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Hominum por an_cafe_nyapyy

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Era el segundo día en el que estaba en Hogwarts y por fin me encontraba en la biblioteca, era grande, llena de estantes repletos de libros, ventanas altas que ayudaban a iluminar perfectamente todo ese gran espacio.

En una de las mesas estaba Granger entre dos montañas de libros, no había rastro de Weasley lo cual era un alivio aunque sí que estaba la chica Weasley, que saludó efusivamente a Harry al verle. Teníamos una hora antes de la cena, suficiente para terminar aunque sea los deberes de pociones.

En unas mesas más adelante estaba Malfoy junto a Nott y Zabini, para consternación de la pelirroja resbalosa nos dirigimos con los Slytherin, e incluso Reon le dirigió una mirada divertida a la chica que parecía en cualquier momento comenzar un berrinche.

Me alegro de verles. Ya es tarde para los deberes, sin embargo, podemos realizar los de Pociones, sobre las propiedades del Ópalo, encontré unos libros excelentes. La princesa ayudo en gran medida al pequeño azabache sobre la ortografía y gramática de su ensayo, Nott y yo dábamos ideas en las redacciones de todos, Zabinni aportaba datos interesantes y poco comunes que ayudaban al enriquecimiento del texto, y Harry ayudaba que el ambiente no se hiciera pesado y aburrido, aun si este solo inflara los mofletes en señal de estar aburrido.

Logramos incluso avanzar gran parte de los deberes de Runas Antiguas. Harry en cambio avanzo en los deberes de Encantamientos con Zabinni y Nott.

Me alegraba que el pequeño lograra llevarse mucho mejor con los amigos de Draco, aunque me desagradaba que el moreno de pronto parecía tener un deseo imparable de toquetear el cuerpo de Reon-nota mental golpearlo un día en un pasillo oscuro-.

Nos levantamos para ir directo a la cena, nos sentamos cercas de los gemelos, donde Harry les puso al corriente acerca de todo lo que había ocurrido en el castigo, los gemelos estaban furiosos, juraron vengarse a su manera, algo que seguramente no sería capaz de perderme.

 

 

Al abrir mis ojos me encontraba siendo usado de almohada del pequeño moreno nada nuevo, estaba satisfecho y un suave ronroneo salió de entre mis labios, era confortante tener un buen descanso había tenido un día agotador, y como le prometí al oji verde ahora me encontraba con él, está vez en su cama.

Habíamos llegado de la cena a los dormitorios sin mayores escalas, hablamos un par de minutos con Nevielle antes de meternos en la cama sin importarnos comentarios o exclamaciones odiosas ni sonrojos exagerados-en el caso del chico Nevielle-.

Tome una ducha con los constantes recordatorios de Ichibi, el cual oía sin interrupciones. Desperté a Harry, que aún con ojos cerrados se dirigió a tropezones a la ducha, Dean resoplo al ver que le habían ganado.

Tenía lista ambas mochilas al ver al azabache salir, termino de acomodarse el uniforme y nos dirigimos al comedor para el desayuno. Hermione se acercó a nosotros preguntando acerca de los deberes, algunos que teníamos hechos, en el caso del de Historia de la Magia y de Pociones, el ligero avance de Harry sobre Encantamientos.

A mitad del desayuno la insufrible pelirroja se me acero con los labios pintados, las pestañas rizadas, y demasiado rubor en su pecosa cara.

Escuche que la profesora Umbridge les ha castigado, pero que vieja arpía no es así. La voz de falso disgusto saco hasta una risa a Reon.

Oh, vaya que lo ha sido, Snape ha dicho exactamente lo mismo que tú. Al nombrar al mayor logro sacar una mueca de asco, que logro que con ese maquillaje se viera más exagerada.

Lo ha-ha dicho. Gruño de manera tan forzada que hasta la castaña la vio con mala cara, pareció querer reponerse de su evidente fracaso de conversación mas no salió nada de su boca, solo se fue por donde había venido.

Una arpía criticando a otra arpía. Ahora puedo decir que no me queda más por ver. Soltó riendo viendo por donde la chica se había ido con la cabeza bien levantada en señal de orgullo.

