Jugando con fuego
El tiempo parecía haberse detenido, pero la mano de daehyun seguía estimulando su miembro, Jae no sabía cómo reaccionar ¿Qué estaba ocurriendo? ¿En verdad el mayor se le estaba insinuando? Escucho un carraspeo y alzo la vista nervioso, el mayor tenía sus ojos clavados en él.
-Jae…- su nombre se oyó como un gemido, el menor se sintió estallar ¿Qué diablos pasaba?- Jae…bebe… ¿en verdad…vas a dejarme así?
-¿así…cómo?- de alguna forma los papeles se habían invertido, ahora Youngjae se encontraba avergonzado y perdido y daehyun parecía listo para saltar sobre el
-vamos…-movió su mano de forma burda sobre su entrepierna, Jae lo observaba incrédulo ¿Qué debía decirle? Estaba sin palabras.
Como si el mayor comprendiese sus dudas, se acercó a Jae y coloco ambas manos sobre el cuello de la bata, lentamente comenzó a deslizar la tela por los hombros revelando con mayor claridad el conjunto del menor. Jae mantenía su mirada clavada en el mayor, este no podía evitar morderse sus abultados labios mientras bajaba la mirada por el cuerpo ajeno deteniéndose en cada parte de su anatomía ¿Cómo podía un hombre verse tan sexy en ropa interior femenina?- daehyun…-susurro con calma temiendo la reacción del otro, el mayor lo miro a los ojos dándole tiempo a hablar- ¿en verdad…quieres hacer esto?
Y en ese momento daehyun solo pudo sonreír. Porque él era el único de BAP que supo la orientación sexual del menor desde un principio. Dae había estado al pendiente del desde su época de trainer y casi se había fanatizado con el menor. Le gustaba su voz, su tono de piel, la forma en que siempre se expresaba ¡incluso su parte fem! porque vamos, cualquiera que conociese a yoo Youngjae sabía que más allá de su apariencia de chico bueno, había un hombre delicado, alguien que necesitaba ser visto y oído, elogiado y apreciado. Daehyun amaba cada faceta de Youngjae y no había un solo pelo en su cabellera negra que desease cambiar. Aun así sabía que había sido duro, había tratado al menor de “pasivo” y “maricon” en forma condescendiente, y no era algo que lo enorgullezca pero cuando los celos actuaban el verdadero daehyun se iba lejos.
Detesto cuando ese chico peniel apareció en sus vidas, el poco tiempo que estuvo rondando a su menor se le hizo fastidioso. Dae nunca había tratado al menor en forma despectiva y jamás intento que se abriese con él, porque hasta la llegada de ese chico Youngjae no vio la necesidad de sincerarse con el grupo. Pero entonces paso, peniel llego y Jae se pintó la vida colore de rosa, hablando abiertamente de su homosexualidad y lo feliz que le hacía tener al chico tonto a su lado. Daehyun pasó mucho tiempo tolerándolo y tratando de no meterse, pero cada vez que veía al menor sonreír como tonto ante su teléfono quiso romperlo y ponerse a gritar. Cuando la relación acabo daehyun se sintió sinceramente feliz, había esperado esa oportunidad por meses. Ahora Jae era abiertamente homosexual y estaba soltero, y eso era más de lo que daehyun podía pedir. Porque ante los ojos de todos él era heterosexual ¡y realmente lo era! Hasta que el azabache se cruzó por su camino volviéndolo un tonto despistado. Desde entonces había buscado matar la ansiedad que sentía por su compañero de grupo con la comida. Cuando quería tocarlo, besarlo, mimarlo, el simplemente había comido y fingido que eso no ocurría, porque la idea de acabar con el grupo por su amor no correspondido era demasiado tonta y egoísta. Pero ahora Jae estaba solo y él se sentía estúpidamente esperanzado. Si Youngjae había salido con el tonto de peniel ¿Cómo no salir con él?
