- Lo hiciste bastante bien Kibum – comentó Jonghyun mientras salían de la universidad y caminaban hacia la parada de autobús.
- Gracias… - respondió con un tono de voz débil mientras se acomodaba su mochila.
- Toma estos libros para que practiques la lectura ¿tienes un piano o teclado en casa? – preguntó y le entregó dos libros no muy gruesos que se veían algo usados, él los tomó y los puso en su mochila.
- No, no tengo uno pero estoy ahorrando para comprarlo.
- Ya veo… entonces puedes venir a ensayar aquí supongo, o siempre puedes venir a mi casa a practicar.
- Eh, lo pensaré, gracias. – el mayor asintió.
- ¿Está bien si te pregunto por qué dejaste la universidad? – Pasaron unos incómodos segundos en los que Jonghyun se arrepentía de querer saber más de lo que debía – si no quieres decírmelo no hay problema, perdón por entrometerme.
- No es eso, es complicado pero básicamente quiero empezar de nuevo y elegir bien esta vez, quiero ser capaz de tomar mis propias decisiones.
- ¿A qué te refieres? ¿Elegir bien?
- A que estaba estudiando algo que no me gusta y quiero hacer lo correcto ahora y seguir mi verdadera pasión, por más cursi que suene. – dijo un poco avergonzado. La verdad es que cuando lo decía en voz alta sonaba muy fantasioso. No muy propio de él.
- No es cursi, es increíble. Hay muchas personas que pasan por un montón de problemas para encontrar lo que en verdad les gusta, tú te diste cuenta pronto, es algo bueno.
- Si, supongo que si lo miras de ese lado es bueno. – sonrió.
- No suenas muy emocionado por ello ¿qué es lo que quieres hacer?
- Quiero estudiar música – se volteó hacia él y sonrió sin darse cuenta al ver su expresión entre sorprendida y extrañamente feliz – ¿Te sorprende tanto? Me estás ayudando con el piano después de todo.
- Si pero, pensé que era por hobby… espera, ¿seremos colegas entonces? – trató de suprimir la alegría que sintió al pensar en que podría verlo en su facultad a diario o incluso compartir un escenario algún día.
- Eso creo, pero aún no sé en qué especializarme ¿Cuál es la tuya?
- Composición e instrumentación.
- Pero tú cantas…
- Si, también tomé clases de canto, pero es el nombre de la especialización, significa que me voy a enfocar en la composición en mi carrera, más no en la interpretación – lo vio asentir para luego fruncir el ceño levemente haciendo que sus labios formaran un lindo puchero y le regresó la mirada, confuso.
Adorable.
- Pero ¿Qué hay de Neon? He escuchado que iban a debutar oficialmente en TV y todo ¿No quieres seguir con la banda? – preguntó con un tono de preocupación.
- Claro que me gustaría que tuviéramos éxito pero la realidad es dura – sonrió algo melancólico. – No es fácil competir en este mercado, sobretodo en una sociedad que valora la imagen sobre la música… la mayoría de las veces.
- Pero si los tres son guap… es decir, creo que no tendrían problemas en esa área. – miró al piso avergonzado por lo que estaba a punto de decir.
- No es tanto por eso – sonrió al verlo avergonzado – me refiero a que las empresas nos ven como un producto que tiene que ser atractivo para las masas y eso incluye cambiar nuestro sonido, hacer música más comercial. Y no queremos vendernos de esa manera, valoramos mucho a nuestros admiradores pero a la vez sabemos que nuestra música no es del gusto popular y no vamos a traicionar nuestros principios por tener éxito, no lo vale. No seríamos felices siendo usados de esa manera…
- Tienes razón, pero estoy seguro de que hay mucha gente que estaría feliz de escuchar sus canciones en la radio y de ver sus presentaciones en vivo, y que se den a conocer más. Yo soy uno de ellos… Espero que puedan encontrar una disquera lo suficientemente valiente para firmarlos.
- Gracias. Por ahora estamos bien así pero siempre estamos pensando en el siguiente paso. – sonrió de nuevo, esta vez más cálidamente sabiendo que Kibum lo apoyaba. – Espera ¿me has visto cantar antes?
- Claro, en la fiesta de bienvenida, la verdad no sabía antes de la banda porque no suelo ir a esas fiestas pero los escuché esa noche y son bastante buenos. Además ese fue el último día que estuve en la universidad. Y luego pues, nos encontramos aquí mismo… - dijo al llegar al paradero, ambos se quedaron de pie, sus ojos puestos en los ajenos en un silencioso acuerdo.
De pronto Jonghyun sintió como si una fuerte brisa despejara sus pensamientos.
Y pensar que te conocí el día que te marchabas. De no haber estado allí en ese preciso momento… Creeré que tengo suerte de ahora en adelante, a menos de que ya la haya usado toda aquel día al encontrarte…
- Si, aunque aún no hemos lanzado ninguna canción original, queremos esperar una mejor oportunidad. Pero dime ¿En qué te quieres especializar?
