Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La Verdad Pasajera por cravatnaitospain

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

El despertador interrumpió mis sueños. Miré ligeramente hacia mi ventana y luego volví a refugiarme entre los brazos del amor de mi vida.

- Buenos días, cielo. – dijo con una voz suave. – Arriba ese culito. Tienes que ir a clase.

Tardé un poco en incorporarme, ya que me encontraba realmente a gusto. Poco a poco me iba vistiendo, mientras sentía la mirada de Jake clavada en mí mientras me cambiaba para ir al instituto.

- ¿Qué? ¿No tienes que vestirte para ir a trabajar?

- Soy profesor de una extraescolar, ¿recuerdas? – Dijo mirándome desde la cama – No tengo que ir a trabajar hasta la tarde – se estira y me vuelve a mirar – Hoy vienes a clase, ¿no?

- Por supuesto, nunca me perdería una clase tuya – dije mirándole con una sonrisa. – Pero probablemente tenga que irme un poco antes… dentro de poco empezaré con los exámenes trimestrales, y necesito repasar.

- Oh… es verdad. Lo había olvidado. – Se incorporó un poco para mirarme de forma lasciva – Últimamente he estado distrayéndote y por eso tienes que apretar en estos exámenes ¿eh?

Le lancé un cojín.

 – Tu no me has distraído, idiota – dije sonriendo. – Además, estos exámenes valen mucho más que los otros. Es normal que me quiera esforzar más que los otros.

- Si tú lo dices… -dijo con una sonrisa

Acabé de vestirme y me fui a clase. En cuanto puse un pie en mi aula, Leo y William me abordaron con las típicas preguntas de siempre sobre Jake: que si era cariñoso, atento, bueno en la cama… lo querían saber todo.

- No pienso contaros nada, ¡par de pesados! – dije con una sonrisa

- ¡Oh vamos! – dijo Leo, sentándose en el pupitre de delante. – Al menos, si no nos vas a contar nada de él, déjanos conocerle.

- Claro, eso es. – añadió William. – En una cita doble o así.

Suspiré.

- No me vais a dejar en paz hasta que acceda a ello, ¿verdad?

Asintieron. No, si ya me lo veía venir…

- Esta bien… Pero no os paséis con los comentarios ¿eh?

Lo celebraron por todo lo alto. Parecía que estuvieran a punto de conocer a una celebridad…

Le comenté a Jake lo de la cita doble y parecía estar conforme… ¿Realmente no le importaba?  Esa cita doble era un gran paso en nuestra relación, puesto que implicaba presentarle como mi novio oficial… ¿Realmente estábamos preparados para formalizar lo nuestro de esta forma?

Aun que, si a Jake no le importaba, ¿Qué problema había?

*****

A la semana siguiente, se celebró la dichosa cita. Jake y yo estábamos muy nerviosos. Aunque yo lo estaba más, puesto que conocía a Leo y William y sabía los comentarios que hacían a veces para incomodar a alguien… Y sabía que ese día, algún que otro comentario acabarían soltando.

Llegamos media hora antes al restaurante donde habíamos quedado. Los nervios hicieron que nos diéramos demasiada prisa y llegáramos tan pronto. Leo y William llegaron con 5 minutos de retraso. Algo normal, puesto que venían de casa de Leo, y ese sitio estaba algo lejos de allí. Por ese motivo, no se lo tuve en cuenta.

Al entrar al restaurante, pensaba que todo iba bien ya que el momento de la presentación de Jake a mis amigos, estos se mostraron pacíficos y amistosos. Por lo que, inocente de mí, pensé que todo iba bien. Pero no.

Los verdaderos problemas vinieron después.

- Un buen sitio ¿eh? – dijo Jake una vez sentados en la mesa.

- Si, lo he escogido yo. – Le contestó Leo – Es un sitio al que suelo ir a menudo.

La cosa avanzaba bien. Los tres se estaban tratando bien, hablábamos, contábamos anécdotas, nos reíamos… Todo perfecto. Pero entonces…

- Oye Jake. – empezó a decir Leo con un tono sospechoso - ¿Y tú como eres en la cama? ¿Eres cariñoso o brusco?

