Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

REINEMOS por maria819

[Reviews - 57]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Un nuevo capítulo que espero les guste

Después del paseo que no estuvo tan ameno como Rasa e Izuna pensaban, los cuatro volvieron y después de comer los chicos fueron a sus habitaciones a hablar entre ellos mientras Rasa iba por una copa con Madara que lo invito junto a Fugaku, todo por pedido de Hashirama quien detuvo en el pasillo a Izuna.

-Espera no te vayas – Hashirama detuvo al doncel de un brazo, Izuna lo miro por un segundo y le sonrió con algo de tensión, esperaba que el duque lo abordara en algún momento para hablar de Tobirama pero no esperaba que fuera tan pronto.

-Dime – Izuna se hinco como era la costumbre ante su duque consorte, Hashirama se sintió algo mal por eso, en especial porque ya sabía que su nieto se sentía atraído por Sasuke.

-Quería que habláramos de Tobirama y Sasuke – Menciono algo apenado de sacar el tema a colación.

-No – Izuna no quería escuchar como estaba Tobirama con su fabuloso consorte y sus bellos hijos, además que no planeaba decirle a Sasuke nunca sobre ese pequeño detalle.

-Por favor – Insistió el moreno – Tobirama está muy enfermo.

-¿Cómo? – Pregunto Izuna pasmado, Tobirama no era viejo para estar enfermo y que supiera nunca sufrió de nada.

-Tobirama no se casó con quien nuestros padres le impusieron, en vez de eso desde que te fuiste no fue el mismo y sumió en la depresión hasta caer enfermo, ahora es irreversible y morirá en cualquier momento – Hashirama lloraba mientras le decía todo eso, Izuna estaba impactado y un sentimiento de pena lo abordo por completo pero su prioridad fue, es y será Sasuke

-Lo pensaré – Izuna volvió a hincarse y se fue directo a su habitación donde se acostó esperando a su esposo, a la hora este llego un poco sorprendido de que Izuna estuviera ahí, pensaba que seguía con Hashirama y es que obviamente noto que se lo llevaban para que los donceles pudieran hablar a solas.

-Hola belleza – Rasa le dio un beso en los labios que Izuna profundizo con pasión mal contenida llevando a su esposo a la cama encima suyo – ¿Y eso?

-Hable con Hashirama – Izuna le respondió y se abrazó al varón, este sabía toda la historia del doncel y cuando se enamoró no le importó nada, por eso si su hijo adoptivo decidía que quería estar con el varón rubio, él lo apoyaría incondicionalmente.

-Hablaron de Tobirama – Una punzada de celos le pego en el pecho, por esta razón era que el viaje se había retrasado hasta que su hijo prácticamente los echo del reino por insistencia de su madre adoptiva.

-Sí, según Hashirama él está muy enfermo – Izuna lo miro con la misma pena que miro al doncel hace unas horas – Al borde de la muerte.

-Mmm – Fue lo único que salió de sus labios, no conocía al tipo pero por lo que sabía no le agradaba, así que no le despertaba ningún sentimiento de lastima, como se le notaba a su consorte.

-Te amo – Rasa lo miro con una ceja arqueada haciendo reír al doncel – Estoy algo deprimido por saber de cosas y personas que no quiero, así que necesito de mi esposo para que me suba el ánimo.

-Súbeme otra cosa y yo te subo el ánimo – Rasa tomo la mano de su consorte y la llevo hacía su entrepierna, Izuna sonrió con coquetería mientras acariciaba esa parte que bajo su toque se empezaba a levantar.

-Ven aquí – Izuna abrió sus piernas mientras aumentaba el ritmo de su mano sobre la ropa pero empezando a quitarla con la otra, Rasa se quitó la camisa y procedió a quitarle el pijama al varón, mientras se besaban con ganas, los años no habían disminuido la pasión entre ellos y no perdían tiempo para hacer el amor.

-Ahh – Rasa gimió al sentir como la mano de su consorte se perdía en su pantalón, Izuna tomo el pene de su esposo y lo masturbo con ganas, Rasa no se quedó atrás y llevando sus dedos a la entrada del doncel lo penetro con dos de ellos haciendo gemir fuertemente a su consorte.

