P.O.V. Paco
Marcos: ya deja de insistir, te dije que no es nada –dice serio
-ya deja de guardarte las cosas para ti solo, te dije que no importa que pase yo te ayudare-
Marcos: entiende que hay cosas en las que no podrás ayudar
-¿quieres apostar?- digo retándolo
Desde que salimos de detención, estamos todo el camino de regreso, discutiendo pues él no quiere decirme que sucedió, eh insiste en que no es nada, pues si no fuera nada el no estaría así
Marcos: ya olvídalo Paco
-hoy dormiré en tu casa- digo rápido
Marcos: ¿Qué? ¿Por qué?
-porque quiero, al igual que tu quieres mantenerte en silencio, yo también hare algo que quiera-
Marcos: no es lo mismo
-ya dije-
Marcos comienza a correr, como para perderme pero de todos modos soy más rápido que el
-¿Por qué corres?-
Marcos: a veces solo quiero estar solo
-¡¡¡cuidado!!!- grito, pues un camión casi lo impacta pues no estaba viendo que corría a una pista, lo jalo hacia atrás y ambos caemos al suelo -¡¡¡¿¿¿no ves por dónde vas???!!!
Marcos: … -está asustado al parecer, yo solo lo abrazo y el corresponde
-sabes te ves tierno cuando reaccionas de modo inmaduro, me gusta, pero te pones en peligro muchas veces, no puedo evitar preocuparme por ti-
Marcos: disculpa
-¿Por qué corriste?- digo acariciándolo – ¿acaso estás haciendo un drama de problemas que son fáciles de resolver?
El solo baja la cabeza
Marcos: podemos ir a casa, quiero hablar contigo
-eso está mejor- digo sonriente -¿Tu mama está? O si no para llevar algo de comida
Marcos: si, si está en casa como siempre, pero quiero llevar algo para comer
-está bien, iremos a comprar algo ¿Qué quieres?-
Marcos: ¡¡¡papitas!!! –dice con sus ojitos brillosos
-ok, compraremos las papitas que tanto quieres- jejeje, este chico tiene un complejo con las papas
Marcos: disculpa por salir corriendo y por estar actuando así
-ese eres tú, no te disculpes por ser así, solo procura no ir corriendo cuando hay un camino que viene hacia ti- digo serio
Marcos: de todos modos no es lo más peligroso que ah pasado
-Pero si de los más peligrosos-
Marcos: ¿como la vez donde fui perseguido por el oso?
Paco: no me hagas recordar eso, aun tengo pesadillas
Entre bromas llegamos al establecimiento de comida, el mismo donde comimos el fin de semana y la misma señorita nos atiende
Maya: Buenas tardes, ustedes son los chicos de la otra vez ¿Qué se les ofrece?
Marcos: hola –dice saludando agitando una mano de un lado a otro y ella hace lo mismo
-buenas tardes, queremos llevar 2 Hamburguesas y una porción de papas- mientras voy pidiendo la orden puedo ver cómo es que la mirada de Maya se centra en mi pequeño Marcos, eso me molesta un poco
Marcos susurrándome al oído me dice
Marcos: creo la chica me está viendo –eso me molesto aun mas, pues lo decía alegre
-¿Tú crees?- digo jalándole la mejilla como regañándolo
Marcos: auch, oye eso duele
Maya: sus pedidos están listos, acompáñenme a caja a pagar
Yo voy y pago, cuando nos retiramos de ahí la chica sonriente le manda un beso en el aire a Marcos, eso me molesto
Yo lo saco a él casi corriendo
Marcos: ¿oye que te pasa?
-nada- digo frio
Marcos: ahora eres tu quien hace eso, me dices que yo me callo cuando tú haces lo mismo ¿Qué te molesta?
Creo tiene razón, de algún modo suelo ser algo injusto a veces
-nada, no importa- digo sacudiendo su cabello y abrazándolo por el hombro
Marcos: sabes que puedes confiar en mí
Llegamos a su casa y Marcos grita
Marcos: ¡¡¡Mamaaaaa ya llegue!!!
La señora Aurora sale de la cocina y dice
Sra. Aurora: ¿Cómo estas hijo? Oh que bien, Paco te acompaña
Marcos: se quedara hoy a dormir
Sra. Aurora: Me alegro que siempre cuides de mi hijo Paco, sabes que siempre eres bienvenido a esta casa
Paco: muchas gracias –digo sonriente
Sra. Aurora: ¿Quieren cenar?
