-Acabo de abajarme del elevador, si el sonido que escuchaste es el del elevador, kami Madara si te estuviera engañando ni siquiera tendrá tiempo de contestarte, y menos aún seria lo suficiente mente tonto para no recordar que colocaste ese chip de rastreo en mi celular, ahora voy a tocar la puerta, no Madara, no me iré de fiesta con mi hermano, kami el es una buena persona y ahora está en una relación sana mama nos lo conto recuerdas.
-¡Madara!.-el rubio abrió la puerta porque escuchando lo mucho que Zetsu le prometía a Madara que no lo engañaría durante su estadía en Iwagakure era como su bienvenida, y bueno solo su amigo dándole una afirmación con la cabeza entro a su departamento para posterior mente terminar con la charla que mantenía con su prometido, porque si Madara y el podía decirse que ahora estaban en una relación plena donde el Uchiha mayor podía darse el gusto de llamar prometido a Zetsu y el peliverde, bueno el solo se limitaba a controlar los celos de su amado novio porque con anillo en mano aun así estaba el constante mal humor de él cuándo se alejaban y más aún si Zetsu visitaba a Deidara, kami que ya llevaban más de siete años con esta relación y ni así podía estar plenamente convencido de su amor.
-Lo sé, lo se amor soy ellos no yo.-y ahí estaba de nuevo la verdad lo escucho Deidara al momento de regresar a la cocina porque las galletas ya estaban listas y solo sacándolas del horno regreso para encontrarse a Zetsu fumándose un cigarrito en el balcón y sonriéndole no tardo el rubio en llegar a si lado porque bueno aunque solo tenía esta vez solo tres meses sin mirarlo, aun asi estaba la nostalgia de ya no tener tan cerca a su mejor amigo como en sus días de juventud.
-Lamento esto.
-Madara solo está nervioso por la boda, teme que lo deje plantado en el altar, kami como si eso fuera posible.
-En verdad no me creo que ustedes se casen, bueno si, ya son siete años y pareciera que solo fue ayer cuando te encontré de sorpresa follando con el tipo que te daba clases particulares.-y ambos rieron porque si pareciera que solo podían recordar la sorpresa de los tres y Madara pidiéndole disculpas era aún más gracioso.
-Siempre supe que estábamos destinados a estar juntos.
-Pensé que solo estaban destinados a follar.-y rio mas Deidara, porque si recordaba las palabras de su amigo y el cómo se planteaba que solo eso era, un acoston y el gusto de enamorar a un tipo mayor, bueno si lastima para el que se enamoró de ese tipo.
-El follar solo fue el comienzo, y bueno henos aquí siete años después a meses de casarnos.
-Estoy tan feliz por los dos, y es una lástima que Madara aun este molesto con migo.-y recargándose en el barandal del balcón Zetsu lo imito porque ahora mismo era una lástima recordar la realidad, y si solo Deidara hubiera tomado mejores decisiones en el pasado no estaría en la posición que ahora estaba, acorralado y sin salida.
-Madara solo no entiende el por qué no quieres verlo, el por qué intentas que no te visite, el quiere visitarte y tu evades sus visitas, sus llamadas, y entonces yo te visito y tú no te opones pero si lo haces cuando el intenta venir con migo.-y apagando el cigarrillos Zetsu tiro la colilla en el cesto de basura que Deidara ya tenía preparado para el, porque si Deidara se preparaba para sus momentos de vicio en el balcón.
-Es por eso que desconfía de ti, y me culpa.
-Madara siempre ha sido celoso, y no Deidara, no te culpa, pero amigo crees que es tonto para no darse cuenta del porque escondes a tu hijo, Madra no es idiota Deidara y desde el momento en que te negaste a mostrarlo después de su primer años el se puso a analizar cosas.
-Le conté mi historia.
-Joder Deidara, quien se creería una idiotez como que te acostaste con un tipo y te dejo embarazado solo meses después de que te marchaste de Konoha, tu no eres ningún chico fácil, y menos aún lo fuiste en el pasado.-y así había sido la historia que había contado, porque joder no había podido negar su vientre después de que alguien lo mirara y circulara la noticia de su embarazo, sus abuelos lo supieran, sus padres lo supieron y sus amigos ellos fueron los más sorprendidos cuando seis meses después había dado a luz a un bebe prematuro y con ojos azules que era lo único que había sacado a el.
-Siempre hay una primera vez, y en ese entonces me creía que sería lo mejor contarles, además mis padres le hallaron lógica cuando aquel tipo con el que salí me mando el mensaje para terminarme.
