La escuela no era un lugar muy divertido, pero con los alumnos de las otras escuelas era algo más entretenido, las chicas francesas eran algo repipis, pero podías tener una conversación con ellas, los chicos del norte eran silenciosos, les hablabas y solo te respondían con monosílabos.
Estábamos en la clase de pociones, el profesor nos había dicho que hoy realizaríamos la Amortenia una poción de amor que huele igual que el aroma de la persona que amas realmente, hacerla no fue muy fácil, es más, fue horrible, pero pude terminarla de forma correcta
-chicos ahora huelan sus pociones y digan a que huele-dijo el profesor-señorita Evans a que huele su poción
-huele a colonia italiana, a gomina y un toque dulzón-dijo Lindsay
-señor Dilaurentis-dijo el profesor
Mi apellido sonara raro pero lo cierto es que mi padre es italiano, mi madre es inglesa se conocieron cuando mi padre comenzó a trabajar como embajador del ministerio de magia italiano aquí en Reino Unido
-el mío...el mío huele a.…piel de oso, colonia fuerte y a cuero
Raro, porque ese olor no me recordaba nada a Jared, el odiaba el cuero y los perfumes fuertes, salí de la clase pensando porque mi Amortenia no olía al aroma de Jared
-hola lindo-dijo Jared dándome un beso en la mejilla
-hola amor-dije abrazándolo
-las clases en las que no estas se me hacen eternas-dijo Jared
-y a mí, ya has metido tu nombre en el cáliz?
-no, quería hacerlo esta tarde, vas a estar presente?
-no me lo perdería Jared
Los besos de Jared son salvajes, me devoraba la boca, su lengua se enredaba con la mía, sus manos me rodeaban la cintura y las mías su cuello jugando con los pelos de su nuca, mientras me besaba con el sentí que alguien me miraba, abrí uno de mis ojos, el chico de Durmstrang me miraba, yo sonreí pícaramente, le lamí el cuello a Jared mientras él me miraba y sonrió
-ey amor para si no quieres que te lo haga aquí mismo delante de todos
-vale-dije separándome de el
Me di cuenta de lo que había hecho, estaba provocando a ese chico que no conozco, pero que me sucede yo no soy así, por la tarde estaba con los demás viendo como la gente metía sus nombres en el fuego, Jared lo metió y todos le vitoreaban, estaba sentado encima de él, pero la entrada de los alumnos de Durmstrang me distrajo, el chico con el que me había chocado iba el primero, puso su nombre, lo mire fijamente y el me devolvió la mirada con una sonrisa.
-que le pasa al musculito húngaro contigo? no deja de mirarte
-Jared no seas celoso ya sabes que solo tengo ojos para ti
El chico de Durmstrang no dejaba de mirarme y mas allá de molestarme, me gustaba, me sentía excitado por su mirada qué coño me estaba pasando.
Cuando callo la noche caminaba por los pasillos en soledad, me gustaba caminar por los pasillos mientras no se oye nada, pasaba por los baños de la quinta planta cuando alguien me arrastro para dentro de uno de los cubículos, pensé que era Jared
-Jared no tengo ganas de sexo
-no soy tu novio
Era la voz del chico de Durmstrang, mis pelos estaban de punta, su aroma llego a mis fosas nasales, una colonia fuerte, como la que olí en mi Amortenia, sus manos se aferraban a mi cadera con fuerza, me giro para verlo de frente, me miraba con sus ojos rojos que me volvían loco.
-que quieres?
-follarte
-joder que directos son los de tu escuela-dije empujándolo levemente-siento decirte que no follo con desconocidos y tengo novio, así que mastúrbate
-no tientes bebe-dijo mientras me lamia el cuello-como tiemblas estas asustado? no verdad estas cachondo, te pongo más que tu novio
-déjame salir o comenzare a gritar y se hacerme muy bien la victima-dije empujándolo más fuerte
-no me vas a negar que te has puesto duro-dijo-tú también tócalo si quieres y compáralo con el de tu novio
-no voy a tocarte la polla, ahora si me disculpas me voy a dormir
Me fui del baño, estaba excitado lo reconozco, este chico me ha hecho volverme loco y menos mal que mi cordura no ha decidido irse o ahora mismo estaría gimiendo como un loco, no sé qué coño me pasa con él, pero guardare las distancias, no quiero perder a Jared por un calentón con alguien que se ira en nueve meses.
La sala común estaba vacía así que decidí disfrutar un poco del silencio y de la tranquilidad, me estaba dejando dormir cuando oí la puerta abriéndose, me quedé de piedra al ver al húngaro allí
-qué coño haces aquí?
-me has dejado muy caliente y tendrás que hacerte cargo
Me cogió en peso y me empotro contra la pared, sus besos eran apasionados, salvajes, no pude resistirme a ellos, nuestras lenguas comenzaron a jugar entre ellas, me separé por un gemido cuando su mano comenzó a acariciar mi pezón.
-me encanta como gimes, dime que debería hacer ahora?
-métemela por favor
No sé cómo acabe desnudo encima de él, cabalgándolo como si fuera una amazona en celo, sentía su hombría dentro de mí, me sentía lleno y quería más, era adictivo, estaba disfrutando de lo lindo, de un momento a otro era el que estaba encima, penetrándome con fuerza, besándome salvajemente, me encantaba oír sus gruñidos cada vez que mi culo se contraía y apretaba su pene, estaba a punto de venirme y sabía que el también, quería que lo hiciera dentro, que me marcara como suyo, su velocidad aumento, llegaba el clímax y…
-KALM ¡despierta vamos a llegar tarde a clase de encantamientos
Era todo un sueño, había tenido un sueño húmedo con ese chico que ni conocía, pero que me pasaba con él, tengo arreglar esto, yo quiero a Jared no puedo engañarlo con alguien que dentro de nueve meses desaparecerá.