En unos minutos, los cuatro chicos se encontraban llegando a las cercanías del lugar donde Dave les había indicado.
Ignis estaciono de nuevo el Regalia y los chicos se bajaron a inspeccionar;
-más adelante se encuentra el santuario de Saint Capitiz. Deberíamos descansar ahí antes de emprender la caza
-primero inspeccionemos bien el terreno. Ya hemos estado aquí, pero sería bueno darle otra revisada- objeto Gladio
-además es temprano y hay que tener en cuenta que la Arboleda de Steyliff se abre solo con luz lunar- concluyó Ignis y vio como el atardecer se acercaba
-vayamos entonces, está a punto de abrirse- exclamo Noctis empezando a caminar hacia la mazmorra cercana
-¡que empiece la diversión! - soltó Gladio con energía mientras que Prompto tomaba fotografías de sus amigos.
. . .
Los cuatro chicos salieron de la mazmorra un poco después de que entraron;
-gracias por las pociones Iggy, fueron de mucha ayuda- dijo Gladio mientras se masajeaba los hombros
-no fue tan difícil pelear contra el Quetzalcóatl, pero si era bastante escurridizo- exclamo Prompto cuando se subió al auto
-debemos darnos prisa de llegar al santuario antes de que los cadentes empiecen a aparecer- concluyó Ignis, encendió el Regalia y continuo su camino hasta el santuario.
Después de unos metros, los chicos llegaron hasta el santuario de Saint Capitiz. Cuando Ignis estaciono el auto en el aparcadero, el primero en bajarse fue Prompto, quien comenzó a tomar fotografías del lugar y de las luciérnagas que se escurrían por la noche, en lo que los otros bajaban las cosas del campamento;
- ¡Prompto! - grito Ignis desde la cajuela del Regalia - ¡ven a bajar las cosas de la tienda!
- ¡el que no ayuda no come chico Chocobo! - exclamo Gladio entre risas mientras que colocaba las mesas y las sillas plegables en el suelo del santuario
- ¡¿Qué?!- grito el chico asustado y corrió donde Ignis a bajar las cosas que este le ordenaba - ¿y porque Noct no ayuda?... ¿y dónde está?
-Noct está pescando nuestra cena de hoy- dijo Ignis desde la cima del santuario mientras que preparaba su amada cocina
-no es justo que él se divierta- contesto el rubio con un puchero
-no pidas mucho y deja que el príncipe se divierta- soltó Gladio divertido - ¿Oh quieres ir a cazar a oscuras?
-aquí estoy bien- concluyo el otro cuando vio que Noctis volvía con varios pescados de diferentes tamaños.
El chico se los entrego a Ignis y este se dispuso a cocinar. En unos cuantos minutos, los cuatro amigos se encontraban frente a la fogata comiendo tranquilamente;
-sin contar con la pelea contra la bestia, hoy ha sido un día tranquilo- decía Gladio con cansancio
-mañana debemos buscar el siguiente mausoleo, después de ir por la recompensa- comento Noctis y miro a Ignis, quien se levantó y le extendió una pequeña sonrisa
-tiene razón su Alteza. - dijo -Pero por hoy descansemos, hace una bonita noche
-yo tomare unas cuantas fotografías más. - exclamó Prompto con alegría y se acercó al borde del santuario -Noct… ¿vienes?
-claro
-no se alejen mucho, saben que pueden salir candentes o monstruos
- ¡sí! - dijeron los más jóvenes al unísono y comenzaron a caminar hacia el lago.
Al llegar, el rubio se acercó al lago y saco su cámara, sin notar que algo había caído de su bolsillo. Noctis lo vio y lo recogió, mientras que el otro seguía ensimismado tomando las fotografías.
Noctis miro al rubio por un segundo, con los ojos como platos y acercándose lentamente a su amigo, le toco el hombro;
-Prompto… - dijo en un susurro y le extendió una hoja de papel algo doblada. El rubio el tomo dudoso y al abrirla, cambio su rostro por uno asustado; - ¿eso es verdad?
-yo… - respondió Prompto, pero las palabras no le salían mientras que el otro lo miraba fijamente
- ¿eso es para mí? -. El chico guardo silencio, aun se mantenía muy asustado - ¡responde! - dijo Noctis con autoridad a lo que él otro rio con nerviosismo
-claro que no, - dijo aun nervioso -era para Cindy… pero me dio pena dársela… sabes cómo me pongo cuando tengo a nuestra diosa cerca he he
-no sabía que a Cindy le gustara pescar
“demonios” pensó Prompto muy avergonzado. Ya no había escapatoria, había sido descubierto. El secreto que había guardado durante tanto tiempo fue revelado por un descuido.
Se creo un silencio incomodo, hasta que Noctis se sentó en la hierba y miro hacia el lago con detenimiento mientras que Prompto se movía con impaciencia.
Noctis miro como un pequeño pez saltaba fuera del agua y en el momento en que entro de nuevo a ella, comenzó a hablar;
- ¿desde cuándo? - pregunto con seriedad el príncipe sin separar la mirada del agua
- ¿perdón? - dijo el otro sin entender
-desde hace cuánto… ¿te gusto? - pregunto de nuevo el príncipe, pero esta vez volteo a mirarlo. El rubio se puso rojo hasta las orejas y dio un suspiro triste;
-desde la secundaria… - comenzó a decir Prompto y se sentó junto a su amigo, -Desde que la dama Lunafreya me pidió que fuera tu amigo, yo comencé a ejercitarme para ser el digno amigo del gran príncipe de Lucis.
>> Desde la escuela primaria te admiraba, eras tan popular, increíble y siempre rodeado de todos, mientras que yo… solo era un perdedor. Entonces, comencé a ejercitarme hasta que sentí que ya estaba a tu nivel y así poder hablarte cuando ya estábamos en secundaria. Entonces comenzamos nuestra amistad y de ahí… mis sentimientos…
- ¿Por qué nunca me dijiste nada? - pregunto el príncipe sin inmutarse
- ¿no es obvio? - exclamo el otro -Desde casi tu nacimiento estas comprometido con la Oráculo… ¡vas a casarte Noct!
-pero…
- ¡pero nada dude! - el rubio se puso de pie de un salto - ¡estas por casarte y yo no me voy a entrometer!
-Prompto- dijo Noctis poniéndose de pie también
- ¡no voy a traicionar a Luna así! ¡ya lo estoy haciendo por tener sentimientos por ti dude!
-Prompto-. El rubio suspiro,
-me voy a dormir… Iggy debe estar preocupado, mejor regresemos
-Ignis puede esperar- exclamo Noctis tomando el brazo de su amigo
-Noct, vamos a… - y antes de que terminara de hablar, el chico fue callado por un beso del príncipe.