-Idioteces, que fingieras ese mensaje fue la gota que derramo el vaso y solo te hiciste más mentiroso, Deidara te largaste de Konoha embarazado, te escondiste de todos para ocultarlo y solo cuando lo notaron inventaste esa maldita historia, y entonces te creíste que todos seguiríamos tus mentiras salvo por el hecho que te olvidaste de un pequeño detalle.-y entonces las lágrimas aparecieron porque era verdad, todo lo que decía Zetsu era verdad.-Ese bebe llevaba los genes Uchiha, si tenía tus ojos pero no te pensaste que el crecería y su mata de pelo inexistente crecería a un negro puro, su piel es idéntica a la de él, y esa expresión de mierda que se carga nunca me imaginé que volvería a mirarla en ese niño, y entonces te pensaste ocultarlo y volviste a desaparecer, tus padres te buscaron por todo el mundo, yo te busque.
-Y que querías que hiciera.
-Que les contaras la verdad Deidara, amigo tardaron dos años en encontrarte y como te dije desde el principio nadie es tonto para no darse cuenta de lo evidente, ellos sabían que el niño era de Itachi.
-Y yo sé que aún me odian por lo que hice.
-Y no es para menos, tu necesitabas ayuda para hablar de lo que estaba pasando, de lo que paso en el pasado, y un año después se casó Naruto y ni siquiera tuviste el valor de presentarte en su boda con Sasuke, el te necesitaba para sentirse más valiente por su decisión y tu no lo apoyaste por el simple hecho de que tenías miedo de encontrarte de nuevo a Itachi, joder Deidara que Naruto tu hermano menor tubo más valor que tu cuando se escapó con Sasuke.
-El aún me odia.-y como olvidar las palabras de Naruto cuando el lo llamo, con cuanto rencor le dijo lo mucho que le había hecho falta y por su cobardía no había asistido a su boda después de que el y Sasuke se habían fugado a las ciudad del remolino para casarse y más aún cuando sus padres se negaron, y es que Sasuke en su momento había tenido que mudarse por motivos de un trabajo, y Naruto no queriéndose separar de el a pesar de que sus padre se negaron a dejarlo ir había decidido fugarse para casarse con Sasuke, y así marcharse con el sin ningún impedimento.-Pero aun así no le conto la verdad a Sasuke sobre Ichigo, nunca se lo ha dicho.
-Rin tampoco se lo dijo a Obito, ni siquiera yo se lo el dicho a Madra a pesar de sus preguntas.
-Y entonces seis años después me encuentro en este callejón sin salida, y que mis padres y tu me lo recuerden cada años que pasa e Ichigo crese mas no me hace las cosas fáciles.
-Lo serian si tuvieras el suficiente valor para buscar a Itachi y le contaras la verdad.-y más lagrimas caían al piso porque ahora mismo era como cada visita de Zetsu, como cada visita de sus padres, de Rin, de las personas que conocían su secreto y querían que reconociera su error.-Contarle que tiene un hijo, que supiste la verdad de lo que paso hace cinco años, y supiste en verdad que el no te engaño.
-Me va a odiar, no tenía ningún derecho de mantener esto como un secreto y solo no me importo que el no lo supiera, me pensaba, quería este bebe para mí solo y entonces le quite el derecho que le pertenecía.
-Pero ahora lo sabes, y amigo estas arrepentido.
-Él no lo vera así, Zetsu yo fui el unico que se equivocó, y lo sabía.-se limpió las lágrimas el rubio con su propia mano porque recordar la verdad era tan doloroso a estas alturas.-Estaba tan desesperado porque nadie me volviera a hacer llorar que no me importo ocultar esto de todo el mundo, necesitaba ayuda y no la busque en su momento, ahora es tarde y, y entonces como me justifico.
-Contándole ahora tu problema, dile que estas recibiendo esa ayuda que necesitaste en su momento, que lo lamentas, has que no se pierda más los momento que podría estar con su hijo, y más aun Deidara has que Ichigo no se pierda más la oportunidad de crecer con un padre a su lado, con toda su familia a su alrededor, porque amigo si te equivocaste con tu propia vida no hagas lo mismo con tu hijo.
-PAPA.-y entonces rápidamente se limpió una vez más las lágrimas porque resonando la puerta al momento que la abrieron escucho el rubio los rápidos pasos y los gritos que decían papa cada vez más cerca antes de mirar a su hijo sonriéndole, ese pequeño niño de 5 años que cada día lo llenaba de luz, que le recordaba porque daba todo de si para superarse cada día y más que nada le recordaba su pasado, ese pasado que había arruinado con mentiras y que sabía que cualquier día tendría que enfrentar para revelar todo lo malo que había hecho.
