Era un día tranquilo en la ciudad, el sol brillaba calentando el pavimento, haciendo morir de calor a los transeúntes. Ya eran las vacaciones de verano, así que nuestros protagonistas estaban en la casa de la mangaka ayudándola a terminar unas cosas, por supuesto que ella no les pagaría por aquello.
-¡¡Hace mucho calor!! – se quejaba Eugeo desparramando las hojas del manuscrito en la mesa.
-Ya sabemos, no es necesario que lo grites en mi oído- Gin estaba de mal humor por el calor.
-Creo que podemos tomar un descanso – hablo Hikari acomodando las hojas y dejándolas en la mesa.
-Pero la fecha límite es pasado mañana Hikari-san, no vamos a llegar si paramos ahora- dijo Andrés terminando el beta de una página.
-Tranquilo ¿No te ibas a quedar a dormir en mi casa?, podemos terminar de hacerlo mañana- la sonrisa de la peli-rosa dejo embobado al chico. -Ahora ¡¡Todos a la playa!!-
-Hikari no hay playa aquí cerca- dijeron Gin y Eugeo con una gota resbalándole por las cienes.
-Bueno… ¡¡A la piscina pública!!-
* * *
Los cuatro jóvenes habían llegado a la piscina pública un par de cuadras de la casa de la peli-rosa, la piscina estaba repleta de personas, unos niños casi atropellaban a Eugeo cuando llegaron al lugar, pero dejando eso de lado y con el calor que hacía era un oasis en el desierto. También se podía ver a conocidos que también intentaban huir del calor.
En una reposera acostado boca abajo se podía reconocer a Nanatsu por su cabello, parecía estar bronceándose. Este vestía de unas bermudas azul índigo y una botella que Parecía decir protector pero no se podía ver bien, del otro lado se podía ver a Ren con un traje de baño azul marino con detalles de estrellas, y a un chico castaño de ojos jade quien vestía una remera blanca holgada y unas bermudas rojas comprando tres helados. Finalmente y para pesadilla de Gin, Zele estaba sentado en la reposera mientras una peli-Rosa con un peto negro con cadenas doradas que lo sujetan al cuello y una falda negra con encaje, le untaba bloqueador en la espalda.
Los cuatro se sentaron en unas reposeras juntas mientras la peli rosa, quien vestía una camisa rosa, ya se la estaba quitando para poder ponerse bloqueador dejando ver su bikini rojo con verde. Luego de sacarse la camisa y el short, se ató el pelo en una coleta para luego sacar el bloqueador de su mochila.
-Deberían ponerse en cuatro- Los dos chicos la miraron con los ojos muy abiertos. –Digo, ponerse bloqueador- la chica empezó a reírse a carcajadas mientras sus amigos la miraron con una gota resbalándose por las cienes. Andrés tenía una cara de bobo por a ver estado viendo a la peli rosa sacándose la ropa en una forma que este describía como sexy.
-Está loca- Gin se sacaba la remera azul para solo quedarse con las bermudas amarillas con toques verde, mientras Eugeo se puso bloqueador en los brazos, piernas y abdomen.
-Gin ¿Me puedes pasar bloqueador por la espalda?- El peli-plata asintió con la cabeza mientras se ponía bloqueador en las manos para pasarle al rubio por la espalda. Hikari los miraba detenidamente, imaginándolos en una tina tomando un baño con espuma, a Gin manoseando al rubio apretándole las nalgas.
-“No, ahí no… es vergonzoso”- decía el rubio con las mejillas rojas carmín.
Una sonrisa malévola se dibujó en el rostro de la mangaka, eso podría ser una gran idea para un nuevo One-shot. Andrés miro a Hikari, dándose cuenta que la peli-rosa imaginaba a los otros dos chicos en alguna escena comprometedora o pervertida. Inmediatamente decidió sacar a la chica de sus ideas lujuriosas.
-¡Hikari-san!- la chica se sorprendió cuando Andrés dijo su nombre apretando por reflejo el bloqueador haciendo que saltara rociándole la cara al azabache haciendo que Andrés cayera al agua.
-Ups, mi error- dijo la peli-Rosa al ver caer al chico al agua.
-Hikari deberías sacarlo antes de que se ahogue- Le dijeron sus amigos. La chica lo pensó, dándose cuenta que perdería a su asistente así que saltó al agua para sacar al chico antes que fuera demasiado tarde.