Entonces se armó de valor y fue en busca del menor dispuesto a declarársele. Pero Jae se le adelanto, y antes de darse cuenta se encontró con la escena menos pensada en su propio camerino. Su lindo compañero y el líder de got7 estaban besándose en el sofá como si su vida dependiese de ello y lo primero que se le vino a la cabeza fue ¿Cómo no lo vio venir? El maldito JB había estado pegado como chicle al azabache y muchos hablaban de su amistad ¿Cómo no imaginar que intentaría algo? Era demasiado ingenuo.
Entonces daehyun actuó como mejor pudo, se apartó del menor y comenzó a criticarlo con todos los que podía, llenándolo de apodos ofensivos y dejándole en claro que no le agradaba su estilo de vida. Sabía que estaba mal, pero no podía evitarlo, algo en el despertaba cuando lo veía tonteando con JB o cualquier otro idol tonto. Pero ahora estaba ahí, ahora tenía a Youngjae cerca de él luciendo demasiado hermoso como para dejarlo pasar. Movió su cabeza negando varias veces, quería olvidarse de todo en ese momento ¿Qué importaba su ex? ¿Qué importaba jaebum? Youngjae estaba justo ahí y su mirada le decía que quería eso tanto como él.
-hyung…-la suave voz del menor sonaba como una súplica, Dae termino de quitar la bata y pestañeo lentamente, sin animarse a quitar la vista de su rostro
-¿si…Jae?
-no respondiste mi pregunta…-daehyun trato de pensar en eso un momento ¿Qué pregunta le había hecho el menor? Su mente había estallado en centenares de pensamientos que lo enloquecieron por completo
-oh…cierto…-sonrió de lado mientras jugaba con la peluca del menor entre sus dedos- sí, sí quiero Jae, deseo hacértelo tanto…por tanto tiempo. Que ya no puedo controlarme…- la honestidad en sus palabras, ya no quería fingir
-¿porque?- Dae en serio quería reír, soltó la peluca inclinándose más delante del chico
-¿en serio lo preguntas? Por dios Jae, eres hermoso y sexy ¿Cómo no querría?- Jae quedo en blanco ante tal confesión, en verdad no esperaba eso
-pero eres…hetero Dae…-dijo como si eso explicase todo- ¿es porque parezco una mujer?
-bebe…-para el mayor era imposible no hablar en su dialecto, sabia que sonaba como un auténtico chico de Busan ahora, pero no podía controlarse, cuando estaba caliente su verdadero tono se hacía evidente- que lleves esta estúpida peluca…no cambia nada…-alzo su mano hasta detenerse en la cabeza del menor, este lo miraba boquiabierto- es más. Te prefiero sin ella…- de un solo movimiento arranco la peluca arrojándola lejos sin importarle su destino, sus ojos seguían perdidos en las orbes del azabache- tu eres un hombre, tu cuerpo es el de un hombre, eso no cambiara…por mas lencería que uses…
Jae estaba dispuesto a retrucarlo, pero el mayor se le adelanto acercando su rostro al ajeno y robándole un beso. Youngjae amplio sus ojos asombrado ¿en verdad lo estaba besando? No podía creerlo, eso era demasiado bueno para ser cierto. Como si buscase asegurarse de que eso fuese real, alzo su mano rosando la mejilla del mayor, acción que Dae encontró estimulante para comenzar a mover sus labios. Jae cerró los ojos dejándose llevar por el momento, había anhelado eso con tanta intensidad que ahora no se encontraba capaz de comprenderlo. Se dejó llevar por el beso permitiendo que el mayor tome el ritmo que desee.
Daehyun se inclinó sobre el menor haciendo que este se eche ligeramente hacia atrás sobre su cama, apoyo ambas manos sobre el colchón detrás de su cuerpo para hacer de soporte. Dae se inclinó hacia la izquierda buscando profundizar su beso, le encantaba sentir los suaves labios del menor contra los suyos, tenían un sabor dulce y fresco al que fácilmente podría hacerse adicto. Coloco su mano en la nuca del menor al tiempo que pasaba su lengua por los labios ajenos solicitándole permiso, deseaba más de ese contacto, deseaba todo del. Jae suspiro entre abriendo sus labios y el mayor aprovecho para adentrar su lengua en la cavidad ajena. Quería conocer cada parte de su cuerpo, sentirse dueño de que pedazo de su ser, lo ansiaba tan desesperadamente que empezaba a desesperarse.
