El día de ayer mis amigos no me dejaron de molestar ni mucho menos ver la película que habíamos planeado. Estuvieron de ruidosos todo el tiempo tratando de buscar mentiras en mis palabras ¡Me enojé tanto que no les calenté la comida y dejé que la comieran fría! Ustedes no pueden pensar que yo les escondería algo tan importante como el que un chico me cortejara. Me siento cómodo con el hecho de que ustedes sepan que me atraen los chicos, no les importa y eso me hace apreciarlos, atesorarlos. Mis padres también saben que no estoy interesado en las chicas desde que vieron como rechacé en una ocasión el año pasado a Young Mi, la más bonita de la escuela. Recuerdo que ese día mi padre habló conmigo y me pidió que le explicara mi decisión. En aquél momento no había nadie que me atrajera como me atraes tu Nam Joon, pero yo sabía bien que no podía ser pareja de una mujer. Te lo dije sin retenerme nada y sentí un pánico horrible cuando me tomaste de la muñeca y me llevaste de regreso a casa con mamá. Mil historias pasaron por mi mente, me regañé por haber dicho ello pero es que no podía decir mentiras. Ustedes eran las personas que más amaba en este mundo y si hubo algo que me enseñaron, fue a siempre ser sincero con lo que yo soy y con ustedes. Me pusiste enfrente de Omma, quien había estado limpiando la cocina y le pediste que le dijera lo mismo que te había justo confesado a ti. No fue fácil pero volví a decir esas duras palabras, que me estrujaban el corazón por no saber cuál sería mi destino con ustedes. Tu solo sonreíste y le preguntaste a Omma "¿Qué vamos a hacer con tu hijo?" Y ella te miró con miedo también. "Un hombre con dinero, eso es lo que debe conseguir." Entendimos tu broma inmediatamente y yo me lancé a llorar a tus brazos Appa. Si existe la felicidad absoluta creo que en ese momento la sentí.
Gracias.
Gracias a todos ustedes, por apoyarme y quererme tal cual soy.
Hoy es fin de semana. No estuvo tan difícil la semana y a pesar de que podría descansar si lo quisiese, decidí que iría con ustedes. Tenemos un carrito ambulante de comida tradicional que compramos entre los tres, Omma, Appa y yo. Ahorramos mucho tiempo para comprar aquel carro equipado para vender cosas desde Ddeokbokki, Hotteok hasta Bibimbap. Es pequeño en comparación con los trailers de comida que nos rodean, pero tenemos mucha clientela en el parque debido a la sazón tradicional que tenemos. Si. Los tres somos buenos cocinando.
--Debiste descansar Seok Jin --Dice Appa amoroso, revolviéndome los cabellos. Se que necesitan ayuda, pero que ellos piensan que también me merezco días de descanso, la mirada de Appa al ver a los chicos de mi edad cargando libros o ya con trajes de practicantes a punto de graduarse me lo dice todo. Quisiera decirle una y otra vez que no me importa que no hayan tenido dinero para pagar mi Universidad, que no lo necesito, que soy feliz aquí con ellos y que estoy agradecido de todo lo que han hecho por mí y que alguna de esas veces, ellos me creyeran por completo y dejaran de sentirse culpables. Niego con la cabeza para tranquilizarlo, mientras empezamos la operación de esa tarde. Hay mucha gente en aquél lugar por un pequeño festival, sonrío a todo el que pase por el lugar, esa es la clave de que muchos se acerquen a preguntar qué vendemos en el carrito o al menos eso es lo que Omma dice. Yo solo espero que logremos acabar con todo lo que tenemos para vender hoy.
Han pasado dos horas y vamos vendiendo muy bien, al ser tres podemos atender de forma rápida a todos los que se acercan.
-¡Hey! ¿Eres tú Seok Jin? --En otros momentos la voz me hubiera puesto en alerta solamente para buscar quien me llamaba, o si buscaban a otra persona, pero al escuchar el timbre familiar de aquél que había gritado lo mismo el día anterior sentí que se abría un abismo a mis pies. Si, cuando volteé estaba caminando hacia mi aquél muchacho de cabellos de color aqua y ojos de gato. No supe cómo reaccionar, ya que en la escuela siempre estaban juntos y eso significaba que... --Si, eres Seok Jin. ¡Te lo dije Nam Joon! --Y saliste de detrás de él, sonriendo de forma nerviosa, casi como abochornada. Las personas de alrededor pusieron la vista en ustedes dos y no los culpo, estaban vestidos con ropas de marca y que se veían nuevas, llevaban accesorios vistosos y que se veían caros, todo su atuendo y actitud gritaban a los cuatro vientos que venían de los barrios altos y ustedes acercándose a un carrito ambulante y viejo de comida, no era algo que se viese todos los días por ahí.
