Pensé que había escuchado mal pero cuando vi su mirada de espanto o asombro, no sé muy bien cual de las dos era sentí que en realidad si había dicho eso.
Me levanté del pasto un poco avergonzado porque nunca nadie me había dicho esas cosas cuando hablaba de manera tan ¿Profunda?.
Normalmente recibía patadas o me callaban porque les aburría. Así que no me esperaba que un chico como Jin dijera que mis palabras eran un arma de seducción. Aunque, me gustaba pensar que era del tipo exagerado por lo que decidí dejarlo pasar.
–Gracias.
Es que tenía que agradecerle ¿No?.
–Siempre he pensado que las palabras seducen tanto como las acciones, pero son incluso más exquisitas cuando están en un libro. Es difícil de explicarlo, pero no hablo de palabras comunes sino de esas que te embriagan con solo su belleza. Algo con un toque poético, ¿Me explico?.
Jin me miraba asombrado, pero vamos, simplemente estaba exponiendo mis pensamientos. Algo que no hacía muy seguido pero al chico no parecía importarle, cosa que me hacía sentir a gusto.
–Tienes una forma de expresarte tan única –Se sonrojó –Me gusta –Cerró los ojos sonriendo.
Demonios… Si fuera chica me enamoraba de él. Ojalá existieran chicas con su personalidad, alguien que me escuchara como él lo estaba haciendo en esos momentos.
Una voz interrumpió nuestro momento. Sí, porque era un buen momento donde una bella amistad resurgía inesperadamente.
–Nam… –Mencionó la voz.
Miré el rostro de la persona pero la luz del crepúsculo me deslumbraba, aunque yo era un chico que sabía identificar aquella voz a la perfección.
–Dime Sohye –Contesté.
Se sentó en el pasto haciendo que me tuviera que inclinar para verla. Jin también lo hizo, cosa que Sohye notó al instante al verlo.
–¿¡Jin!? –Se sonrojó –¿Cómo es que tú y él?.
Nos miró a ambos y Jin se movió incómodo ante su presencia.
–¿Qué pasa Sohye? –Interrumpí su momento.
En serio no tenía ganas de verla en esos momentos.
–Quería disculparme por lo que dije –Se sentó de lado y puso el celular entre sus piernas –Creo que me pase con las palabras y bueno… –Dudó al mirarlo –Eres importante para mí.
Me tragué mi enojo y asentí. Era de las pocas amigas que tenía después de haberme cerrado tanto al mundo, así que no la perdería por un berrinche absurdo y un comentario estúpido de su parte.
–Sí.. Gracias –Suspiré.
–Los dejo solos… Nam te veo luego –Miró con el rostro agachado –Y quiero que sepas... Olvídalo –Sonrió un tanto decepcionada.
A veces no la entendía.
Una semana después, todos nos encontrábamos comiendo en la plaza. Solo que esta vez Jun nos presentó por primera vez al chico castaño del que hablaba la última vez. Taehyung era un hobae de la Universidad y aún estaba en sus primeros años.
Mi amigo y él supieron disimular la tensión que había entre ellos así que ninguno se percató que ya se conocían, claro, todos menos yo porque era su amigo y ya lo conocía demasiado como para saber que estaba fingiendo.
Jun lo había descrito muy bien, era bastante hiperactivo y hacia muchas bromas por ahí. Todos nos reíamos sin excepción, incluso Hoseok o lo fingía muy bien para mi gusto. Yoongi era un tanto serio pero sonreía, al menos lo hacía.
Después me di cuenta… Jin observaba mucho a Jun. Yoongi también lo sabía, así que de repente le echaba miradas furiosas a Jin y ella respondía con un pequeño manotazo en su pierna antes de seguir la conversación.
–Hola chicos –Sonrió apenada Sohye.
Hoseok y yo la presentamos. Era una amiga nuestra, además los demás tenían curiosidad por conocerla. Ella instintivamente se sentó en medio de Hobi y de mí, porque solía ser un poco reacia con los extraños. Y bueno… ellos no eran tan extraños para ella, porque cuando la vieron dieron la impresión de que la conocían.
