19 junio, Hora de comer:
Manny se despertó asustado por las voces de Harry y de Robin que lo llamaban.
-¡Aquí estoy!-Gritó, feliz de haber despertado y poder ver a su familia de nuevo.
-Manny, al fin, te hemos buscado toda la tarde, nos tenías muy preocupados- Dijo Harry, trepando al árbol para bajar a Manny.
-Disculpa por haberte molestado, pero mira, ¡te guardamos el ultimo huevo cocido!- dijo felizmente Robin, a pesar de que seguía hambriento después del picnic de pollo.
-Oh, gracias, pero no tengo hambre, ¿puedes comerlo tú?- dijo Manny
-¡No lo digas dos veces!- respondió Robin para después zamparse el huevo.
-Entonces… ¿estaban buscándome?-preguntó Manny, todavía no se acostumbraba a que su nueva familia se preocupara tanto por él, su padre jamás habría ido a buscarlo.
-¡Claro que sí! Eres nuestra familia ahora y además, supongo que es porque nosotros te….amamos.-un poco avergonzado, Harry dejó a Manny en el suelo.
-Gracias chicos- dijo Manny mientras Robin y Harry lo abrazaban y reían.
19 de junio, hora de jugar:
-¿Bueno, que más pasaba en tu sueño?- Robin parecía muy interesado por el “sueño” de Manny
-Ya te lo dije, no creo que haya sido un sueño, no recuerdo haber subido al árbol- Manny no entendía que había pasado, cuando buscaba entre sus recuerdos, lo único que veía era a esa mariposa convirtiéndose en un humano y acercándose cada vez más, esas imágenes se desdibujaban y se mezclaban con recuerdos de su padre, cerca de él, tan cerca….
-Robin, déjalo en paz- Harry tomo una carta del juego y la leyó: ¿Qué es lo más grande en el mundo?
Aunque no quería admitirlo, le preocupaba Manny y no quería que este pensara ni recordara ni soñara con las cosas que habían pasado antes; para algo lo había alejado de Roy, ¿cierto?
Harry estaba a punto de encender la vieja computadora de Robin, pero se lo pensó mejor y regresó a su silla.
-Definitivamente, lo más grande de este mundo es…mi amor por ustedes, chicos- Robin se burló un poco y Manny se sonrojo ante la respuesta de su amigo. Harry nunca había sido lo que se pudiera decir sentimental, pero desde la llegada de Manny a sus vidas, él y Robin habían pasado de ser mejores amigos a transformarse en una familia, para cuidar de Manny.
Por su parte, Manny no podía estar más feliz, tenía un hogar, comida rica y un par de amigos geniales, una familia, su vida no se parecía nada a su pasado con su padre, en esa horrible casa donde pasaban tantas cosas malas.
Robin estaba bien, tenía a su mejor amigo y a un niño adorable con él, la soledad se había acabado para los tres y sus vidas poco a poco remplazaban sus recuerdos de dolor.
19 de junio, hora de dormir:
-¡No puedo creerlo! Es totalmente irrazonable, ¿cómo puedes siquiera haberlo pensado?- Robin alzaba cada vez más la voz
-Robin…
-Eres un estúpido, ¡no quiero ni seguir respirando junto a ti!
-Robin, Manny ésta durmiendo, por favor…-Harry alejaba cada vez más a Robin del cuarto que los tres compartían y donde Manny yacía en su cama, durmiendo tranquilamente.
-¡Como si te importara, no quieres que se despierte pero dices cosas como esas!, ¡Pedófilo!, asqueroso pedazo de….
-¡¡¡Robin, cállate de una vez!!!- Robin se calló y se dedicó a fulminar a su amigo con la mirada, cuando volvió a hablar, lo hizo con una voz serena, pero impaciente.
-Harry…
-Robin…
Ninguno quería empezar a hablar, no fuera a ser que la pelea comenzara de nuevo.
Finalmente, Harry consiguió ordenar sus ideas y hablo:
-Okey, sé que suena mal, sé que no se ve normal y que en muchos sentidos es horrible, pero tienes que entenderme, lo amo…
-Harry, sé que estas confundido y que desde que Manny llego todo ha cambiado para nosotros, pero no pienso permitir que te acerques a él con esas intenciones, ¿entendiste Harry?
-Robin, no quiero ofenderte, pero ya estoy mayorcito para que tomes mis decisiones-¿Cómo se atrevía ese viejo a retarlo así?
-¿Y qué piensas hacer, eh?
-Bueno, yo….
-Silencio, no quiero escucharte, solo piénsalo, ¿cómo un niño tan pequeño podría comprender esto?
-No es tan pequeño, pronto cumplirá 8….
-¡Y tu pronto cumplirás 20, idiota!
-¿Y qué?
-¿Te estas escuchando a ti mismo?
-En realidad, ¡no puedo ni siquiera escuchar mis pensamientos a causa de tus gritos!
-No estaría gritando si tú no…. en serio eres estúpido…….mira, ¿qué quieres con él, no te parece suficiente ser tutor?, somos una familia, los tres, ¿recuerdas? Nuestro deber es cuidarlo y evitar que vuelva con Roy, ¡no hacerle pasar por lo mismo!
-Lo sé
-¿Por qué le harías eso a un niño?
-Porque….
-¿Cómo puedes siquiera pensarlo, no ves que eso te volvería igual a Shrignold?, igual a….
-¡No lo digas!
-Piénsalo, si lo haces, ¿qué te diferenciaría de Roy?
-¡¡¡CALLATE!!! , TU NO LO ENTIENDES, ESTO ES DIFERENTE.
-¡NO, NO LO ES!
-¡SÍ QUE LO ES!
-¡¿¡¿¡Chicos!?!?!
-¿¡¿¡¿Manny?!?!?
Sus gritos habían despertado al pequeño y este, sin comprender lo que pasaba, los había ido a buscar.