Las clases fueron mucho más llevaderas que el día anterior, esta vez asistí a mi clase de Aritmancia en la que me senté junto a Nott un chico bastante serio pero con conversaciones interesantes, parecía tener un don natural con los números que era bastante impresionante. La rubia princesa estaba del otro lado de Nott solicitando constantemente su ayuda para entender formulas y conceptos. Era claro que el rubio tenía dificultades para entender los números.

En mi caso batallaba más que en otras materias, por lo cual en más de una ocasión tuve que pedir que me explicaran o me guiaran. Al final de la clase acordamos juntarnos en la biblioteca una hora antes de que cerraran.

 

Buenas tardes señor Potter, señor Sabaku No. Sentí como ambos respiramos muy profundamente al ver la sonrisilla marca Umbridge en la detestable mujer.

Buenas tardes profesora Umbridge. Contestamos en unísono ingresando, ahora el moreno intentaba enfocar su vista a cualquier cosa que no fuera cursi, estúpido o rosa, cosa que era muy difícil.

La mujer parecía igual de emocionada y expectante que el día de ayer algo que no era buena señal, sin embargo, ya había colocado el escudo de arena en Harry.

Las plumas y el pergamino están en el escritorio, ya saben qué hacer. La mujer parecía muy confiada nuevamente con su castigo, me pregunto si en realidad había comprobado si las plumas funcionaban si era así ¿Las había usado con alguien más? O mejor aún ¿con ella misma?

Esta vez el oji esmeralda se acercó a las sillas mucho más relajado dando por hecho que el castigo de igual forma iba ser saboteado, cosa de la que pareció percatarse la horrible mujer.

Espere ahí señor Potter. La mujer se acercó al pequeño cosa que no me agrado en absoluto y me coloque rápidamente al lado del chico. La arpía me analizo pero nuevamente fijo sus ojos de sapo en la dulce figura del azabache, saco su corta varita con esos dedos gordos de salchicha y paso ese diminuto palo de la cabeza a los pies del moreno “Esta checando que no haya nada extraño, ¿el chackra podrá ser checado con la varita?” tenía la misma duda que Ichibi, ¿Qué pasaría si encontrara algo raro en él?

Frunció ligeramente el ceño y murmuro algo entre dientes, mas no dijo palabra alguna, realizo la misma acción conmigo y el ceño fue mayormente acentuado.

¿Es que acaso eres la pareja del señor Potter? La cantidad de asco con la que soltó aquella pregunta dejo en claro que la sola idea parecía repugnarle en niveles mayores.

Eso a usted no le incumbe, profesora. Conteste sosteniéndole la mirada, pareció evidentemente furiosa ante mi respuesta y Harry parecía pensativo.

Avisare a Madam Pomprey de su anti naturalidad para que logren componerse, aun son muy jóvenes y pueden reivindicarse. Contesto con una mueca más melosa pero que a nuestra vista parecía grotesca, en cambió Harry parecía evidentemente furioso con lo dicho por la mujer, al parecer ser gay era una enfermedad para el vómito rosa. Verán que con el tiempo encontraran a la bruja indicada para ustedes. Sonrió mostrando sus dientes filosos.

Sin embargo, no venimos a usted para charlas de sexualidad. Trate de decir de la forma más suave posible pese que estaba igualmente furioso.

Oh cierto, si llegan a necesitar ayuda para eliminar impuras atracciones o inclinaciones esten seguros que les guiare y ayudare.

 Nos sentamos en el escritorio viendo las plumas, con su misma afilada punta, no tenían nada diferente, a simple vista seguían igual; no habia tintero, solo el pedazo de pergamino.

¿Hay algún problema con la pluma? Sus dientes resplandecieron al aparecer entre esa grotesca mueca que quería llegar ser sonrisa. Harry le miro aun furioso por cómo nos habia tratado apenas minutos atrás.

