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Danke por Melu102

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Notas del capitulo:

Holu~ perdonen de verdad por la tardanza, es que no se me ocurría de qué manera cerrar exactamente el arco y abrir el siguiente en un mismo capítulo, así que se me complicó un poco ¡Pero acá está el capítulo quince! Espero les guste XD

Que lo disfruten~ 

   El menor despertó primero con un dolor de cabeza bastante notable puesto que tomó su cabeza con ambas manos al sentir las fuertes puntadas en aquella zona. Inspeccionó atentamente el escenario en el que se encontraba, llevándose una gran sorpresa seguido de un leve sonrojo al notar como los brazos de Ed se aferraban a su cintura con suavidad. El castaño observó el rostro de su hermano, el cual expresaba un semblante de alegría y serenidad que lograba desarmarlo por completo. Al sonrió con un poco de tristeza, había estado pegado a la persona que amaba toda la noche y ni siquiera se había dado cuenta ni había tenido la oportunidad de disfrutarlo. “Solo un poco más” pensó, mientras volvía a acurrucarse en el pecho de su hermano, disfrutando su calor, apreciando su fragancia.

   El mayor despertó entonces abriendo sus ojos lentamente, para luego agachar su cabeza mirando a su hermano, “Sigue dormido”, pensó el rubio, mientras dirigía su mano hacia la cabellera de Al, acariciando sus hebras castañas. Fue entonces cuando el menor subió su cabeza algo sonrojado y Ed dio un respingo por la sorpresa. Ambos quedaron mirándose unos segundos, hasta que el castaño se separó torpemente.

   -L-lo siento nii-san ¿Te desperté?

   -No, no te preocupes Al. Buenos días. – Expresó Ed mientras removía los cabellos del menor. Al miró un momento a su hermano, en su rostro se formaba una sonrisa que parecía decir que tenía el mejor buen humor y alegría que cualquier persona en el mundo.

   -¿Por qué tan alegre nii? – Se aventuró a preguntar, el rubio solo sonrió.

   -¿No recuerdas nada? –Preguntó Ed mientras el menor negaba con su cabeza, entonces suspiro con un poco de tristeza. Bien en el fondo, Edward sabía que le hubiese gustado que recordase aquello.

   -¿Qué fue lo que hice? – Preguntó entonces el castaño mientras veía reír a su hermano alegremente.

   -Bueno… te pusiste a cantar Niji, Stay Away y Over Soul. Te enojabas si no te hacia los coros. Tranquilo, no lo hiciste en público. – Respondió el mayor entre risas, logrando que las mejillas de Al se tiñesen de un intenso carmín, para luego soltar un  gran suspiro de alivio.

~~~~~~~~~~Alphonse~~~~~~~~~~

   Luego de que todos hubiésemos despertado dentro de la casa, Winry nos obligó a que la ayudemos a limpiar todo el desastre que habíamos ocasionado en la madrugada, realmente no creí que hubiésemos hecho tantos desastres, pero cuando observé la entrada de la casa pude divisar la cantidad de botellas, comida, platos sucios y otras cosas más que habían restregadas por todas partes, todos dimos un largo suspiro y nos dedicamos a dejar todo ordenado como estaba anteriormente. 

   Al terminar, luego de charlar algunas horas más entre todos, nii-san, el General, la Teniente Coronel y yo, nos encaminamos de nuevo hacia Central, ya que nuestras casas se ubicaban todas cerca del Cuartel, decidimos dar una vuelta por allí con la intención de “saber alguna noticia u algo ya que no pasamos por allí en mucho tiempo”, según Roy-san.

   Grande fue nuestra sorpresa al ver como todo el edificio se encontraba fuertemente custodiado por muchos militares y lleno de cintas de precaución por donde se lo mire. Al divisar al Fürher charlando con otras personas realmente serio, nos acercamos para recibir algún tipo de información acerca de lo sucedido. Él giró su vista y al encontrarnos se acercó rápidamente hacia nosotros mientras llevábamos nuestras manos derechas hacia nuestras frentes en señal de saludo.

   -Me alegra encontrarlos aquí, Coronel Elric, General Mustang.

   -¿Qué ha sucedido aquí? – Preguntó Roy, totalmente desconcertado.

   -Han robado el perro de cristal. – Explicó Dussek con preocupación. Tanto nii-san como el General quedaron totalmente perplejos ante la notica, con caras que incluso parecían no creerse aquello.

   -¿¡P-pero cómo!? ¡Se supone que aquello está custodiado las 24 horas del día incluso en vacaciones! ¿¡Cómo es posible que ultrajen algo como aquello!? – Preguntó molesto mi hermano, mientras la expresión del Fürher tomaba un deje de tristeza y frustración.

   -¿En dónde están los guardias a cargo? – Acotó Roy-san con molestia mientras Dussek desviaba su mirada hacia abajo.

   -Ellos… están muertos, los asesinaron. Pero no fueron balas, tenían profundos rasguños por todas partes… los destrozaron. – Todos nos sorprendimos ante las palabras del Fürher, si tenían la fuerza suficiente como para robar algo como aquello, destrozar a los guardias y salir con vida del Cuartel, no había duda de que eran astutos. Llevé ambas manos a mi boca con dificultad, si podían hacerle aquello a unos guardias podrían hacerlo con cualquier persona, incluso con Ed. No estaba seguro de lo que sea que era el “Perro de cristal”, pero de seguro debía de ser importante para la milicia.

   Luego de unos minutos de charlas que no pude escuchar debido a la baja voz con la que hablaban ambos, Dussek le pasó unos documentos a mi hermano.

   -Necesito que se haga cargo de esto, Acero. Usted es el único que puede con criaturas tan peligrosas como aquellas, nadie puede sobrepasar un poder alquímico tan potente como el suyo. – Mi preocupación se acrecentó cuando mi hermano asintió con seguridad. Me encontraba realmente aterrado ¿Es que acaso no era suficiente con alejarlo tantas horas de mi lado, que ahora lo enviaban a una misión así de peligrosa?

   -Señor, no es necesario que envíe a Acero, puedo hacerlo yo per-

   -Se lo ordené al Alquimista de Acero ¿Acaso usted es el Alquimista de Acero? – Las palabras que Roy expresaba con obvia preocupación fueron fuertemente cesadas por la voz firme y potente del señor Dussek, quien ahora se había parado frente a él elevando su cabeza, mirándolo con desdén. 

   -No… señor.

   -Entonces dedíquese a guardar silencio y conocer su posición aquí. No olvide con quien está hablando, General Mustang. – Dussek volvió nuevamente la vista hacia mi hermano quien dio un pequeño respingo ante la mirada del señor. – Se lo encargo mucho, Acero.

   -Sí, señor. – Dussek se retiró entonces del lugar dejándonos a todos dar un gran suspiro de alivio, de repente la cara de Roy volvió a su aspecto de preocupación, dirigiéndose a mi hermano.

   -Acero, si de verdad no estás seguro de esto yo pue-

   -Estaré bien Roy, tranquilízate. – Expreso nii-san mientras palmaba el hombro de Roy-san con despreocupación. – Vamos a casa, Al. – Asentí mientras saludaba a la Teniente y al General, alcanzando luego el paso de mi hermano.

