Los Uchiha miraron de la casa Ōtsutsuki a Sasuke, el azabache sonreía complacido.
—¿Qué hiciste?
—Nada.
—Para que haya gritado a sí, debió ser algo grande— comentó, frunciendo el ceño Itachi.
-—Puuu...—el sonido de su teléfono lo interrumpió. Sai miró el teléfono creyendo era Gaara pero era algo mucho mejor: las noticias. —Así que...
¿Qué tal tu noche con Naruto-san?
Sasuke y Mikoto se ahogaron con el jugo de naranja.
—¿Qué dices hijo?—Mikoto miró el teléfono... —¿Desde cuándo son novios?
—No somos novios.
Itachi miró el teléfono —Pues parecen muy acaramelados, y ese beso fue muy hambriento.
—Aún no es mi novio.
Aún...
Se miraron y sonrieron, era la primera vez que miraban a Sasuke tan serio y decidido.
—Hoy saldré con Naruto...
Sonrieron felices, pero Sai con maldad. Sabía por Gaara que Naruto era muy rencoroso.
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Se miró una vez más en el espejo de su habitación.
¡¿Cómo pudo el bastardo marcarlo de esa manera?!
—Idiota. Idiota. Idiota.
Gaara sonrió al ver el puchero y el rubor de su hermano —¿Qué fue exactamente lo que sucedió?
—No sé— apoyó su cabeza sobre el regazo de su hermano menor —. Desperté completamente desnudo. Sasuke también lo estaba. Cuando despertó sugirió que habíamos tenido sexo.
Revolvió los cabellos rubios —Yo no lo creo. Tal vez te jugó una broma.
—¿Por qué lo haría?
—No tengo idea. Pero es un Uchiha...
—Si—rió con burla—. Así como Sai.
Observó a su hermanito sonrojarse— ¿Te gusta verdad?
Asintió —Si... ¿Y si Sai me ve solo como el "vecino"?
—Lo dudo, Gaara. He visto como te mira. Te aseguro que le gustas. Date una oportunidad con Sai.
Asintió. Recordó el tema que quería abordar —Los Namikaze...
Frunció el ceño —¿Qué sucede con ellos?
—Yo... Sentí horrible al verlo sufrir.
—Yo también— confesó y sollozó —. Pensé que me sentiría mejor al vengarme pero...
Gaara besó la frente de su hermano —Te sientes culpable—el rubio asintió—... me pasa lo mismo. Pero no hay marcha atrás. Minato Namikaze legalmente te vendió la empresa. Era tuya y podías hacer lo que quieras con ella.
—Lo sé...—miró aquel tatuaje en la frente de su hermano —. Ese centro se realizará. Es el último diseño de papá, y haré que su sueño se cumpla.
—Lo sé. Haremos lo posible para que el último deseo de papá se cumpla. Ahora ve a cambiarte. Te hará daño si te quedas con la ropa mojada. Le diré a Shiro-san para que te traiga el desayuno.
—Gracias.
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Todos en la casa despertaron de un terrible humor, en especial, Minato Namikaze.
El rubio miró a su esposa. Tenía grande ojeras y sus ojos estaban rojos. Su hijos no se quedaban atrás.
—Minato-sama. El periódico.
—¿Malas noticias? ¿Mas reporteros en la puerta?
—Si— le entrego el periódico —. Será mejor que lo vea.
Asintió y abrió el periódico.
Vaya esperaba una parte de la historia, más no la foto en primera plana: Sasuke Uchiha entrando al elevador del hotel mientras llevaba al rubio en estilo nupcial.
—Son pareja...
—¿Quién?—preguntaron los tres.
—Sasuke y Naruto.
Ino sonrió maravillada. Se miraba tan tierna la foto —Hacen una hermosa pareja.
—Vaya. Y yo que creia que Sasuke era asexual— Menma rió.
Minato acarició el rostro de Naruto. Era tan parecido a él. Sus ojos y cabello todo era de él...
—¿Qué haremos, Minato?
—Buscarlos... Son nuestros hijos.
—¿Y la empresa?
—No hay nada que hacer— dijo con pesar —. Era suya.
—¿Qué? ¿Qué quieres decir Minato/padre?
—Yo le había vendido la empresa el viernes por la tarde— confesó por primera vez a su familia.