-Voy a salir un rato mamá
Intentó darle un beso pero ella se apartó con asco.
-Ya te he dicho que no me llames así niño estúpido
-Yo… no tardaré, lo prometo
-Por mí no regreses, hazme un favor y muere de una puta vez
No hubo necesidad de que volteará para notar que lloraba, sus hombros temblorosos lo delataban.
¿Qué si se arrepentía de tratarlo así?
Para nada, todo lo contrario, disfrutaba hacerlo, un placer la invadía cada vez que lo humillaba y lo golpeaba. Francamente esperaba que pasará bien ese día porque en la noche…
Oh no, iba a jugar con él.
A fin de cuentas, no compró aquella macana con afilados picos para nada.
-Disfruta mientras puedas JongWoon –bebió una gran cantidad de alcohol y sacó un celular de su bolsillo del pantalón. –Seok cariño, necesito que vengas esta noche… hay que estrenar un juego con Yesungnie…
…
Los nervios lo carcomían por dentro y sus manos sudadas lo confirmaban, había pasado parte de la noche eligiendo algo para ponerse hasta que se decidió por unos pantalones negros y una sudadera roja, un gorro del mismo color y tenis oscuros, no eran sus mejores trapos pero al menos lo cubrían del frío. Sabía por la propia boca del castaño que su familia provenía de una familia adinerad pero esto que tenía enfrente sobrepasa sus expectativas. Una inmensa mansión, como veinte veces más grande que su casa era lo que lo tenían con la boca abierta, se podía ver un gran jardín y varios hombres cuidando del lugar.
¿En dónde rayos se metió?
-¿Puedo ayudarlo en algo?
Un señor mayor, vestido como esos personajes de la película Hombres de negro fue quien lo sacó de su admiración.
-Buscó a Kyuhyun –susurró algo cohibido.
-¿Quién es usted?
-Soy Kim JongWoon, él… me invitó ayer en el colegio -comenzó a explicar al ver como el “agente” buscaba algo en lo que parecía ser un celular.
-¿Yesung?
-Sí…
-Pase por favor, el joven Cho lo espera adentro
Atravesó unas rejas enormes y siguió al mayor en silencio, casi se desmaya por las diversas fuentes que adornaban el recibidor.
Eh ahí la diferencia de clases Yesungnie, realmente eres un interesado.
-No soy un interesado –se defendió.
-¿Ha dicho algo?
-No, nada
El camino continúo igual sin ninguna palabra, después de un minuto pudo ingresar a la casa y si antes de entrar estaba sorprendido ahora el color había abandonado su cuerpo.
¡Por Dios! La sala de bienvenida no era ni la mitad de su cuarto.
-¡Yesung!
Fue tacleado y lanzado al piso por un cuerpo que ahora se encontraba sobre él.
Déjà vu.
-Donghae –inició sin aire. –No pue…do respirar
-¡Por todos los peces! Kyuhyun va a matarme si se entera que volví a tirarte
-Tra…quilo, no tiene por qué enterarse
-¡Pero si estas pálido!
-Estoy bien, mejor dime algo
-Lo que quieras
-¿Cada que me veas vas a tirarme?
Mostró sus dientes blancos y comenzó a reír como loco, su personalidad no concordaba con la de Kyu, quien era un poco más serio, lo sabía porque había estado espiándolo, no de mala manera, él solamente quería conocerlo un poco más.
-Donghae ¿volviste a esconder mi celu…lar?
Un chico salió, uno un poco más alto que ellos, con una cabellera rubia que le daba un toque juguetón y tierno.
-Mucho gusto –mostró una inclinación de noventa grados, tal y como había aprendido de niño.
-Mucho gusto –repitió el gesto. –Soy Leeteuk, el hermano mayor de este niño –apuntó a Hae quien parecía estar ¿tarareando? –Y del hombre que tienes como novio
-¿Kyuhyun les dijo… eso?
-Umm –puso un dedo en el mentón haciéndolo lucir pensativo. –No, lo gritó
No supo cómo reaccionar, por dentro gritaba de la emoción pero por fuera lucía…
-¿Te sientes bien? luces algo perdido y… encantador
Reaccionó a lo último, se deshizo de la cara de bobo y la cambió por una de completa ternura para el mayor, algo dentro de él se removió, JongWoon se le hacía conocido.