Noté la tensión entre Jun y Sohye pero ninguna dijo nada al respecto. Y Taehyung al parecer desconocía de su existencia, aunque este no parecía ser el caso de Yoongi quien no mostraba interés con su presencia.
¿Es que todos se conocían menos yo?
Al poco rato llegó un chico pelinegro que se llamaba Jungkook que nos sorprendió porque llegó a besar al pequeño castaño a su lado en los labios a modo de saludo. Y se presentó como su pareja, cosa que me sorprendió a mí y a Sohye, pero a Hoseok pareció inmutarle (o más bien aparentaba).
Cuando no pudo más se levantó con la excusa de ir al baño, a lo que yo lo acompañé cuando sentí como Sohye me tomaba de la mano. Con su rostro me decía que no la dejara sola pero tenía que ir con él, cosa que comprendió con una cara llena de decepción y media molesta.
–Hoseok, ¿Qué sucede?.
El se recargó en la pared fuera del baño. Una mamá con su hijo salieron y simplemente nos observaron con asco, homofóbicos.
–Me sucede Taehyung.
–¿Quieres contarme?
–Es mi ex –Abrí mis ojos totalmente sorprendido.
No entendía la historia y justo cuando él parecía que me iba a resolver todas mis dudas, veo la presencia del castaño antes mencionado a unos metros de nosotros.
Lo miré a él y luego mire a Taehyung. ¿Qué debía hacer? ¿Dejarlos solos o llevarme a mi amigo con él?
–Hoseok-hyung –Se mordió los labios.
–¿Qué necesitas, niño? –Lo miró Hoseok jugando con su lengua un poco molesto.
–Debería dejarlos solos –Susurré en su oído.
Él me miró enojado pero intenté darle a entender que quizás era lo mejor para ambos. Taehyung se acercó temerosamente hacia nosotros y yo camine hacia su dirección cuando siento que Hoseok me toma de la mano antes de alejarme lo suficiente.
Volteé a verlo y él simplemente me jaló con las manos todavía juntas, dejándolo de esta manera solo y triste cuando ambos cruzaron la mirada antes de que ambos nos alejáramos.
Dos cosas: Mi mejor amigo era gay y nunca me lo había dicho. No sabía si molestarme con él o dejarlo pasar… Además, ¿Quién era Taehyung y por qué parecía tan molesto con su presencia?
Regresamos a la mesa después de haberlo dejado, él chico aún no regresaba, seguramente para fingir que en realidad había ido al baño. Cuando nos sentamos, Sohye nos miró evidentemente molesta por haberla dejado sola tanto rato.
Miré a Jin de reojo, seguía con la mirada perdida por todo lo que Jun platicaba. Realmente estaba enamorado de ella y algo dentro de mí se sentía raro. ¿Por qué?
Durante los últimos había estado encontrándome con Jin en mis ratos libres porque casualmente coincidíamos con horas libres y no podía negarlo, su presencia me gustaba mucho. Sin embargo ver que no apartaba la vista de Jun hacía que me sintiera incómodo y no alcanzaba a entender el porque.
Cuando sonreía, me gustaba ver como en los ojos se le formaban pequeñas arrugas y cuando reía el sonido que provocaba me parecía muy mono. Su expresiones a la hora de comer y cuando levantaba la voz para reclamar algo hacían que yo lo estuviera buscando con la mirada constantemente.
–Ey tú, pareces tan distraído –Mencionó Jun mirándome acusatoriamente.
–¿Eh? –Volví a la realidad.
En algún momento me perdí en mi pequeño mundo y aunque no me lo esperaba, dentro de mis pensamientos Seokjin aparecía constantemente.
–Pareces enamorado.
*Maybe, pensé automáticamente sorprendiéndome a mí mismo. Y aunque no dije nada, por alguna extraña razón sonreí mostrando mis hoyuelos.
Momento erróneo porque Taehyung se me quedó mirando extraño. No me digas que había malinterpretado…