—Estoy cansado, ya no puedo más.-un adolorido Kanon se arrastraba literalmente con un montón de cajas-Esto está más pesado que los pilares de don Pose.
—Ni que lo digas, esta será la misión más pesada de todas.-Aioria cargaba cajas extras y a como podía se quitaba el sudor-Aunque no es para tanto.
—¡¿No es para tanto?! ¡Tendremos que mudarnos de nuestros templos!
—No te quejes, Death-Suspiró Saga mientras se sentaba a descansar un poco.-Vas a vivir con Afrodita.
—¡Precisamente por eso! ¡Viviré con Afrodita en su templo!
—¿Qué no estás feliz?
—¡Claro que lo estoy! ¡Pero no quiero vivir en el templo de Afrodita!
—¿No se supone que ellos deberían vivir en nuestros templos?-Aioria ladeó la cabeza confuso-¿Cómo está eso?
—Así debería ser, pero no contaba con la necedad de Afrodita.
Flashback
—Caballeros, es mi deber anunciarles que mientras dure la misión deberán comportarse como una pareja real.-los demás la miraron raro-Es decir, que los que resultaron ser las madres deberán vivir en el hogar de los padres.
Como siempre, hubo protestas y berrinches que la diosa intentó aplacar con su cosmos y más porque su patriarca estaba también molesto. Seiya alzó la mano mientras comía un montón de papitas de su bolsa.
—Saori, ¿Dónde viviré yo si no tengo pareja?
—Desde luego que vivirás conmigo, Seiya.-Aioros se adelantó-Eres como un hijo para mí y por lo tanto vivirás conmigo.
—Gracias maestro.
—Aparte, así podré sacarte la verdad sobre el padre del bebé.
—¡Yo no quiero vivir en el templo de Death!-chilló Afrodita tozudo-¡Ahí no! ¡Ese lugar apesta a muerto, ratas y porquería!
—¡Oye!
—¡Yo tampoco dejaré el recinto patriarcal!
—Maestro Shion, trate de calmarse.
—Gran patriarca, relaje la vena. El hijo le va a salir todo enojón.
—¡Milo!
—¡A callar todos!-rugió la morada y todos se quedaron mudos-Sin objeciones todos se mudarán a sus respectivos lugares…Con excepción de Afrodita. Lo siento Ángelo-DM frunció la boca-pero tu templo parece cementerio podrido.
—¡Noooooo!
—Por otro lado, Mu se irá al templo de Géminis.-Mu se quedó todo rojo mientras sentía la mirada intensa de Saga sobre él-Kiki también se mudará. Shaka te irás al templo de Leo.-Shaka se quedó mudo y le empezó a temblar la boca a lo que la diosa le calmó-Pero puedes estar tanto como desees en tu templo.
—Yo no te lo negaré, Shaka.
—Está bien, Aioria, mientras pueda pasar algo de tiempo para meditar ahí. ^u^
—Continuaré…Dohko, debido a la posición de Shion deberás mudarte al recinto patriarcal.-Shion sonrió ganón y satisfecho-Mientras que Shiryu se quedará con Shunrei en la casa de Libra.
—Shiryu, no quiero que mi casa parezca el “Motel de Libra”.
—Si maestro.
—Aioros, te mudarás junto con Seiya a la casa de Capricornio.
—¡No! ¡Eso no!-rugió Aioria como el león de su signo-¡Aioros no se irá al templo de la cabra traidora!
—¡¿A quién le dices cabra traidora, gato ridículo?!
—¡A ti!
—Calma, hermano.
—¡No me calmo!
—¡Pelea, pelea! ¡Ya se prendió el santuario!
—¡Milo cállate!
—¡Se acabó la discusión!
Athena los calmó y no dio razones de objetar. Aioria se tragó su coraje pero se vengaría.
—Camus, te irás a la casa de Escorpio.
—Sí, no quiero que el anciano pervertido ese-Milo se refirió a Zeus-ande rondando por ahí.
—En eso tienes razón, Milo.
—Y te llevarás a Hyoga.
—¡¿Eh?!
—¿Qué esperabas, Milo? ¿Qué dejara a mi patito solo?-Hyoga y Milo se miraron raro por el actuar de Camus. Aunque luego el rubio sonrió ya que así, Milo no andaría de pervertido con su maestro Camus-Oh no, él se viene conmigo.
—Pero maestro, ¿No viviré con Shun?
—No, hemos acordado con Shaka que debido a su pequeña irresponsabilidad ambos estarán viviendo con sus respectivas familias.-todos los miraron atónitos. ¡¿A qué horas se habrán puesto de acuerdo si ellos nunca los vieron hablar en todo el rato?! Hasta que les cayó el veinte cuando elevaron un poco sus cosmos-Espero que se comporten.