-Rasa – Muy fuerte grito su nombre, cuando el varón embistió con sus dedos esa parte dulce en su interior que lo volvía loco.

-Izuna por favor – Pidió con ansias y es que ellos no pasaban más de una semana sin sexo pero el viaje duro tres semanas y llevaban ahí tres días, casi un mes sin tocarse era un record y ya se sentía estallar.

- Hazlo mi amor – Izuna le dio permiso y Rasa no perdió tiempo, quitándose el resto de su ropa y la de su consorte fue retirada igual, sin más lo penetro de forma certera y deliciosa haciéndolos a ambos gemir fuertemente.

-Sí – Rasa inicio las embestidas dando en el punto exacto que sabía enloquecía a su consorte haciéndolo gemir más alto, Izuna se movía con ganas al compás del movimiento de su esposo.

-Más fuerte – Le rogó, el varón le hizo caso  y aumento la intensidad alzándolo con una mano y con la otra sosteniéndose de la cama mientras el doncel enredaba sus piernas en la cintura del pelirrojo y con una mano estrujaba la sabana tratando de controlar el placer que lo recorría por completo mientras la otra estaba en su miembro acariciándose fuertemente al ritmo de las embestidas.

-Ya casi – Rasa le hablo en medio de todas las sensaciones.

-Vente – Le ordeno Izuna y este lo hizo al momento, el pelinegro al sentir el semen en su interior se vino de igual forma entre sus vientres, Rasa lo deposito con cariño en la cama y se acostó a su lado, el doncel se abrazó a su esposo cuando este se acostó a su lado.

-Te amo – Rasa le dijo al devolver el abrazo y acomodarse para dormir.

-También te amo – Izuna se acomodó también y ambos se quedaron dormidos rápidamente.

 

Al otro día Naruto se levantó desanimado pero fue interceptado por su hermano antes de bajar a desayunar, este traía una sonrisa que reconocía como de una gran idea.

-Está noche iremos a la fiesta de cumpleaños de Jiraiya – Sai le conto, todos sabían que esas fiestas eran ostentosas y siempre los invitaban aunque esta vez la cosa seria diferente – Yo invitare a Gaara y por cortesía tú debes hacerlo con Sasuke, simples principios.

--Simples principios – Naruto sonrió cómplice, era cuestión de cortesía y nadie podría reprochárselo. Los hermanos siguieron su camino planeando todo lo que harían esa noche, hasta que llegaron al comedor y saludando a sus padres, abuelos e invitados.

-Está noche habrá una fiesta – Sai no dejo que nadie iniciara ninguna otra conversación y se dirigió a Gaara, este lo miro con atención por lo que podría decir – Es la fiesta de cumpleaños del sabio Jiraiya, es doncel de compañía de nuestra madre y sus fiestas son legendarias.

-No iremos – Fugaku interrumpió lo que sea que su hijo podría decir, aunque por la mirada entre sus hijos podría deducir esa complicidad.

-Siempre hemos ido y sería una descortesía no hacerlo – Naruto se metió en la conversación, su relación con Sasuke dependía de esa fiesta.

-Pero tenemos visitas y no podemos suspender por una fiesta su atención – Minato apoyo a su esposo Rasa e Izuna se miraron entre ellos, obviamente se daban cuenta que esa era una excusa para no ir a la fiesta aunque no sabían porque.

-Para mí sería todo un honor que los duques reales de Suna y los príncipes asistieran a mi fiesta – Jiraiya que estaba en el lugar, previamente avisado por Sai – Además es mi cumpleaños número 70 y será probablemente la mejor fiesta de todas.

-Estaremos encantados de asistir – Rasa acepto la invitación y sus hijos saltaron emocionados, Gaara volvió a mirar a Sai incitándolo a seguir hablando.

-Me alegra mucho que vayan, así que estaría muy feliz de que me fueras mi acompañante – Sai  le ofreció, Gaara se ruborizo pero sonrió alegremente.

-Sería un placer – Gaara le contesto y Sai sonrió dedicándole una mirada cargada de significado que hizo sonrojar más al pelirrojo.

-Excelente, Naruto ira con Kabuto – Al rubio se le cayó el tenedor de la mano al escuchar a su padre, las miradas de todos puestas en el rey le hizo continuar con la frase – El chico es nuestro invitado y aun no se ha logrado integrar del todo.