Fue el con una sonrisa arrogante y una gran determinación, tomo de forma correcta la pluma y coloco la plumilla en el pergamino, sin titubeos ni miedos deslizo la punta por el papel para plasmar: No debo decir mentiras. La sapo con sus ojos saltones bien abiertos vio como a pesar de ver la friccion de ambos objetos no se plasmaba ni una letra.

La sorpresa y el enojo fue lo siguiente que invadio a la horrible mujer, sus ojos no parecían dar crédito alguno a lo que veía.

A pesar de su enojo, ahora nos puso a escribir 300 veces sus respectivas frases.

Sin embargo las dos horas que estuvimos con la mujer no paro de hablar acerca de lo enfermo que eran las relaciones del mismo sexo, lo antinatural y lo blasfemo que eso podría conllevar. Harry salió furioso del despacho, lo que logró sacar una sonrisa socarrona a la detestable mujer. Era increíble lo que era capaz de hacer con tal de hacer sufrir o incomodar de sobremanera a la gente.

El pequeño Reon se fue a los dormitorios, mientras yo me dirigí a la biblioteca, tenía que hacer los deberes de Aritmacia, y de Transformaciones, si puedo llegar a avanzar a mas deberes sería bastante bueno. Pero la princesa y su sequito de amigos me esperaban o nos esperaban, pero el moreno estaba demasiado enojado por la cantidad de sandeces que salieron de la abertura horrorosa a la que llaman boca de la sapo rosa.

Era realmente confortante tener un grupo de estudio, en el que al menos esta vez éramos la princesa y el chico Nott, en que era increíble como el castaño podría ignorar casi siempre la perorata del rubio acerca de temas que no le interesaban, léase de cuidados y belleza.

Sin embargo, el castaño generalmente era mejor leyendo a las personas, solía acertar cuando alguien tenía un problema, según él no importa cuán buena mascara ponga siempre hay algo que te indica que es lo que pasa con esa persona.

Fue el que de hecho descubrió con solo ver al profesor Snape, que ya se encontraba en una relación, aunque el hombre daba todo su esfuerzo para que en realidad no fuera muy obvio. Para el castaño era tan claro, dado que a su punto de vista el hombre estaba que se subía por las paredes al no tener recientes relaciones sexuales.

Al regresar a las habitaciones Reon no estaba, la habitación si bien no estaba vacía, al encontrarse al menos al tímido moreno, prácticamente abrazando a su extraña planta, pese a cuestionarle el paradero del invasor de camas incluso afirmo no haberle visto desde hace mucho, que incluso la última vez que tiene un recuerdo del día había sido conmigo.

Los de la sala común que aún se encontraban fuera de las habitaciones mencionaron que tampoco le habían visto.

 “Donde se habrá metido” Ichibi parecía intrigado y preocupado a partes iguales, y su ligero nerviosismo no ayudaba a mi desesperación por saber de él. Al regresar a la habitación ya con Finnigan y Thomas dentro me dispuse a buscar pistas que me dieran al menos una pista de donde se había metido.

Para mi sorpresa, sobre mi cama solo había una nota: Estaré bien. HP. ¿Cómo es que no la había visto?  Aun con su nota y ya el toque de queda pase largo rato buscándole por el gran castillo con rotundo fracaso ¿Cómo se había escabullido tan rápido? ¡¿Y de mí?! De todas las personas que habitaban este enorme lugar, ¿no debería de ser yo el que fuera capaz de encontrarle con una rapidez ridícula? “Y sin embargo, no tienes ni jodida idea de donde esta” los regaños de Shukaku no ayudaban a mi sanidad mental.

Para la 1 de la madrugada Severus me esperaba fuera de la sala común para ir a entrenar. Le había dejado plantado una hora completa.

No parecía ni la mitad de sorprendido cuando le conté acerca de la desaparición de Harry, pero menciono que si al regresar no estaba en los dormitorios que el ya interferiría. Me sorprendió en gran medida lo tranquilo que estaba pese a todo. ¿Es que esto era tan común? Chiste mentalmente, Harry no debería de huir de esta manera. ¿Estará con alguien más? ¿Está ocultando su sentir después de aguantar a la sapo rosa? ¿Estará teniendo un encuentro furtivo con un mago o bruja? ¿Una reunión clandestina? ¿Estará destrozando una sala de Hogwarts? ¿Estará leyendo los libros de My Little Pony que le regalaron los gemelos? ¿O se estará probando el atuendo de Blanca Nieves que Sirius pago para conseguirle? O ¿Estará encima de una torre con el disfraz de Batman diciendo: Yo soy Batman? ¡¿Qué es lo que hace que no desea ser encontrado?!

