Alzó su mano posicionándola frente a la madera color caoba, y golpeó suavemente sus nudillos contra esta, esperó una respuesta del otro lado pero lo único que recibió fue silencio, repitió la acción una vez más, un poco más fuerte que la anterior.
— ¡Mama, ya te dije que no bajaré a esa maldita reunión! — Replicó una voz grave dentro de la habitación.
Tomo el pomo de la puerta entre sus delgados dedos y lo giró suavemente adentrándose de apoco en la habitación y cerrándola cuando esta dentro.
— ¡Mama, te he dich...! — Asombro y confusión son lo que puede distinguir en la cara del chico sentado en su cama con apenas un bóxer cubriendo sus partes nobles, su aspecto estaba descuidado, tenía los ojos hinchados y rojos, los labios resecos y partidos y por lo que pudo vislumbrar entra la oscuridad la habitación parece que había sido barrida por una bola demoledora.— ¿Qué haces aquí, BaekHyun?.
Era comprensible su forma de mirarlo, nunca fueron cercanos, aunque se criaron casi juntos, viéndose en reuniones, cenas, vacaciones y demás. Sus eran cercanos, pero ellos nunca lograron serlo, se saludaban e intercambiaban algunas palabras en pocas ocasiones, pero nada más. No porque les desagradara el contrario, sino porque BaekHyun era demasiado tímido y ChanYeol siempre se veía serio.
Sin embargo, algo dentro de suyo lo impulso a escabullirse escaleras arriba frente a la puerta luego de escuchar un poco la historia de lo que pasó con la exnovia del hijo de los socios de sus padres, ni el mismo comprendía que hacia allí, pero ya no había vuelta atrás.
— Hablar.
— ¿Hablar? — BaekHyun se encoge de hombros. — Si mis padres te enviaron puedes salir justo por donde entraste.
Niega mientras una sonrisa de labios cerrados alza sus comisuras,se acerca un poco vacilante y se sienta en el bordo del final de la cama.
— Nadie me envió,vine porque...ni siquiera yo mismo se por qué lo hice, solo estoy aquí —Terminó encogiéndose nuevamente de hombros, fijándose en el ceño fruncido ChanYeol,lo que hizo que su sonrisa se ampliara.El alto lo mira con desconfianza.
— ¿Hablar de qué?.
—De cualquier cosa.
— ¿Por qué?
— Porque si.
— ¿Qué clase de respuesta es esa?
— Una corta — Unos segundos después el sonido de una pequeña risa ronca se extiende por la habitación.
—Touché. — Aceptó,ChanYeol. —¿Por qué ahora?.
— ¿eh?
— ¿Por qué me hablas ahora y no antes? si no mal lo recuerdo, siempre huías de mi o respondías con monosílabas cuando te hablaba.
—La verdad no tengo idea del por qué ahora lo hice,pero en cuanto a antes mi defensa tu siempre estabas serio,y yo soy lo suficientemente tímido como para acercarme.-Se defendió,BaekHyun. El mas alto de ambos se recostó en el cabezal de la cama llevándose las sabanas consigo.
—Yo no soy serio,solo que esas reuniones nunca han sido mis favoritas,ademas por como te comportabas parecía mas que no te agradaba.
— Entonces, comencemos de nuevo. — El alto lo miro confundido,y el bajo se acercó hasta estar en el centro de la cama sentado en modo indio. — Soy Byun BaekHyun. — Extendió su mano con una sonrisa.
— Park Chanyeol. — Estrechando la mano frente suyo dándose cuenta de lo suave y tersa que era,y también de lo frágil que se veía entre la suya.
—Ahora,hay que conocernos.
—¿Cómo?
—Hablando. — Se miraron fijamente y luego se soltaron a reír a carcajadas, sin importar nada, disfrutando el momento.
Poco a poco las risas fueron disminuyendo, hasta que se camuflaron en el silencioso ambiente de la habitación.
— Comencemos con preguntas básicas ¿te parece?— Propuso, BaekHyun. ChanYeol asintió con una sonrisa una que no había sido pintada en sus comisuras hace mucho tiempo.— Comienzas tú.
— Ohm, ¿Qué edad tienes, BaekHyun?.
— diecisiete.
