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Conociendo a mamá por Samantha0507

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Yuri se giró, tratando de concentrarse en Otabek, aunque el que realmente le preocupaba era JJ, quien simplemente se había subido sobre el vehículo, cuando en un simple instante había terminado sobre Seung Gil, tratando de marcarlo.

 

—JJ…—pero la mano se Otabek evito que continuaran, el rubio se sentía realmente nervioso, nunca había visto a un alfa tratando de atacar a un omega, su encuentro con Otabek había sido completamente diferente considerando su edad.

 

JJ, simplemente se había arrojado sobre el omega, quien simplemente lloraba desesperado por la marca, vio Pichit tratar de acercarse al otro, pero la mano de Yuuri lo detuvo, él era un alfa y las reglas eran claras, ellos no podían entrometerse.

 

—…estoy sangrando…

 

—Te mordiste a ti mismo, obviamente dejaras una marca terrible…—Otabek le contesto.

 

—Lo siento Yuri, no quería molestarte, tuviste que salir de la casa de tú familia por mi culpa.

 

—está bien, Victor continua delicado y por ahora un descanso le viene más que bien, además mi presencia a complicado las cosas, según entiendo sus emociones son demasiado inestables y era probable que su salud se viese afectada, pero por ahora es otra cosa lo que me preocupa. — el rubio miró la mano de su cuñado, luego de no morder al joven, JJ simplemente se había levantado tratando de alejarse y de controlar las feromonas que salvajemente invadían el lugar, finalmente Pichit y Yuri había acostado al otro en la habitación del ultimo y le habían inyectado un supresor de emergencia, mientras con todo su voluntad, los alfas tratan de controlar sus propios deseos al sentir la cantidad de feromonas que se mantenían en el ambiente. —Me sorprendí bastante, pensé que no te controlarías y que lo marcarías en ese instante.

 

—Bueno no podía…— el alfa gruño, tratando de controlar su respiración, para él también se volvía doloroso no haber podido morder al que era su pareja destinada. — ese chico beta, que estaba junto al alfa, era su pareja, pude ver en su rostro la desesperación y su pequeño intento por detenerme, no podía dejar que lo viera.

 

El auto estuvo nuevamente en silencio, Otabek miraba al frente y Yuri simplemente se quedaba observando a su cuñado, el conocía a JJ desde niño y aunque generalmente decía que el otro lo molestaba y que lo odiaba, en el fondo le tenía un gran aprecio.

 

JJ siempre había sido un alfa diferente y el cómo hermano mayor había inculcado en Otabek todo lo que el rubio amaba, lo había liberado de muchas obligaciones también.

 

Llegaron en silencio a la residencia donde se quedarían, según le habían indicado eso sería incluso más cómodo, ahora que JJ se encontraba tan descolocado.

 

—Hermano…—Otabek trató de acercarse al mayor, pero este le sonrió llegando a lo que supuso sería un baño.

 

—Estoy bien, no exageres, por ahora solo necesito darme una ducha con agua fría y pensar un poco, esto es bastante difícil.

 

Ambos alfas se miraron por un segundo y simplemente se alejaron, ante la atenta mirada del rubio, quien por su parte no podía evitar sentirse como una mala persona de haber dejado a Yuuri solo con Victor.

 

—Yura.

 

—Beka.

 

La pareja se miró por un segundo, tiempo más que suficiente para reconocerse, había sido una semana, pero nuevamente estaban juntos y eso era lo único que necesitaban por ahora.

 

El alfa rodeo al omega trató de clamarlo, ya que el corazón del joven saltaba de manera desbocada, la ansiedad y todo lo que había pasado, terminó por ponerlo ansioso.

 

—Yura, no sabes cómo extrañé tenerte entre mis brazos. —aunque quisieron ponerse melosos en ese mismo lugar, se controlaron por respeto a todo lo que JJ estaba pasando.

 

Se quedaron en la sala, rodeándose en un abrazo, conversando de todo un poco.

 

—Yura, entre las cosas de tú abuelo pude encontrar los videos que me pediste, estas seguro de querer verlos.

 

—Beka, estuve pensando, sé que hay algo y realmente me preocupa ¿viste alguno de ellos?

 

—Solo uno, aún no nacías, Victor te llevaba en su vientre, realmente era muy joven, los otros los traje para que pudieses verlo, aunque realmente no comprendo que quieres probar, son solo películas caceras.

 

—Creo que algo pasó cuando cumplí tres años, por más que el tiempo pasa pode ver que Victor quería tenerme, sus historias y las de Yuuri cuadran con exactitud hasta en los detalles, además vi muchas fotos en su casa, en donde yo simplemente aparecía con ellos, quiero entender cómo siendo mi madre terminó por alejarse.

 

El resto de la tarde se dedicó a desempacar y preparar algo que pudiesen comer, JJ estaba un poco callado, pero ante la situación les parecía algo normal.

 

Cerca de las 8, Yuri recibió un mensaje, Yuuri le confirmaba que Seung Gil estaba bien y que necesitaba contactarse con JJ, que ambos tenían que saber que pasaría entre ellos, además le informándole que Victor debía guardar reposo de 5 días, que por ahora lo mejor era que no se vieran, para que ambos pudieran procesar la situación, pero lo que más sentimientos del mensaje le produjo, fue la despedida, en donde el japonés le decía que lamentara no ser un buen alfa, que pudiese darle un hogar junto a su madre, que la puertas de su casa estaban abiertas para él, para Otabek e incluso para JJ y que si necesitaban ayuda que lo llamaran y él iría a verlos.

 

—¿Qué ocurre?

 

—Victor esta delicado, necesita reposo por 5 días.

 

—¿Quieres irte con él? — Otabek estaba metiéndose a la cama, mientras el rubio se había acurrucado entre las almohadas.

 

—Necesita descansar y no tener más tensiones, como las que yo le provoco…— los ojos del rubio estaban llenos de lágrimas. —Beka ¿y si fue mi culpa?¿si no pudo ser mi madre ya que yo dañaba su salud? — el rubio había comenzado a llorar. —todo lo que veo es que solo pude arruinar su vida y su carrera, no tengo idea de cómo debería sentirme, no sé cómo debería verlo a la cara ahora.

 

—Creo que tú también debes descansar, una semana es demasiado, ¿aun quieres ver los videos? —El rubio asintió y con un suspiro el moreno acercó la computadora, rogando por no destruir más a su pareja, después de todo, al parecer el rubio tenía más culpa de la que el mismo deseaba.

 

 

 

 

 

 


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