… ¿Eh?

- ¿C-cómo? – preguntó Jake, totalmente desconcertado.

- Lo pregunto porque estoy preocupado por nuestro amigo, ¿sabes? Ha tenido malas experiencias, como bien sabrás, y no nos gustaría enterarnos de que solo le usas para acostarte con él y ya está… entiéndenos.

- ¡Leo! – le grité.

- Además… - continuó William – Pareces ser el típico chico musculitos que solo le importa su físico. – Se acercó a él con cara seria. – pero me gustaría decir que me equivoco, ¿sabes?

- ¡William!

- te aseguro que no soy así – contestó Jake con una sonrisa sarcástica, y luego se dirigió a Leo. – Y para tu información, soy cariñoso y le amo de verdad. Nunca le usaría solo para el sexo.  

- Cariño, no les sigas el juego – dije mirándole y tomándole de la mano, luego miré a Leo y William con cara de muy pocos amigos. - ¡Y vosotros dos, parad ya!

No daba crédito a lo que estaba viendo. ¿Era posible que, mis dos mejores amigos, hubieran soltado ese tipo de comentarios? ¿Por qué le decían eso con ese tono tan hostil? Es como si le tuvieran rabia a Jake por salir conmigo pero… ¿Por qué?

Jake se levantó, no podía soportarlo más.

- C-creo que me voy – dijo con la voz temblorosa.

Fui detrás de él, no sin antes lanzarles mi servilleta lleno de rabia a la cara a Leo y William.

- ¡Imbéciles! – dije lleno de rabia antes de  irme.

Salí y le cogí de la manga para que no se fuera

- ¡Lo siento, lo siento, lo siento! – Dije suplicante- No pensé que soltarían ese tipo de comentarios… ¡De hecho, aun no me lo creo que lo hayan hecho! – le miré a los ojos. – lo siento

Me negó con la cabeza.

- No pasa nada, solo… - suspiró profundamente. – creo que no les caigo demasiado bien a tus amigos…

- pero… ¡Si durante el resto de la cena han estado muy amables! No entiendo nada…

- Yo tampoco. – Añadió – Tendré que ir con cuidado con todo lo que haga de ahora en adelante… No vaya a ser que me corten el cuello – dijo riendo un poco.

Sin pensármelo dos veces, le besé.

- Tú… no tienes la culpa de nada. – le dije.

Nos besamos en medio de la calle y nos fundimos en un abrazo.

*****

Las semanas siguientes se podrían resumir en Leo y William yendo detrás de mí y llamándome a cada minuto para pedirme perdón por su comportamiento en la cena… Pero yo no quería ceder. Estaba realmente enfadado con ellos.

Tal fue su acoso por parte de ellos dos para que les perdonara, que hasta extorsionaron a Neil para que este me intentara convencer.

- Neil… - le dije en una videollamada. – No te preocupes, ya hablaré con ellos cuando se me pase el enfado… pero de momento no se me ha pasado.

- ¿tan grave es lo que te dijeron?

Suspiré profundamente.

- En realidad, me molesta más que te hayan metido en esto.

Se encogió de hombros.

- A mí no me importa… Pero, sinceramente, solo quiero que seas feliz – dijo con una sonrisa – Por cierto, dile a Jake que si puede pasarme los apuntes de alemán que me dijo el otro día.

En efecto, Neil y Jake se hablaban. Realmente, me sorprendió lo rápido que congeniaron. Incluso Jake, que tenía ascendencia alemana por parte de sus abuelos maternos, se ofreció para darle clases online de alemán a Neil, que realmente lo necesitaba. Y no solo eso, le aconsejaba sobre cómo vivir en Alemania, las costumbres, los precios, los lugares más bonitos… se estaba portando realmente bien. Y Neil, más de lo mismo.

- ¿te sorprende que tu ex y yo nos llevemos bien? – me preguntó un día en la cama

- Un poco, la verdad. –Le confesé- no es por ti, ni por él tampoco. Es porque pensaba que, entre presentarte a mis amigos, a mi madre o a mi ex, esta última iba a ser la que más problemas me iban a dar.