— Así que soy tu hyung.—Agregó ChanYeol algo asombrado.
— ¿Cuántos tienes tú, ChanYeol hyung?— Preguntó con algo de retintín la última parte.
— veintiuno. ¿Estudias algo?
— Sigo en el instituto.
— ¿Que tal eso?
— ¿Eh?
— ¿Amigo? ¿Compañeras pretendientes? ¿promedio, bueno, malo, regular, promedio? ¿Popular, regular?...
— Wou, wou, wou, para el caballo vaquero. — Algo abrumado por la cantidad de preguntas.
— Como dijiste, hay que conocernos— Le imitó un poco burlón.
— Bien. No tengo amigos allí, soy bastante tímido y un poco retraído, además gran parte de los que se acercan a mi es por el hijo de quien soy, mis amigos se limitan a un barista de una cafetería algo popular en el centro de la ciudad llamado XiuMin y mi vecino KyungSoo. En realidad no tengo pretendientes, recalco nuevamente que soy demasiado tímido y aunque no fuera así no serían exactamente mi tipo. —Se encogió de hombros — mmm...mi promedio es el mas alto de la clase y soy casi asocial allí.
— Interesante... aunque no entendí eso de no serian exactamente mi tipo.— BaekHyun dejó salir una risita.
— Yo que pensé que lo captarías. Bueno, no sería exactamente mi tipo porque no me gustas las chicas.
— ¿Eh?
— Hombre. —Suspiró cansado. — No me gustan los pechos, ni las vaginas, y por ende no me gustan las mujeres, ¿por qué? porque me gustan los hombres, por Dios. —Se tiró de espalda exhausto como quien ha hecho la más cansadora de las tareas.
ChanYeol se quedó en blanco por un momento, la verdad no le molestaba los gustos del chico frente a él, era fiel creyente de que si amas a una persona no importa ni el sexo, ni la situación, no importa nada.
— ¿Cómo descubriste que tenías preferencia por los hombres?
De un momento a otro BaekHyun se puso de un color escarlata cubriendo su rostro con ambas manos al recordar aquella experiencia, totalmente vergonzosa.
— Es muy vergonzoso, no puedo.
— Vamos, no me burlaré.
— Bueno...
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El resto de la noche fue transcurriendo entre anécdotas de parte de ambos, risas y preguntas. Conociéndose. ChanYeol estaba asombrado por el hermoso carisma y personalidad que se encontraba de bajo de la mascara de timidez de BaekHyun, era una persona graciosa y risueña. Le había sacado más de una sonrisa, una que pensó que jamás volvería a hacer aparición en su cara desde el incidente con Sandara y el cara de rata, mejor conocido como KyuHyun. Había descubierto varias cosas de él, como que le gusta leer, las películas de terror no son sus preferidas ya que es demasiado asustadizo, le gustaba la repostería y cocinar no se le daba tan mal, le gustaban mucho los gatos, se veía tierno sonrojándose y cuando hacia pucheros su cara se asemejaba a la de un cachorro.
Para lástima de ambos en algún momento de la madrugada la puerta de ChanYeol fue golpeada, y después de unas palabras de este reveló los rostros de su madre y la de BaekHyun buscándolo, ya que había desaparecido del primer piso sin ningún aviso,además de decirle que ya era hora de irse, para luego cerrarla mientras se lanzaban miraditas cómplices para nada discretas.
Se miraron por un momento antes de que BaekHyun se acercara y abrazara a ChanYeol,tomándolo por sorpresa,pero no le tomo mucho tiempo asimilar la situación y devolverle el gesto apresando su cintura y acercándolo un poco mas, tal vez porque necesitaba uno, tal vez porque BaekHyun desprendía calidez, o porque simplemente quería y se sentía bien.
— Cuando la vida te da mil razones para llorar, demuéstrale que tienes mil y una para sonreír. — Citó en su oído dejando caer su aliento caliente en su oreja y parte de su cuello, removiendo algo dentro suyo. — Recuerdálo, Channie. Tienes una sonrisa hermosa, no dejes que nada haga que desaparezca.
Y con eso salió de la habitación cerrando la puerta detrás suyo, dejando a un pensativo Chanyeol reflexionando sus palabras con la almohada.