« Narrador »
Eran las 5:30 AM y Jackson se estaba bañando, preparando para su trabajo, hoy tenía 4 cirugías programadas y seguramente más si ocurría algún accidente que casi siempre pasaba, iba a estar muerto al final del día, pensaba.
Aunque eso lo entristecía un poco él estaba muy contento, ayer a la noche antes de irse a dormir, Dylan le había enviado un mensaje y empezaron a hablar, habían hablado hasta las 3 así que solamente había dormido 2 horas.
Antes de dormirse, Jackson y Dylan arreglaron para verse al mediodía y comer algo, aunque el cirujano no le prometió nada.
Se había vestido con una camisa blanca un poco abierta y pantalón camuflado, a nadie le importaba como iba a vestir mientras estuviera ahí. Busco unos minutos sus llaves, de la casa y el auto y salió corriendo, ya eran las 6:00 AM.
Al llegar al hospital, saludó a las enfermeras y siguió su camino hacia una habitación que era solo para doctores. Abrió la puerta y al parecer su amiga ya estaba ahí... Pero estaba dormida en el sillón, otra vez se quedó en la noche.
- pone su mochila en el casillero y se acerca a ella_Allison... Ally? Despierta-
_Mmmmm........ No quiero, quiero dormir mami- Jack se empezó a reír y se despertó, ya que él le había mojado la cara con agua_Ay te voy a matar... Blake... Que haces aquí?-
_Eeeh es mí turno, son las 6 así que... Mejor ve a unos de los cuartos a dormir y yo te cubro ok?-
_Aja, gracias... Te debo una!- le dijo dándole un beso en la mejilla y dirigiéndose para aquél lugar mientras tanto él se puso la chaqueta y salió.
« Jackson »
Al ponerme la chaqueta, salgo rápidamente y me encuentro con una de las enfermeras, estábamos platicando tranquilamente de la vida, ella me contaba lo que había hecho anoche y yo... No le dije nada solo inventé algo sobre una chica, ellos no saben sobre mí sexualidad y la verdad tengo pensando seguir así.
Allison Williams o Ally como yo le digo, es la única que está enterada además de su novia Rebecca que no se ocultan nada y me pidió perdón ya que yo le había dicho que no le dijera a nadie... Estaba todo bien, mejor otra persona más para pedir consejo.
No pude evitar pensar en él, estoy aburrido, no vino nadie para mí especialidad y todavía falta mucho para mis cirugías; en estos momentos me gustaría verme arriba de Dylan, como ven yo acepto que soy el pasivo de la relación, quiero que se venga adentro mío.... Jackson Blake ya basta o tendrás una gran erección en unos minutos dije golpeando las mejillas, Rebecca me vió y se rió.
_Que estás hacie......- no pudo terminar la frase ya que unos gritos se escucharon en la entrada donde entran los pacientes que traen las ambulancias, Rebecca, yo, Zoey otra cirujana de pediatría y otras enfermeras nos dirigimos así allá.
_Que demonios ocurrió aquí...- le susurré en el oído a Rebecca, nos miramos fijamente, ella no respondió, en su mirada había preocupación claramente no era nada bueno que alguien entre muy alterado al hospital y mucho peor era si habían llamado a dos pediatras significaba que el niño estaba bastante mal como para dos médicas o que habían dos niños, cualquiera de las dos eran terribles.
Nos acercamos, habían dos personas con dos niños en sus brazos... Una de esas personas era, era Dylan, ayudé a las demás a controlar a los niños, el mayor de ellos con 12 años tenía una herida en el estómago muy profunda al parecer y su hígado ya no funciona, el otro chico de 10 años sufrió un fuerte golpe en la cabeza, se había desangrando mucho y no podían parar la hemorragia, e inmediatamente lo diagnosticado con muerte cerebral y la madre del niño al escuchar esto decidió dar el hígado de su hijo al amigo, le tomaron las pruebas y rápidamente se encargaron del tema.
Mientras tanto yo... Estoy yendo a buscar a Dylan cuando apenas lo vi hace varios minutos tenía un gran corte en la pierna y en la cara, espero que nadie lo haya curado porque quiero hacerlo yo.... No me juzguen solo quiero pasar tiempo con él y verlo... Y tal vez intentar tocar ese cuerpo de Dios que tiene.
Me tuve que pasear por toda la planta baja del hospital, no lo encontre sino hasta minutos después de que me di por vencido, estaba todavía herido hablando alegremente con una enfermera de nombre Luna y Rebecca... Rebecca? Por qué demonios está tocando su hombro y estaba bajando a un más.... Entiende perra es mío.
Me acerqué tranquilo aunque por dentro estaba enojado, claramente celoso era la palabra exacta.
_Bien Remmy, me voy tengo que buscar a alguien-
_Espera que!? Claro que no, tú te quedas para así te limpió la herida ok?- estaba a centímetros de ellos, logré escuchar lo que le había dicho entonces quise decir algo pero el me interrumpió.
_No gracias, lo prefiero a él- dijo apuntandome con él dedo y acercándose hacia mi_ Hola Dr Jake, nos vamos?- yo asentí y nos fuimos antes Rebecca me mate porque ya lo estaba haciendo con la mirada.
Hice que entrara en una habitación cerrada, había una cama y después lo demás era todo quirúrgico. Primero le limpié la herida de la pierna, al parecer no era tan grave despues seguí con su rostro.... Sus ojos eran hermoso, me enamoré de esa barba de 5 días y sus labios, quería probarlos pero estaba en el trabajo y era muy inapropiado.
Estaba limpiando su rostro, había un silencio enorme y se me ocurrió preguntarle qué había ocurrido, por qué esos niños estaban en tal mal estado.
_Dylan?... Sabes qué pasó con los niños?- dije poniéndole una venda
_Mmm pues, hubo un enfrentamiento entre dos bandas y los dos niños quedaron en medio, me acerqué y con mí compañero los trajimos..-
_Y como es que te hiciste estos dos cortes?- dije sentándome al lado
_Me acerqué con algunas balas de por medio y por suerte no terminaron adentro de mi cuerpo...- cuanto más hablaba más me daban ganas de comer.... Si lo dije en voz alta la verdad no tengo idea pero él se adelantó a eso.
Me agarró y empezó a besarme el cuello, luego mis labios... Por fin pude probar los, eran un manjar del paraíso.
Nuestras lenguas se juntaban, literalmente nos estábamos muriendo, no teníamos aire pero eso no nos importaba, nos acostamos en la cama y él me quitó la camisa y empezó a besarme el estómago, tocó de repente mí entrepierna que recién estaba despertando e hice un gemido a lo que él río.
Abrió el cierre de mí pantalón y yo le quise quitar su camisa de cuadros pero se detuvo así sin más, me pidió perdón y se fue.... Se fue!!! El muy imbécil, aunque mí imbécil me dejó tirado en ese maldito cuarto...
_Demonios... Me dejó caliente...- me dije por dentro, cerré con llave el cuarto y me acosté... Iré a verlo pero primero tengo que encargarme de mí grande y excitante problema.
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