Sans suspiro cansado, bostezaba perezosamente pero ahora que estaba por fin solo en su estación de vigilancia, saco de entre sus bolsillos de la chamarra una libreta, hojeando con velocidad, encuentra la siguiente hoja limpia después de sus últimos apuntes, saca una pluma y comienza a escribir
Nota XX: “Sans” de otra dimensión
Aun no muestra signos de que la Data Madre sea activada, aquel Sans de otra dimensión se encuentra completamente “borrado” de su papel principal, no recuerda ni quien es, sin mencionar un extraño comportamiento.
Me atrevo a decir que, por su apariencia es alguien revoltoso y de fuerte carácter, sin embargo, sin sus recuerdos, se vuelve alguien sumiso, tímido y retraído, difícilmente se le hace enfadar (va una semana y aun no logran hacerle enfadar) no le gusta pelear, extremadamente dócil y temeroso. Principalmente, parece tener cierto resquicio de pánico y/o terror hacia Papyrus…
Especulo que hay una gran probabilidad de que el Papyrus de su dimensión sea el culpable de su situación pero aun no veo como ya que todos los “Sans” de cualquier dimensión cuidan y quieren a su Papyrus… ¿Por qué este tendría miedo de su hermano?. Cuando se trata de Papyrus, Red (nombre autoproclamado por el mismo y única forma de distinguirnos entre ambos) se comporta mas retraído y dócil, temeroso, no levanta ni siquiera la mirada, obedece sin chistar y siempre tiembla cuando esta cercas (por temor supongo yo)
Red… es bastante… bueno, ayuda demasiado a las persona, siempre trata de ayudar en todo lo que puede, es algo torpe y su condición física, si bien es tal vez y aun más débil que la mía, por lo menos es mas su energía, se asusta cuando hace algo mal y comienza a llorar asustado… es algo que aun no queda claro… ¿Qué hay exactamente en su mundo para que ese Sans se comporte de un modo tan sumiso? No puede ser el mismísimo infierno.
Suspiro cansado, recargándose en su asiento y viendo al cielo cubierto de nubes… para su desgracia, en su mundo aun no aparecía su excepción, aun no aparecía el humano que viniera a hacer “la excepción” y que cambiara las cosas, así que no sabia realmente que ocurriría, no podía dejar a ese otro Sans en su mundo, después de todo, Red tenía que volver con los suyos, era la Data Madre de su dimensión y eso era un peligro…
Suspiro otra vez, estirándose con pereza pero cambiando su expresión relajada a otra más seria, viendo fijamente hacia la nada… era cierto que Red era alguien sumiso y bastante tranquilo, pero Sans sabía que no podía estar mucho tiempo así…
*La Data Madre puede reconocer a otra Data Madre con tan solo verla*
Independientemente de lo que pasara, mientras una Data Madre estuviera fuera de su dimensión, la excepción no podría hacer un reset a las líneas de tiempo y volver a comenzar… si había acabado con una línea genocida, habría ciertos problemas… pero si su humano trataba de algún modo de encontrar a ese Sans, habría un problema… estarían atrapados hasta que este volviera…
Si, el lo sabia… él también era una Data Madre… pero no era algo que pudiera decir a la ligera en ese lugar… hasta donde sabía, la Data Madre era prácticamente un dios no importaba a donde fuera, claro, tenía sus restricciones que para beneficio o desgracia, eran contadas y fuertes, también… hasta donde sabía… solo otra Data Madre podría contra una Data Madre…
Bueno, no era como que Red fuera a volverse loco de un día para el otro, que comenzara a atacar a todos como si no hubiera mañana volviéndose un genocida… y aun si eso llegase a ocurrir, el podría detenerlo, aunque no saldría limpio de la pelea, podía detenerlo en dado caso de que algo ocurriera… no era problema… el problema era, que no estaba bien, nada bien, que una Data Madre estuviera lejos de su mundo, ya que era necesaria para que el mundo como tal pudiera sobrevivir
