Capitulo 7
̶ Deberíamos ir un momento al buffet, hay comida muy deliciosa ̶ Comento Saga pasando su mano por una de mis mejillas, en aquel momento dejé de mirar al otro peliazul, para asi mirar a Saga .
̶ Claro, vayamos, me muero de hambre ̶ Dije poniéndome de pie, tanto el como yo fuimos hasta el Buffet, ahí habia toda clase de alientos, era esta una de las primeras veces que asistia a reuniones tan importantes.
̶ Kardia hizo esta cena mas elegante que el año pasado, espero presentártelo luego Dita ̶ Murmuró Saga terminando de servirse lo que quería comer, yo solo lo mire unos poco minutos sin hacer mucho caso ̶
̶ Espero conocerlo… ̶ Hable con poco interés en ese tema, aún a lo lejos seguía mirando al otro peliazul, no entendía porque llamaba tanto mi atención, no lo sabía pero él también correspondía a mis miradas ̶
Al ir de regreso a nuestra mesa, Kanon habia desaparecido pues al parecer fue a saludar a los socios con los que ellos trabajaban, empezamos a comer agarrando los cubiertos, todo fue en calma de vez en cuando Saga posaban su mano en mi cintura, odiaba que este hiciera esto pero de buena manera lo alejaba, todo estuvo algo tranquilo hasta que un peli azul de ojos igual de azules se acercaba a la mesa, su atuendo era demasiado elegante, el aspecto de un Playboy
̶ Vaya, pensé que no te vería en toda la noche, Saga ̶
̶ Yo también pensé lo mismo, es bueno verte después de tanto tiempo Kardia, y se nota que no cambiaste nada ̶
Ambos hombres se abrazaron de manera fraternas dando algunas palmadas en la espalda ajena, en aquel instante aclaré mi garganta para que notaran mi existencia en el lugar.
̶ Oh y el debe ser ¿Dita?, enserio es un chico demasiado lindo ̶ El tal Kardia se separó de Saga para asi tomar mi mano y besarla.
̶ Asi es, y es mi prometido, Dita el es Kardia uno de los socios de mi empresa ̶
̶ Es un gusto conocerte Kardia ̶ Hice que soltara mi mano y asi le regale una tenue sonrisa ̶
̶ Sin duda te sacaste la lotería, alguien que en verdad me preocupa es Álgelo, quien todo el tiempo esta ocupado con su trabajo ̶
̶ Quiza esperando a la persona indicada, al igual que yo …Desde que conocí a Dita mi vida cambió por completo ̶
Saga tomo con mas fuerza mi cintura, yo solo le sonreí, si no fuera por la vida que me daba simplemente lo dejaría.
̶ Y Dita ¿Tú sientes lo mismo por Saga? ̶ Preguntó Kardia con una sonrisa de lado sentándose en una de las sillas, mientras se servia un poco de Wisky en uno de los vasos de la mesa ̶
̶ Por supuesto, Saga es como un príncipe que me salvo de una torre de la cual fui prisionero ̶ Por suerte yo actuaba demasiado bien, al terminar de decir aquello besé la mejilla de Saga ̶ ̶
̶ Me alegra que sean felices,¿Y pronto será la boda? ̶ Un curioso Kardia no dejaba de hacer todo tipo de preguntas.
La música de fondo era clásica haciendo que el ambiente fuera mas ameno y relajante.
̶ Aún Dita y yo queremos una vida solo de prometidos,La boda entre nosotros aun es algo lejana ̶ Con esa respuesta Kardia solo sonrió de lado mirando hacia los demás, ahí se fue acercando el peliazul que tanto observé en toda la noche, debe ser el destino, pensé.
̶ Álgelo, hasta que te dignas a venir ̶ Kardía dejo el vaso con Wisky en la mesa para asi tomar al peliazul por los hombros ̶ Este chico es uno de mis mejores amigos, aunque no manejamos el mismo negocio.
̶ Entonces tú eres Ángelo, me presento, yo soy Saga Michel y el es mi prometido Afrodita Lindberg ̶
La penetrante mirada del peliazul de cabello corto me hizo ruborizarme, trataba de verme lo mas inocente posible.
̶ Un gusto Saga, un gusto Afrodita ̶ Al decir eso último el tomo mi mano de igual forma y beso esta mirándome nuevamente a los ojos, se notaba que era un hombre bastante elegante ̶
̶ El gusto es mio Ángelo ̶ Respondí sin decir más, aquel momento solo parecía de los dos, sin que existiera Saga o Kardia.
̶ ¿Y en que trabajas Ángelo? ̶ Preguntó de repente Saga tomando un vaso de wisky ̶
̶ Soy doctor, me especialice en pediatría asi que es por eso que también estoy a cargo de este proyecto de los niños con Cáncer ̶
̶ Él es un exitoso doctor en Italia, ahí nos conocimos en la secundaria ̶ Agregó Kardia tomando asiento junto al peli azul de cabello corto.
