El reloj ya marcaba la 1:30 pm y todavía que nadie iba a recoger al pobre Jimin, ya todos sus compañeritos se habían ido, y nada que llegaba Hoseok a recogerlo.
-Peque, no llores, ya vas a ver que ahorita mismo viene tu papá!-Expresó la Profesora al ver al pobre niño tomado de su mano cansado de esperar y esperar en la entrada del colegio....
Pov Taehyung:
Me encontraba terminando algunos retoques de un logotipo que una empresa me pidió que les creara, así que era logico que me quedaría toda la tarde en mi local de diseño gráfico, pero mi trabajo fue interrumpido por una llamada de Jin:
-Tae, no puedo ir por Jimin a la escuela, porque estoy en los chequeos de salud mensuales de los niños, ya yo hablé con Hoseok y no le quedó de otra que aceptar que te llamara para pedirte ayuda, ya que él no tiene permitido salir del trabajo hasta las cinco de la tarde!-Escuché a un agitado Jin hablarme desde la otra linea.
-Pues, ese no es mi probema!-Pensé responder, pero realmente no me atreví.
-Vamos, Tae, dime que puedes hacerlo! Sinceramente no sé que tipo de problemas tengas con Hoseok, pero porfa haslo por el niño! -Habló un desesperado Jin tratando de convencerme.
-Es que Jin, tengo mucho trabajo!-Argumenté seguro.
-Pues lo vas a buscar y te lo llevas al trabajo!-Respondio Jin con tono de obviedad.
-Mira, lo haré por Jimin, pero espero que esto no se vuelva a repetir!-Suspiré fastidiado.
-Ok! Te mandaré la dirección de la escuela y el nombre de la profesora por mensaje de texto!-Oí hablar al otro con tono célebre para luego colgar.
-No puedo creer cuán bajo he caido! Ahora me toca ir a buscarle a la escuela el hijo al descarado de Hoseok!-Bufé mientras apagaba mi computadora.
Salí de mi oficina, avisandole a tres de mis empleados que saldría y pronto volvería, así que le asigné una tarea a cada cual y me encaminé en mi auto hacia la dichosa escuela.
Al principio pensé que me perdería por algunas calles que estaban arreglando, pero pronto pude divisar la escuela azul de la tanto me hablaba mi sobrino Yoongi.
Cuando llegué me sentí muy incómodo, nunca habia ido a buscar a ningún niño a la escuela, ni siquiera a mi sobrinito, pero allí estaba, haciendo esto por un pequeño desconocido que era hijo de alguien a quien le guardaba rencor.
-Hola estoy buscando al niño Jung Jimin!-Expresé al dirigirme al salón que el portero me había indicado.
Y allí estaba el menor con su carita agachada sobre la mesa, junto a la joven profesora.
-Hey, pero que sorpresas da la vida, el gran Kim Taehyung tiene hijos!-Expresó la mujer con una gran sonrisa mientras se acercaba.
-Wendy, que gusto verte! Aunque lamento decirte que el niño no es mi hijo!-Traté de no sonar fastidiando por las palabra de mi conocida.
-Ah, entonces es tu sobrinito?-Preguntó la chica con cara de confusión.
-No!-Rspondi simple viendo como wendy abría la reja para que pasara a desertar al menor que al parecer estaba profundamente dormido.
-Cómo no va a ser familia tuya, si es que se parece mucho a ti !-Wendy seguía con su raro tema, yo no le veia ninguna semejanza conmigo.
-No es mi hijo, solo contentate con eso! vale?-Respiré ondo para conservar la cordura ante aquella situación.
-Es el hijo de..... un conocido!-Pronuncié restandole importancia a la mujer para proceder a despertar al niño.
-Jimin, despierta, vine por ti!-Hablé suave mientras le palmeaba la espalda con cuidado.
-¿Preguntó el niño removiendose sin aun haber abierto los ojos.
-No chiquito, soy Taehyung!-Respondí mientras Jimin empesaba a abrir sus ojitos con lentitud.
-Pobrecito, estuvo llorando todo este tiempo porque nadie venía por él en su primer día de escuela!-Wendy se acercó pasandome la mochila del menor.
-Jimin, despierta, vamos!-Hablé para después tomar al pequeño en mis brazos ya que tenía el sueño pezado.
Luego de despedirme de mi vieja amiga me encaminé hacia el auto con Jimin en mis brazos.
-Papi, soñé que el señor Taehyung venía a buscarme!-Sentí que el menor se removió para luego aferrarse más a mi cuello mientras seguia el camino hacia la desolada salida del colegio.
-Minnie, soy Tae, te vine a buscar porque tu papá no pudo salir del trabajo!-Respondí simple, y escuché como el menor suspiraba para luego formar un pucherito, supongo.
-Es que yo quería que viniera él!-El menor volteó su cara y se acomodó para poder mirarme.
-Y no te alegra que yo venga por ti?-Pregunté fingiendo tristeza.
-Mmmh!.... Sí, si me alegra!-Después de pensarlo un momento el pequeño pelinegro me sonrió apretando mis mejillas.... cosa que me hizo morir de la ternura porque se sentía tan cercano, cuando en realidad el menor no era absolutamente nada mio...pensamiento que me hizo desanimarme un poco.
-Señor Tae, no estés trizte, ya yo te dije que estoy feliz de que me hayas venido a buscar tú! -Jimin formó un pucherito tratando de hacerme sonreir esrirando mis labios con sus manitas, como si pudiera moldear mi cara, al notar mi repentino cambio de expresión.