—Maestro Shaka…
—Sin objeciones, Shun, esa es mi última palabra. Además-Shaka señaló aun con los ojos cerrados al dormido fénix en uno de los sillones-aun te falta la reperiqueta de Ikki por salir con domingo siete.
—Siendo así, vayan arreglando las mudanzas.
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Fin del flashback
—Ya no seré recordado como DM: el sanguinario caballero de cáncer. Si no que ahora seré Ángelo: el florido caballero de cáncer.- DM se lanzó al suelo a patalear-¡He perdido mi dignidad!
—Esa la perdiste hace mucho tiempo, cangrejo.
—Apúrense, que ya quiero llegar a mi templo y poner todo esto.
Los caballeros vieron como Milo hacía levitar cajas y cajas con letreros que anunciaban “Amuletos de protección” “Espanta dioses” “Trampas para las deidades”. Al llegar al templo de Escorpio se fueron al jardín de este y se sentaron en el césped.
—¿Qué era todo eso, Milo?
—Amuletos y protección extra, Shura.-gruñó el escorpión-Me aseguraré de que ese viejo no se ande por ahí.
—Hasta yo me espantaría por lo que pasó en el centro comercial.
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Flashback
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Ni bien amaneció Afrodita levantó a todos por los templos para llevarlos al centro comercial. El de piscis estaba más puesto que un calcetín y con los ánimos por los cielos. No le importó despertar a DM a punta de rosas piraña ni sacar a Saga de su baño de purificación.
Ahora estaban todos en un centro comercial exclusivo de Atenas, cortesía del avión privado de la diosa, mientras se iban de compras. Se irían en parejas para hacer las respectivas compras, excepto Ikki que se había pegado como lapa a Shun para joderle el rato a Hyoga-cosa que le agradeció Shaka- y Seiya que se perdió ni bien entraron al centro. Acordaron de verse a las dos en punto para ir a comer juntos.
Entraron a una tienda de maternidad todos y ahí se separaron.
Mu iba cuidando de Kiki ya que parecía que el pequeño se perdería con tanta cosa que veía por los lugares. El menor ya llevaba un carrito con un montón de cosas, entre ellas juguetes y ropita para el pequeño “bebé” y de paso ropa para su maestro.
—¡Kiki! ¡No tantas cosas! ¡Es demasiado!-aunque se quedó de piedra cuando vio a Saga sacar la tarjeta de crédito y pagaba todo-No es necesario, Saga.
—No te preocupes, Mu, por una vez deja de cargar con tanto peso tu solo.-le regaló una sonrisa que puso al carnero muy colorado-Me agrada hacerlo.
—Saga…
—Alde, cielo, ¿No crees que exageras?- el pequeño pelinegro vio con una gota en la cabeza como el imponente toro cargaba con pilas de ropa de mamá y bebé yendo de un lado a otro-Ya estás llevando ropa hasta para los cinco años y solo estoy de apenas un mes.
—Tonterías, Tenshi, quiero lo mejor para ustedes.-el grandote ya se encaminaba a la dependienta después de dejar las pilas de ropa-¿Dónde están las cunas?
—En el segundo piso.
—Rosita, ya no siento mis brazos. ¡No veo por donde voy!-hablaba DM haciendo malabares para cargar tanto ropa como juguetes y demás productos de cuidado y belleza que el caballero de piscis le iba aventando-¡Estás exagerando!
—Te callas, Ángelo, y no exagero. Me estoy previniendo para cuando me ponga más gordo. No quiero que me salgan estrías ni paño.
—¡Eso no te pasará! ¡Y no me digas Ángelo!
—Shaka, ¿Te gustan estas? No escatimes ni te fijes en el precio.- Aioria parecía más entusiasmado que el propio Shaka quien tímidamente solo llevaba unas dos batas. Él por su parte llevaba una docena-Vas a necesitar más.
—Aioria, no es necesario.
—Por supuesto que sí. Estamos juntos en esto y es mi deber velar por los tres…Bueno por los ¿Cinco?
—Considerando al pato ese serían seis.
—Shion, no quiero sonar grosero pero ¿vas a elegir alguna túnica?-Shion lanzaba túnicas al aire y estas le caian a un pobre Dohko el cual ya estaba sepultado-¡Moriré asfixiado!
—Lo siento, Dohko, pero aun no me decido.-Shion siguió buscando y lanzando más ropa-Siento que con estas me veo gordo.
—¡Todavía no te pones gordo!
—¡Pero lo estaré!