Independientemente de lo que el pensara sobre aquel Sans de otra dimensión… había algo que aun no le quedaba claro… ¿Por qué tenía una personalidad tan frágil? Era un hecho que Red era amable, que era tan fuerte como el mismo Sans... que era incluso una Data Madre y que Red en algún punto debió de darse cuenta que eran iguales… pero, aun no le cabía en la cabeza porque alguien que por su aspecto y forma de vestir, lucia tan fuerte; actuaba tan sumiso… quería saber que era lo que sucedía en su mundo, principalmente ¿De dónde venía? Si no sabía su procedencia era imposible el poder ayudarlo a volver, también estaba el hecho de que, para poder ayudarlo a volver, la Data Madre tendría que trazar un camino que lo llevara de vuelta a su mundo, pero si la Data Madre estaba inactiva, lo complicaba todo aun mas…
Soltó un respiro cansado y se enderezo de golpe en su lugar, volviendo a ver sus notas, siguió escribiendo algo que tenía muy presente con tan solo ver la imagen de Red en su mente…
Red es más frágil de lo que parece… hubo una ocasión que llamó a Papyrus por “jefe” y cuando Papyrus le pidió que no lo hiciera, asustado comenzó a llorar pidiendo perdón como si hubiera hecho algo terrible e imperdonable… entre ambos tratamos de calmarlo pero parecía imposible… y fue solo hasta que Papyrus lo tomo entre sus brazos que logro calmarse, solo después de otro rato mas, siempre diciendo lo mismo “lo lamento jefe… no me haga daño”…
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-nyehehehe- sonrió contento, ya había logrado acabar su tan famoso espagueti, ahora solo faltaba llamar a todos a la mesa, era de noche y solo estaban Red y el, Sans había ido con Alphys para ver de dónde provenía Red pero por lo que oía Papyrus, aun no había ni por asomo de suerte con eso… y…
-no, eso no es posible Papyrus… Red debe de volver a su hogar- se dijo bajito, golpeando un poco su cabeza con la palma de su mano… después de todo, no es una muy buena idea decir que preferiría que Red se quedara a vivir con ellos
-¡Red, ya está la cena!- grito a las escaleras, pues ahora Red y Sans dormían en la misma habitación… espero un momento, pero no recibió respuesta, confundido, comenzó a subir las escaleras, entro en la habitación de Sans y aun entre el desastre que se veía mucho más ordenado desde que había llegado Red, no lo encontró, confundido, siguió buscando, fue hasta su habitación y lo encontró, pero apenas por mero milagro
Red estaba oculto en una esquina, cubierto con su chaqueta como si tratara de escapar, confundido, se acerco para llamarlo, al no ver respuesta supuso que estaría durmiendo, así que sonrió levemente
-Red, si querías dormir en la habitación del gran Papyrus solo tenías que decirlo, no era necesario entrar a…sí- iba hablado felizmente, pero cuando estuvo frente suyo, estirando sus manos para poder tomarlo, vio que temblaba y no era por frio
-Red… ¿Qué te sucede? ¿Estás bien?- preguntó preocupado, notando como el contrario solo temblaba mas y mas, preocupado, lo toma de sus hombros, notando que está hecho un ovillo, realmente parece que trata de ocultarse, Papyrus se siente confundido pero lo saca de milagro, notando que el esqueleto contrario está demasiado asustado como para poder decir algo lo apega a su pecho
-ya, ya, todo está bien, no tengas miedo… ¡el gran Papyrus está aquí para ayudarte!- dijo tratando de darle confianza…
Aunque puede notar como entre sus constantes temblores, Red solo se aferra a su pecho, tiembla y llora fluidamente mientras pide disculpas suavemente, a veces tartamudea tanto que incluso Papyrus no puede comprender ni media palabra de lo que le trata de decir…
Papyrus solo pudo estrecharlo con más fuerza, sintiendo lo frágil que era, tanto, incluso tal vez mas que un cristal, lo aferro a su pecho, notando lo alterado y confuso que estaba, acaricio desde su cabeza hasta su espalda, dando ligeras palmaditas que de cuando en cuando servían con Sans en su infancia. Cuando por fin pudo notar que Red se había calmado, confundido del silencio se aventuro a preguntar
-nye… Red… ¿puedo hacerte una pregunta?- entre el silencio y unos cuantos hipidos que aun brotaban suaves del esqueleto más chico, solo notó un leve asentimiento
