Todos los personajes de esta historia pertenecen a Marvel
Capítulo 3
El día de nuestra boda fue un evento que apareció hasta en los periódicos. Recuerdo haber estado sumamente emocionado, todos nuestros amigos también lo estaban, nos apoyaban, incluso nuestros padres aceptaban la unión, aunque también les convenía a ellos…
La compañía Asgard era dueña de múltiples hospitales, por otra parte Jotunheim se dedicaba al negocio de los medicamentos, era una farmacéutica muy grande, solo comparada con otras como Bayer ¿Entienden lo importancia de esto? Ambas compañías se necesitaban para existir.
En cuanto a la planeación de tan esperado evento, Loki parecía ser el principal encargado. Él durante más de tres meses visitaba tiendas, restaurantes, salones de fiesta mientras yo lo seguía cual fiel labrador. Siempre miraba encantado las elecciones que hacia pues jamás contradeciría su voluntad.
Un día cuando esperábamos afuera de una exclusiva cristalería, tomó mi mano y se acurruco en mi pecho, acto seguido yo suspire enamorado.
—No sabes que cosas haría por estar siempre así, contigo—me dijo sonriendo—. Por favor no te alejes de mí.
—Jamás lo haría, Loki ¡Tú eres mi sol! ¿Acaso crees que podría vivir sin ti? —bese su coronilla tratando de transmitirle todo el amor que tenía por él.
Entonces sentí como sus manos rodearon mi cuello y sus labios se posaron sobre los míos en un flamante beso, inmediatamente correspondí.
Cualquiera que nos viera pensaría que éramos perfectos, el amor hecho personas.
Lo fuimos.
Recuerdo cuando llego el día. Lucia despampanante en su traje blanco con su cabello de obsidiana amarrado y sus ojos brillando más de lo habitual.
Recuerdo sus palabras.
—Nunca te voy a dejar ir, Thor Odinson. La perfección te define…tú me has brindado todo el amor que necesitaba…solo tú has iluminado mi camino y te juro amor mío…que este loco sentimiento jamás morirá.
Recuerdo haber sentido emoción.
Recuerdo haber sentido miedo.
Si…
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Thor sintió los rayos del sol en su cara y la suave brisa movió su cabello. Por primera vez en mucho tiempo estaba afuera ¡Se sentía tan libre! ¡Tan pleno! Todo su ser le había pedido a gritos tener un momento así.
—Me da gusto que lo disfrutes tanto, mi bello vikingo—hablo Loki a sus espadas, traía consigo una pequeña canasta con frutas adentro— ¿Te gusta?
Thor regreso un momento a la realidad. No era libre, aun permanecía en su jaula de oro— Sí…—observo el rosto sonriente del contrario y decidió tantear el terreno— ¿Cuándo volveremos a salir?
—Ya estamos afuera—contesto mientras ponía todo para su picnic.
—Me refiero a salir a ciudad…cariño
Loki frunció el ceño, las galletas que sostenía se rompieron ante la simple mención—No lo sé ¿No sabes si esa Jane Foster va a morir? Porque no saldremos de nuestra mansión hasta que ella este enterrada 2 metros bajo tierra.
—Loki…no podemos estar aquí de por vida—se acercó para poderle ayudar. Tal vez si lograba calmarlo un poco nada malo ocurriría. Cuando se está con una persona como él solo puedes arriesgarte y esperar a que ocurra lo mejor o por lo menos así trataba de pensar Thor.
—Es que…tú no entiendes. Si por algo te he encerrado es por nuestro bien… ¡Tu ibas a terminar dejándome! Eso mancharía tu imagen porque prometiste siempre estar a mi lado—jaló todo lo que había puesto sobre el mantel, las cosas empezaron a caer por todas partes y el sin pensarlo dos veces busco entre los objetos algo con que atacarlo. Su rápida vista visualizo un tenedor, rápidamente se acercó a él y lo enterró en su mano, Thor soltó un grito— ¡No puedes dejarme! Jane nos alejó ¡Nos sigue alejando!
El rubio entendió el grave error que había cometido pero estaba cansado…esta vez seguiría hablando a pesar del ardor en su mano— ¡Esto ya no es amor! ¡Loki! ¡Tú me has alejado de ti! ¿Es que acaso no entiendes que me da miedo el simple hecho de verte?
La bomba cayó, los ojos de Loki comenzaron a derramar gruesas lágrimas. Thor sabía que no tenía lógica alguna sentir piedad por él, mas, verlo llorar así bajo toda sus defensas. Después de todo estaba seguro que muy dentro de aquel ser extraño aún se encontraba el amor de su vida o algo así.
No.
No podía pensar así ¿Por qué debería? Él lo apuñalo, lo golpeo, violo cada uno de sus derechos. No podía chantajearlo solo con venir a llorarle.
Así que con el corazón destrozado se dio la vuelta y comenzó a correr hacia la salida, sintiendo la adrenalina al tope pues en cuanto inicio su carrera Loki dejo a un lado su dramático teatro, esta vez el objeto amenazador no era un tenedor, era un cuchillo.
— ¡REGRESA ODINSON! ¡TU ME AMAS!
Eso fue suficiente para hacerlo correr más rápido.