-Hola -Atiné a decir de forma vaga, nervioso. Appa y Omma enseguida notaron que algo parecía fuera de lugar conmigo.
-¡Vaya forma de expresar el gusto que te da vernos! -Bromeó, lo supe porque sonrió de forma limpia y te dio un codazo.
-¡Es un gusto verlos! -Dije enseguida, haciendo una ligera reverencia e invitándolos a acercarse más. -¿Puedo ofrecerles algo de comer? -No debía confundirme. Ustedes iban pasando por la calle y se detuvieron a comer, era todo.
-Me llamo Min Yoon Gi y él es Kim Nam Joon -
Justo estaba presentándose cuando escuchó al ruidoso de Jimin saludar a la lejanía.
-¡Jinnie! ¡Venimos a comer! -Ho seok venía con él, sonriendo como solo él sabe hacerlo y deteniéndose en seco cuando los vieron a ustedes. Ambos me lanzaron miraditas incriminatorias, estoy seguro que iban a bombardearme con preguntas luego. Cuando volteé a verles a ustedes dos, el que ahora sabía se llamaba Yoon Gi había abierto los ojos, mostrando las orbes castañas sorprendidas hacia Jimin.
-Los presento. -Dije con una sonrisa conciliadora. Mis padres saludaron con cariño a mis dos amigos y miraron de manera sorprendida a los otros dos pero no preguntaron nada -Park Ji Min, Jung Ho Seok , ellos son Min Yoon Gi y Kim Nam Jon, los cuatro se vieron ayer a la salida de la escuela -Se saludaron todos y noté que desde que te vio a ti Jimin, Yoon Gi no podía quitarte la vista de encima.
-¿Es tuyo? -Preguntó Yoon Gi y señaló el carrito
-Le pertenece a mi familia -Dije mientras Ho Seok tomaba una hojita simple donde decía lo que podíamos preparar y se las entregaba.
-Swag -Contestó Yoon Gi y Jimin rió con fuerza, tapándose la boca.
Cada quien pidió un platillo y mis padres y yo empezamos a prepararlos. Tú sin embargo aún tenías la fotocopia en la mano, de vez en vez te distraías viendo a Yoon Gi, pero al parecer la comida no parecía de tu agrado o al menos, eso dabas a notar. No pude evitar pensar que era lógico, seguramente estabas acostumbrado a comer de restaurantes finos o extranjeros, incluso la comida de la escuela era demasiado americanizada. Por fin, alzaste tu mirada hacia mí y me dejaste saber tu decisión
-¿Puedes preparar bibimbap? -Tu voz es demasiado grave, tienes un acento muy característico. Asiento mientras soy yo mismo, ya que mis padres están demasiado ocupados quien comienza a prepararte tu comida. Me siento nervioso, siempre había servido para ti lo que ya estaba preparado pero ahora, digamos que tendré un gran juez para que evalúe mi sazón. Tiro un poco de caldo de los nervios y mi Omma me mira frunciendo el ceño, yo se cocinar muy bien desde que era un crío, así que era extraño ver que me pusiera de pronto nervioso por un platillo que llevaba haciendo casi toda mi vida. A lo lejos ustedes conversaban, bueno, solamente Yoon Gi con Jimin y Ho Seok, porque tu... ¿Dónde estabas? --Nunca había visto como preparaban el plato --Me dices y me sobresalto. ¿Cuándo te pasaste del otro lado del carro? Me habías estado observando de minutos a mi espalda y yo no me había dado cuenta. Salté un poco y tu alzaste las manos así como si la policía te hubiera tomado sorprendido en un delito. -¡Lo siento! -Dices y sonríes apenado. Yo alzo una de mis manos y niego, mostrándote entonces el resto del proceso. Te dejo ver como pongo el arroz, las verduras, la carne y baño en salsa, de reojo te miro y pareces realmente interesado. Eres demasiado guapo con esa cara de que estás viendo algo nuevo, al final, cuando pongo el huevo frito encima parece que estuvieras a punto de salivar. Te presento un perfecto plato de bibimbap en tus manos y mis padres entregan el resto a los chicos. Tú no sabes que hacer, Yoon Gi se acopló de inmediato con aquellos dos, así que se sienta en la banca con su comida. Te acercas a ellos y casi podría decir que torpemente y mirando hacia todos lados tomas asiento y comienzas a comer. Estoy ansioso por ver tu reacción. Cuando abriste tus ojos luego de probar el primer bocado y asentiste con tu cabeza, me sentí completamente feliz. Algo cálido me explotó en el pecho y no pude dejar de verte. Mi Omma llegó de pronto con un poco de udon y me dijo de forma muy dulce:
-Seok Jin, ve a comer con tus amigos -Por un momento niego ya que más gente viene a pedir comida pero tu me miras con esos ojos de que sabes algo y no me vas a aceptar un "no" por respuesta. Gracias Omma. No se que haría sin ti.