-Pero papá yo… - La mirada del rey lo hizo callar en su pelea, ese chico no le agradaba nada, era el sobrino de Jiraiya pero no le caía bien, el chico le hablaba como si fuera un idiota, a Sai tampoco le agradaba.

La cena siguió en completo silencio, Gaara y Sai se regalaban miradas entre consternadas y coquetas, se dividían entre su propio romance y ayudar a sus hermanos, aunque podrían hacerlo al mismo tiempo. Después de comer los reyes se retiraron a sus deberes y los duques escoltaron a sus invitados al jardín, aunque Sai pidió permiso de pasear a solas con el pelirrojo menor.

-Claro cielo, diviértanse – Había dicho Izuna, Rasa solo resoplo pero no dijo nada, además que notaba la mirada entre feliz y celosa de Sasuke así como que le regalaba una mirada de añoranza a Naruto.

 

Sai y Gaara iban paseando por el jardín lo suficientemente cerca para que sus padres los vieran pero lo suficientemente lejos para que nadie los escuche, el doncel iba colgado del brazo que muy galantemente el varón le había ofrecido, los adultos no les quitaban la vista de encima formando en sus cabezas una muy buena alianza entre Suna y Konoha por ese matrimonio, mientras que Naruto y Sasuke los veían pasear con algo de celos, el rubio quería hacer lo mismo con Sasuke pero era obvio que sus padres no apoyaban esa idea. Por su lado Sasuke se preguntaba porque las personas en Konoha no lo querían cerca del rubio, ¿sería porque son familia? Pero si eran primos segundos, eso ni siquiera se consideraba familia ¿O sí? Todo era muy confuso.

-La idea de invitarte era también para que Naruto invitara a Sasuke – Sai inicio la conversación hablando de sus hermanos pero decidió reiniciarla por la cara de Gaara – Pero lo principal es que nos conozcamos mejor y dar un paso en nuestra relación.

-¿Nuestra relación? – Pregunto Gaara sonriendo pero con un sonrojo en las mejillas.

-Gaara puede ser muy rápido para esto pero yo quería decirte algo – Sai detuvo su marcha y se posiciono enfrente del doncel quien lo miro atento y nervioso – Me gustas

-A mí también me gustas – Gaara le respondió y Sai sonrió feliz por eso, tomo delicadamente el mentón del doncel y acercándose  lo beso en los labios, algo fugas que los dejo con ganas de más.

-Quiero darte un beso de verdad, pero con nuestros padres y hermanos viéndonos así no es buena idea – Sai lo abrazo mirando hacia los que los vigilaban, todos tenían una sonrisa en los labios, incluyendo a Naruto y Sasuke que la combinaban con tristeza y celos por no poder estar en sus lugares, sin proponérselo se miraron el uno al otro por tiempo indefinido diciéndose todo lo que no podían decirse con palabras y se quedaron mirándose hasta que Izuna se llevó a Sasuke lejos.

-Debemos ayudarlos – Gaara aún refugiado en los brazos de Sai le dijo al oído, este asintió con gusto de saber que su doncel, porque definitivamente seria suyo, pensaba igual que él.

-Ya sé cómo podemos empezar – Sai le hablo al oído con picardía, lo tomo de la cintura y jalo detrás de un árbol, allí volvió a tomar su mentón y reclamar sus labios pero esta vez de forma apasionada que puso a temblar a Gaara dejándole las piernas de gelatina. El varón chupo sus labios con gula y cuando quiso más delineo con su lengua el labio inferior haciendo que el pelirrojo soltara un jadeo que aprovecho para meter ese musculo atrevido y juguetón dentro de la boca del otro que la recibió gustoso y acompaso los movimientos de esa lengua con la suya propia, después de unos minutos se separaron.

-Eso fue – Gaara no pudo decir nada más porque Sai volvió a tomar su boca y es que verlo así con los labios hinchados y las mejillas sonrojadas por el beso, le dieron ganas de comérselos a besos.

-Sensacional – Sai respondió por él, pero debieron alejarse porque Izuna llamo a Gaara, este le guiño un ojo antes de regalarle un pequeño pico para irse con sus padres.