- La verdad es que estoy un poco indeciso al respecto, pero quizá interpretación? O teatro? Siempre me han gustado los musicales.
- ¿Cantas? Oh, tengo que escucharte. Tu tono de voz es bastante peculiar.
- Me gusta cantar pero no sé si soy lo suficientemente bueno como para dedicarme a ello.
- Hmm, yo pensaba igual cuando era más joven y mírame ahora. – Sonrió – que te parece si te aconsejo sobre eso la próxima vez que nos veamos, prepara una canción, la que sea, y veremos… a menos de que quieras hacerlo ahora, podemos practicar en mi casa.
- Eh, no puedo hoy, dejémoslo para la próxima ¿está bien? – respondió rápidamente.
- Oh, por supuesto, es sábado por la noche, de seguro ya tienes planes.
Que idiota Jonghyun, suenas desesperado.
Pensó para sí mismo mientras evitaba su mirada.
- Pues sí, tengo planes…
- ¿Una cita? ¿Saldrás con tu novia?
Di que no…
- Si es una cita pero aún no es mi novia…
¿Aún no? Auch de todas formas.
- Oh bueno, suerte con eso hahaha, nos vemos. – le dio una “suave” palmada en la espalda y se despidió, caminó hacia el bus que acababa de llegar y se subió en seguida sin siquiera voltear a ver a un confundido y despistado Kibum aún en la parada.
Y solamente se quedó en blanco el resto del viaje hasta su departamento, el hecho de que probablemente Kibum se le declararía a aquella chica pronto le molestaba, y pensar que por un momento creyó que podía tener algo con él, durante esos escasos segundos en que lo vio directo a los ojos, creyó que compartía sus mismos sentimientos, pero al parecer se equivocaba, saldría con aquella chica de cabello largo, la que le hacía sonreír de esa manera que lograba agitar su corazón como no tenía idea, y seguramente era ella también la que ganaría su corazón y no él.
Pensando en ello, consideró darse por vencido, y en realidad no tenía muchas más opciones.
La noticia lo desanimó en tal manera que incluso ni se despidió propiamente de él, ni le dijo tampoco cuando sería la próxima vez que se encontrarían para sus lecciones de piano, las cuales las encontraba muy estúpidas ahora porque su propósito era acercarse a él a través de ellas, pero ahora no sabía si quería seguir jugando ese juego, aunque se moría por escuchar su voz al cantar, seguramente sería tan hermoso como su sonrisa, pensó. Aunque quería pasar más tiempo con él y perderse en sus encantos… ya se lo había prometido, así que simplemente seguiría con ello, seguiría torturándose y enamorándose más de él.
No tienes remedio Kim Jonghyun…
***
Mientras tanto Kibum se quedó extrañado por la repentina partida de Jonghyun, pero pensó que seguramente estaba ocupado y tenía algo más que hacer, así que no le dio más vueltas al asunto y se fue a su casa, siendo casi las 6 de la tarde aún era muy pronto para su cita, así que una vez llegado a su casa, se sintió cansado y se recostó en su cama con sus audífonos puestos y por más que trataba de no pensar en él, aquel momento en que su mirada lo hizo sentir tan vulnerable y sintió esa “molestia” en su estómago volvió a su mente, sin mencionar que cuando llegó lo encontró cantando su nueva canción y él estaba tan maravillado con su voz que sólo se quedó ahí, como si estuviera hipnotizado viéndolo, realmente tenía una voz hermosa y quería seguirla escuchando, tenía curiosidad por cómo resultaría la canción; y aunque decidió dejar de lado sus sentimientos hacia el mayor sabía que era mejor si permanecía a su lado, después de todo estaba dispuesto a ayudarlo con su propia música y eso era mucho más importante que un simple “flechazo”, así que después de regresar a ese pensamiento una y otra vez, se quedó dormido teniendo sus audífonos puestos y escuchando música.