Marcos: trajimos unas hamburguesas, comeremos eso
Sra. Aurora: procuren no comer mucha comida chatarra, en un rato más les subiré una jarra de limonada
Marcos: ok mama ya vamos subiendo
Dice empujándome escaleras arriba, ya en su cuarto él se tira a su cama boca abajo, agarra su almohada y la abraza
-oye, ¿ahora si me dirás que sucedió?- el niega con su cabeza aun abrazando su almohada
-¿Por qué?-
Marcos: no quiero –dice con voz infantil
- acordamos que me lo dirías cuando llegáramos-
Marcos: es muy tonto
-¿es otra de tus travesuras?- aunque dudo que lo sea, esta así cada que habla con Silvia es que se pone extraño
Marcos: ven –dice jalándome, pues estoy sentado cerca de el
-¿Qué sucedió?
Marcos: yo…
Sra. Aurora: Chicos, aquí les traigo su limonada –dice su mama desde afuera de la puerta, yo salgo y le recibo, de algún modo siempre algo interrumpe
-Marcos, ahora si dime-
Marcos niega con la cabeza otra vez, yo me acerco y le rasco su cabecita y él se pone como gatito y se me acerca
Marcos: yo, tengo miedo
-¿a qué?- digo intrigado
Él se me acerca y se acurruca a mi lado, que puedo hacer con este niño, hace cosas que sobresaltan mi corazón
Yo me subo a la cama y me acomodo para abrazarlo entre mis piernas mientras aun estamos sentados –Marcos, ¿es tan malo lo que pasa?-
Marcos: no es eso –dice triste
-¿entonces? No será otra vez drama innecesario-
Marcos: ¿a ti te gusta alguien?
Eso si me tomo por sorpresa -¿Por qué lo dices?-
Marcos: si una chica linda te dijera que le gustas ¿Tu que dirías?
Creo es por donde va esto -¿a qué o quién te refieres?-
Marcos: solo responde
-Marcos, creo te lo dije una vez hace mucho tiempo, no sé si lo recordaras; aquel día en el hospital cuando desperté estabas dormidito en una silla a mi lado- el me mira intrigado –ahí me hiciste la misma pregunta a modo de juego pese a que no lo tenía claro en ese momento igual te lo dije, hay alguien muy especial en mi corazón
Marcos: no lo recuerdo
-yo si-
Marcos: ¿entonces ya tienes a alguien en el corazón?
-si-
Marcos: ¿y esa chica es linda? –dice cabizbajo
-la persona más hermosa por dentro y por fuera- digo acariciándole la mejilla
Marcos: ¿Cómo es?
-pues, tiene pelo rubio y ojitos verde, de baja estatura pero le queda muy bien dándole un aura muy tierna- el parece entristecer
Marcos: ¿sabías que tú le gustas mucho a Silvia?
-¿Por qué lo dices?-
Marcos: …
-¿estás llorando?- enserio no entiendo que sucede
Marcos: ella me dijo, que tu le gustabas mucho, que desde aquella vez donde tú la ayudaste cuando le estaban robando ella se enamoro de ti, me estuvo hablando todo el día y preguntándome cosas de ti, como yo soy tu amigo más cercano me dijo que le dijera como podía enamorarte y hacer que te fijes en ella
Creo que yo voy entendiendo – ¿y eso qué? Ella no me gusta- el me mira sorprendido
Marcos: pero tu dijiste que la chica era muy linda y… -
-¿tú crees que es linda?-
Marcos: no es eso, solo que…
-¿Estabas celoso?-
Marcos: ¡¡¡puedes dejarme hablar!!! Yo, no quiero ser egoísta, no quiero que siempre estés cuidándome siempre estás ahí para mí y eso me gusta, pero pensar que te aburrirás de mí, me da miedo pensar que te irás, si estas con alguien yo ya no, ya no podría estar contigo como ahora y pensar que te gusta Silvia, me hace sentir que te voy a perder
- ¿y qué te hace pensar que me gusta Silvia? –
Marcos: tu dijiste que la chica tiene ojos verdes y es rubia, es bajita, ósea la describiste, es la única en el salón con esas características
-jajaja, creo no entendiste y sabes pequeño, eso es estar celoso- digo sonriéndole
Marcos: ¿y si así fuera qué?
Me sorprendo ante su respuesta –sabes, cuando este con alguien, será una persona que realmente ame, y ya sé quién es esa persona, pues me enamora a cada instante, mas y mas
Marcos: ¿pero quién es? Entonces me mentiste con la apariencia de la chica- me mira directo a los ojos y yo pienso, ¿es correcto que siga ocultándolo?