-¿Por qué siempre me tienes miedo?... ¿O por que estabas llorando?- pregunto, dándose cuenta que era más que una simple pregunta, se maldijo mentalmente, pero solo sintió como Red se aferraba un poco más a él, de un modo sabe y asustadizo…
Siempre que Papyrus lo abrazaba sentía que tenía entre sus brazos a alguien tan frágil y delicado, que tenía miedo de que con un movimiento brusco podría llegar a lastimarlo más de lo que a veces se mostraba… se quedo unos momentos callado, pensando, suponía que el contrario no le diría nada; estaba a punto de rendirse y de cambiar la conversación a sus famosos espaguetis para que así, el contrario pudiera estar más tranquilo, pero notó que Red solo se alejaba un poco para verlo a los ojos, aun con esos ojos cubiertos de lagrimas y esa mirada retraída y algo asustada, Red respiro hondamente entre sus hipidos
-a-aun cuando no tengo recuerdos concisos… a veces tengo pesadillas… donde… veo a alguien muy… muy parecido a ti, pero malo… siempre me lastima, siempre me hace daño y… a veces… cuando te veo, pareciera que por momentos, esa mala persona aparece y yo… tengo miedo… de que un día, aparezca de verdad- susurra asustado, pero calmándose rápido al sentir las caricias de Papyrus
-no te asustes… ¡el gran Papyrus no dejara que alguien te haga daño otra vez!- le dijo inflando el pecho lleno de superioridad, Red muestra ligeras risas de alivio mientras asiente a sus palabras, notando la tranquilidad que ha tomado, Papyrus le sonríe de igual modo y cargando con el contrario, lo lleva hasta abajo
-de todos modos, vamos a comer, Sans ya debió de haber vuelto de ver a Alphys- dicho esto, Red baja de sus brazos y lo sigue de cercas, viéndolo con algo más de tranquilidad, Papyrus se siente más aliviado al ver que por lo menos ya se comporta más tranquilo y ya puede alzar la mirada cuando están juntos
-estoy en casa- se escucha a lo lejos la voz de Sans junto a la puerta siendo abierta y cerrada, al entrar, puede ver a Papyrus y Red bajar ambos sonrientes, Sans puede decir que siente cierto resquicio tal vez de celos pero prefiere no prestar mucha atención, después de todo, lo más llamativo es ver qué Red comienza a abrirse más con su hermano, algo que podría decirse como aliviante
-vamos a comer Sans… hice mi famoso espagueti!- anuncia con seguridad
-ho, perfecto, pero come lento… no queremos que te llenes hasta los huesos antes de acabar- le dijo mientras le guiñaba un ojo, notando el enfado de Papyrus pero las risas suaves de Red, al parecer trataba de no ser evidente con las mismas, Sans rio un poco al ver la lucha de Red, aunque, muy dentro de su mente, recordó la última nota que había escrito ese día
Posiblemente sea Red quien este negando a la Data Madre a activarse apropiadamente y por lo tanto… sea Red quien inconscientemente no quiere volver a su hogar.
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-¿ha habido rastro de esa cosa o de Sans?- llego preguntando Papyrus a Alphys quien, soltando un bufido de fastidio le dio a entender todo
-que vegas aquí cada día no significa que haya encontrado algo… resígnate de una buena vez, esa amalgama se llevo a tu hermano y no van a volver nunca más- le dijo con fastidio
-deja de joderme y haz algo con tu vida de mierda- le dijo molesta, por fin girando para verlo, Papyrus solo se mostro molesto, callado pero fastidiado, observando detalladamente a la científica que no se amedrentaba por su mirada
-solo encuéntralos- ordeno partiendo por fin del laboratorio y comenzando a caminar
No había pasado más de un par de días desde la aparición de lo que parecía ser una amalgama, y también, de la desaparición “nuevamente” de su hermano inútil… después de todo, tenía ciertas preocupaciones, en primer punto, Sans no lo había reconocido, algo le había pasado durante la batalla que lo había dejado sumamente lastimado, sin mencionar todo ese poder que había mostrado durante la batalla… ¿Qué estaba pasando? Algo en su interior le decía que Sans no había salido con esos poderes de la nada… algo le decía en su interior que esos poderes los tenía desde siempre… pero… ¿Por qué no había dicho nada o los había mostrado desde antes?