 

Sai fue en busca de esa persona y es que al igual que su hermano, Kabuto no le caía muy bien pero debía hablarle para poder ayudar a su hermano, lo vio por fin en la biblioteca, leyendo como siempre.

-Hola – Sai le saludo de forma cortes, el doncel solo subió la vista y le regalo una mirada de desdén para volver a leer el libro que tenía en las manos, Sai solo apretó los puños y suspiro por la acción del doncel – Sé que no te agrado y tú no me agradas, pero…

-¿Por qué crees que no me agradas? – Kabuto lo interrumpió, Sai le miro por un segundo negando con la cabeza.

-Tú me agradas porque siempre me has tratado mal y a mi hermano, pero no sé qué te hicimos para que nos trataras así – Sai reconoció su último pensamiento, se sentó enfrente del doncel ya que este dejo su libro y lo miro fijamente.

-Porque mis padres quieren que me case con Naruto o en su defecto contigo – Kabuto se rio por la mueca del chico – Pero yo amo a alguien más y si ustedes me odian puedo casarme con él.

¿Quién? – Sai estaba interesado en saber quién podría evitar que un doncel quitara los ojos de su hermano, o en su defecto de él.

-Eso no te importa, lo que sí debería importarte es que no quiero ir a esa fiesta con Naruto y creo por lo que he visto que él quiere ir con Sasuke ¿Me equivoco? – Pregunto lo último el peliblanco, Sai decidió que ya no le disgustaba ese chico y se convertiría en un buen amigo y algún día en buen aliado.

-No pero aún no sé cómo hacer para que no vayan juntos – Sai reconoció, pensaba pedirle a Kabuto que declinara la oferta, pero era obvio que no podría hacerlo.

-Pues yo me escapare con mi amor por esa noche así que puedes decir que estoy enfermo, pero solo hazlo cuando mis padres ya estén en la fiesta – Sai lo miro asombrado, ¿Se iban a escapar? Kabuto solo rio por eso – No haremos nada malo, volveré lo prometo.

-Eso espero, entonces te cubriremos y tú nos cubres – Sai le guiño un ojo, señal que fue devuelta por el doncel que volvió a su lectura, mientras Sai iba con su futuro novio a contarle el plan.

 

Naruto estaba alistándose para la estúpida fiesta a la que tendría que ir con Kabuto, Sai entro ya listo y vio cómo su hermano se abotonaba la camisa.

-Nuestros padres ya se van – Sai anuncio y Naruto soltó un gruñido dando a entender que no le importaba, antes quieren vernos en el salón.

-Vamos y salgamos de esto – Naruto salió con el chaleco en la mano y bajo con su hermano de mal humor, sus padres abajo los escanearon y con últimos retoques de su madre, estos se fueron satisfechos por cómo se veían sus hijos, fue su turno de irse.

-Antes de que te vayas debo decirte algo – Sai lo sostuvo y se rio por la actitud infantil de su hermano que hizo un puchero – Saluda como se debe a tu pareja.

-Púdrete – Naruto salió del castillo y  entro al carruaje, se sentó y volteo a mirar a los dos donceles que estaba enfrente suyo, no pudo evitar abrir la boca como idiota.

-Hola – Un más que bello Sasuke lo saludo con alegría, sabía por su hermano lo que habían planeado así que la cara de Naruto le dio mucha risa y acompaño a Gaara y Sai con las burlas hacia el rubio.

-Sasuke – Naruto reacciono por fin pero eso no lo salvo de las burlas de los demás - ¿Cómo es que estas aquí?

-Bueno, nuestro buen amigo Kabuto se “enfermo” entonces Sasuke accedió de último segundo a ir contigo, ya que de todas formas iba a ir solo – Sai hizo las comillas en el aire haciendo reír al rubio, al instante se crearon dos conversaciones diferentes, una de Gaara y Sai y otra de Naruto y Sasuke.

-Me alegra mucho que seas tú – Naruto le hablo muy cerca haciendo que Sasuke se sonrojara pero sonriera igual.

-A mí también – Reconoció Sasuke y sumiéndose en una conversación agradable llegaron a la mansión de Jiraiya.

Notas finales:

Gracias por leer


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).