(Sebastián & Ciel.)
Cabalgar es sinónimo de relajación, de un momento dónde disfrutas de una conexión magistral con un equino pura sangre, una sensación por demás fabulosa que te mueres por probar apenas lees sobre ello...
Sebastián no opina lo mismo...
Era una tarde común y corriente, la última clase del día había sido suspendida así que los alumnos salieron temprano del instituto a desperdiciar sus vidas en sexo, drogas y alcohol. #YOLO Ejem! Quise decir ir a sus casas para pasar tiempo de calidad con sus familias discutiendo textos bíblicos, después de todo es viernes
Afortunadamente Ciel y Sebastián no son de ese tipo y decidieron ir a casa del primero para avanzar con sus trabajos de geografía y poder tener fin de semana libre para ir a Daytona, después de todo, pases all acces con entrada a pits a una carrera no te los regalan todos los días así que hay que aprovechar. Para su mala fortuna cuando se trata de estudiar juntos este par son extremadamente rápidos así que siempre terminan con bastante tiempo de sobra que si bien podrían aprovechar viendo un maratón de Mega-construcciones en History Chanel ellos han aprendido a aprovecharlo de una forma un tanto más candente.
Si su sincronía a la hora de estudiar era fabulosa capas de asombrar a los más altos mandos del colegio pero, su sincronía a la hora de follar podría impactar hasta a la actriz porno más experimentada del mundo.
Con las piernas abiertas a más no poder se encontraba Ciel recibiendo las embestidas de Sebastián que a cada arremetida parecía ir más profundo en su interior. Por su parte Sebastián además de golpear el interior del menor como si le odiará se encarga de morder su cuello en busca de brindarle tanto placer como sea posible.
-Date vuelta.- dice Sebastián antes de darle un corto beso en los labios y salir de él, por su parte Ciel obedece y se gira dejando su trasero levantado para ser penetrado esta vez de una forma más que ruda haciendo que sus brazos flaqueen dejando su rostro hundido en el cojín del sillón.
-Ahhh!!! Siiii …- gime Ciel moviendo su cadera en busca de una mayor profundidad. –Ahhh!!! Más…¿ Eh- eso es todo?-
-Quisieras niño bonito.- sonríe antes de salir de nueva cuenta del menor y atraerlo hacia él. –Hazlo tú mismo.-
Ciel con una sonrisa se monta sobre el mayor y comienza a subir y bajar rápidamente por aquella dura erección buscando más placer.
-¿Es todo lo que tienes ‘Cielito’?- pregunta Sebastián moviendo sus caderas contra el menor.
-Quisieras anciano.- responde antes de apoyarse sobre los hombros del azabache con la intención de moverse más rápido y también de forma más ruda
-MALDITO IMBESIL!!!-
Se oye un grito de Sebastián con una voz totalmente adolorida mientras avienta a Ciel lejos de él.
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¿Cabalgar?
Sebastián jamás va a dejar que alguien lo vuelva a hacer.
Créelo, no es una sensación nada agradable el llegar a la sala de urgencias con una fractura de pene mientras un par de doctores te toquetean y las internas de enfermería se burlan y secretean a lo lejos.
Moraleja: Si al Titán no quieres matar, cuidado deberás tener al montar.
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(Soma & Agni)
No hay situación más hermosa en esta vida que el saberte correspondido por aquella persona que has amado durante años y Agni lo sabe pues él ha vivido enamorado del hijo del embajador de la India en Inglaterra desde que estos le emplearon. 5 años después el es la persona más feliz del mundo pues hace 3 meses su amado le declaro su amor y el no pudo hacer más que llorar de alegría. Ahora que ha pasado el tiempo ha llegado la hora de dar el siguiente paso y que mejor que en una noche estrellada después del festejo del muchacho que hoy cumplía los 18 años.
Ambos se encuentran desnudos bajo las sabanas besándose de forma tierna mientras el mayor acaricia el cuerpo del otro con toda la devoción que le profesa.
-Nhhh… Agni.- jadea el más joven al sentir las manos del otro pasearse por sus piernas
-Soma, te amo.- susurra sobre los labios del menor antes de acomodarse listo para arremeter en su interior.
-Soma, tu madre te… ¿Qué están haciendo?- pregunta el embajador que entraba a la habitación.
-Ehhh… yo…-
-Olvídalo, ya eres mayor de edad y yo no puedo decirte nada. Solo utilicen protección, no los quiero enfermos al rato.- dice el embajador levemente sonrojado antes de salir de nueva cuenta dejando a la hermosa pareja totalmente cohibida cubriéndose con las sabanas sin mirarse de ningún modo.
