No lograba entender como Namjoon y Sohye eran amigos siendo polos tan apuestos pero como última instancia quería creer que ella había cambiado su forma de ser.
Jun no la soportaba y tampoco fingía hacerlo, no lo negaré, intentaba llevar las cosas en paz pero de cierta manera admiraba su manera tan honesta de ser.
Tal vez ni Hoseok ni Namjoon lo sepan pero la Sohye que conocen solía ser tan superficial. Comencé a salir con ella en mi intento de olvidar a mi amiga pero no sabía que iba a ser un error fatal hacerlo.
Prácticamente solo me usaba para sus fiestas de etiqueta, para socializar con su familia y amigos. Presumir que salía con un chico tan apuesto, y a pesar de ello, yo intenté enamorarme de ella.
Que error…
El día que la encaré. Ese día le dije cosas horribles que a ambos nos hicieron llorar, le terminé confesando que la apariencia no lo es todo en esta vida y esperaba hacerla comprender.
Le dije que me sentía decepcionado porque a pesar de todo, yo si intenté amarla cosa que a ella ni siquiera se le había pasado por la cabeza. Después de aquel episodio, nunca más la volví a ver hasta que nos encontramos nuevamente.
Es sólo que ahora las cosas eran diferentes. Si pudiera decirlo de alguna forma, a veces me daba la impresión de que Namjoon le gustaba pero algo me seguía diciendo que su personalidad era igual de mala que antes.
Además, él que tenía tantos problemas de autoestima ni siquiera se daba cuenta de lo que pasaba a su alrededor. Aunque prefería que fuera de esa manera porque Nam se merecía a alguien mucho mejor que Sohye como su actual pareja.
Como yo…
¿Eh? Bueno… No lo negaré, yo soy perfecto para Nam pero no de esa manera. ¿Oh sí?
Ese era otro problema. No entendía que me estaba pasando últimamente pero las palabras de Nam quizás si habían terminado por seducirme.
No pensé que pasaría de esa manera pero Nam me ponía nervioso cuando se mordía el labio de esa manera, cuando ponía la mano en sus ojos de manera tan casual. Cuando leía un libro en la biblioteca, y recargándose haciendo que se cayeran varios de un solo jalón.
Como olvidaba sus cosas en la banca, y como era tan descuidado que siempre andaba con benditas en sus dedos. Como sonreía y esos malditos hoyuelos borraran todo lo que había frente a mí.
La voz tan gruesa que poseía cuando me hablaba de manera filosófica. Como ponía tanta atención en las letras de las canciones intentando entender al artista que las cantaba. Y como él era tan único que me hacía estremecer con su sola presencia.
Así que a esto le llaman enamorarse.
Era diferente porque con Jun no sentía estas cosas.
Era diferente…
Cuando Namjoon estaba involucrado siempre era diferente.
–¿Alguien más esta en tu mente? –Preguntó curioso.
Me volteé a verlo mientras ponía mi cara en el antebrazo.
–Sí…
–Por eso andas tan distraído últimamente –Se acarició la barbilla –Me alegró por ti –Sonrió.
Es solo que su sonrisa la noté vacía.
–Nadie se negaría a salir contigo –Apretó sus labios –Así que tienes suerte, bonito.
–Quizás eso no sea tan cierto –Me acerqué.
Nuestras miradas se cruzaron y podía observar como su pecho subía y bajaba a causa de su respiración. Podía oír el sonido de las hojas moviéndose al unísono del viento, y nosotros en completo silencio.
–La persona que me gusta ya tiene a alguien.
Y se llamaba Hoseok.
–Ya veo… –Me miró entristecido.
Al menos intentaba ponerse en mi lugar. Y adoraba eso de él.
–Puedes esperar a que corte con esa persona –Se rió intentando ser optimista.
–No lo creo… Se ve que ya tienen tiempo saliendo.
–¿Quién es?
Eso aún tenía que permanecer en secreto para el involucrado.
–Lo conoces.
–¿En serio? Espera… –Analizó mis palabras –¿Lo?
Ni siquiera yo me había percatado. Yo solo me había quemado.
–Sé quien es… –Se mordió un labio –Pero… –Lo estaba pensando –Quizás él corte con aquella persona porque a mi parecer, aún no olvida a su ex.
Nuevamente no lo comprendía. ¿A quién se refería?
–Perdona, pero ¿Quién crees que es?
–Te gusta Taehyung, ¿No?
Espera… ¿Por qué cree que es Taehyung quien me gusta? ¿y cómo sabe que aún no olvida a su ex? Es más, ¿qué ex?
–No es él…
–Entonces Jungkook –Abrió los ojos como platos.
Mierda no… Es un niño. No soy un asaltacunas.
–¿Te gusta Jungkook? –Dijo una voz que reconocía.
Ambos volteamos a ver a la persona parada y nos paramos. Me sacudí el pasto que tenía en el cabello intentando procesar sus palabras.
–Tae… –Mencionó Namjoon.
Yo no pude contestar así que me quedé callada intentando procesar las palabras.
–Es mejor de esa manera –Sonrío nostálgicamente –Tú si podrás hacerlo feliz.
¿Qué carajos?
–Jungkook me pidió te entregara esto –Estiró la mano donde traía un recetario.
Previamente había platicado con Kookie por Kakao porque tenía ganas de aprender algo nuevo y él amablemente me ofreció el recetario nuevo que su papá había comprado.
Era algo común entre nosotros, incluso a veces iba a mi casa a cocinar conmigo por gusto pero que le daba pena mostrarlo con los demás porque su personalidad era más “ruda”. Algo que solamente Tae y yo sabíamos, aunque nunca nos acompañara en nuestras actividades.
–Gracias Tae pero… –Y me interrumpió.
–A decir ver tú lo mereces más que yo –Bajo la mirada –Tú si podrías amarlo.
Mi cabeza hizo corto-circuito así que no encontraba una forma de negarse coherentemente.
–Igual yo te apoyo amigo –Genial, he sido friendzoneado en sólo unos minutos.
–Es que… –Tae ya se estaba yendo del lugar aún más cabizbajo que antes y Namjoon ya no me estaba haciendo caso.
Nam miraba su celular atentamente antes de levantarse despavorido.
–Mi clase de Electricidad Y Magnetismo –Brincó en el pasto –Lo siento Jinnie, luego hablamos, que se me hace tarde y el profesor no me dejará pasar –Dijo antes de salir corriendo.
Así que ahora tenía una idea errónea.