Tanuki logro calmarme diciendo que probablemente estuviera leyendo los libros de My Little Pony, un par de veces lo encontramos leyéndolos a escondidas.

Como siempre habíamos hecho bastante para llegar al lugar de entrenamiento, esta vez Severus tenía un termo lleno de café, para no quedarse dormido transfiguro una roca en un sofá. Antes de si quiera usar el sofá ambos hicimos un poco de meditación. Era confortante porque el hombre parecía realmente agradecido por ese inicio, parecía en realidad bastante a gusto con ello.

Entonces comencé el verdadero entrenamiento. El taijutsu esta vez era más pesado, con un duro calentamiento de por miedo, el cual tenía que repetir si alguno de mis movimientos no eran los adecuados, ya sea el ángulo o la fuerza proporcionada –esto obligado obviamente por Tanuki-.

El gran mapache parecía odiarme lo sentía inquieto y confuso, de alguna manera sabía que estaba pensando en Harry. ¿Qué habrá pasado?

Severus estaba más que sorprendido cuando me vio trepando arboles sin usar manos y caminando de manera horizontal por ellos, más aún cuando vio el alcance de mi poder, al menos una parte.

El escudo era perfecto, pero esta vez empuje a la magia a combinarse con el chackra, sin embargo, estuvo sumamente inestable y me dio tremendo dolor de cabeza que me tumbo en medio de un grito desgarrador, agradecí que el moreno estuviera me atendió rápidamente y la parte de mi autocontrol fue empujada para no cometer una locura con el chackra.

Era un misterio para Shukaku como para mí porque tenía ambas, aunque ambos teníamos nuestras teorías. Para Severus solo existía una en mí, no decidía si decirle la verdad.

Después de media hora del incidente el mayor me obligo a regresar a las habitaciones a descansar, teniendo el argumento que eso no era bueno ni normal. Según el dure más de 25min gritando agarrándome fuertemente la cabeza y que el poder que pululaba era por mucho asfixiante y que varias criaturas extrañas comenzaban acercarse, muchas de ellas oscuras.

“Fue un shock de poder, debes de tener más cuidado, la idea es buena solo se necesita entrenamiento y constancia. Seremos invencibles si logras hacer que tu poder-magia y chackra-, junto con el mio se junten” La pedantería prácticamente era destilada por cada palabra. Sentía que era una gran satisfacción para el que no fuera un bueno para nada. “Nunca he pensado que seas un bueno para nada. Solo no me gusta ser prisionero” Gruño cual puchero y no pude evitar sentirme mal.

Disculparme con Shukaku fue tarea para el regreso. Paso lento junto con Severus el llevaba la varita con el lumos y el hechizo de desilusión, no quería que me sobre esforzará.

Harry estaba acostado con Nevielle cuando volví, aún tenía el ceño fruncido cuando lo encontré dormido junto al moreno, no se había quitado las gafas y su posición era incomoda. El tímido chico ocupaba gran parte de la cama prácticamente con brazos y piernas disparatadas por todos lados. ¿Entonces está enojado conmigo?

Eran las 6 de la mañana cuando había vuelto a las habitaciones, mi cabeza no punzaba gracias a las pociones de Severus, pero mi cuerpo estaba pesado y me sentía francamente agotado.

La ducha que tome fue a consciencia usando de esas sales de baño que la princesa me había regalado para mejorar la apariencia de mi piel, estas también tenía la particularidad de relajar los músculos y el aroma servía para desestrezarme, su aroma era más floral que de tierra como normalmente me gusta, olores de madera y tierra, Ichibi estuvo de mejor humor al mofarse de mí, al oler a bellas y delicadas flores.