Sonrió un poco.

- ¿Qué ocurre? – pregunté.

- Ocurre que, lo que pensabas que te iba a dar más problemas es lo que al final ha ido mejor.

Sonreí y le besé.

- Sinceramente… - Empecé a decir – Que os llevéis tan bien me hace… tan feliz.

- Y a mí. Pero, de todos modos, lo de tu madre tampoco fue mal del todo, ¿no?

Me quedé pensativo unos segundos.

– No… del todo. Solo expresó la misma preocupación por que me hicieras daño de Leo y William pero con unas palabras más amables.

Asintió con una sonrisa.

- Tienes una madre muy buena… - se incorporó un poco para mirarme a los ojos. – Y unos amigos que, aunque no lo expresaron bien, se preocupan por que no te hagan daño como te pasó aquella vez…

 Me acarició la mejilla muy suavemente, como si temiera que me fuera a romper después de ese comentario.

- ¿Vas a… perdonarlos algún día? – dijo, con el tono más suave que pudo encontrar.

Me encogí de hombros, era difícil saberlo. Ya no estaba enfadado con ellos, pero es que ciertamente me habían hecho daño.

- No lo sé… Pero es que me molesta que hayan involucrado a Neil para que me intentara convencer de que les perdonara.

Suspiró, muy profundamente.

- Haz lo que tengas que hacer, cariño.

Me acogió en sus brazos de nuevo. Últimamente, era lo único que hacía.

*****

Poco tiempo después, cuando aún estaba debatiendo si debería perdonar a Leo y a William por lo que hicieron, pasó algo que hizo que lo que sentía por Jake se intensificara.

Pasó cuando salimos de clase de defensa personal, que él me iba a acompañar a casa, como siempre hacia. Cuando pensábamos que no nos veía nadie, nos cogimos de la mano. En ese momento oí una voz a mis espaldas que me dejó helado.

- Así que los rumores son ciertos ¿eh? Estas saliendo con él.

Dentro de mí desee que mi mente me hubiera jugado una mala pasada y no hubiera oído esa voz… pero cuando me giré, mis mayores temores se confirmaron.

- ¿D-Dennis?

Jake puso cara de asustado y sorprendido a la vez.

- ¿Ese es…?

Asentí, sin mirarle. Empecé a temblar de forma brusca.

- Veo que has encontrado a alguien que te haga lo que yo te hacía, ¿eh?

- Si… ¡Pero al menos él no me fuerza a hacerlo! ¡Lo hago yo porque quiero! – dije yo, con un tono bastante alto y sacando una valentía de dentro que ni yo mismo sabía que tenía.

Empezó a reírse de forma sarcástica. Yo me estremecí. Esa voz me traía muy malos recuerdos y me hacía entrar en un estado de miedo y terror bastante fuertes… pero la verdad, es que no tuve mucho tiempo para estar así. Cuando me quise dar cuenta, Jake se había encarado con Dennis y le decía que se largara. Dennis, como era obvio, no le hizo caso a la primera, pero hizo falta que Jake le hiciera una llave igualita a la que me enseñaba en clase para que, después de haberse caído de bruces al suelo, se levantara y se fuera corriendo.

- ¡Esto no acaba aquí! – dijo mientras se iba, al más puro estilo de las series americanas.

Al ver que se había ido, se dirigió hacia mí y me plantó un beso en los morros con una sonrisa.

- Ala, solucionado. – dijo todo orgulloso.

Yo estaba en shock… ¿Era posible lo que acababa de ver? Había echado a Dennis con una facilidad que me costaba de creer. Si hubiera estado solo… Realmente hubiera huido por patas.

Una sonrisa boba se formó en mi rostro. Jake me miró intrigado mientras me tomaba de la mano.

- ¿Te ocurre algo?

- Nada, solo… que estoy feliz.

- ¿Por qué? ¿Por qué le he echado? Para mí no ha sido nada, realmente me ha resultado fácil.

Sonreí y negué con la cabeza. No, no era por eso.

 

Era mucho más que eso.

CONTINUARÁ…

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).