Sin mencionar que ni siquiera le había enviado una nota desde su desaparición… ¿Seguiría vivo? La última nota que le envió, fue hace tiempo y en ella también dijo la posibilidad de no hablarle de nuevo… incluso pidió por su opinión por fin… y tenia tanto que decirle… insultos… palabras no tan hirientes… pero… ya no había nada… no había señales de vida de Sans… de SU Sans…
Regreso de nuevo a su hogar, ya había acabado el entrenamiento con Undyne desde hace mucho y aun así, seguía buscando por Sans, seguía dando más vueltas por todo el Underground solo para buscarlo, aunque dijera que estaba en busca de humanos, todo el mundo sabía que inocentemente buscaba por el esqueleto de menor estatura… era una lástima que de pronto ya no lo veía y que no había manera de poder encontrarlo
Molesto, cansado y frustrado de seguir sin poder verlo, regresa a su casa, entra azotando la puerta detrás suyo, respira molesto, pasando su mano por toda su cara, camina hasta el sofá y se desploma en este, viendo con enfado la mesa que continua pulcramente limpia… sin un solo trozo de papel blanco en el… sin una nota de Sans para siquiera avisar que seguía convida…
-¡jodete estúpido saco de huesos vagos!- grita atacando a la mesa inocente, destruyéndola de paso y caminando hasta su habitación
Se tumba sobre su cama, con las manos en su nuca y viendo hacia el techo, siente una preocupación que le cala hasta los huesos, no sabe absolutamente nada del imbécil de su hermano, ahora más que nunca lo quiere asesinar por hacerlo pasar por esos sentimientos tan mierda que tiene… pero también debe admitir que no puede estar tranquilo… la última vez que lo vio, su mirada había cambiado tanto, incluso el mismo podía decir sin un ápice de duda que Sans ni siquiera lo reconocía y no era por que se hiciera el desatendido…
Le había preocupado… hasta, solo en su mente se atrevía a decir, que asustado con el simple hecho de haber visto aquello, después de todo, sin importar lo que fuera a suceder… Sans siempre estaba ahí para él, siempre estaba con él, no importando que le hiciera, lo que pasara, el siempre SIEMPRE lo seguía, siempre…
Giro su cuerpo, ahora estaba de costado, viendo hacia su escritorio, encuentra un libro en este y un montón de collares; el silencio es pesado y bastante molesto llegados a este punto, pero prefiere el silencio mientras su mente recuerda con precisión de donde saco el libro y los collares
Flash Back
Luego de que aquella extraña amalgama desapareciera con Sans, por supuesto Alphys se lavó las manos alegando que nada había escapado de su laboratorio (no era secreto el saber que ella experimentaba con los caídos en batalla por ordenes de Asgore) y sin embargo, mientras el caos del momento desaparecía, Papyrus había encontrado una libreta muy cercas de donde había desaparecido aquella cosa. La libreta era de cuero café bastante desgastado, algunas partes estaban salidas y se veía en muy mal estado, parecía que le daban bastante uso, al hojearlo rápidamente pudo ver la letra de Sans, así que de inmediato las guardo
No muy lejos de donde encontró la libreta encontró un grupo de collares, recuerda, que cuando vio a Sans pelear, aunque se veía no saber qué era lo que estaba haciendo, de su cuello quito todo el grupo de collares que, contando, eran 16 en total, todos con diferentes dijes, pero apenas los tomaba entre sus manos, sintió como si toda su energía le fuera robada, así que, con ayuda de una vara, tomo los collares
Fin Flash Back
Entre el bullicio y lo que la amalgama había destruido, Papyrus solo tuvo tiempo de dejar todas las cosas que había visto de Sans en su habitación y vuelto de inmediato a la acción, de ahí, habían pasado los días, por supuesto, de la nada… el perro molesto que fungía como algo que se llamaba a sí mismo como Data Madre, no estaba sirviendo mucho…
Alegaba que la Data había sido dañada y que tardaría bastante rato en poder arreglarse y era cierto extrañamente… las cosas volvían, pero después de 3 días todo había vuelto a la normalidad… así que, ahora ya podía leer el libro…
Se levanto de su cama y se sentó en su escritorio, abriendo entre las primeras hojas de la libreta se encuentra la letra de Sans… no lleva su nombre, no lleva datos personales, Papyrus encoje su rostro en una mueca de desagrado, al parecer, el esqueleto más pequeño creía que con llevar la libreta a todos lados nunca la perdería… valla pensamiento estúpido
Nota XX: Sigo pensando que es estúpido
Después de todo, ¿No es muy de niña la idea de tener algo como un diario o una bitácora? De todos modos, me parece poco práctico… si alguien llegase a encontrar esta mierda, seré aun más humillado que de costumbre… no tengo ganas de escucharle la boca a Papyrus… pero parece ser lo más adecuado
Confundido y con una ceja entreabierta, se da cuenta que hay mas desde donde ha leído, así que regresa hasta la primera pagina, comenzando a leer con cuidado, cada palabra, cada anotación… algunas cosas son científicas, otras están escritas con una caligrafía extraña, son símbolos y manos las que aparecen, no recuerda haber visto ese tipo de fuente antes, pero le parece extraño…
Y así, mientras la noche llega a ellos, poco a poco, va leyendo con cuidado… cada nota… cada…
Parte de Sans…