Una vez aseado y vestido me di cuenta que todos seguían profundamente dormidos, aunque uno de ellos no parecía disfrutar de su sueño. ¿Por qué se durmió con Nevielle? Habrá sido porque no estuve con él para arrullarle hasta que se quedase dormido. Suspire amargamente.

Reon, ya es hora de levantarse. Susurre cercas de su oído, pensé que no iba hacer caso, pero abrió los ojos rápidamente y sus ojeras eran muy notorias.

Buenos días Gaara. Su voz era patosa pero al mismo tiempo era triste. ¿A dónde fuiste toda la noche?

Estuve con Severus. Conteste con una leve sonrisa. Asintió por la respuesta perdido en sus pensamientos. Se incorporó, me hice a un lado para que el chico fuera por sus cosas, Nevielle dio un gran ronquido y cambio de posición.

Con razón no me topé con él al regreso. Susurro sacando un par de limpios calcetines.

Reon. Le hable antes de que entrara al baño, el chico me volteo a ver con ojos cansados y un velo de tristeza. ¿A dónde fuiste en la noche?

Estuve en la torre de Astronomía, las estrellas son muy bellas estos días. No tuve el valor de decirle que ese entre otros tantos lugares del interés del pequeño fue donde busque de manera casi desesperado.

No dijo otra palabra más y se metió a la ducha. ¿Qué pasaba con Reon? “Su relación es de confianza silenciosa cachorra. El hecho que le agrades no significa que confié sus secretos y pensamientos en ti. Mucho menos si tu evidentemente no lo haces” Gruñi abatido, ¿Tan rápido la regué?

Los chicos comenzaron a salir de sus camas con caras dormidas e imagen cómica con la ropa desarreglada y marcas de sabanas en sus caras, era tan hilarante y al mismo tiempo tan confortante, todos intercambiaron un buenos días segundos antes de comenzar un juego de piedra papel o tijeras para ver quién sería el siguiente en la ducha.

Durante los próximos días pese al intento de la asquerosa mujer nunca logro hacer que sus detestables plumas funcionaran en nosotros. Sus horas eran una tortura al escucharla con sus insufribles discursos acerca de lo aberrante que eran las relaciones homogéneas, de los problemas mentales que incluso los niños que estaban a su cuidado podían desarrollar al crecer con parejas homosexuales. Entre otra sarta de tonterías que lograba escupir.

El viernes durante la hora usual de castigo en realidad Umbridge estuvo el doble de insoportable, esta vez después de su usual castigo de planas, nos obligó a lustrar cada adorno de su oficina con un trapo que era minúsculo, el producto designado para la tarea tenía un olor muy similar al perfume de la mujer, lo que hacia la tarea aún más horrible. El pequeño Reon estaba más bien decaído y un poco frustrado al no haber podido asistir a las pruebas para elegir al guardián del equipo de Quidditch.

Mientras yo me encontraba lamentándome internamente los últimos días Reon prácticamente escapaba de alguna manera en mis propias narices, solo bastaba una pequeña distracción por mi parte para que el chico se escabullera y no regresara hasta altas horas de la noche. Nunca pude reunir el suficiente coraje como para exigirle respuestas. ¿Cómo exiges alguien confianza cuando evidentemente tú no eres capaz de hacer lo mismo?

Los entrenamientos ya no tuvieron día de descanso, desde el miércoles de esta misma semana. A las 12 puntualmente Severus me esperaba junto al retrato de la Dama Gorda, para este día –viernes- ya ni siquiera cuestiono el paradero de Harry –el cual había obtenido la misma respuesta: No lo sé.  Era frustrante no poder saber dónde se iba el pequeño. Los entrenamientos iban a mejor aunque más desmoralizadores, realmente quería mejorar la relación que tenía con el ángel de ojos verdes. ¿Cómo se mejora la relación de todas formas?