—Shura, no es necesario comprar todas esas cosas.-Aioros veía a Shura el cual llevaba tanto ropa como productos, libros y quien sabe cuanta cosa más mientras Aioros lo veía todo apenado-Solo ocupo unas pocas.
—Aioros, déjame hacerlo ¿sí? Es en parte para compensarte.
—Ya lo hablamos, Shura, ya te lo he perdonado.
—No insistas, Aioros.
—Cubito, mira esta ropa que te compré.- Milo le mostraba a un muy rojo Camus un conjunto muy sexy-Y ya sé donde lo usaremos~
—No empieces, Milo, iré a ver unas batas.
Camus se alejó mientras Milo pagaba y ordenaba en secreto una cuna y demás juguetes. Pero se vio interrumpido por un grito de Camus y dejando todo fue veloz hasta él. Vio con ojos llameantes como su cubito era sostenido en brazos de Zeus quien lucía un poco más jovial sin quitarle lo atractivo mientras Camus trataba de liberarse siendo ayudado por Hyoga.
—Ganimedes, cuando supe de tu estado no perdí tiempo y encerrando a Hera me escapé del Olimpo para venir por ti.-Zeus lo miraba con ojos de borreguito mientras Camus evitaba por todos los medios que este lo besara-Yo debo ser el padre de tu hijo, y te saludo mi pequeño nieto.
—¡Por enésima vez, no soy Ganimedes!
—¡Y usted no es mi abuelo!
—¡Viejo depravado, deje a Camus!
—Tu, caballero de pacotilla, ¿Cómo te atreves a retener a Ganimedes?- Zeus se puso serio y sin soltar a Camus le lanzó un rayo a Milo-He venido por mi amado y no me iré sin él.
—¿Qué tiene en la cabeza, moscas? ¡Camus no es Ganimedes!
—¡Que sí lo es!
Ambos se enfrascaron en una pelea haciendo despapaye y medio, al grado de dejar de pelearse como guerreros y hacerlo al estilo de las novelas: como dos viejas verduleras agarrándose de los cabellos y rodando por el suelo mientras se echaban las peores maldiciones. Camus trataba inútilmente de separarlos junto con Hyoga, hasta los demás caballeros que acudieron pero de la nada un estruendo se hizo escuchar y una potente voz gritó.
—¡Zeus, deja de pelearte como una verdulera de tianguis con el caballero de Escorpio!
Todos vieron a Hades lucir muy atractivo con una chaqueta de cuero negra, una playera blanca con unos jeans oscuros y mocasines negros. Llevaba su cabello despeinadamente sexy junto con unos lentes de aviador. Detrás de él venían sus tres jueces y sus dos jueces gemelos con atuendos normales y con un montón de bolsas y cajas. Estaban atónitos ya que el hermoso dios estaba como quería y normalmente lo veían con sus túnicas oscuras. Lo más sorprendente: él no salía del inframundo para nada.
—Esto es el colmo, Zeus, te has rebajado demasiado.-Hades se quitó los lentes revelando sus bellos, y furiosos, ojos turquesa-¡Me tienes hasta la madre! ¡Ganas no me faltan de ponerte en mis rodillas y darte de nalgadas!
—Hermano, he venido por Ganimedes y no me iré sin él.- Zeus señaló con su dedo a Camus quien estaba en el suelo todo desmayado mientras Hyoga y Shun le echaban aire-¡Mi amado!
—¡Mi cubito!
—¡A callar, Zeus!-Hades le dio un zape-Deberías estar en el Olimpo no aquí jugando al lujurioso acosador.
—Si sabes como soy para que te enojas.-Hades le fulminó con la mirada-A propósito, ¿Qué haces aquí? ¿No que odiabas ir a la tierra?
—En efecto, lo odio, pero tuve motivos fuertes para venir: necesito café y ropa.-miró a sus jueces de una manera severa-La última vez que mandé al trío me trajeron un café que parecía té de calcetín y la ropa me daba picor. Ya he dejado instrucciones para que ese diseñador…¿Cómo se llamaba?
—Armani, señor.
—Oh si, el señor Armani me hiciera todo un guardarropa.-se miró las ropas y después sonrió petulante-Esas revistas que le confisqué a Pandora me sirvieron.
—¿No se te olvida otro motivo?- Zeus se calló cuando una esfera negra le achicharró los pelos-¡No tenías porqué hacerlo!
—Si sabes como soy, para qué lo haces.-se la devolvió socarronamente-Y no colmes mi paciencia. Lárgate al Olimpo de una vez.
—¡Que no me iré sin mi Ganimedes!
—¡Con un carajo, él no es Ganimedes!