*Segundos después…*
Andrés sintió los labios de alguien unirse a los suyos mientras una mano estaban apoyada en su mentón, abrió un poco los ojos pero tenía la vista un poco nublada dejando ver una coleta que no podía distinguir el color ya que el fuerte sol no lo dejaba ver.
-Qué bueno, está despierto- Parpadeo varias veces y ahí noto que quien lo “besaba” era un chico de pelo largo negro agarrado en una coleta y ojos verdes. Andrés empezó a escupir el agua que tenía en su sistema.
-Sácalo todo – el chico le daba unas palmadas en la espalda. Al lado de Andrés estaban Gin y Eugeo mientras Hikari sacaba fotos seguramente de cómo el de coleta le hacía respiración boca a boca.
-Oye Kaien no sabía que eres salvavidas- dijo Gin sentándose en la reposera.
-Je, es mi trabajo de medio tiempo, mi turno es de las 10am hasta las 15pm- dijo el de coleta.
-Oye, ¿Cuándo termines no quieres venir con nosotros?- hablo Eugeo que ahora le pasaba bloqueador por la espalda de Gin.
-No puedo lo siento, tengo otras cosas que hacer luego- Lo último lo dijo sonrojándose -Bueno tengo que seguir con mi trabajo, los veré otro día- Dijo mientras se iba a seguir con su trabajo, en su cabeza se reproducía las palabras de un rubio invitándolo a salir, y no dejaba de ver la hora esperando a terminar el trabajo para poder reunirse con él.
- Bueno, ¡¡vayamos a jugar!!- dijo la peli-rosa mostrando una pelota de playa.
Dejando a nuestro simpático grupo, cierto peli purpura seguía en lo suyo cuando recordó cierta cosa que la había dicho su “adorado” maestro. Chisto de la amargura mientras se ponía los lentes de sol negro.
-Al menos aquí puedo estar tranquilo- Susurro continuando tomando el sol. Mientras, cierto azabache regresaba con los helados antes comprados donde se encontraba una chica pelinegra de ojos lilas, que usaba un bikini negro de dos piezas.
-Siento la demora- Dijo este dándole uno de los helados a la chica.
-Nada para combatir el calor que los helados- Lu comenzó a comer el helado con emoción, realmente los adoraba desde pequeña.
-Come más despacio o sé te congelara el cerebro- Ren también comenzó a comer el suyo.
-Gracias por el helado- Yoshi también comenzó a comer el helado, cuando en eso los dos mayores notaron algo extraño en el ambiente.
-¿Los ves? Nos llevan mirando desde hace cinco minutos- La pelinegra le mostro disimuladamente al contrario donde dos chicos les veían mientras hacían la finta de conversar.
-¿Qué tiene de malo?- El de mechón blanco no entendió hasta que su amiga señalo al castaño y luego disimuladamente a los chicos de nuevo. Fue ahí cuando el heterocromatico destruyo su helado con la mano mientras lanzaba una mirada agresiva a esos dos chicos. Estos captaron la amenaza y se fueron aterrados, cosa que hizo reír a la oji lila mientras el oji jade no estaba ni enterado del asunto, continuando comiendo su helado.
Por su parte, Luka y Zele estaban listos para nadar.
-Nada mejor que este ambiente para relajarme y conseguir inspiración- La peli rosa se estiro un poco antes de entrar a la piscina.
-¿No se supone que vinimos a la piscina para relajarnos?- Zele veía con gracia a su amiga.
-Puedo hacer ambas cosas al mismo tiempo, ¡Vamos!- Tras lo dicho, ambos entraron al agua.
* * *
Andrés, Eugeo, Hikari y Gin estaban con el agua hasta el pecho mientras jugaban con una pelota de playa que iba rebotando de las manos de Hikari hacia Eugeo, de Eugeo a Andrés, y de Andrés a Gin para luego cambiar. Zele se alejaba de Luka quien lo salpicada haciendo que el albino se chocara contra la espalda de Gin. Zele se iba a disculpar, pero no lo hizo al ver con quien había chocado.
-Ve por donde vas, estúpido- Dijo Gin.
-Córrete del medio, idiota- Hablo Zele. Los dos espesaron a pelear lo que canso a sus compañeros, Luka se fue a otro lado a nadar un rato mientras los otros tres salieron del agua para buscar algo que comer.
Eugeo y Andrés hacían los pedidos en el quiosco mientras Hikari esperaba mirando hacia las otras personas que pasaban a su lado, de lejos podía ver a un chico con el pelo arcoíris y una chica de cabellera chocolate.
-Iré a refrescar a mi pequeño, este ambiente hace que despierte mi hambre- dijo Pancho caminando hacia la piscina.
