Naruto despertó con los griteríos de sus progenitores ocasionando le un gran dolor de cabeza, todos los recuerdos infame del día anterior volvieron a su mente como un remolino.
Como era domingo hoy no tenía que trabajar, así que, se vistió torpemente y salió de su recámara. Ya no se escuchaba las voces que lo despertaron. Fue al cuarto de, Deidara, al entrar sólo vio un gran desastre, el closet abierto y mucha ropa revuelta sobre la cama... Pero no había nadie. Asustado fue hasta la cocina y ahí encontró lo que tanto temía una nota de su madre escrito con letras grandes.
Naruto:
Fuimos la capital a dejar a Deidara con la tía Konan. Regresamos mañana por la noche. Muchos besitos. -¿Muchos besitos? ¿Qué les pasa a mis padres? Están locos.
Su teléfono volvió a sonar el número era desconocido dudo unos segundo. Pero contestado con inseguridad.
-¿Si?
-Mi Kisune ¿Ya te cayó el veinte? ¿A qué hora nos vemos?
Naruto colgó inmediatamente al escucho esa voz que malos recuerdos le traía.
Fue rápidamente hasta su habitación para darse una ducha, se vistió con rapidez, tomó la hoja en la que había notado la dirección de la oficina de Uchiha Sasuke y salió de su casa. Condujo el auto sin poder evitar un delirio de persecución. Al fin, llegó al domicilio y bajo del coche fingiendo seguridad ante la suposición de que ya Yahiko lo observaba. Nervioso, preguntó por Uchiha Sasuke al recepcionista. Un joven de sonrisa franca y belleza notable.
-¿Quién lo busca?
-Su amigo Kyubi Naruto.
-¿Eres su amigo de verdad?
-No puedo mentirte. En realidad soy un radioescucha que necesita consejos Por favor. Es muy importante.
-El licenciado Sasuke no ha llegado aún ¿Gusta esperarlo?
-Si- Un momento yo te conozco, acaso te llamas Kiba.
-Sí, y tú... Un momento no eres Naruto-
-Siii ha pasado mucho tiempo.
En unos minutos empezaron a recordar los viejos tiempos y Naruto se abrió con su viejo amigo. Le platicó sobre el drama de su familia, la enigmática visita a la casa de Sasori y el peligro de que Yahiko, un ex-convicto, hubiera aparecido de nuevo y que estuviera acosándolo.
-En cuanto llegue Sasuke le diré que debe recibirte, Naruto por que no vienes a sus seccione hoy fue la primera. Termino como hace una hora no debe tardar en llegar.
-¿Y tú crees que yo podría escribirme todavía al curso?
-Sí, si tú quieres, faltan siete sesiones. Mira este es el material que están estudiando.
-Por supuesto quiero participar en el curso.
kiba le pidió que llenara una solicitud de inscripción. Minutos después llegó a la oficina un hombre serio. Vestido con excesiva pulcridad.
-Hola Kiba.
-¿Cómo le fue?
-De maravilla.
-Licenciado, le presentó Kyubi Naruto; es mi amigo de infancia; desea hablar con usted. Necesita ayuda personal.
-Hola, Kyubi Naruto- Dijo Sasuke dando en la mano -Por favor pasa a mi oficina.
Naruto camino con aparente seguridad.
-Toma asiento-
-Gracias...- Sobre el escritorio de Sasuke estaba la fotografía de un joven. Naruto había visto ese imagen en Internet era el hermano de Sasuke fallecido años atrás.
-Uchiha Sai- Dijo Naruto -Era un doncel extremadamente bello.
Sasuke al escuchar ese nombre salir de esa boquita pequeña, se queso en shock -¿Cómo sabes...?
-Vi tu portal... De hecho he estado leyendo tus cartas privadas...
-¿Ah, sí?- Sasuke carraspeo -¿Cómo supiste mi contraseña para entrar a la sección personal de mi página?-
-Tú la dijiste ayer por la radio.
-¿Es eso cierto?
-¿Por qué querría mentirte?
Sasuke se giró para encender su computadora, después de unos segundos entró a su página web murmurando: -Esa sección la usó como un fichero de documentos personales... Está oculto. Nadie a entra en ella... Pero tengo un contador automático que me permitiría saber si alguna persona distinta a mí ha ingresado. Siempre ha estado en ceros... Aquí está- Giro el Monitor, el cuadrito negro con números blancos tenía tres cifras “001” -Ahora es diferente...
-No soy hacker, solo analicé los gráficos...
-Y de cifraste el acceso...
-Sí... En realidad si quieres hacerlo privado deberías poner más filtros de seguridad. Yo sólo...
-Tranquilo... No me molesta... Pero me asombré y me agrada. Esto nos convierte... En una clase de amigos especiales... Así que puedes... Nos podemos tratar por nuestros nombres, claro si tu estas de acuerdo.
Naruto apretó los labios para evitar todo rasgo de sonrisa triunfal... El corazón le latía a gran velocidad.
-Sí...
-kiba dijo que necesitabas un consejo. ¿En qué puedo ayudarte?
-Es... Complicado.
-Te escucho.
-Bueno en realidad... sólo quería conocerte en persona...- Se detuvo, -Mejor hablamos otro día... o mejor... ¿Puedo escribirte un e-mail?
-Claro.
Sasuke sacó su tarjeta de y anoto algo en el adverso -Esta es mi cuenta privada... Sólo se la doy a quienes entran a la sección secreta de mi página. Escríbeme cuando quieras-
-Gracias, Sasuke...
-Pero, si ya estás aquí, ¿Por qué no haces un esfuerzo y me dices lo que te pasa?
CONTINUARA...