Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Viviendo con el enemigo por Yusei156

[Reviews - 217]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola! Una disculpa, esperaba actualizar más temprano pero en este momento solo tengo mi celular y los datos para hacerlo pero procuraré traer a tiempo el del miércoles y el domingo, espero les guste el capítulo, nos leemos abajo.

Aquel aroma, aquella figura, todo parecía perfecto, estaba muy cómodo poniendo sus brazos en aquel cuerpo. Sirius apenas comenzaba a despertar, el brillo del sol en la mañana apenas y atravesaba las gruesas cortinas. Dentro de las cobijas era cálido, tan cálido que comenzaba a acomodar su cabeza en los hombros de su compañía.

 

Comenzó a olfatear ligeramente su cabello, le gustaba su aroma, poco a poco fue repasando con sus manos la tela que cubría aquella piel cálida. Le gustaba sentir ese cuerpo bajo sus manos, poco a poco fue bajando para seguir con el recorrido, sabía que no debía de hacerlo.

 

Abrió lentamente los ojos para verificar que Snape todavía estuviera dormido, lo último que quería era que lo atrapará infraganti así que cuando lo confirmó siguió con su recorrido. Comenzó a mover una de sus manos en los glúteos, le gustaba tocarlos, eran firmes y suaves, quería morderlos, pero estaba lo bastante despierto como para darse cuenta de que era mala idea.

 

La otra mano la metió por debajo de la pijama para acariciar su torso, era suave, tenía algunas cicatrices que por el tacto se sentían viejas, pero eso poco le importó, le gustaba mucho el peligro que representaba tocar aquel cuerpo. Era una tentación por la que no debía caer, lo sabía y aún así se encontraba allí, acariciándolo, comenzaba a marcar un ritmo entre sus caricias.

 

-Ah… ummm- Se desprendió el sonido de la boca de Severus, comenzaba a reaccionar inconscientemente a las caricias.

 

-¿Tienes un sueño húmedo conmigo amor?- De inmediato se dio cuenta de lo imbécil que había sido al preguntar, detuvo de inmediato sus movimientos, una cosa era correr el riesgo de disfrutarlo mientras Snape dormía y otra muy diferente era despertarlo para que este tuviera una razón más para castrarlo, justo cuando recién había intentado dar el paso rumbo a  la amistad.

 

Sin embargo no fue suficiente, una vez se dio cuenta que este seguía dormido continuó con su trabajo, debía de admitir que actualmente se encontraba más despierto que nada. Había caído bajo el encanto del Slytherin, se había dado cuenta de eso cuando lo vio casi desnudo en el baño y amanecer con el de ese modo solo se lo confirmaba.

 

Por más que odiara admitirlo si le dieran veritaserum terminaría diciendo lo mucho que disfrutaba de tocar aquel cuerpo en la mañana, que si bien era cierto que Snape no era la persona más atractiva con la que estaba saliendo nadie lo había dejado encantado con tan poco. Antes de cometer alguna estupidez se levantó con cuidado de la cama, esperaba que no se le presentara otra oportunidad así. Tomo un baño y se arregló antes de salir, ese sería un día largo.

 

oOo

 

Cuando recibes una invitación para una comida en casa de los Black lo mínimo que debes esperar es encontrar a todo sangre pura de londres, la mayoría eran idealistas. Querían que solo dominaran los magos alfas, a los Beta los respetaban claro aunque con los omega era otro asunto. En general cuando un alfa se casaba con un omega era porque se trataba de un sangre pura, una joya realmente rara. Aún así esos matrimonios eran escasos, se buscaba que el sucesor fuera respetado y temido pero por demás poderoso.

 

Es por ello que cuando se habían enterado que el mago más poderoso del mundo mágico era un Omega el mundo comenzaba a temblar de nuevo, este hombre era elitista y era firme creyente de la supremacia de la sangre pura. Sus ideales habían logrado enquistarse en las más grandes familias sangre pura de todo Londres, con algunas excepciones.

 

Cosa que lo ponía nervioso, ya que Gideon Prewett estaba consciente de que sus ideas no eran del agrado de los señores Black. Por eso no entendía porque lo habían elegido para que se casara con su hijo, tal vez fuera porque era un alfa sangre pura y eso era todo lo que les interesaba a padres así. Algo en su interior quería gritarle que no asistiera a aquella gala, comer con un montón de gente desagradable sólo por un compromiso que aún no estaba confirmado era demasiado problema.