- Me entero que hiciste alguna pendejada, no te sacaré de la cárcel- dijo Filia de mal humor. La peli-chocolate se metió a nadar mientras Hikari la seguía con la vista, la peli-rosa buscaba algo que le sirviera en el próximo One-shot.
La joven dejo sus cosas en una reposera y se dispuso a entrar al agua, no le vendría mal un buen chapuzón después de todos los entrenamientos en su club. Con eso en mente, entro de un clavado a la piscina. Bajo el agua, Filia nadaba con los ojos cerrados pensando en lo últimos días cuando chocó contra alguien haciendo que volviera a la superficie para respirar. Al llegar arriba se encontró con una peli-negra de ojos lilas con un gran moretón en la frente.
-Lo siento- Dijo la peli chocolate.
-No, yo lo siento… ¿Te duele?- A Lu le dolía la cabeza pero la chica con la que había chocado tenía un moretón grande en la frente. Las chicas algo mareadas salieron del agua, viéndose en el reflejo que las dos tenían grandes moretones en las frentes así que se acompañaron mutuamente a la enfermería. La peli-rosa que miraba a las chicas estaba imaginando a Filia cargando a Lu al estilo princesa hacia la enfermería. Andrés y Eugeo la sacaron de esos pensamientos cuando le dijeron que ya tenían los sándwiches y que eligiera uno.
Bajo el agua Luka nadaba tranquila cuando un grupo de niños la paso por al lado empujándola haciéndola que tuviera que volver a la superficie cuando noto una cosa… no tenía el peto negro dejando al descubierto sus pechos que rápidamente oculto con sus brazos y sumergiéndose hasta el cuello.
La peli-rosa se sumergió completa para localizar la mitad superior de su traje de baño viéndola en el fondo de la piscina, salió a la superficie tomo una gran bocanada de aire para luego sumergirse a buscar su peto.
En otro lado Nanatsu despertó de la siesta que se había tomado mientras tomaba sol cuando iba agarrar su celular para ver la hora se dio cuenta que su piel estaba mucho más oscura ¿Pero cómo podía ser eso posible si se había puesto bloqueador? Agarro el envase de dicho producto para darse cuenta que era bronceador. Sus ojos se abrieron y trato con todas sus fuerzas de no gritar de puro enojo al saber que había cometido tal estupidez de confundir el bronceador con bloqueador, ahora su piel estaba morena. Tomo sus cosas para irse completamente enojado consigo mismo, mientras parecía que humo salía de su cabeza.
Por otra parte, cierto castaño se encontraba remojando sus pies en el borde de la piscina mientras veía a su hermanastro nadar como si fuera un pez en su habitad natural. Este último se acercó a donde estaba el menor.
-¿No piensas entrar?- El azabache parecía curioso del porque el contrario aun no entraba al agua.
-Es que, no se me da bien nadar- El oji jade parecía avergonzado de hablar del tema. Yoshi iba a ir a las reposeras pero cuando se levantó para irse donde estaban las cosas, este término resbalándose y cayendo en la piscina, además de golpear de pasada a Ren. Después de un rato, ambos salieron del agua notando el oji jade que al contrario le sangraba la nariz.
-¿E-Estas bien?- El menor estaba asustado a la par que preocupado al ver el líquido carmesí.
-S-Si, mejor ve a secarte, iré a la enfermería-
***
El castaño se encontraba en los vestidores para ducharse, sentía vergüenza por haberse resbalado y terminar cayendo a la piscina, nada peor podía sucederle ahora si se lo preguntaba. Fue hasta una de las duchas para poder bañarse y quitarse el cloro de la piscina, una vez dentro se quitó la playera y el bañador, comenzando a ducharse. Lo que el chico no sabía, es que un depredador de bañadores se encontraba robando cuantos encontraba en los vestidores. Pancho no podía con su mal genio y comenzó a robar los bañadores de los ingenuos que los dejaban cerca a las duchas, fue ahí que robo el bañador rojo de Yoshi mientras este continuaba duchándose, además de robarle también la playera.
El pervertido continúo con su cacería sin que nadie se diera cuenta, y fue ahí cuando el castaño salió de la ducha, no encontrando ni su playera ni el bañador. Lo que era peor, él ahora se encontraba desnudo y no podía salir para pedirle a Ren una toalla porque lo considerarían un pervertido, por tonto se había olvidado de pedirle su toalla. Fue ahí cuando se dio cuenta que no era el único al que le había pasado eso, ya que vio que a varios les habían robado sus bañadores. Las quejas no se hicieron esperar y varios se encontraban discutiendo de quién demonios era el vulgar ladrón que había robado los trajes de baño, comenzando todos a discutir entre ellos no importándoles que estaban con las pelotas al aire. Fue ahí cuando cierto azabache ingreso a los vestidores, ya que se había dado cuenta que el menor no había llevado una toalla.
