Capitulo: 10
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Sin pensarlo dos veces, Yuri corrió a la orilla para verificar la inminente muerte de su esposo. Rogaba porque estuviera equivocado pero su corazón no le dejaba de latir tan fuerte que creía que se saldría de su pecho, estaba muy asustado, no solo por el o por su esposo, tenía a dos adolescentes por los que aun debía permanecer fuerte, pero sin su esposo ahí… no sabía si lo lograría.
Yurio intento seguir los pasos de su padre, pero fue detenido por los brazos de Roy quien intentaba evitar el trauma para el muchacho, el rubio intento luchar, pero de pronto se rindió y escondió el rostro en su pecho. Otabek se acercó a ellos y tomo con fuerza la mano de Yurio haciendo que se soltara del mayor y abrazara a su novio.
Para Katsuki, cada segundo que pasaba era un martirio, habia demasiado silencio y eso tan solo aumentaba sus sospechas, justo cuando estuvo a punto de inclinarse y ver, una mano le sobresalto haciendo que cayera sentado no sin antes soltar un pequeño grito alertando a los demas.
-Víctor! – Gritó al ver al dueño de aquella extremidad, inmediatamente lo ayudó a trepar
-Yuri! – Exclamo en respuesta
-No vuelvas a hacerme esto! – le grito antes de abrazarlo con fuerza
-Papi! – Yurio se soltó del agarre de Otabek y se lanzo hacia su padre casi tacleando a ambos de sus progenitores
Otabek le siguió de cerca sintiéndose aliviado de no perder a otra persona cercana a él, no más, rogaba, se sobresaltó cuando el mismo Víctor le jalo del brazo para unirlo al abrazo familiar, eso eran una familia y debían cuidarse de ahora en adelante.
-Lo siento – se disculpó el mayor – por haberlos asustado
-Eso estuvo muy cerca – dijo Sidon siendo ayudado por Link y Zelda a ponerse de pie
Cabe decir que ni el pelirrojo ni el rubio soltaron sus manos una vez que este se sostuvo sobre sus pies. Sidon sostuvo con fuerza su mano y con su pulgar acariciaba la piel del muchacho en un intento de tranquilizarse a si mismo, pues habia sido solo cuestión de suerte que ninguno de los cables de la cabina del elevador los golpeara, de cierta manera estuvieron a salvo de la enorme caja debido a la construcción de los ductos ya que pegados hacia las paredes de estos, la cabina tenía suficiente espacio para pasar sin golpearlos pero el cableado se retorcía furioso echando chispas a su alrededor… fue bastante aterrador.
-Bien – comenzó Roy una vez que todos estuvieron más calmados – debemos seguir avanzando
Se movieron de ahí hasta que llegaron al centro del barco, el agua habia roto algunas de las ventanas y caía cual cascada. Incluso algún contenedor de combustible debió haberse roto porque olía demasiado a gasolina.
Esto hizo que el estómago por ahora sensible de Oikawa, se revolviera, tuvo que soltarse de su esposo y sostenerse de la pared antes de comenzar a vaciar lo poco, o nada que contenía su estómago.
-Oikawa-san! – exclamo Sidon – estas bien?
-Si, si, solo… son las náuseas, es normal, estoy embarazado – sonrió apenado por darles aquella vergonzosa imagen
-Tranquilo – le susurro su esposo, acariciando su espalda
-Gracias Iwa-chan, creo que ya me siento mejor
Mientras se daba aquella escena, Roy analizaba el entorno, era preciso que llegaran tan pronto como podían al casco del barco, pero si seguían asi piso por piso, les llevaría bastante tiempo y teniendo en cuenta el nivel al que el agua habia llegado hasta ahora…
- ¿Qué piensas Roy? – pregunto Edward cuando vio al hombre meditar manteniendo la mirada fija en el agua
-Dame tu opinión Ed – pidió en cambio
-Claro, ¿sobre qué? – respondió viendo como el hombre se alejaba un poco de el
-Mira esto – dijo en cuanto estuvo al lado de una estructura de metal que atravesaba el lobby del barco, formaba parte de las columnas de uno de los elevadores del lobby, dicha estructura estaba doblada por la fuerza del impacto, y una de las puntas comenzaba en el piso en el que estaban… oh
-Quieres decir…
-Asi es, sé que es arriesgado, pero nos acortaría el camino y el tiempo – dijo una vez que el muchacho entendió su idea
-Concuerdo – dijo Ed – es arriesgado, pero creo que vale la pena intentarlo
- ¿Crees que tu hermano pueda con esto? – pregunto sabiendo lo mucho que al muchacho le interesaba la seguridad de su hermanito
-… - Ed tan solo suspiro – le costara trabajo, pero no podemos arriesgarnos a seguir asi, ya hemos perdido mucho tiempo… además se que si seguimos asi llegara el momento en que nos suguiera que lo dejemos y sigamos adelante y yo… simplemente no soportaría eso. – confeso
- ¿Ed? – pregunto dicho hermano cuando vio el semblante del rubio
-Tenemos una idea – dijo Ed en voz alta llamando la atención de los demas
Roy señalo la estructura de metal, explicando que la idea era usarla como un puente para poder cortar camino y ahorrar tiempo, las caras iban desde el asombro al miedo, sin embargo, tambien se encontró con algunas determinadas, entre ellas la de Sidon que se giro para mirar a los demas.