-Ven –alzó la mano para ofrecérsela pero no esperaba la reacción del bajito, quien brincó en su lugar y cerró los ojos con fuerza. –¿Te he asustado? –asintió. –Lo siento, no era mi intención
-Descuida yo me… asusto con facilidad –se excusó.
¿Dónde había escuchado esa excusa antes?
-Es cierto hyung, la otra vez Wookie quiso abrazarlo por detrás y Yesung gritó, ¡hasta se hizo bolita! Es muy asustadizo
-¿En serio?
-¡Sí! Fíjate, fíjate, fíjate
El rostro de Kyungsoo llegó a su mente, a Do lo habían violado y se mostraba reacio, no dejaba que desconocidos lo tocarán y reaccionaba atemorizado a cada gesto que se hiciera de repente.
¿Será que…? No, tal vez todo se deba a su personalidad.
Mostró una sonrisa que siempre hacía para sus pacientes y que funcionó en él, tragó en seco.
No Leeteuk tranquilízate, no te hagas idea, tú todavía sigues traumado por el caso del niño. Todo está bien.
-Vamos, te mostrare la casa, ¡Hae!
-¿Si hyung? –se sobresaltó, su mente estaba en la salud de sus peces.
-Ve y busca a Kyunie, dile que ya está aquí su chico
-¡Por supuesto! –antes de desaparecer de la vista de ambos se giró y puso una cara de completa inocencia. –Teukie…
-¿Sí bebe?
-Tu celular lo escondí en la caja de mis galletas –y huyó de manera adorable.
-Ese niño…
-¿Siempre ha sido así?
-Siempre
-Qué bueno
Otra sonrisa surgió, le había agradado, lo vio de reojo y no pudo evitar sentir una punzada en su pecho.
¿Dónde he visto ese rostro?
-Hyung ¿vas a mostrarme la casa?
“Estoy sólo hyung”
“Mami se enojó conmigo”
-¿Hyung?
“¿Tú serás mi amigo?”
-¡Hyung! –gritó para que saliera de trance.
-¿Qué? Ah sí, yo… vamos, te enseñaré el lugar favorito de Kyuhyun
¿A qué se debían esos recuerdos?
-¿Kyu tiene un lugar favorito?
-Todos lo tenemos pequeño, ¿tú no?
Cualquier sitio lejos de Seok está bien.
-Sí…
Otra vez esa mirada vacía y triste, su corazón se aceleró e imágenes de él siendo agraviado le llegaron. Salió de su trance con las apenas audibles expresiones del pelinegro, apreció su rostro, que tomaba gestos de admiración a sorpresa.
-¿Te gusta el lugar JongWoon?
-Es increíble hyung, pero dime Yesung
“Papá una vez me nombró Yesung, fue el día más feliz de mi vida.”
-Te diré así entonces –una sonrisa falsa fue lo único que pudo exhibir. –Mira, por allá está el sitio preferido de Kyunie
-¿Esa casota?
-No es una casa cariño, es un invernadero
Entraron y los ojos del menor se iluminaron, había diferentes tipos de flores, todas de ellas hermosas.
-¿A él le gustan las flores?
-No exactamente, le gusta apreciar su belleza, siempre ha dicho que las plantas sobreviven a pesar de las adversidades que pasan, en lugar de marchitarse o secarse con los fríos estás crecen con mayor fuerza, se hacen fuertes…
Yesung quería llorar, las palabras de su hyung le llegaron.
¿El sería como una flor? Conocía la respuesta… no. Porque se consideraba todo, excepto una persona fuerte que destilará belleza, su cuerpo poseía marcas, marcas que le habían hecho y que él mismo se provocaba cada vez que quería desaparecer.
Leeteuk detallaba sus facciones y notó el cambio, su respiración era errática y el sudor comenzaba a escurrirle por la frente y parte de su cuello.
Respiró hondo, iba a hacer algo de lo que probablemente se arrepentiría… o no. Existían dos reacciones y francamente esperaba que tomará la correcta.
Se acercó con sigilo por detrás de él, con una gran bocanada de aire se dio valor, aproximó sus manos a la cadera del chico de manera lenta y junto sus labios en su oído.
-¿Todo bi…
-¡No! –se acuclilló en el suelo y varios gemidos lastimeros se dejaron oír. -No lo hagas por favor… -imploró con la voz quebrada.
Estaba en lo correcto… a Yesung lo habían violado.