendió no escuchar por unos minutos, tratando de procesar lo dicho. ¿Theon?, el recuerdo de ambos, siempre al lado del otro, entrenando, yéndose juntos a los burdeles…a los bosques…por un momento sintió algo parecido a una mezcla de decepción y celos.

 

 —Te metías a la cama del Greyjoy…—Murmuro tragando sus palabras,girando lentamente para encararlo.

 

Fue en el pasado—Jon rio, pero no con una risa divertida ni siquiera una burlona, fue una de desdén y nervios, esa que le daba cuando intentaban no insultar a un enemigo.

 

—Tu fuiste quien dijo que el pasado importaba—Le recordó Jon aquel encuentro donde habían empezado a ser más cercanos— “el pasado nos marco”, esas fueron tu palabras—Él guardo esas palabras, como cada una que salía de su boca.  

 

Jon, tu menos que nadie tienes derecho a tomar esa actitud conmigo—Se defendió—como si yo te gustara, cuando se qué no es así…—Se quejó pero Jon ladeo sus labios sin importarle lo dicho. No, no lo consideraba una pareja, es más, le resultaba difícil sentir algo más allá de la fraternidad, pero comparar su asunto con el de él, no hacían de su traición algo menos desdeñable.

 

¿Crees que actuó como tu amante?—Robb estaba empezando a odiar todo la situación. Jon no le correspondería si no estuviera obligado a estar ahí y no le habría contado nada de no haber preguntado, no tenía derecho a portarse de esa forma— Siempre actuaste engreído, pero no creí que en verdad lo fueras—Por primera vez desde que tenía memoria estaba discutiendo de esa forma y para su desgracia no podía cerrar la boca ahora—Solo me preocupo porque somos familia—Corrigió.

 

—…Así que…solo sigo siendo tu hermano…—No estaba seguro de que sentir, le entristecía pensar que Jon no cambiara su manera de verlo a pesar de lo pasado entre ambos.

 

No cambies el tema Robb—Jon se sintió encerrado, no era lo que quería dar a entender y sabía también que había actuado de manera demasiado impulsiva pero…qué la única persona que lo protegió a parte de su padre se hubiera enredado precisamente con Theon Greyjoy. Su desprecio era peor que cualquier palabra hiriente que le hubieran dicho.

 

Puedes olvidar lo que te pedí—Robb se miro serio—no es necesario dormir juntos…—Dijo apresurándose a salir de la habitación. Únicamente empeoro más las cosas y eso no hacía más devolverle los pensamientos que tanto se esforzaba en desechar.

 

Si se hubiera abstenido de contarle su pasado, si no hubiera pasado esa noche con él … hubiera lo hubiera dejado marchar…

 

Jon no quiso alcanzarlo, quedándose en soledad mientras se sujetándose el cabello y pateaba la mesa de madera, logrando mover dentro de ella el pedazo de cristal. Permaneciendo contemplándolo por lo que parecieron horas.

 

Es mi familia…debería estar apoyándolo…no juzgándole…—Dijo reprendiéndose y agachándose para recoger aquel objeto.

 

Eso no es del todo cierto—La silueta de una mujer se dibujo en el marco de su puerta provocándole una fuerte presión en el pecho que lo obligo a ir rápidamente por su espada—no hay necesidad mi ex lord comandante, no vengo a causar problemas—la mujer de largo cabello rojo ni siquiera se inmuto por el arma en su contra—vengo a ayudarlos, a ti, a tu familia—Jon presionó la espada con fuerza para que esta no fuera a caer por ningún motivo. Recordaba a la perfección a la bruja roja.

 

Te advertí que si regresabas te condenaría—Hablo alto, intimidante, esperando que alguien llegara a su cuarto, aunque era improbable, nadie más que sus hermanos le visitaba.

 

—Ya me condenaste una vez. Me exiliaste, ¿Recuerdas?—Dijo ella tocando la punta de la espada con un dedo para hacerla a un lado. Mirando fluir la sangre del mismo cuando Jon regreso la regreso a su lugar—creo que merezco tu perdón después de haber traído a tu prometido de la muerte—Ella siguió avanzando, sin miedo a clavar la espada en su piel, como si su cuerpo la tuviera sin cuidado.

 

—…tu fuiste…—Todos creían, gracias a los cuentos de Catelyn  que un hombre en de la guardia sin estandarte era el responsable de su resucitación, nadie preguntó al respecto—¿Qué quieres Melisandre?—Preguntó sin bajar ni  un momento su defensa.

 

Ayudar mi príncipe, nada más que eso—

Notas finales:

Primera pelea de enamorados, toda una ternura ese Robb Stark, XD saben me encanta salirme de mi papel de "escritora" cuando releo mi historia, me sorprendo yo sola, soy una persona de gustos simples jajaja (denme por mi lado)

En fin, muchas gracias a todos su comentarios :3 me cautivan 

Ah y para las que esperan el mpreg (sí, tu kitsuneloli ;) me refiero a ti D: ) jajaja bueno en el siguiente capitulo sabras como ...se dara? XD jajaja

Gracias a todos los lectores y aquellos que me dejan sus comentarios!

Nos vemos en el próximo cápitulo! 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).