Jae termino bajando aún más hasta que su cuerpo toco el colchón, daehyun no quería ni podía ir lento ahora, estaba usando toda su voluntad para no hacérselo en ese mismo momento. Trepo sobre el menor evitando que sus bocas se apartasen, sus labios se movían frenéticos sin poder controlarlos, el aire comenzaba a faltarle pero a ninguno parecía importarle ese detalle. Jae pasó ambas manos por el cuello ajeno buscando acercarlo más a su cuerpo, su piel comenzaba a quemar en los lugares donde el mayor lo rosaba con su propio cuerpo. Jae bajo una mano para rosar el costado de Yoo sin timidez, adoraba lo suave y caliente que podía llegar a ser su piel. El veo se vio interrumpido por un instante en que ambos necesitaron dar un respiro y daehyun lo encontró perfecto para hundir su nariz en el hueco que el cuello y la clavícula le dejaban a la vista. Labio la zona con extremo cuidado y dio un pequeño mordisco que hizo jadear al menor. Una sonrisa cubrió el rostro de daehyun con un dejo de superioridad, siempre había querido escucharlo gemir bajo su cuerpo, era música para sus oídos. Acerco sus labios al oído ajeno para susurrarle aun en su dialecto- me tienes tan caliente Jae…y ni siquiera te das cuenta.
Youngjae quiso reír, escuchar esas palabras que días atrás hubiesen sido parte de un sueño húmedo, pero ahora eran reales…era tan alocado como perfecto
Daehyun se aparto un momento observando al menor con detalle, no quería perder ese hermoso cuerpo de vista. Bajo la vista hacia la entrepierna del menor y sonrió divertido, aun empalmado como estaba le había gracia la apariencia del menor
-¿en verdad querías verte como una mujer?
-¿de qué… hablas?- Jae aún estaba obnubilado por el momento pasional que acababan de pasar, se irguió lo suficiente para ver al mayor
-no ocultes tu hombría bebe…es la parte que más me calienta de tu cuerpo…- Jae amplio sus ojos, sabía que había enrojecido con esas palabras, bajo la mirada a su entre pierna recordando que había acomodado miembro para que no se note demasiado. Daehyun se volvió a acercar aprovechando la distracción para pegar su rostro al ajeno, Jae lo observo sorprendido con sus labios entre abiertos- en realidad… eso es mentira, todo en vos es jodidamente caliente, me hace querer joderte por completo- antes de que el menor reaccione daehyun volvió a unir sus labios, adoraba el rojo en sus mejillas y que aun teniendo experiencia se vea tan inocente, era su punto débil con el menor. Besándolo como si el mundo fuera a acabarse, daehyun volvió a acostarlo cayendo sobre el por completo, su mano derecha roso las pantys desde la parte baja hasta la cadera, desviándose hacia la entrepierna un momento. Entretuvo al menor con un beso lento y gentil mientras deslizaba su mano dentro de la ropa interior, Jae gimió sobre sus labios cuando sintió la mano del mayor tomando su hombría y tirando de ella hacia adelante, haciendo que la punta salga de la prenda y descanse quedamente sobre su estómago. Sin detenerse allí, bajo su mano hasta el tronco y subió con rapidez, comenzando un enérgico vaivén que enloqueció al menor. Jae gemía con fuerza contra la boca ajena, daehyun estaba encantado con las reacciones del menor, pero aun quería mas, él quería todo lo que Jae podía darle. Movió su mano con mayor rapidez mientras devoraba su boca de manera urgente ¡diablos! Estaba tan duro que le costaba respirar, pero no quería detenerse, no podía ahora.