-Creo que mejor no levantamos, ¿No le parece?-
Moraleja: Si a tu amor deseas tocar, la casa de tu suegro no te olvides de respetar.
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(Grell & Will.)
Tener 25 años y ser exitoso en los negocios no es la clave de la felicidad, ¿O sí?
Grell Sutcliffe y William T. Spears son socios fundadores de la mundialmente conocida Death Store, la tienda en línea más poderosa que se ha visto en la última década pues esta es incluso más conocida que amazon.
Jóvenes, atractivos y multimillonarios, el sueño de cualquier mujer interesada y vaya que pretendientes jamás les han faltado, sin embargo ninguna a cubierto al menos un 30% de sus expectativas, por ello es que han terminado en esta situación.
Grell recostado en el escritorio de cristal mientras este lo embiste de forma realmente tosca olvidando que también es la primera vez del sujeto que lo acoge en su interior, sin embargo a Grell no parece molestarle dicha situación pues a cada arremetida el volumen de sus gritos aumenta de forma descarada, tanto así que es casi seguro que sus sonidos de placer se escuchan en el edificio de al lado.
Spears siempre se sintió atraído hacia Sutcliffe desde que lo conoció en el dormitorio de la universidad, sin embargo jamás menciono nada por temor al qué dirán, así que decidió aprovechar la oportunidad que hoy se presento con ambos totalmente ebrios.
La cada vez más pesada respiración de ambos les hace saber que el fin esta cerca y después de un par de estocadas sucede con Will llegando al orgasmo en el interior del pelirojo mientras este se encarga de atenderse a sí mismo con su derecha hasta que termina unos segundos después.
-Eso no estuvo tan mal.- dice el castaño retirándose del pelirojo.
-Sí, aunque fue muy rápido.- responde Grell antes de bajarse del escritorio y buscar su ropa.
-Emmm… Grell…- llama nervioso al pelirojo cuando mira algo extraño asomado en su entrada.
-¿Qué pasa Will? ¿Acaso quieres otra ronda?-
-Emmm…No… O no por ahora, primero necesito que me devuelvas el preservativo que se quedo dentro de ti.-
-¿Ehhh?- curioso Grell se agacha abriendo sus piernas y allí se encuentra con la tira morada del preservativo asomada en su trasero. –Olvídate de que esto vuelva a pasar hasta que no aprendas a usarlo.- dice molesto el pelirojo antes de echar de su oficina al otro sin importarle que también está a medio vestir.
Moraleja: Si follar quieres, aprender a usar el preservativo debes.
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(Alois & Claude.)
El primer aniversario como pareja siempre es el más alegre, en el que más te esmeras para festeja, te esfuerzas en conseguir un regalo maravilloso y te preocupas por lucir perfecto para tu pareja.
Alois y Claude salieron con esa idea de sus casas dispuestos a encontrarse en el parque para tener una noche espectacular para culminar todo en la habitación del mayor arreglada especialmente para la ocasión, sin embargo las cosas no siempre salen como las planeas.
El tráfico les hizo perder la reservación en aquel restaurante de lujo, aun así ninguno de los dos perdió el ánimo y lo solucionaron comiendo una crepa sentados en una banca en el parque.
Lo segundo en la agenda era ir al teatro a ver Cats por numero 220 en el tiempo que llevan saliendo, ahhh!!! Ventajas de ser una pareja amante del teatro, sin embargo al llegar a la sala se encuentran con que la función se pospone debido a un virus que ataca a más del 30 % del elenco. Aún así nuestra pareja de enamorados no pierde la sonrisa y vuelve al parque donde un centenar de personas se reúnen en para un concurso de baile, el cual al final nuestra pareja gano con una excelente coreografía de “I say a Little prayer”
La tercera actividad en la agenda era un romántico paseo tomados de la mano mientras caminan de vuelta a casa del mayor alistándose para cerrar con broche de oro su noche de aniversario. Sin embargo el clima no parece estar de su lado, pues de la nada se ha soltado un terrible diluvio que obliga a la gente a correr para resguardarse del agua que amenaza con inundar Londres.
-Estoy arto!!!.- dice Claude golpeando la pared frente a ellos sin importarle empaparse en menos de 30 segundos. –Por favor no me malinterpretes, pasar el día contigo ha sido fabuloso, pero ninguno de nuestros planes ha salido bien.-
-Para mí ha sido un día de cita fabuloso.- sonríe antes de caminar hacia su pareja empapándose también unos segundos después. –No sabía que vendieran crepas tan deliciosas en Londres.-
-Pero, ¿Qué hay del teatro?-
-Hemos visto Cats antes, además creo que fue incluso mejor ganar el concurso de baile con una coreografía que creamos los dos en la academia de artes.-
-¿Y qué hay de caminar de vuelta a mi casa tomados de la mano hablando de lo fabuloso que ha sido este tiempo juntos y terminar la noche haciendo el amor?-
-Apenas son las 10, la noche es joven, podemos ir a tu casa y hacer que esa última parte del plan salga bien.-
-Me niego a que nos movamos de este lugar, mi suerte ha sido tan mala que seguro apenas salgamos de este callejón podría caernos un hipopótamo encima.-
-Bien Claude, tú ganas, nos quedaremos aquí hasta que la lluvia pare un poco.- dice el rubio desganado recargándose en una pared. –Tengo frio.- exclama después de un rato a lo que Claude de inmediato lo abraza de forma protectora.