 

Y quizá allí es donde se encontraba su respuesta. Ciertamente era demasiado problema pasar una tarde de elegante frivolidad pero cada que veía la foto del joven Black con el que podría desposarse las cosas cambiaban, estaba rendido ante esos ojos, ese cabello, y claro, aquel bello rostro. Casi tenía seguro que al conocerlo en persona se enamoraría instantáneamente.

 

-¿Sigues mirándote al espejo? Falta una hora y no estás listo, mejor deberíamos faltar e ir a visitar a nuestros sobrinos- Comentó un hombre idéntico a él en el marco de la puerta. Era su hermano gemelo Fabián.

 

-¿Y perderme la oportunidad de conocer a mi ángel? ¡Debes estar bromeando!- la sonrisa de felicidad que tenía en el rostro no podía compararse con ninguna otra, estaba nervioso casi tanto como las ganas que tenía de verlo y hablarle de una vez por todas.

 

-Dicen que se escapó y se casó- Aquello lo dijo casi como un susurro, sabía que su hermano estaba emocionado, pero también que aquel muchacho sería malo para él, pero no se atrevió a romper sus ilusiones.

 

-¿Dijiste algo?- Preguntó confundido pues casi podía jurar que había escuchado un sonido.

 

-Nada, mejor alístate que hoy no estaré para protegerte- Contesto provocando una sonrisa en el rostro de su hermano. Sabía que estaba mal mentirle pero era por su bien, no hacía mucho que había muerto su madre, le prometió antes de morir que se encargaría de cuidar bien de sus hermanos menores.

 

Por eso, por eso no quería verlo sufrir perteneciendo a una familia tan despreciable y anticuada, una familia en la cual corromperian su alma convirtiéndolo en un peón más en aquella guerra por una estúpida supremacía. Aún así no lo detuvo una hora después cuando lo vio vestido en su mejor smoking negro mientras se dirigía a la chimenea. Solo le deseo suerte mientras agitaba la mano. Si alguien tenía que desilusionarlo ese era Sirius, debía de escuchar de su boca que ahora estaba felizmente casado, debían romperle el corazón para que olvidara.

 

Gideon hizo su aparición en la recepción para ingresar a un gran salón de fiestas, el salón Orion I, que se encontraba en la casa de vacaciones de los Black muy bien escondido de los muggles curiosos además de tener una maravillosa vista de un lago. Era la primera vez que iba a aquel lugar, sabía que cuando había una fiesta en ese sitio solo significaba una cosa; Walburga celebraba su aniversario o daría una gran noticia.

 

Pronto fue escoltado por un elfo doméstico que no conocía, pero era increíblemente gruñón con todo aquel Beta que se paseaba por los pasillos. Eso le sorprendió un poco pues creía que sería un lugar lleno de Alfas y claro, Regulus el único Beta de la familia. Una vez llegado al salón comenzó a mezclarse. Esa no era una fiesta ordinaria, podía jurar que había al menos un Omega en ese sitio, y ninguno estaba marcado aún.

 

-¿Señor Prewett?- escucho la nerviosa voz de Remus Lupin, era imposible no reconocerlo ya que era buen amigo de sus padres.

 

-¡Remus! ¿Que te trae por aquí? Pensé que sería un ambiente más hostil- se acercó para susurrarle- Ya sabes, con eso de que se creen superiores por tener uno que otro alfa en la familia-

 

-En realidad vengo de compañía- Seguido de esto tomo una copa de las que estaban ofreciendo y comenzaron a caminar a algún lugar más privado, ese era un buen momento para ponerse al día.

 

-¿Quien es la persona afortunada que goza de tu compañía?- Preguntó una vez había comprobado que estaban en zona segura.

 

-Lucius Malfoy me invitó-contestó sin intentar ocultar su vergüenza. Cada que estaban juntos se sentía mareado, aturdido, como si el estar a su lado implicará perder el control sobre cualquier decisión, era muy diferente a lo que sentía por Sirius.

 

-¿Malfoy?- La mueca de espanto que se formó en el rostro no tenía precio- ¡Pero tú vales mucho más! No te enlaces a el si no estás completamente seguro de tu decisión, dentro de unos años te podrías arrepentir y los cachorros no van a tener la culpa.

 

-¡No es algo así!- Reaccionó nervioso, jamás pensó que tendría que explicárselo al pelirrojo. Llevaban años de conocerse y en todo ese tiempo siempre había actuado igual que un hermano mayor- Es solo una cita, al parecer se le olvidó su evento con los Black y por eso estoy aquí.