-Yoshi, ¿Dónde estás? Olvidaste tu toalla- Dijo Ren con una especie de curita en la nariz y un poco de papel en uno de los orificios.
-E-Estoy por aquí- Dijo el oji jade con vergüenza. El ojos raros siguió la voz y noto la peculiaridad que casi todas las personas se encontraban discutiendo completamente desnudos. Ese si era un panorama muy extraño de no ser porque veía de vez en cuando discusiones así en su club. Empezó a buscar con la mirada al menor y le vio acercarse con vergüenza y las mejillas rojas, además que estaba cubriendo su parte íntima con ambas manos.
-Oye, ¿Por qué te cubres? Se supone que aquí todos somos hombres- Cuestiono a su hermanastro.
-T-Tengo vergüenza- Dijo este con el rostro aún más rojo.
-Esto, ¿Y por qué diablos todos aquí están en pelotas incluyéndote?- Pregunto sin vergüenza dándole la toalla.
-No sé, de repente todos perdieron sus bañadores incluyéndome. Además también robaron mi playera- Explica tapándose con la toalla.
-¿Alguien que robe bañadores de hombre? ¿No se supone que una persona normal le roba a las chicas?...- Se cuestionó el mayor. Fue ahí cuando vio que alguien se estaba escapando lentamente hacia la salida de los vestidores, con una bolsa negra muy sospechosa. -¡Oye tú!-
Exclamo el azabache alertando al ladrón y al resto de bañistas. Pancho se asustó y salió corriendo de los vestidores, siendo perseguido por el de mechón blanco.
***
Eugeo se encontraba comprando un helado bastante grande que se la había antojado tras ver a una parejita comer uno. Una vez que se lo dieron, el rubio comenzó a comerlo felizmente mientras regresaba donde estaban sus amigos, pero en eso este escucho pasos rápidos acercarse, girando para ver de qué se trataba.
-¡Habrán paso!- Decía Pancho corriendo con su botín en manos.
Eugeo no reacciono rápido y termino siendo tacleado por el de cabellos raros, lo peor es que termino ensuciándose por completo con su helado, estando las bolas de helado de chocolate, vainilla y fresa en su pecho, brazos y rostro, y con el cono de helado a modo de sombrero.
-Mi helado…- Dijo este con tristeza. El oji azul vio por donde se iba el culpable, notando que este era perseguido por un azabache que parecía tirar humo de su cabeza.
Por otro lado, Gin y Zele se encontraban discutiendo cerca de la piscina sobre quien podría nadar más rápido, pero en eso vieron como el ladrón venia corriendo, siendo perseguido por alguien.
-¡Que te detengas, joder!- El azabache se quitó una de sus sandalias y la lanzo como si fuera un boomerang, esta impacto en la cabeza de Pancho, provocando que este terminara tacleando al peli plata y al albino, y cayendo los tres a la piscina. Los salvavidas fueron a sacar a todos, pero curiosamente Pancho se las había ingeniado para escapar antes que los salvavidas lo atraparan. De paso, este provoco que unos chicos que jugaban con una pelota de voleibol la lanzaran en la dirección equivocada. Para mala suerte, la pelota iba en dirección donde estaba Hikari, a la cual iba a golpear.
Afortunadamente Andrés vio eso y se usó a sí mismo como escudo, quedando su espalda con una gran marca rojiza provocada por la pelota.
-Mi héroe…- La peli rosa tenia brillitos en los ojos, pero en eso vio el semblante de dolor del chico.
-¡DUELE!- El pelinegro grito con todas sus fuerzas; el pelotazo había sido efectivo.
***
-¿Y bien? ¿Te sientes mejor?- Hikari y Andrés se encontraban en la casa de la chica. La peli rosa le pasaba crema en la espalda a su asistente, el cual estaba acostado boca abajo en el sofá.
-Sí, gracias Hikari-san- El oji morado suspiro aliviado cuando en eso sintió un beso de parte de la contraria.
-Gracias por salvarme, eres mi héroe- La oji carmín dibujo una sonrisa, la cual hizo que el chico se pusiera rojo y hundiera su cara en el sofá.