-Lo siento Alois, yo en verdad quería darte una cita de aniversario perfecta.- dice Claude un poco triste luego de algunos minutos.
-Claude, hemos tenido un día curioso, pero yo lo considero más que perfecto.- sonríe antes de atraer al mayor para un beso.
-¿De verdad?-
-¿A caso yo digo mentiras?... Bien, mejor no respondas a eso.- sonríe. –Hay algo que aun puedes hacer por mí.-
-¿Y que podría ser?-
-Siempre he tenido la fantasía de que lo hagamos en un lugar donde nos puedan atrapar fácilmente.-
-¿Es enserio?-
-Sí, siempre he creído que la sensación de peligro vuelve todo más excitante.-
-¿Te parece bien este callejón?- como respuesta Alois rodea con uno de sus brazos el cuello del mayor mientras que con la mano libre comienza a acariciar su entrepierna. –Hagámoslo entonces cariño, solo no grites demasiado…
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-Pantalones arriba y las manos donde pueda verlas.-
Nuestra pareja se encontraba más que concentrada en su actividad sin percatarse de que la lluvia hace rato había parado y 2 policías les apuntaban con sus armas.
-Waaa!!!- gritan ambos asustados mientras arreglan sus ropas.-
-Manos contra la pared, están arrestados por exhibicionistas…
Moraleja: Todo día malo tiene solución, aunque eso signifique terminar en prisión.
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(Ciel & Sebastián.) (Otra vez.)
Nuestra escena comienza un mes después de la anterior en casa de Sebastián donde este se encuentra mirando la tv con un Ciel que se restriega en su brazo como un gatito en busca de una caricia, pues últimamente y por alguna extraña razón Sebastián se comporta un tanto distante con él.
-¿Qué estás haciendo exactamente Ciel?- pregunta después de un momento cuando apaga el televisor al no encontrar nada bueno.
-Por fin me hablas.-
-No empieces o juro que te echo de aquí.- dice el azabache antes de girarse para quedar viendo a Ciel.
-Parece que me odias.- dice con un leve puchero.
-No te odio.- dice tranquilo. –Aunque tampoco esperes que te llene de besos después de que rompiste el pene.-
-Ya me disculpe por eso.-
-¿Y crees que basta con eso?- dice serio. -¿Te imaginas cuantas burlas he recibido desde ese día hasta hoy que fui a la última?-
-Ya sé que no, pero no se me ocurre que más puedo hacer.-
-Te ves bien de rodillas entre mis piernas, tal vez puedas iniciar con algo así.-
-Pero… ¿ya puedes hacerlo?- pregunta mientras se acomoda en la posición indicada por el mayor.
-Me dieron de alta esta tarde.- dice acariciando la mejilla del menor que lo mira emocionado. –No Ciel, eso no significa que ya podamos volver a nuestro usual ritmo. Tengo que esperar al menos un mes.-
-¿Y entonces por qué me insinuaste que querías que te hiciera sexo oral?-
-El médico que me atendió dijo que era una buena forma de comenzar a retomar el ritmo.-
-Idiota, seguro que el médico que visitaste es pervertido igual que tú.-
-Bueno, a decir verdad la doctora Durless siempre me ha parecido un tanto exótica, pero aun así una profesional muy confiable. Y todo esto es independiente de que ella sea tu tía.-
-Bien ya entendí…- dice mientras desabrocha el pantalón del mayor. –Mira ese bulto, juraría que se ve más grande, parece ser que la fractura te sentó bastante bien.-
.Tu cara me asusta Ciel, ¿Qué estas pensando?-
-En que tal vez deba romperte el pene más seguido si eso significa que se te ponga más gorda.-
-No te atrevas.- dice serio cerrando sus piernas.
-Ya Seb, no te enojes.- besa al mayor. –Desde ahora prometo cuidarlo bien, no quiero que se aleje de mí durante un mes por un descuido.-
-Más te vale.-
-Lo prometo.-
Moraleja: Si un buen rato quieres pasar, tus juguetes deberás aprender a cuidar.