 

-Bien, pero si llega a propasarse contigo te aseguro que me las pagara caro-aquella amenaza no quedo solo en el aire. Remus estaba seguro de que lo haría si era necesario, aunque no lo pareciera por su carácter tranquilo y la bonita sonrisa que siempre tenía, Gideon era un auror excepcional.

 

Siguieron platicando animadamente mientras bebían, ya había pasado uno o dos años desde la última vez que pudieron convivir así, era como ver a dos viejos amigos ponerse al día. El pelirrojo le sonreía mientras lo miraba, parecía que lo estaba atesorando, que aquel momento que pasaban por muy simple que fuera le hacía feliz. ¿Como no serlo? Vio crecer al castaño, solo quería que fuera feliz aún si eso incluía que se quedara con un imbécil como Lucius.

 

-Por cierto, ¿eres amigo de Sirius? Podrías presentarmelo- Quería conocerlo y si se lo presentaba un amigo suyo en vez de su madre quizá la probabilidad de que le agradará sería mayor.

 

-¡Claro! Es un buen amigo mío y le he hablado de ti, apuesto a que le gustaría conocerte-

 

-En ese caso espero le hayas dicho maravillas sobre de mi, es importante tener una buena primera impresión-

 

-¡Vamos!

 

Sin pensarlo dos veces el castaño tomó su mano y comenzó a caminar mientras buscaba a Sirius, lo más probable era que su amigo estuviera buscando a Snape, ambos habían hecho el trato de cuidarlo durante toda la reunión y la última vez que lo había visto este estaba con Lucius, así que si encontraba a alguno de los dos daría con su amigo.

 

Comenzó a caminar hasta que por fin  pudo ver al pelinegro, claramente estaba en pánico. Un par de chicas lo tenían rodeado y al parecer le hacían preguntas incómodas. En otra ocasión sus respuestas habían mostrado no solo la seguridad que tenía, sino que no le importaba lo que pensaran los demás de él.

 

Difícil sobre todo cuando tenía que enfrentarse a Bellatrix Black, la odiosa prima de Sirius. Si bien él era un asco de persona ella no se quedaba atrás, incluso podía decir que era peor. Era tan descarada como su primo, aunque Narcisa no se quedaba atrás, resultaba ser igual de insulsa pero incluso era vacía y hacia todo lo que su hermana queria.

 

Ahora se veía rodeado por dos razones: se había casado con el heredero de una ancestral familia de sangre pura lo cual rompía la tradición de años, y además era un Slytherin casado con un Gryffindor. A su parecer estaba haciendo todo lo que era incorrecto en el mundo. En su mundo.

 

-¡Sn...Severus!- Gritó amigable Remus mientras se desplazaba con velocidad, sabía que no necesitaba de su protección pero también estaba seguro de que si el plan se echaba a perder porque no lo había ayudado cuando Sirius estaba ocupado, este se enojaria.

 

-Lupin- Lo pronunció como si no importará pero en realidad le tranquilizaba un poco el verlo- En ese caso me retiro, mi esposo debe de estar buscándome- Eso último lo dijo con el mayor descaro posible, si tenía que fingir que estaba felizmente casado para joderle el día a un par de alfas que disfrutaban de avergonzarlo así lo haría.

 

Caminaron un poco hasta que la mirada de Snape se cruzó con los ojos marrones brillante. Entonces parecía como si todo pasará rápido frente sus ojos. Como si fuera obra de magia había llegado Sirius básicamente corriendo a la escena, Remus los miraba extrañado ya que ambos tenían la mirada fija en Gideon, como si quisieran reconocerlo de algo.

 

-¿Es él?- pregunto Sirius muy serio.

 

-Si-

 

-¿Estas completamente seguro?-

 

-¿Acaso tú ya lo olvidaste?-


Una vez dicho esto sin siquiera dejarlo reaccionar el Black tomó del saco al otro Alfa, alejándolo de los invitados. Quería hablar con él, a solas.

Notas finales:

Lo sé, hay algunas dudas con respecto al capítulo y es que muchas cosas sucederán en esa fiesta. No solo está la aparición de los gemelos Prewett sino que también Tom aparecerá pronto y claro también Lucius otros personajes que ya tenía tiempo que no estaban presentes. Esperaré con ansias leer sus especulaciones jaja. Bonito inicio de semana.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).