Asi que era doctor, o más bien…es doctor, la noche la pasamos asi aunque ellos estaba hablando de negocios la mayor parte del tiempo, yo tomaba muy pocas veces ya que prefería el agua, no me gustaba estar ebrio, asi fue hasta un momento en que Saga quizo sacarme a baila, acepté con desgano ,la pieza era un vals lento, al bailar con él miraba al italiano, no podía dejar de verlo, cuanto hubiera querido que el fuera con quien ahora bailaba.
La mente la traía en otro lado, me quede varios minutos asi hasta que volvimos a la mesa, ahí Saga volvió a tomar con los socios de su empresa, me quede solo observando hasta que alguien toco mi hombro.
—Me gustaría saber si quisieras bailar una pieza conmigo, ¿Saga me permitirías sacar a bailar con Dita? — Saga solo asintió con algo de desconfianza, yo por un lado estaba contento mis suplicas se hacían realidad, pase a bailar con Angelo.
Él tomaba mi cintura con una mano, y con la otra tomaba mi diestra, empezamos a bailar , la canción era igual de lente, mis ojos pasaban a mirar los ajenos, trataba de verme inocente y que el se sintiera cómodo conmigo.
—En verdad eres alguien muy lindo Dita, tienes unos ojos hermosos— Este era el primer hombre que estaba apreciando mis ojos de esa forma, ninguno lo habia hecho antes, una sonrisa nerviosa se dibujo en mis labios
—Me alegra saber que le guste tanto mis ojos— Admití, después de aquello solo nos comunicamos con miradas como horas atrás, ¿Qué era esta sensación?, me sentía tan tranquilo a su lado.
Desde aquel día no vi nuevamente, miraba mis manos que habían sido tocadas por el en un suave roce, acaricié mis propias manos mientras cerraba los ojos, para después seguir peinando mi cabello al mirarme frente al espejo, después de unos poco minutos dejé la peineta en su lugar, toqué mi reflejo observando mis propios ojos con tanto detalle, pero de un momento ha otro me asusté al escuchar la voz del peliazul.
—Dita ya deberías estar en la cama durmiendo— El peliazul se acercó a mi a pasos suaves tomando mi cintura, pose una de mis manos sobre la mejilla de este y asi bese esta misma.
—No dormí pues estaba esperando a que llegaras, al parecer hoy tuviste mucho trabajo—
—Son cosas importantes de la empresa, hubo problemas con algunos papeles, pero se resolverán pronto—
.-.-.-FlashBack-Saga.-.-.
—Hay muchos problemas en la empresa este mes— Decía una joven mujer de cabellos rubios mientras dejaba algunos archivos en el escritorio.
—¿Es demasiado grave? —Pregunte, tomando los archivos ,los habia mandado mi hermano, suspire leve estaba demasiado preocupado pero no quería verme débil.
—Si lo es señor, varias de sus empresas en el extranjero están a punto de caer, ya que uno de los socios resultó ser un estafador— Al escuchar esas últimas palabras mis ojos se abrieron enormemente, pase una de mis manos por la frente, esto era un gran problema, eso quería decir que pronto estaría en bancarrota si la empresa en Grecia cerraba.
—June, puedes retirarte, gracias— La peli rubia hizo una pequeña reverencia saliendo de la oficina, me puse de pie para mirar por el enorme ventanal de la oficina, esto ya era el fin para el imperio de los hermanos Michel.
¿Quién era el estafador?,¿Quién se hizo pasar como un socio más en la empresa?, Esas preguntas no dejaban de rondar por mi cabeza, pronto me daría un grave ataque de locura, todo lo que tenía en el escritorio lo habia tirado al piso con ambas manos, una furia inmensa crecia en mi interior.
Todo siguió así hasta que un mensaje llegó a mi teléfono.
“—Saga, el estafador, ya lo descubrimos…Resultó ser Kardia Antares.
Atte:Kanon—“
Mordí con fuerza mi labio inferior, yo pensaba que Kardia era como un hermano para mí, le habia brindado mi apoyo a él, confiaba en él, me volví a sentar en el escritorio viendo los archivos que me habia mandado Kanon, los abrí uno por uno y eran de las empresas en cada país que tenía, todas cayeron incluso la de Grecia, y para más Kardia habia huido del país, sin duda ese dinero suyo era sucio.
—Saga…Estamos en bancarrota. — Kanon entró bastante agitado a la oficina, y yo solo lo mire para luego bajar la cabeza.
—Yo tengo la culpa por confiar en Kardia, lo siento Kanon—
Continuara…