-Amigos, sé que suena aterrador, pero es nuestra mejor opcion – dijo Sidon sabiendo que sería un tanto difícil
-Entonces, no perdamos el tiempo – Dijo Shibuya sorprendiendo al pelirrojo – no será fácil pero realmente me doy cuenta de que buscar otra solución solo nos llevaría a perder el tiempo
Los demas asintieron, asustados como estaban, pero ya no se podían dar el lujo de frenar su avance.
-Muy bien, en ese caso, síganme – convoco Roy
Puso un pie sobre el puente improvisado asegurándose que era lo suficientemente firme, una vez arriba se dio la vuelta y pidió al hermano de Edward que le diera la mano irían primero. Roy lo ayudaría mientras que Edward iría después por cualquier cosa.
-Porque tenemos que seguir haciendo este tipo de cosas – se quejo Winry con nadie en realidad – odio las alturas
Ed tan solo río, ahí estaba su amiga de la infancia, no le gustaba verla tan asustada, ella normalmente era una persona realmente capaz y nada temerosa, pero suponía que esta situación los sobrepasaba.
-No eres la única – dijo Zelda que iba a su lado – yo realmente detesto este tipo de cosas, siempre he preferido los libros y el conocimiento a las actividades extremas
-Nerd – murmuro Link haciendo reír a todos
-Claro, mi hermano no habla y cuando lo hace solo es para burlarse de mi – se quejo divertida, al menos su hermanito estaba lo suficiente bien mentalmente como para bromear
-¿Todo bien allá adelante? – pregunto Sidon quien iba al final de todos
Iban avanzando con cuidado pues estaban demasiado alto como para caer. Estaban nerviosos porque cualquier movimiento del barco haría que el “puente” se moviera y… bueno, mejor no pensar en eso. Greta iba aferrada a su papá con brazos y piernas mientras este bromeaba por lo “pesada” que era su hija, Wolfram siguiendo el juego le incitaba a dejar de ser un debilucho por una vez y dejar de quejarse, la niña iba divertida ante las ocurrencias de sus padres.
-Parece que todo esta en orden Sidon – dijo Otabek quien parecía haberse repuesto ya luego del trauma de perder a sus padres
-Excelente
Una vez estando todos de pie en el otro extremo del barco, buscaron todo aquello que fuera de utilidad, rompieron un cristal para obtener las linternas de emergencia, además encontraron más botellas de agua que repartieron entre todos y unos que otros bocadillos de las mesas de servicio. Además, encontraron un botiquín de primeros auxilios que decidieron llevar por cualquier inconveniente.
Una vez mas el barco se sacudió, aunque esta vez, el temblor fue mas fuerte que las veces anteriores. “Ay no” pensó Sidon en cuanto comenzaron a escuchar el eco de gritos desesperados. Se dejo caer totalmente desecho, aquellos pedidos de ayuda solo podían significar una cosa. La cabina de aire del salón principal se habia roto, presiono con fuerza sus ojos para evitar llorar, no podía dejar que lo vieran asi, se suponía que el era el guía, tenia que mantener el animo alto, pero no podía simplemente ignorar aquello… su padre…
Se sobresalto al sentir los pequeños brazos de Link, el muchacho lo abrazo sabiendo que era lo que estaba pasando. Recibir aquella caricia logro que las lagrimas en sus ojos finalmente bajaran y los sollozos salieran de su boca. Sidon correspondió el abrazo escondiendo el rostro en el cuello del rubio quien simplemente palmeaba su espalda, no habia nada que decir para hacer menos su sufrir.
Los demas tan solo permanecieron en silencio, mostrando su respeto por aquellas vidas que en este momento se estaban apagando ante la crueldad de la naturaleza. Edward y Roy se tomaron de la mano, ambos mirando al piso ante la impotencia. Winry y Alphonse se abrazaban con tristeza.
