Atacaba como podía ya que las fuerzas comenzaban a terminarse, nunca pensó estar en una situación como esa y menos pelear con semejantes criaturas. Su oponente en cambio, solo lo miraba en completa calma, sabía que pronto se cansaría.
- Rayos…
- Deberías rendirte - hablo Chikushodo - sabes que no tienes salida
- ¡Nunca!
Pero para su sorpresa, el rinoceronte apareció frente a Itaru, tomándolo por sorpresa y sin darle tiempo para escapar, cerró sus ojos para recibir la cornada pero los abrió poco después al no sentir nada
- ¿Pero qué? - viendo una mano que detenía al animal
- ¡Itaru!
- Minato
- ¿Estás bien?
El azabache asintió, para luego ver su sonrisa al mismo tiempo que su hermano lanzaba lejos al animal
- El otro niño Uchiha, veo que despertaste tu Susanoo a medias
- ¿Tú también sabes del Susanoo?
- ¿Susanoo? - Itaru confundido
- Solo he escuchado de él, pero aunque no es tan poderoso como el de su padre
- Minato - acercándosele - ¿Cómo lo lograste?
- Bueno… - el menor agacho su mirada- Teuchi-san, él…
Itaru lo comprendió al ver llorar a su hermano, con cuidado acerco su mano para acariciar la mejilla del menor pese al chakra que lo rodeaba y al ver que no le pasaba nada
- Tranquilo - sonrió Itaru
- Pero
- Si esto paso porque tenía que pasar, es por algo hermano, ahora - sonriendo con confianza - terminemos con este tipo y busquemos a papá y papi
Minato solo asintió, Chikushodo solo los vio con indiferencia, ¿Qué podrían hacer dos niños contra él?, por su parte, Itachi había logrado vencer a Ningendo, al mismo tiempo que se examinaba así mismo, para luego recordar la travesía que sus hijos habían hecho
- Es… imposible… Itachi… tu…
- Lo sé, en otras circunstancias ya habría quedado débil, pero mis hijos se esmeraron en encontrarme una cura, ahora dime, ¿Quién de ellos ha despertado el Susanoo?
- ¿Qué te hace pensar que lo es?
- Porque ustedes son los Seis Caminos del Dolor del líder, así que ustedes están conectados de alguna manera, así que dime, ¿Quién de mis hijos - al verlo reírse
- ¿Y que harás cuando lo sepas?, yo que tu… lo mataría en este momento
Eso fue lo último que Ningendo dijera luego de morir, Itachi se apresuró para ir por Naruto, quien aún se enfrentaba a Pain. De vuelta con los niños, estos ya habían vencido al Rinoceronte y al Ciempiés con sus ataques combinados
- ¡Itaru!
- Es… estoy bien - jadeando
- No es cierto
- Pero… tú, ¿Por qué no te has cansado?
- Yo… no lo se
- Eso es lo que crees, pequeño
Tobi miraba a lo lejos la batalla de los mellizos, sabía que a los dos estaba a punto de terminárseles el chackra, al mismo tiempo que aceptaba que no sería necesario persuadir Itaru. Por su parte, Jigokudo y Shurado corrían a gran velocidad
- Entonces Ningendo ha caído
- Si - sintiendo una vibración - entonces es cierto, uno de los niños ha despertado su poder
- Será peligroso tratar de…
- Jigokudo, tu ve con Pain, yo iré por los niños
Los dos caminos se separaron, el primero fue Jigokudo, quien ya tenía a Naruto sometido en el suelo
- Pain
- Justo a tiempo - viendo como el camino Naraka sujetaba al rubio - captura del Jinchuriki completada
- ¿De verdad?
Ambos caminos esquivaron el ataque de Itachi, provocando que Jigokudo soltara a Naruto, quien fue atrapado por el azabache
- Naruto… Naruto… ¿estás bien?
- I-Itachi… ¡los niños!
- Pronto te reunirás con ellos -hablo Pain - pero tú, traidor - viendo a Itachi- no esperes lo mismo
La pareja frunció el ceño, no dejarían que nada ni nadie lastimara a sus niños; por su parte los mellizos aun soportaban la pelea, ahora era Chikushodo, quien estaba quedándose sin chakra y a punto de realizar una invocación
- ¡Ahora, Minato!
- ¡Katon goukakyuu no jutsu!
- ¡Rasengan!
- ¿Qué?
Los pequeños por fin suspiraron, habían vencido a su enemigo, eso hizo que Minato deshiciera el costillar y caer rendido al suelo
- Minato…
- Estoy bien
- Oh… dos niños derrotaron a uno de los nuestros - los pequeños lo ven- espero que hayan disfrutado su primera y última victoria
Dicho eso, Shurado lanzo sus dos brazos cual proyectiles, Minato al verlo se paró frente a su hermano activando su Mangekyo Sharingan y la caja torácica de su Susanoo, el impacto fue tan fuerte que saco a ambos mellizos volando
- Mi-Minato…
Itaru vio a su hermano desmayado, al mismo tiempo que veía a Shurado acercársele y voltearlo boca arriba con su pie
- ¡Déjalo!
- Tranquilo, aún vive - viéndolo- pero me sorprende que hayas aguantado la explosión… oh, sí claro- sacando una barra de metal de su mano - te protegió, dime, ¿no te avergüenza que sea tu hermano menor quien te cuide y proteja y no al revés?
Itaru vi con horror como la barra negra y otras más eran clavadas sobre el cuerpo de su hermano, pese a que estas no tocaban puntos vitales, el menor no pudo evitar recordar cuando Sasuke hizo llorar a Minato cuando buscaron la Planta de los Milagros, recordó lo inútil que se sintió así como la vergüenza de ser el segundo el adquirir el sharingan.
No era que envidiaba a su hermano, si no que se suponia que Itaru es el mayo, el que debe guiar y enseñar a su hermanito menor en el camino de la vida; pero no, era Minato quien le enseñaba a él. Las lágrimas brotaron de sus ojos, al mismo tiempo que veía como el Akatsuki clavaba más barras
- Detente… ya basta…
- ¿Suplicas?
- No sigas…
- Descuida, tu eres el siguiente
- Dije… - apretando sus puños- basta… - Shurado lo vio de reojo pero siguió - DIJE BASTA
Shurado dejo de clavar más barras negras, al ver como un chakra negro emergía del menor y poco a formaba un esqueleto que iba creciendo más y más; a lo lejos
- ¿Itachi? -Naruto preocupado
- Espero que no sea nada malo - susurro el azabache
Con Tobi y Zetsu
- Ahora los dos han despertado el Susanoo…
- Aun no saques conclusiones Zetsu, el menor aun no completado su Susanoo, así que…
- ¿Cuál será el más poderoso?
- Exacto
Por primera vez Shurado comenzó a tener miedo, al ver el Susanoo completo de Itaru, cuyos ojos estaban cubiertos con su flequillo
- ¿Cómo lo? - temblando
- Pagaras lo que le hiciste a mi hermano y a toda la gente de esta villa
Dicho eso, una ráfaga de aire empujo al pelirrojo lejos de Minato, arrojándolo al suelo. El viento llego hasta donde Itachi y Naruto enfrentaban a Pain y Jigokudo, el cuarteto vio con sorpresa y más para el Uchiha, un Susanoo completamente diferente al suyo o al de Shisui.
De vuelta, Shurado tenía los ojos abiertos, el Susanoo estaba listo para atacar luego de ver como el azabache mostraba su mangekyo sharingan