Despertó luego algo confundido, no sabía qué hora era y sentía que se olvidaba de algo importante, miró en su celular la hora y eran las 7:55 pm, ahí recordó su cita, apenas y tenía tiempo para una rápida ducha y salir disparado hacia el cine si no quería hacer esperar a Luna. Se vistió lo más rápido que pudo, con unos jeans negros, una camisa manga larga de tono beige y una chaqueta negra por el frío, se acomodó su cabello como siempre y salió de su departamento, tomó un taxi hacia el lugar y cuando llegó vio a Luna esperando fuera de la sala, a pesar del frío de la noche ella llevaba un bonito vestido color negro y una chaqueta de jean azul claro, su largo cabello estaba recogido en una media cola de caballo, no pudo evitar sonreír al verla a la distancia, revisando la hora en su celular mientras hacía un puchero, se enterneció ante el acto, seguramente pensaba que la iba a dejar plantada, sin más caminó hacia ella y cuando lo vio posó una enorme sonrisa en sus labios, se disculpó por la demora y entraron a la sala, afortunadamente Kibum había comprado ya los boletos para la película que verían así que solamente tuvieron que hacer fila para comprar sus botanas, una vez dentro de la sala, fueron a sus asientos, no estaba tan lleno como pensaba, apenas y habían dos personas más en su misma fila, por lo que se sentía un poco más cómodo y la vez nervioso por cómo llevaría esta cita, hacía tiempo ya que no salía y no estaba seguro de cómo debía comportarse con ella, aún se encontraba inseguro sobre si debería o no cruzar esa línea de amistad con ella.
¡Qué rayos Kibum! ya estás aquí, ya no hay vuelta atrás…
Intentó relajarse y concentrarse en la película, veían “Animales fantásticos y donde encontrarlos” ya que siempre fue un fan de la saga estaba emocionado por ello también. Los minutos pasaron y ellos se encontraban un tanto callados mientras observaban, de vez en cuando compartían una reacción pero no era del todo incómodo como lo pensó en un principio, en un movimiento rápido Kibum tomó la mano de Luna que reposaba en el antebrazo del asiento, ella se sorprendió por la repentina acción del mayor y lo miró con ojos curiosos y expectantes, él solo sonrió y eso bastó para calmarla, regresaron su mirada hacia la película, su mano se sentía cálida pero se sentía incómodo, sus dudas parecían volver, entonces la miró y ella sonrió inocente de nuevo.
Decidido a ponerle fin a sus dudas soltó su mano y tomó su mejilla mientras se acercaba a su rostro y la besó en un impulso, sus labios se movían lentamente sobre los ajenos, en lo que ella reaccionó un poco más tarde y le correspondió con el mismo ritmo, cuando se separaron vio sus ojos aún cerrados y cuando los abrió y lo miró le sonrió, por el contrario él tenía una expresión seria en ese momento, algo no estaba bien, algo simplemente no se sentía bien, quizá esta era la señal que esperaba y se dio cuenta de que en verdad no podía corresponderle como quería, no podía llenarle la cabeza de mentiras y decirle un falso “me gustas” por más que quisiera convencerse de ello.
- ¿Kibum…? – preguntó con una suave voz al notar la preocupación del mayor.
- Lo siento Luna, no puedo hacer esto – bajó un poco la cabeza – de verdad lo siento – Se puso de pie y salió de la sala, afortunadamente la película se estaba acabando y la demás gente también estaba caminando hacia la salida.
Ella lo siguió sintiéndose al borde de las lágrimas, pero se contuvo, no quería hacer una escena en público, cuando salió lo vio sentado en una de las bancas fuera del cine, tenía sus codos apoyados en sus rodillas y se ocultaba el rostro con sus manos, se veía bastante afligido, y a pesar de sentirse herida por su rechazo, se preocupó por él y lo que estaría sintiendo en esos momentos.
- ¿Kibum que sucede? – Se sentó junto a él en la banca – puedes contarme, antes que nada somos amigos… – la miró de lado alzando por fin la cabeza.
- De verdad lo siento Luna, yo… creo que me gusta alguien más…
- Lo entiendo… – soltó un suspiro en señal de resignación.
- Entenderé si no quieres verme de nuevo, incluso si ya no quieres que trabaje más en Galaxy, yo…
- Hey, no, espera – lo interrumpió – no soy ese tipo de persona inmadura, esto no tiene nada que ver con eso, admito que si necesitaré un poco de distancia pero no te voy a pedir que dejes tu trabajo, sé que lo necesitas, no te preocupes por eso.
- Luna…
- No te preocupes Kibum, te entiendo, nos vemos… – alcanzó a ver que tomó un taxi y se fue, ahora se sentía peor, ella siendo amable con él después de rechazarla y el tener que trabajar en su cafetería arriesgándose a incómodos encuentros de ahora en adelante, sólo esperaba no haber arruinado por completo su amistad.
Sin más que hacer en ese lugar, se dispuso también a tomar un taxi e irse a casa, en el camino, mientras observaba la oscura noche de Seúl a través de la ventana, pensó inevitablemente en Jonghyun, en la inesperadamente divertida tarde que pasaron juntos, y en lo que sintió al estar con él en comparación a lo que sintió cuando estaba con Luna, había sin duda una diferencia, pero no se atrevía a nombrar aún a ese sentimiento.
Ya en la calma de su habitación, se lanzó exhausto a su cama y antes de ponerse a pensar de más y hundirse en la depresión de nuevo, cerró los ojos tratando de dormir lo más pronto posible y olvidar todo aquello que lo hacía sentir vulnerable e indefenso.