El ver a mi padre aún me tenía molesto, pero aliviado de saber que no sabré de el en mucho tiempo, pero ¿Cuánto durara?, esa preguntaba pasaba por mi mente. Al dejar la casa de mis padres Marco me llevo a casa y sin perder tiempo me llevo a la habitación, no tardo mucho para desvestirme, por un momento olvide todo lo ocurrido en el día. Al día siguiente abrí los ojos y voltee a mi lado, ahí estaba Marco, durmiendo como si nada hubiera pasado.-
¿Cómo puedes dormir tan tranquilo?- susurre, acaricie su rostro, me acerque a él y lo bese.- ¿Habrá algo que te quite el sueño?
Tu.- dijo Marco, me coloque sobre el para volver a besarle.- ¿Por qué tan cariñoso? Antes te daba pena tocarme.
Después de hacerlo dos veces creo que sería estúpido de mi parte sentir pena contigo.- dije, era cierto, ya no sentía miedo de estar con él, ya había dudas pero aún era muy pronto para mí el iniciar algo mas.- Marco ¿No debes ir a trabajar?
Ya te lo había dicho, no iré a trabajar hasta que tu estés bien.- respondió Marco.- Mejor vamos a levantarnos a desayunar o juro que no te dejare salir de esta cama durante todo el día.
¿Adicto al sexo?- dije, Marco con mucho cuidado se levantó pero solo para estar sentado, aun conmigo sobre el.- M-Marco... Tu...
Adicto a ti Sabo.- dijo Marco.- Creo que aún no saldremos la cama, estas duro de aquí.
N-No es... Cierto... No... Lo toques.- dije al sentir la mano de Marco acariciando mi miembro.- C-Creí... Que desayunaríamos.
Lo sé, pero lo que tengo ahora frente a mí se ve más apetecible.- dijo y sin perder más tiempo Marco comenzó a besar y a acariciar todo mi cuerpo haciéndome perder el control.
No paso mucho para que Marco acabara de nuevo conmigo, salió de la cama y entro al baño, sentí destruido mi cuerpo, aun en la cama cubrí mi rostro con las manos recordando lo que dijo ese hombre.-
Marco ¡Eres un idiota cursi!- grite aun con el rostro cubierto.
Eso te gusto de mí.- dijo Marco.
Ya aseados los dos bajamos para desayunar, vi el reloj y aun no pasaban de las 8 -¿A qué hora despertamos?- pensé mientras preparaba café, quizás Marco por la hora pensó que estaba tenso o preocupado y quiso relajarme a su manera o quizás solo quería jugar conmigo temprano. Ya teniendo todo listo para desayunar un celular sonó y Marco corrió a responder, vi hablo por un rato para luego colgar y regresar a la mesa.-
¿Importante?- pregunte.- ¿Paso algo?
No, era Luffy, quiere que vamos tu yo a comer con él y Law.- dijo Marco mientras untaba mermelada sobre un pan tostado.- Creo que quiere hacer formal el mudarse con Law antes de lo que había dicho antes.
¿Qué? ¿Mi hermanito? ¿Irse lejos?- dije asustado.- Es muy pequeño, aún está estudiando, me quedare solo.- Me levante de la silla y comencé a caminar por la sala.
Oye tranquilo.- dijo Marco, se acercó a mí y puso el pan tostado en mi boca.- Sabo, Luffy ya no es un niño que necesite de tus cuidados, y no se ira con alguien de su edad o más chico será Law, él ya es un adulto y a lo que he mirado él es la mejor opción para estar con tu pequeño hermano.
Marco tenía razón, desde que Law sale con Luffy ya no se había metido en problemas y es un poco más responsable, pero como hermano mayor la preocupación seguiría ahí.-
Tienes razón.- dije después de terminar con el pan tostado.- Cuando terminemos de desayunar vamos a dar un paseo hasta que llegue la hora de la comida, quiero pasear contigo como...
Novios.- dijo Marco.
S-si... Aunque creo que sería raro entre dos hombres.- dije al imaginar a la gente viéndonos juntos.
Esperaba con ansias que dijeras eso Sabo.- dijo Marco, tomo mi mano y la beso.- Vamos a pasear y a olvidarnos por un día de los monstruos que nos persiguen.
¿Nos? Solo van detrás de mí.- dije, pero al ver a Marco serio tan repentinamente me di cuenta de mi error al preguntar.- Perdón, aun o me acostumbro a compartir mis problemas.
Ya aprenderás.- dijo el hombre, me acerca más a él para así darme un beso.- Tus manos saben a mermelada con pan.
Ni siquiera lo pienses.- dije al ver a donde quería llegar.
No es lo que piensas.- respondió el hombre.- Solo se me hizo algo interesante, te va bien el sabor a fresa.
Gracias pero aún es un no para lo que sea que quieras intentar.- dije molesto, lo aleje de mí y regrese a la mesa.
Marco sonrió e hizo lo mismo, si perder más tiempo seguimos con el desayuno y platicamos de lo que podríamos hacer en nuestro paseo, el estómago se me llenaba de mariposas mientras imaginaba el momento.