Yuri y Wolfram se concentraban en que su pequeña hija no escuchara nada, tapaban sus oídos y hacían caras y gestos para ella que, aunque asustada, no se enteraba de nada. Oikawa escondió su rostro en el pecho de su marido y este envolvió los brazos alrededor de sus hombros.
Los Nikiforov y Otabek se abrazaron, la tristeza reinaba, pero al menos se tenían los unos a los otros. Zelda miraba a su pequeño hermano en silencio, su mano acomodada en su boca intentaba calmar sus propios sollozos, estaba muy asustada y quería que todo esto terminara.
Asi fue, cada familia se abrazó intentando ignorar el miedo que sentían por que aquello mismo les sucediera tambien, no habia nada que decir, tan solo aceptar que ellos eran los pocos afortunados que, por ahora, seguían vivos.
-Gracias Link – murmuro Sidon sin separarse del silencioso muchacho – pero debemos irnos, ya habrá tiempo para llorar nuestras perdidas – dijo con determinación
Estaban preocupados por él, tenía que ser fuerte e ignorar su luto por el bien de su grupo, el alegre pelirrojo no merecía aquello, pero no tuvieron de otra mas que resignarse y fingir que nada habia pasado.
- ¡Oh no! – exclamo Ed en cuanto sintió que sus zapatos se mojaban
- ¡El agua aumento su nivel! – grito Zelda completamente aterrada
- ¡Debemos movernos! ¡Ya! – ordeno Roy liderando el grupo, nadie lo dudo antes de seguirlo
Intentaron seguir por lo corredores, pero estaban obstruidos, el único de los caminos disponibles conducía a uno de los salones de conferencias donde casualmente habia una compuerta, pero al intentar abrirla fueron sorprendidos por un chorro de agua que salía con presión.
- ¡Ciérrala, ciérrala! – exclamo Ed a quien habia golpeado el agua directamente en la cara mojándolo todo – esta fría – se quejó
- ¿Y ahora qué? – pregunto Shibuya en voz alta
-Por aquí – Alphonse apunto a una rejilla de los ductos de ventilación
- ¿Están bromeando verdad? – dijo Winry con una risita nerviosa
-Lo siento cariño, pero no es asi – dijo Alphonse sabiendo de la claustrofobia de su esposa – será por unos momentos nada más, ni siquiera lo notaras
-Vamos – dijo Roy, entre y Sidon quitaron la rendija – uno detrás de otro ¿ok? – les indico Roy
-Adelante, yo me aseguraré de que nadie se quede atrás – respondió Sidon
Como siempre, Roy fue a la delantera seguido por Link, luego la hermana de este y la familia Shibuya seguido de los Iwaizumi y los Nikiforov, mientras que ellos avanzaban los hermanos Elric intentaban convencer a Winry de que entrara en el ducto.
-No hay tiempo – dijo Edward ya exasperado – Al entra ahí – indico, su hermano al notar su molestia no lo dudo antes de seguir sus indicaciones – Tu turno – le dijo a la chica
Sin dejar que ella respondiera la tomo del brazo y casi la obligo a meterse mientras ella negaba e intentaba salir, aun asi no le dio la oportunidad, el entro detrás de ella empujándola en cada oportunidad por lo que no le quedo de otra que seguir avanzando. Sidon un tanto incomodo con la situación no tuvo de otra mas que continuar, ya que eran los últimos era su turno.
-¿Seguro que ella estará bien? – le pregunto a Edward que no habia dejado de empujar a su amiga
-Probablemente tenga un pequeño ataque de pánico, pero no nos arriesgaríamos a dejarla aquí – dijo con decisión
Le asustaba la reacción de la chica ante lo estrecho del ducto, lo peor que podía pasar era que comenzara a hiperventilar, pero prefería pensar que no llegarían hasta ese punto.
Tuvieron que gatear un pequeño tramo, pero llego un momento en que llegaron al tope del ducto, este daba un giro hacia arriba, por suerte las paredes tenían escalones, Roy les indico que tuvieran cuidado pues las paredes eran resbalosas y los pequeños escalones eran eso, pequeños por lo que a veces costaba trabajo apoyar los pies e impulsarse.
En la cima, Roy se topo con una rendija más, intento quitarla, pero estaba atascada, con sus dedos tentó a los alrededores dándose cuenta de que estaba cerrada con tornillos. Maldijo en su mente y golpeo su frente contra la pared del ducto.