Durante una pelea con un clon de arena me cuestione profundamente acerca de alternativas para lograr que el chico volviera a sonreírme con esa mueca de sincera confianza y amistad. Mismo chico que aun pensaba que era sobrino de Severus-hombre con el cual tuvo fuertes roces en el pasado jurando en muchas ocasiones ser una persona que se había ganado un odio profundo-, mismo chico que pensaba que mis padres habían muerto los primeros meses de este año, mismo chico que pensaba que era hijo único, mismo chico que pensaba que solo era un mago con “”magia oriental diferente.””

El clon entonces no batallo absolutamente nada en vencerme, solo basto un momento de distracción en que concentro gran parte de su poder en un ataque, siendo altamente efectivo. Ahora solo echado en una cama de arena con el estómago doliendo horrores con posibles fisuras en las costillas y un clon con sonrisa petulante me di cuenta, como es que los sentimientos mal proporcionados suelen ser realmente un obstáculo.

Estaba confundido, estresado y hasta deprimido, depresión que durante años había sido parte tan fundamental en mí, sin embargo ahora añoraba algo que había sido construido a base de información oculta.

¡¿Cómo puede ser tan irresponsable como para distraerse en un momento así?! Vea como ha terminado, deje de tener ese semblante de estúpido y por Morgana despabile. La voz gruñona y exasperada del hombre me sacaron de mi estupor. No pretenda cerciorarse que todas las pócimas de curación de mis bodegas personales sirvan.

El hombre entonces vacío el contenido en mi boca, y poco a poco sentí una curación casi instantánea recorrer cada milímetro de mi cuerpo. Gracias a Ichibi tenía la particularidad que aun siendo herido mi regeneración era increíble, pero las pociones realmente recortaba muchísimo mas el tiempo de espera para la curación reduciéndolo hasta en segundos.

¿Quiere dejar de pensar en Potter? Protesto con el rostro pálido y jadeante, sus ojos asustados me miraron intensamente, ya había tenido un par de percances durante el entrenamiento, porque el hombre reaccionaba como si fuera a morir en cualquier momento.

No puedo evitarlo. Conteste derrotado. Jure protegerlo y cuidarle.

Usted no es ningún niñero. Gruño acomodándose mejor a mi lado, evitándome cualquier movimiento brusco para ayudar a la poción a cumplir su función, a sabiendas que a estas alturas me encontraba completamente curado.

No se trata de ser un niñero. Gruñí a su lado, mirándole. Quiero ser un hermano para él.

El señor Potter ha estado solo desde temprana edad, y nunca ha confiado plenamente en alguien pese a su personalidad, es un chico solitario. No puede fanfarronear con la idea de ser su hermano.

Necesita de amistad y un hombro en cual reposar sin miedo. Quiero llegar a ser lo suficientemente fuerte para guiarlo, cuidarle y protegerle.

Es una persona muy extraña. Su concepto de hermandad y amistad es extraño. Contesto acostándose a lado mío.

Eran pasadas las 4 am, el hombre estaba más que devastado durante estos días había estado acompañándome sin rechistar. Haciendo caminatas que a leguas se notaba nunca hacía y en ocasiones sosteniendo equipamiento para practicas golpes y patadas. Me sentía realmente fascinado por su dedicación tanto a mi, como a sus alumnos-aunque en ocasiones era realmente un cretino-. Se mantenía firme, con su personalidad siempre al frente y sin pestañear o desistir. Era una gran persona.

Sé que lograra mejorar la relación con Potter. Es un maldito Gryffindor con su testarudez típica de los leones. Sonreí ante la comparación. ¿Seré así de valiente? “Eres más una serpiente que un león” el gorgojeo feliz que daba Ichibi me ocasiono un sentimiento de tranquilidad en mi pecho.

Las cosas deben de mejorar entre Harry y yo.

Notas finales:

Los ligeros problemas entre Harry y Gaara aparecen. 

Los entrenamientos se hacen mas continuos así como el desarrollo y crecimiento del poder de Gaara, entre ellos una revelación. 

Ciertamente no progrese con los castigos en si de Umbridge, lo lamento, pero siento que el odio por sus comentarios fue por mucho mas intolerante.

Muchísimas gracias por seguir mis fics, por todos los votos y comentarios, me hacen mucho muy feliz. Los adoro :´)


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