Ya fuera de la casa, nos dirigíos al parque, en ese momento recordé que en las mañana casi no había gente y sería una escena muy romántica, mientras caminábamos, hablábamos de cosas que para otros podrían ser absurdas como el decorado de la casa, el compras muebles nuevos o salir de vacaciones algún día, me sentía en un sueño, aunque solo era una plática sencilla para mí fue lo más lindo que pudo pasarme. Siguen dentro del parque Marco tomo mi mano, al sentirlo me sonroje y vi a mi alrededor.-
Tranquilo Sabo.- dijo marco.- Estoy seguro que la gente que viene al parque ha mirado cosas peores como para darle importancia a lo nuestro.
Aun así, ¿y si nos ven unos niños?- dije asustado al imaginar el momento.
Marco no respondió y se detuvo, soltó mi mano y miro a los alrededores, para luego tomar mi rostro y acercarlo al suyo, para terminar con un tierno beso.-
Te preocupas por cosas muy pequeñas.- dijo Marco.
Al oírlo decir eso no pude evitar sonrojarme y alejarme un poco de él, respire profundo y lo tome de la mano, para luego seguir con nuestro camino. Pasaron unas horas, al salir del parque notamos que ya habían tiendas abiertas.-
Amor, vamos a ver esos locales.- dijo Marco.
Sí, quiero comprar algo para Luffy.- dije, voltee a ver a Marco y pude notar que estaba riéndose.- ¿Te ríes de mí?
Perdona, es que no dejas de pensar en Luffy aunque estés con conmigo.- dijo Marco.
Estoy seguro que también a ti te ha pasado con tus germanos.- dije molesto pero al mismo tiempo apenado.
Jamás.- respondió Marco sin pensarlo.- Esos idiotas ya me quitan mucho.
Paseamos por tiendas hasta que llego la tarde y Luffy llamo para decirnos donde nos veríamos, Marco, fue a buscar el auto y me pidió que lo esperar en la entrada del parque, mientras me dirigía a ese punto veía a los niños jugar, y por un momento recordé mi infancia con mis hermanos, al llegar al lugar me acerque a la calle y no veía a Marco, pasaron los minutos y él no llegaba, seguí esperando por uso minutos más hasta que un niño se acercó a mí y me dio una hoja de papel, se fue corriendo al interior del parque, fue extraño pero no le puse atención hasta que mire la hoja de papel.-
"No debiste poner a tu padre en mi contra, no debiste involucrar a Marco"
Rompí la hoja el papel y corrí lo más rápido que pude hasta donde habíamos dejado el auto y al llegar vi a Marco tirado en el suelo con sangre en la cabeza, grite por ayuda y unas señoras que estaban cercas se acercaron, una de ellas se aseguró de que Marco siguiera respirando mientras la otra llamaba a una ambulancia.-
Tranquilo, solo esta inconsciente, aun respira.- dijo la dama que aun revisaba a Marco.- Joven, mírame, ¿Cómo te llamas?
S-Sabo.- respondí asustado.
Muy bien.- dijo la mujer.- Sabo necesito que hagas presión aquí, iré a buscar a los niños que estoy cuidando, regresare contigo en un momento ¿está bien?
No dije nada y solo veía a Marco, la otra mujer se acercó a mí y coloco su mano sobre la mía.-
¿Es tu novio?- pregunto.- Sabo, necesitamos que te calmes.- dijo la mujer.- Habla conmigo.
S-Si.- respondí al verla, era una chica alta, muy bonita, joven y de cabello largo color rosa, lo tenía sujeto con una trenza y llevaba puesto un vestido adornado con flores, que se manchó al acercarse a ayudar a Marco.- Lo siento, tu vestido se...
¿Qué? ¿Esto? Está bien, mi padre me ha enseñado que cuando alguien necesite ayuda no me fije en pequeños detalles.- dijo la chica.- Además, solo es ropa.
¿Cómo te llamas?- pregunte al calmarme un poco.
Rebecca.- dijo la chica.- Y la mujer que fue por unos niños es mi tía, Viola.
G-Gracias.- dije al mismo tiempo que empecé a llorar.- ¡Gracias!
Me recargue del hombro de la chica y seguí llorando, unos minutos después regreso Viola al mismo tiempo que llegaban la ayuda, se llevaron a Marco pero no pude ir con el.-
¿Ese es tu auto?- pregunto Viola.
¿Eh? S-Si.- dije al verlas revisando el interior del vehículo.- Mira, hay un celular, llama a un familiar para que te acompañe cuando legues al hospital.
¿Llegue? ¿En el auto?- dije confundido.
Yo te llevare.- dio Viola.- Vamos, suban.
¿Y los niños?- pregunte al verla que regreso sola.
No te preocupes, ellos viven cercas de aquí.- dijo Viola.
Sin perder tiempo nos dirigimos al hospital, Rebecca al ver que no me movía a un teniendo el celular de Marco en la mano, decidido quitármelo y marcar ella.-
¿Dime el nombre de un familiar?- pregunto la chica.
L-Law.- dije aun paralizado por lo que estaba ocurriendo.- Busca Trafalgar Law
Mientras Rebecca llamaba a Law y Viola iba a toda velocidad al hospital, yo pensaba en quien pudo haber herido a Marco así, él es muy cuidadoso y siempre esta con la guardia alta, ¿Quién pudo aparecer frente a él para que se descuidara y permitiera esto?