Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

No pienses en llorar. por Akiko Hayako

[Reviews - 9]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Disculpad la tardanza. 

-¿Quién es él? –Pregunta la chica con curiosidad, nos mira de arriba abajo, debe estarse preguntando por qué me he vestido tan formal cuando no suelo hacerlo.

-Oh, no los he presentado… Silvia, él es Brook, Brook ella es mi hermana, Sil…

-Rubí, ¿cierto? –me interrumpe él dejándonos sorprendidos a los dos.

-¿La conoces?

-¿Me conoces? – preguntamos los dos al mismo tiempo.

-¡Claro! Eres esa modelo nueva ¿no? Te vi en el periódico, me encanta tu trabajo –respondió ignorándome por completo y dirigiéndose únicamente a ella.

-¿De verdad? –rio sorprendida –no creí que alguien vería ese periódico. Gracias, creo que eres el primero en reconocerme –dijo tratando de ocultar su emoción pero yo sabía que por dentro debía estar muriendo de alegría porque alguien la había reconocido.

-¿Gustan pasar a cenar? Tal vez puedan seguir hablando más cómodos y continuar ignorándome –hablé molesto, estaba un poco celoso de Silvia robando la atención de Brook.

-¡Oh, vamos Brook, la comida que hace mi hermano es deliciosa!

-¡¿Qué?! ¿Ustedes son hermanos?

-¡Eso fue lo primero que dije! –reclamé, pero él sólo seguía viendo a Silvia, ella me miró con lástima pero le siguió el juego a Brook.

-En realidad somos medios hermanos –contestó con una sonrisa.

-Sorprendente, Gerard nunca me dijo nada de eso –me acusó el chico. Entré a la sala harto de ver cómo esos dos se entendían tan bien. Mika ya estaba acostado en el sillón, desde la primera vez que vino aquí ocupó ese lugar.

Durante toda la cena se la pasaron platicando y por supuesto continuaron ignorándome, sobre todo Brook, quién estaba fascinado con la visita de mi hermana.

La verdad es que no le había contado mucho a Brook sobre mí, desde que comenzamos nuestra relación decidimos hacerlo desde cero, sin pensar en el pasado y olvidándonos de todo lo malo que había ocurrido.

-Brook, será mejor que vayas a descansar, ya es muy tarde –interrumpí su plática al ver cómo mi novio comenzaba a tener los ojos rojos por el sueño.

-Pero quiero platicar con Rubí un poco más –me dijo en tono aniñado.

-He dicho que a dormir, ella no se va a ir ahora, te lo puedo asegurar –miré a Silvia acusadoramente –estará aquí cuando despiertes.

-Está bien –aceptó cual niño regañado. Lo acompañé a la que solía ser nuestra habitación.

-Perdón por esto, no pudimos celebrar adecuadamente tu cumpleaños –me disculpé una vez estuvimos en mi cuarto.

-¿Estás loco? Ha sido el mejor cumpleaños, conocí a una chica que dentro de algunos años será tan famosa que no podré ni mirarla a los ojos aun cuando sea tu hermana, además me contó muchas cosas sobre ti. Eres tan malo –infló las mejillas –nunca me cuentas nada de ti.

-Es que nunca me has preguntado –sonreí, él era el niño más lindo que pude haberme encontrado. –Venga a dormir, mañana hablaremos todo lo que quieras –deposité un beso en su frente y otro en sus labios, él me correspondió dulcemente. Se quedó dormido en medio del beso, debía estar muy cansado.

Bajé a la cocina donde aún se encontraba Silvia. Tomé asiento frente a ella.

-¿Cómo has estado? –de entre todas las cosas que quería preguntarle había elegido la más insignificante.

-Con vida –rio irónicamente.

-¿Qué haces aquí? –hacía mucho que no venía a pesar de que había dicho que lo haría.

-¿No te alegra que haya venido? –arquea una ceja.

-¡por supuesto que sí! Te extrañaba mucho. Pero ¿y tu trabajo? ¿Está bien que vengas así de pronto?

-Tengo vacaciones, no sabía a donde más ir y… ella me debe estar buscando, estoy segura que ni en un millón de años se le ocurrirá venir aquí.

-Entonces solo has venido por protección –la miré con los ojos entrecerrados.

-¡claro que no! ¿Qué clase de hermana crees que soy? Tenía ganas de verte y saber quién es esa personita que has conocido –esta vez fue ella quien me miró con sus grises ojos entrecerrados. Ahora que lo pensaba, ambos nos parecíamos más a nuestros respectivos padres, gracias al cielo no heredamos rasgas significativos de la perra que teníamos como madre. Por ello los dos éramos tan diferentes físicamente.

-Pues ya lo has conocido –me limité a decir, esperando su reacción.

-¿Es Brook? –contestó irguiéndose en su asiento completamente seria. Me asusté, no me importaba lo que pensaran los demás, pero sí lo que pensara ella. –Wow, no sabía que fueras gay –dijo aún sorprendida.

-No lo soy, bueno, no lo sé, nunca me había sentido así por un hombre, hasta que lo conocí, te lo juro que siempre había estado seguro de ser hetero, pero él… Dios, él es tan lindo, tan vulnerable, tan… tan todo, que no me he dado cuenta cuándo he caído por él –trato de explicar cómo me siento pero me es imposible expresarlo en palabras, simplemente sé que le amo demasiado. Silvia sonríe ampliamente.

-Me alegro mucho por ti, jamás te había oído hablar de esa forma, realmente le quieres ¿Eh?

-Como no te imaginas. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).