~~~~~~~~~~Roy~~~~~~~~~~

   El sudor frio comenzó a correr por mi frente luego de aquello, si el enemigo había sido tan fuerte como para asesinar de esa forma a los guardias más calificados para cuidar el tesoro más importante de la milicia en menos de unos segundos, entonces quería decir que no estábamos tratando con algo precisamente fácil. No podía dejar que algo malo le pasase a Acero durante esa misión, tal vez si fuese junto con su hermano sería fácil, pero conociéndolo seguramente no lo dejará acompañarlo y teniendo en cuenta que hace mucho tiempo no pelea seriamente, tal vez haya perdido un poco de práctica.

   Simplemente no podía permitirme algo como aquello, no solo podría perder a uno de mis mejores subordinados, también podría perder una parte de mi familia, a un hermano, a un hijo para mí. Y lo peor de todo, con que maldita cara tocaría la puerta de su casa y le comunicaría a Alphonse si algo le llegaba a pasar a su hermano mayor, con que coraje lo miraría a sus ojos cubiertos de lágrimas, me partiría el alma en mil pedazos, simplemente no podía.

   -El informe dice que los ladrones huyeron hacia las afueras de Ciudad Oeste, probablemente cruzaron la frontera. – Dije entonces mientas dirigía mi vista hacia la Teniente, quien se sorprendió ante mi comentario.

   -¿Qué quiere decir, General?

   -Iré a un teléfono público, necesito hablar con la diosa de la muerte.

   Aun después de tres años me seguían impacientando estas pequeñas cabinas, me sentía encerrado, desprotegido, aún si tenía a la Teniente vigilando mis espaldas, no podía dejar de sentirme inseguro. Marqué lentamente los números y esperé paciente, hasta que una voz dulce y animada del otro lado del teléfono me respondió.

   -Bar Unglaublich zuflucht ¿En qué puedo servirle?

   -Buenas tardes, María. Tiempo sin saber de ti.

   -OH~ ¡Pequeño Roy! ¿Cómo has estado? Sabía que me llamarías~ - Dijo alegremente la voz detrás del teléfono, solté una pequeña risa y volví a hablar.

   -Te lo dijeron tus cartas ¿No es así?

   -¡Correcto! Que listo eres pequeño Roy~

   -Supongo que ya sabes lo demás ¿Cierto?

   -¡Exacto! No necesitas preocuparte, tengo a dos grandes chicos que podrán ayudar mucho ¡Déjamelo a mí!

   -Gracias, María.

   -Lo que sea por mi pequeño Roy~ voy a colgar, debo hacer un trabajo. Auf Wiedersehen~

   -Adiós.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

   En un pequeño bar a las afueras de la Cuidad Oeste, muy cerca de la frontera de Creta, una mujer de cabello y tez morena armaba rápidamente un pequeño pájaro hecho de papel, el cual tomó vida sorprendentemente y salió volando por la ventana del rustico local, con un destino indefinido.

   -Teniendo en cuenta que la grúa por aparcar mal les secuestrará nuevamente el auto… espero que no se tarden demasiado. – Expresó la mujer mientras apoyaba su mentón graciosamente sobre la barra, en señal de aburrimiento. 

Notas finales:

Uy~  esto se está poniendo bueno XD el que sea que se haya dado cuenta que quien es la señorita de los últimos párrafos merece todo mi respeto por haber leído el manga XD y el que no… ya más adelante se explicará quien es.

Les debo contar que a partir de los siguientes capítulos esto va a ser un verdadero desmadre, así que váyanse preparando xdd

En fin~ espero que les haya gustado ¡Y muchas gracias por leer!

Bye <3


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