Me retiro el delantal y voy con ustedes, platillo en mano. Iba a sentarme frente a Nam Joon pero Yoon Gi se levanta y se va a sentar junto a Jimin, entre ellos tres, hablan de música. Sonrío sin realmente saber que hacer, si te incomodaré. Estaba a punto de sentarme en el lugar original y lejano cuando llamaste mi atención.
-¿Por qué no te sientas aquí? -
Voy contigo sin decir nada más y me siento a tu lado. Estoy nervioso y no se de que hablar. A lo lejos, Yoon Gi nos mira y sonríe. Me siento confundido, como si me hubieran atrapado en una cita a ciegas a diferencia que; yo sí te conozco y si quiero estar a tu lado.
-Está delicioso. Si no te viera visto cocinarlo podría jurar que no lo hiciste tu -
-¿Por qué dices eso? -Pregunto curioso.
-La comida de la escuela no sabe igual -Dices, haciéndome reír. Muchos me han dicho que tengo una risa contagiosa. Yo se que suena a un limpia ventanas.
-Yo no cocino lo que sirvo en la escuela -Hablo entre risas y tú te apenas demasiado. Tanto que prefieres casi hundir tu rostro en el bibimbap. -¿Vinieron al festival? -Pregunto casual tratando de que no se forme alguna incomodidad en el ambiente. Asientes con la boca llena. Yo vuelvo a reír. Una ráfaga de aire te bota la gorra que traías y por fin puedo ver tu cabello rubio, te queda muy bien, no traes goma para peinar y puedo observar lo suaves que seguramente son tus mechones. En vez de ir por tu gorra te quedas mirándome y yo no me doy cuenta hasta que tus ojos chocan con los míos y el contacto es inevitable. Ambos pasamos un momento observando el uno al otro, eres tu quien rompe aquel instante levantándote por tu gorra. Yo sonrío y miro mi plato de Udon, es mejor que coma antes de que se enfríe. Cuando regresas, me ves comer y haces lo mismo. Dejas la gorra en tus piernas, ya no hay aire. ¿Te habrías dado cuenta que te observaba como si fueras el más guapo y perfecto del mundo?
-Esto es simplemente delicioso. -Terminas el bibimbap con sonidos de real satisfacción por la comida. Que tu halagues algo que yo pienso es mi mayor talento realmente me hace feliz. Los otros chicos también han terminado. Caminamos entre risas al carrito con mis padres. Me entero de que Yoon Gi compone música y tuvo en común con Ho Seok que les gusta el rap. Jimin se quejaba que estuvieron molestándolo por su estatura y que cuando él dijo que era vocal al momento de cantar el de cabellos aqua le apretó la nariz y le dijo que "No tenía Swag"
Cuando era momento que cada quien pagara su comida, Yoon Gi cubrió lo de todos y dijo que golpearía a quien se atreviera a contradecirlo.
-Hasta pronto, Jimin -Dijo Yoon Gi guiñándole el ojo a mi amigo pelirrojo, quien solamente alcanzó a gruñir cosas que no son propias en la calle.
-Seok Jin -Llamas. Quisiera escuchar a diario mi nombre en tu voz.
-¿Si? -Me acerco hacia ti, sonriendo.
-Mi número -Me extiendes una tarjeta con tu nombre y celular. Me sorprendo bastante por ello y te das cuenta. Sonríes con circunstancia y me dices. -Me dijo Yoon Gi que trabajas todo el fin de semana con tus padres. --Asentí, se estaba haciendo recurrente que tu amigo supiera demasiadas cosas de mí. ¿Debería acostumbrarme a ello? --Si vienes el día de mañana. ¿Puedes llamarme? -
-Cla... claro --Te respondo nervioso.
-Quiero venir a comer otro de tus bibimbap. -
Muevo la cabeza en una señal de afirmación. Claro. Mi comida es capaz de hacer a clientes venir una y otra vez para probarla. Debo decir que me siento muy orgulloso de ello, que de igual forma, te haya atrapado a ti.
-Y... -Habías comenzado a caminar pero regresas el paso. Ladeo mi cabeza como preguntándote qué sucede. --¿Crees que puedas escaparte un momento conmigo mañana? --No se que responder a ello y tu lo notas, tienes cara de que estás a punto de arrepentirte de lo que has dicho pero; carraspeas un poco y vuelves a hablar. --Quiero venir a comer lo que tu preparas. Pero quiero comer contigo. --Es una invitación. Mi corazón se acelera y parece que se va a salir de mi pecho. Sonrío débilmente y asiento de nuevo con la cabeza. Se que si te digo algo notarás que mi voz se quiebra de emoción. --Nos vemos mañana Jin -
-Nos vemos mañana, Nam Joon -Te digo y se que escuchaste mi despedida antes de alejarte con Yoon Gi con camino al festival.