~POV Marco~
Llévame ahora mismo a donde la tienes escondida –Me dijo con un tono autoritario que causo que un escalofrío recorriera mi espalda, simplemente asentí a lo que él se envolvió en un halo de fuego para después mostrarse como un humano común–
–Era prácticamente igual excepto que sus cuernos y el ojo en su frente había desaparecido y su piel ahora clara con algunas pecas en el rostro, aún así no me sentía tranquilo a su lado por lo que lentamente comenze a caminar fuera del callejón–
–El camino a casa fue muy incómodo y al parecer no solo para mí, no sabía qué hacer o que decir. Aquella escena de como los monstruos eran calcinados seguía en mi mente ¿Me haría algo igual después de obtener la varita? No lo creo, Star dijo que tocando la campana si estaba en peligro y alguien vendría a ayudarme–
–Al parecer no había nadie en casa pues todo estaba muy tranquilo y silencio, eso no ocurría cuando mis padres estaban ahí. Entramos y nos dirigimos a mi habitación, abrí el cajón donde escondía la varita y removí la ropa que había en sima de esta–
–Él era un demonio de nueva cuenta– Aquí esta –Dije tomándola para mostrarle la varita, pero empezó a comportarse rara, una destellante luz la envolvió, al parecer él tampoco entendía que estaba ocurriendo, su rostro denotaba asombro al igual que el mío–
–La luz duró unos cuantos segundos hasta se fue completo dejándonos ver que la apariencia de esta había cambiado, el color ahora era rojo claro, las alas habían desaparecido, entre la cabeza y el mango de esta había un listón atado, era bastante largo pasando por poco al mango de la varita, el corazón que tenía en la parte baja del mago ahora una especie de pirámide. La cabeza ahora tenía el centro color dorado. Pero lo que más me confundió fue que la estrella de había vuelto un corazón de color rojo muy intenso y lo rodeaban pequeños rayos negros–
¿Que acaba de pasar? –Pregunte mirándolo a los ojos, el me sujetó del brazo con el cual sostenía la varita–
Vendrás conmigo ahora –Dijo miéntras comenzaba a caminar hacia la puerta, trate de liberarme pero su fuerza era mayor que la mía, era un demonio después de todo–
No iré a ninguna parte hasta que me respondas –Replique jalando mi cuerpo para evitar seguir siendo arrastrado–
–Lo escuché soltar un bufido antes de girar su rostro para verme– Escucha, no tengo no la menor idea de que acaba de ocurrir, pero se de alguien que tal vez lo sepa, así que mueve tu trasero –Respondió sin soltarme–
De acuerdo, pero promete que no harás nada sospechoso ok –No podía confiar en él, pero al parecer ella si lo había hecho antes, solo espero no estar equivocado–
~POV Tom~
Muy bien –Conteste sonriendole de forma confiada y extendí mi mano la cual se cubrió con una llama, observé cómo dudo un momento si tomarla o no, al parecer ese chico era muy torpe pues acercó la suya–
–Antes de que su piel tocara llama apague el fuego de mi mano mientras el me veía confundido, al parecer creía que haríamos una especie de contrato o algo así– Ahora toca la campana para irnos de aquí, Glossaryck y el reino de los demonios nos esperan
Sobre eso... Olvidé la campana en el callejón –Dijo jugando con sus dedos de forma nerviosa–
¿¡Qué hiciste qué!? –Grite furioso, como se supone que volveríamos sin la esa campana– ¿¡Como pudiste olvidarla!?
Oye, no fue mi culpa, con todo lo que pasó lo último en lo que pude pensar era esa pequeña campana –Respondiór03; mirándome como si fuese mi culpa que eso ocurriera–
Pues entonces vayamos a ese callejón, busquemos la campana y ya –Conteste de forma obvia–
Primero sueltame la muñeca –Pidió jalando su brazo para zafarse de mi agarre, abrí mi mano viendo como caía al suelo de forma cómica, no pude evitar reír a carcajadas ante eso–
No es gracioso –Dijo miéntras se ponía de pie y sobaba su trasero–
Claro que sí, es muy gracioso –Respondí tratando de tranquilizar mi risa, pero me era algo imposible, salimos de su casa para regresar al callejón donde nos conocimos momentos antes y buscar la jodida campana y resolver ese misterio de una buena vez–
~POV Normal~
–Después de un par de minutos buscando Tom la encontró junto a unos botes de basura–
¡La encontré! –Gritó haciéndola sonar, al instante apareció un portal de fuego y de este salió uno ascensor demoníaco–
–Marco se acercó a Tom quien lo ayudo a subir y luego entró él, una vez con ambos dentro el ascensor descendió desapareciendo por el portal–