- ¿Todo está bien? – pregunto Zelda quien habia sido testigo de todo esto
-Esta cerrada, mis manos no… ¡eso es! – exclamó - Greta, linda, puedes venir aquí? – pidió a la niña que estaba unas cuantas personas abajo
-Eso creo – respondió la niña siendo ayudada por sus padres a subir
-Ten cuidado cariño – le pidió Wolfram a su hija
-Si mami
-Eso es – la felicito Roy una vez que tomo su pequeña mano entre las suyas, la ayudo a subir y sobre su propia rodilla logrando que la niña estuviera de pie – muy bien Greta, pasa tus manos por aquí – indico señalando la reja
La niña hizo caso, por suerte sus pequeñas manos lograron pasar sin ningún problema.
- ¿Dime, puedes mover el tornillo? – pregunto
Mientras ellos intentaban abrir la reja, hasta abajo, Winry cada vez se ponía más y más nerviosa debido a que el agua comenzaba a entrar por el ducto.
-Quiero salir! – rogó
-Es demasiado tarde para eso – respondió Edward volviendo a empujarla para evitar que se detuviera
-Vamos Win, ya casi lo logras – dijo Alphonse que iba delante de ellos, le costaba un poco mover la pierna, pero podía soportar aquel dolor, todo para sobrevivir
- ¿Que tanto hacen allá arriba? -se quejo Ed, Winry intentaba hacer todo lo posible para retroceder y ya le habían tocado varios golpes
Arriba, batallaban en intentar mover los tronillos, las manos de la niña no podían moverlos por si mismas. De pronto Zelda recordó algo.
- ¡Link! – exclamo – tu dije – señalo
-… - el muchacho no dijo nada, pero le miro con los ojos muy abiertos entendiendo lo que ella decía
El rubio saco una pequeña cadena que rodeaba su cuello y al final de esta se encontraba el dije de una espada de doble filo con mango entre azul y morado. Link aun recordaba cuando sus padres le regalaron aquel collar. Habia tenido bastantes problemas con vividas pesadillas sobre monstruos y mundos apocalípticos, le aterraba irse a dormir pues aquellas trágicas escenas inundaban su mente cada que cerraba sus ojos, pero todo cambio cuando sus padres llegaron con aquella espada miniatura, su madre le dijo que esa espada tenía el poder de repeler el mal y era para que en sus sueños siempre tuviera algo con que defenderse.
Además, le dijo que el espíritu de la espada, Fye, nunca dejaría que nada le dañara y siempre estaría a su lado sin importar nada. Realmente no sabia si su madre lo habia inventado todo en ese momento o realmente existía una cosa asi. Pero desde el primer dia que aquel dije rodeo su cuello, las pesadillas desaparecieron.
En fin, dicho collar llego hasta las manos de Roy que entendió la idea, felicito a Zelda por su ingenio y le explico a Greta lo que tenia que hacer, con ayuda de aquel dije podrían hacer que el tornillo girara mas fácil, la idea era utilizarlo como un desarmador. La niña apretó el dije entre sus dedos temerosa de que se le cayera.
- ¡Dense prisa! – grito Winry allá abajo
-Win tranquila! – le grito Ed en respuesta
Aun a gatas, a ellos el agua ya les habia llegado hasta los codos y comenzaban a ponerse nerviosos, aun mas por la desesperación de la chica, Alphonse habia estado hablando con ella para tranquilizarla, pero no funcionaba mucho pues ella ya habia comenzado a intentar empujar las paredes del ducto.
-No te preocupes, linda – le dijo Roy a la niña – solo sigue con lo tuyo
Lo que menos querían era que Greta se pusiera nerviosa, de lo contrario se asustaría y no podría seguir con su tarea. Evitar que la presión callera sobre sus pequeños hombros era su principal objetivo.
-Vas bien, muy bien – le animo
- ¡Al! – gritó la muchacha – no puedo, no puedo
-Ey! – exclamo Ed en cuanto se dio cuenta de a que se refería la chica, no podía respirar, estaba hiperventilando
-Winry, Win – Alphonse como pudo de dio a vuelta para quedar boca arriba en el ducto y le tomo la mano – Cariño, vamos a calmarnos, todo esta bien ok, saldremos de aquí
Mientras tranquilizaban a la rubia, la pequeña Greta lograba sacar uno de los tornillos en la rendija e iniciaba con el otro. Lo hacía lo más rápido que podía, pero aun asi le llevaba un tiempo. Roy podía escuchar como las cosas se complicaban en la parte de abajo del ducto, sabía que no podía apresurar a la niña, pero las ganas no le faltaron, Edward estaba allá abajo y le aterraba que para cuando saliera fuera demasiado tarde.
Continuara...