-no mentí, es esa su apariencia-
Marcos: ¿entonces si es ella? –dice apretando mis brazos suavemente y ocultando su carita en mi pecho
-no es ella, no es ninguna chica del colegio-
Marcos: ¿está en otro colegio? ¿O ya es mayor? –dice con un tono bastante triste yo, no quiero verlo así pero ¿Por qué entristece?, acaso tiene miedo que si es alguien más yo me fuera, quiero decirle que sin importar que no me iré, es mi pequeño a quien yo amo con todo mi espíritu pero
¿Qué dirá si le digo que me gusta? ¿Qué hará si sabe que es el dueño de mi corazón? Sé que soy muy importante para él pero no sé si del mismo modo que él para mí; tantas dudas inundan mi cabeza pero su vocecita me saca de mis pensamientos
Marcos: Paco –dice acariciando mi mejilla –no importa quién sea la chica, por favor no te alejes de mi, tengo miedo de que te vayas, de perderte, eres lo más importante para mí –dice eso y lagrimas corren por su rostro
El se intenta secar y sonríe, pero yo… ya no puedo ocultarlo más, ya no quiero hacerlo
-Marcos, mi lindo Marcos, yo no me iré de tu lado tenlo por seguro- me acerco poco a poco a él, a su rostro mientras veo como sus mejillas se tiñen de un rojo intenso, un tierno rubor que surge en su rostro por la cercanía del mio, me acerco a su oreja y le digo –Esas palabras salieron de lo más sincero de tu corazón, gracias por confiar en mi… ahora me toca decir que no es una chica de quien estoy enamorado
El se aleja un poco, parece aun no entenderlo
Marcos: no entiendo
-eso pensé-
Lo miro y poco a poco voy cortando el espacio entre nuestros labios
-yo, te amo a ti-
Dicho eso acorto por completo el espacio entre ambos y le doy un beso, un dulce y tierno beso que él no responde, siento mi estomago alborotarse y mi mente en blanco, por fin pude decirlo, sus labios, suaves y pequeños sería el mejor momento de mi vida, pero, el no responde, no se mueve y yo, creo que metí la pata
Me separo de él, algo decepcionado y muy triste, inevitablemente lagrimas caen de mis ojos, tanto por la emoción de haberlo besado, como del dolor que quizá no lo vuelva a ver igual
Cuando ya estamos separados me abraza por el cuello y me atrae hacia él, sus bracitos se aferran a mi mientras el comienza otro beso, algo torpe pero muy lindo…
Qué debo hacer, estoy muy feliz, pese a que intenta no puede llevar el mando de lo que hace así que lo agarro por el cuello y de la espalda para acercarlo más a mí, ambos sentados en su cama, en su cuarto, donde tantas veces lo vi dormir, reír, llorar, ahora puedo besarlo
Un terno beso que se hace más intenso poco a poco, hasta que ambos nos quedamos sin aire
El esta rojito eh intenta desviar la mirada
Marcos: yo…
Lo interrumpo, pongo un dedo en sus labios y le hace una señal como diciendo está bien, me bajo de la cama a apagar la luz y siento una presión en la espalda, unos brazos me rodean y un suspiro sale de mi boca
Con las luces apagadas, poco puedo ver su rostro pero lo suficiente para besarlo otra vez, el se pone de puntitas pues es muy bajito para besarme mientras estamos parados, yo lo cargo como si de una princesa se tratase y él se sobresalta
Marcos: no, no hagas eso –le doy otro beso y el calla
Lo recuesto sobre la cama y me hecho a su lado- te dije que sin importar que, no me iría- lo abrazo y lo beso en su frente
Escucho como un pequeño llanto que quiere ocultar
-¿qué sucede?- digo preocupado
El se aferra a mí
Marcos: tenía miedo, que te vayas, que te enamoraras de alguien y que me dejaras de hablar
-¿Por qué haría eso?-
Marcos: Silvia no me quiere, me detesta pues tu solo estás conmigo y si tú estabas con ella, ella no te dejaría hablarme otra vez
-jajaja, perdón por reírme, pero siempre te digo que haces un drama de cosas innecesarias, ella no me gusta y si acaso hubiera estado con ella, nada me alejaría de ti- digo dándole otro beso para que deje de llorar
-te dije que quien me gustaba era rubio, de ojitos verdes y además era una persona hermosa de muy lindos sentimientos, pues eso eres tú-
Marcos: tonto –dice haciendo un puchero
-sí, pero ahora sabes, soy solo tuyo- le doy un beso en su frente a un pequeño que parece se quedo dormidito después de llorar; yo de veras lo amo mucho