—¡¿Por qué dices eso?!-Zeus señaló al ahora despierto Camus que estaba en brazos de Milo-¡Es mi Ganimedes! ¡Lo reconocería en donde fuese!
—Estás más ciego que un topo. Pero en fin, es hora de que te largues.-Agarró a Zeus como un perrito y sin vacilación lo lanzó a un portal que abrió en segundos-¡Por cierto, Hera no está muy feliz que digamos!
—¡Waaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!
Después de eso, Hades se puso sus lentes y reanudó su camino en compañía de sus jueces y dioses gemelos mientras los caballeros se quedaban mudos. Seiya llegó después con un montón de ropa y golosinas viendo a los demás confuso.
—¿Me perdí de algo?
—Ay, Seiya, te perdiste toda la diversión.
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Fin del flashback
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—Ese Zeus es más necio que una mula. Es más necio que Seiya cuando le quiero quitar las golosinas.- se les unió Aioros trayéndoles una jarra con algo de jugo, a lo que Shura con velocidad se las quitó-No era necesario, Shura.
—Claro que sí, Aioros.
—En fin, no creo que Zeus se rinda. Me temo que esto es solo el comienzo.-Milo refunfuñó tomando su bebida de un trago-Ese viejo es un hígado…
—El tal Ganimedes le dio duro eh,-DM ladeó el vaso-mira que hacer semejantes ridiculeces solo por un amante.
—Ganimedes no era cualquier amante, Ángelo.-salió Afrodita en compañía de los demás caballeros dorados y de bronce-¿Qué no te sabes esa historia?
—Perdón por la ignorancia, rosita.
—Ganimedes fue un príncipe troyano, un humano tan hermoso que hizo que Zeus se enamorase de él con tan solo verlo mientras este cuidaba su rebaño de ovejas.-intervino Athena quien venía con Shion-Zeus se transformó en un águila y sin vacilación lo raptó llevándolo al Olimpo. Ahí lo hizo el copero de los dioses dejando de lado a Hebe y dándole el título de su amante. Hera lo odió desde el principio, porque no solo le dio tal título, sino porque lo hizo inmortal y porque lo ascendió como la constelación de Acuario. Ganimedes en sí es el caballero de Acuario.
—¿Y dónde demonios está?- Milo estaba enfadado y Camus le calmó con una gélida mirada-Por su culpa Zeus nos está dando mucha lata.
—Ganimedes vivía feliz en el Olimpo, amado y querido por los demás dioses, pero no todo es felicidad…Zeus con el tiempo sucumbía a las tentaciones y Ganimedes no lo toleró. Una noche, Ganimedes desapareció del Olimpo e hizo desaparecer su cosmos para no ser encontrado. Zeus al notar su ausencia puso al Olimpo de cabeza y mandó a sus mejores soldados en la búsqueda de su amante. No lo ha encontrado. Y ya han pasado más de veinte años…
—Ósea que el viejo ese está buscando a su amante perdido desde hace más de veinte años…Sí que le dio duro el amor.-Kanon se les unió llegando junto con Sorrento y Julian Solo-Aunque sea un promiscuo.
—Lo interesante es que no lo han encontrado después de todos estos años.- Julian Solo ladeó la cabeza en un ademán pensativo-Y solo hay dos motivos: está en una dimensión extraña.
—Descartado, te olvidas de Chronos.-Athena señaló a lo que Julian suspiró-Él fue con quien primero acudió para localizarlo.
—La otra es que esté bajo la protección de algún dios.
Todos se quedaron mudos ante esa declaración y después surgieron los murmullos. Después miraron a Athena quien negó velozmente.
—No, yo no lo oculto.
—Pues quien sea que haya sido lo ha hecho muy bien.
—Ganimedes está tan oculto como el “novio” de Seiya.-Aioros vio con reproche al pegaso quien se encogía en su asiento como un niño regañado-Porque estás de novio ¿No?
—Maestro…
—Si, Seiya, estás todo misterioso.-Ikki se le unió-Desde hace meses que andas raro: te vas más temprano de la escuela, cuando salimos todos te pierdes por horas, y cuando paso por tu cuarto se oyen unas risitas muy raras.
—N-No les diré quién es.-Seiya se levantó y se encaminó hacia la salida del templo-Nunca se los diré, nunca.
—Qué dramático se pone. ¿Pues con quién quien andará de novio?-rio Milo carcajeándose junto con los demás-Ni que anduviera con un dios…
Sus risas se callaron de repente pensando en esa posibilidad. No podía ser posible, o si…
—¡¡SEIYAAAAAAAAAAAAA!!
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