-Siendo así, no estaré triste!-Expresé dedicandole una sonrisa juguetona al menor...y ahora el niño me recordaba un lado de Hoseok que alguna vez muy en el pasado habia conocido.
Al llegar al auto senté a un sorprendido Jimin en el puesto de atrás colocandole el cinturón de seguridad y entregandole una bolsa de papitas fritas para que se distragera mientras llegabamos a mi oficina y ordenabamos algo de comer.
-Muchas gracias, señor Taehyung, tu carro es muy bonito, más bonito que el de mi papito, pero Shhh! No le digas a mi papá que te dije eso!-Dijo el menor antes de empezar a comer sus papitas fritas.
-Minnie, olvidé decirte que no vamos a llegar a la casa, sino que vamos a llegar a mi trabajo, y allá vamos a almorzar, y luego tu te vas a quedar quietecito mietras que yo trabajo! Vale?-El menor asintió con la boca llena y se dispuso a mirar e paisaje por la ventana.
Al llegar a mi negocio, todos mis empleados se quedaron extrañados porque no se esperaban la visita del pequeño Jimin conmigo.
-Chicos, les presento a Jiminnie, él estará acompañandonos esta tarde!- Expresé amable para que mi equipo de trabajo lo saludara desde sus puestos, cosa que hizo sentir timido al menor, por ser ahora el centro de atención, y en consecuencia escondiera su carita en mi costado.
-Awww, que lindo!-Escuché a algunas de mis empleadas suspirar de la ternura, y a mi solo me hizo formar una sonrisa por el comportamiento del menor....ajora me daban ganas de tener un hijo para presumirlo y sobre todo sentir esa felicidad inexplicable que estaba sintiendo en el momento.
-Señor Tae, si hijo es igualito a usted!-Una de las secretarías se levantó de su puesto para decirme aquello muy sonriente.
-Lamento decirles que Minnie, no es mi hijo!-Desvié la mirada incómodo.
-Pero es de su familia, cierto? Porque de verdad tienen un gran parecido! -Se metió en la conversa uno de mis diseñadores graficos.
-No, él es hijo de un conocido!, Y es mejor que se pongan a trabajar porque hoy tenemos muchos pendientes!-Desvíe el tema y me fui directo a la oficina llevando al menor tomado de mi mano.
-Mira minnie, esta es mi oficina!-
-Es muuy bonita!-Respondió el menor observando todo a su alrededor. Las parwdes eran blancas y tenían el efecto de que se derramaban pinturas de colores desde el techo, tenía mi escritorio de vidrio, una biblioteca blanca, un sofá rojo, y mi propio baño.
-Señor Taehyung, es verdad que usted es el que manda a todos en su trabajo?-El penor preguntó, muy seguramente guiado por la escena con mi equipo de trabajo.
-Sí, yo soy el dueño de esta empresa!-Respondí con aires de orgullo,despues de tono no había sido nada fácil llegar hasta donde me encontraba. Y estab seguro de que Hoseok nunca se habia poder imaginado que yo llegaría tan alto.
-Ahh, que bueno!-Dijo el menor mientras se sentaba.
-Ven, vamos a comer nuestro almuerzo aquí! Oh, y no le digas a tu papá que yo soy dueño de una empresa! Vale?-El menor asintió mientras que lo sentaba en mi puesto, el super sillón del "jefe' que era el más comodo del mundo.
-Mira, ahora tu eres el que manda en la empresa!-Expresé en tono juguetón para que el menor se sintiera importante.
-Sí, y yo ahora te mando a ti, Señor Taehyung! -El menor sonrió al captar la idea y sonrió orgulloso, mientras que mi secretaria entraba a la oficina y nos traía servidos los espaguetis que había ordenado por domicilio con anterioridad.
Tomé una silla y me senté a su lado para poder disponernos a comer.
-Bueno, señor Jefe Jimin, espero que disfrute su almuerzo de lujo.
-Sí, señor Taehyung, gracias por traerme a este restaurante tan lujioso (lujoso) !-El menor empezó a comer a la vez que se imaginaba que estábamos en un restaurante y yo le seguí el juego.
Despues de comer le dije que le contaría un cuento para que se durmiera y eso empecé a hacer pero...
-Había una vez un niño llamado Harry potter, y él hacía magia con sus amiguitos!-Empecé a relatar mientra el niño apoyaba su cabeza en mi regazo acostado en el sofá.
-Has visto la magia?-Pregunté con una idea en mente.
-No!-Respondió el menor. Así que saqué una moneda de mi bolsillo y le hice el truco de la moneda que desaparece detrás de la oreja.
-Oh. Puedes hacer magia como el niño del cuento que me estabas contando!-El menor se sorprendió a más no poder, y su expresión lo decía todo...Era tan chistosa su inocencia que me hacía sonreir sin cansarme.
-Sí, pero solo puedo hacer dos trucos por dia, porque luego se me acaba la magia!-Me hice el inreresante.
-Y puedes hacerme otra magia?-Suplicó el menor con ojitos de cachorrito.
-Sí, pero solo una más!-Alcancé un lapiz del escritorio y le hice el truco del lapiz de gelatina y el menor quedó encantado.
-Que divertido, eres magicalico, Ojalá mi papito pudiera hacer eso!-Expresó el menor con ilusión. y me parecía raro que Hoseok nunca le hubiera mostrado esos truquitos a Jimin, si fué él quien un dia me los enseñó...pero eso habia asado hace mucho tiempo.
-No es magicalico, es magico!-Corregí entre risas para poder seguir contandole la supuesta historia de Harry potter a un relajado Jimin, hasta que se quedó dormido y pude seguir el resto de la tarde con mi trabajo.
Continuará..
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