-O valla niño maleducado, y es que para mi no hay un hola.-y entonces sonriendo aquel niño de cabellos negros y cortos corrió hacia su tío porque había sido un largo tiempo sin mirarlo y que Zetsu regresara solo quería decir que un regalo traía con el.-En verdad que tu si sabes cómo ganarme mocoso, y entonces me extrañaste.
-Claro que si tío, papa solo me da verduras, y esta mañana el serial era de solo avena.-y entonces una mueca apareció en Zetsu porque ese niño era tan diferente a Itachi y a la vez tan igual físicamente, y es que bueno tiernamente Ichigo podía sacarle provecho a lo lindo que era y a lo que los genes Uchiha le habían heredado.
-Tu papa si que no sabe lidiar con un niñito como tu.
-Ni que lo digas, en mi lonchera solo encuentro manzanas y no chocolates.
-Eres tan malo Deidara.-y sonriendo Deidara solo podía mirar los ceños fruncidos de Ichigo y Zetsu y es que a la misma altura se cuchicheaban cosas en su contra y negando en verdad que su amigo si sabía cómo ganarse a su hijo.
-Valla, valla, pero mira a quien tenemos aquí, ni más ni menos que a mi pequeño hermanito.
-Y entonces hace su aparición el tondo del año.
-Zetsu.-el peli castaño se colocó enfrente del peliverde cuando este volvió a ponerse de pie y es que Ichigo corriendo cuando Deidara le dijo que podía tomar un postre de la nevera no lo pensó dos beses para salir del balcón donde Deidara se sabía en unos momentos las palabras no serían aptas para un niño de tan solo 5 años.
-Hagoromo.
-Y entonces como van las cosas con el anciano de tu prometido.
-Pues la verdad demasiado bien, aunque bueno no debería decírtelo cuando a ti las cosas con Haori no te fueron demasiado bien, y dime sus padres te sacaron de su casa con una patada en el trasero.-y ahí estaba punto para Zetsu.
-Acepto que mis acciones no fueron las correctas.-si sus suegros los habían encontrado follando en su casa.-Pero por lo menos Haori es joven y tu prometido cuantos años dices que tiene.-o kami punto para Hogoromo.
-En verdad que ustedes no cambian.-y era momento de terminar con la discusión se supo Deidara porque no quería que terminaran como la última vez y con Hogoromo sin cabello una vez más.
-Él es el que comienza.-y señalándose ambos Deidara solo negó mucho porque ambos hermanos eran únicos y solo dejando de lado sus ceños fruncidos cuando un celular sonó Zetsu volvio a contestar.
-O kami, tu cuñado quiere hablar con tigo querido hermano mayor.
-Valla que él no se puede estar tranquilo verdad, descuida yo lo resuelvo.-y tomando el celular Hogoromo salió del balcón porque solo el podía tranquilizar a Madara al decirle que el cuidaría de su prometido, y Zetsu, bueno el solo se lo dejaba a su hermano.
-A pesar de todo en verdad el sabe cómo tranquilizar a Madara.
-Ni que lo digas, aunque si estuviera con Haruma sería lo mismo, Madara necesita hablar con ellos para tranquilizarse, y en verdad no entiendo cómo puede tranquilizarse más con ellos que con migo.
-Tus hermanos te adoran y el lo sabe.
-Sí, sí, no trates de hacer que me olvide de lo que hablábamos y mejor dime Deidara cuando buscaras a Itachi.-y entonces había llegado el momento, porque Zetsu tenía razón y a estas alturas ya no podía ocultar más el echo del porque huyo de konoha, y ahora más que nunca necesitaba paz en su vida, y no menos que eso Ichigo necesitaba a su padre a su lado, el mismo necesitaba que Itachi Uchiha supiera de su existencia.
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-Si claro, revisare el caso cuando vuelva a Suna, Shisui solo resuélvelo tú, tu eres mejor en esto que yo y lo sabes además mis vacaciones comienzan, y la verdad estoy al tanto que este caso era exclusivamente para ti así que no quieras tentarme a regresar.
-ITACHI.-el pelinegro levantó la mano cuando miro a su hermano y primo y es que regresar a Konoha era como un alivio y tormento parar su pasado, porque a pesar de los años transcurridos aún estaba esa punzada de dolor por sus recuerdos.
-Volví.