Como el camaro estaba en el taller de los Hale, tanto Scott como Derek habían tenido que irse en taxi hasta el hospital, y la ida había sido bastante silenciosa.
Scott sentía que el cabello de la nuca se le erizaba como el de un gato asustado, y ni un masaje podía calmarle la desesperación que le estaba trayendo esos ojos escrutadores.
Al llegar pidieron un turno, y se encontraron con que el Doctor se hallaba en su descanso, tendrían que esperar. Algo que Derek Hale no deseaba hacer sabiendo a Lydia con Stiles.
Por suerte para ellos, el doctor llego en el momento justo, en el que iban a empezar una discusión. El hombre había entrado como si fuera un modelo de pasarela, haciéndose el galante con las enfermeras y en cuanto una de ellas le presento al hijo de una de sus grandes colegas, los ojos le brillaron junto a su gran sonrisa, y así se decidió que se les atendería sin ningún inconveniente.
―Isaac Lahey ―se presento.―No sé sí conozco a tu madre, pero después de verte a ti en su lugar, casi me alegro de que existan los pequeños accidentes. ― dijo, con una sonrisa que Scott no seguío.
Los de alrededor les miraron e incluso hubo alguien que carraspeo. Realmente a Derek no le agradaba ese sujeto, que parecía ser demasiado simpático, y al parecer la cosa se había vuelto reciproca, por que al momento de atender a Scott, hizo que Derek se quedara en la sala de espera, plantándole prácticamente la puerta en las narices, luego de que Scott entrara. Luego abrió nuevamente la puerta como si no se hubiera dado cuenta de lo que había echo, pero aclarando que en el consultorio solo entraba el medico y su paciente…,y lo hizo con una actitud autoritaria y adoctrinada que hizo a Derek poner aún mas molesto.
Scott imaginaba que si Derek tuviera un buen par de colmillos, seguramente intentaría gruñirle o hasta morder a ese doctor. Aunque a Scott muy al contrario del ojiverde, le había caído bastante bien, y estaba mas que agradecido con él, la verdad es que no estaba aguantando la actitud hostil de Derek.
Sentado en la camilla, observo como el doctor preparaba el yeso que iría en su brazo, el hombre sonreía demasiado, e intentaba llamar la atención de Scott, a lo que Scott interpreto como el típico doctor de niños.
Solo faltaba que le entregara una paleta, aunque a diferencia de eso, le hizo un pequeño muñeco en forma de yeso algo que Scott considero cool y lo guardo en el bolsillo de su chamarra.
Luego de algunas recomendaciones, le dio una cita para ver que tal iba el yeso.― Pero creí que solo debía venir para quitármelo dentro de un mes. Por que…, solo lo tendré un mes o un mes y medio..
― ¿Sucede algo especial en un mes?
― uh bueno, vera…,cumpliré dieciocho en dos meces.
― ey! Los dulce dieciocho, ― volvió a blanquear sus dientes mientras se sentaba en la punta de su escritorio.
Scott permaneció en la camilla tocando el yeso, y musito un censillo ― si.
― Es un momento especial, seguramente quieres pasarlo en un momento romántico con tu novia, imagino que a tu edad tienes ya pareja.
― Bueno, yo… aun no. Aunque ahí alguien…,realmente me trae de cabeza… solo que… aún no se lo digo.
― Interesante, pero bueno… si sigues mis indicaciones, para antes de soplar las velas estarás como nuevo.
― Será mucho… no a respondido mi pregunta.
― Bueno pequeño Scott, un antebrazo quebrado requiere de 6 a 8 semanas de yeso para curarse. ... El tiempo que deberas tener el yeso dependerá de tu edad y la velocidad de curación. por eso necesito que vengas de vez en cuando, para saber si tenemos que preocuparnos y de qué cosas debes estar pendiente, que podrían indicar un problema con el yeso o el brazo.
― De acuerdo, pero podría no decirme pequeño, es algo irritante cuando la gente lo hace.
―Oh, cierto estas creciendo.― Scott se sonrojo como hace tiempo no lo hacia, realmente este doctor empezaba a hacerlo sentir incomodo.
Scott salio con una de esas sonrisas que decía “por favor; sácame de aquí ahora” pero Derek no suele ser bueno leyendo semblantes así que creyó que al moreno le agradaba mucho el doctor. Otro punto para estar molesto con su hermano.
― Nos vemos en una semana.
Al caminar fuera del hospital Derek hablo ― ¿Una semana?, no debería ser cuando te quitan el yeso, o es que acaso; la fractura ¿es grave?
―No se de que te preocupas, tu eras el que quería arrancarme el brazo en la mañana.
― Yo no quise arrancarte el brazo, solo quería una explicación.
Scott observo como las personas fuera del hospital, les observaba ― vamos, no me gusta discutir en la calle.
Para cuando llegaron a un bar-café, se sentaron fuera y pidieron algo de tomar. Derek observo la vista y luego como a Scott se le complicaba endulzar su café. ― niño inútil, dame eso.
―0ye! ― Scott lejos de molestarse, escondió su sonrisa. Desde que Derek se había convertido en algo así, como un hermano, tendía a ser resuelto y a la vez comprensivo con su torpeza.
Su ceño se frunció, para cuando Derek había terminado de poner tres cucharas de azúcar en su café y girado la ultima vuelta. Ahí estaba el problema, la sensación extraña volvía a recorrerle hasta girar en el centro de su estomago. Scott encontró los ojos de Derek frente a frente, casi podía recordarse en una situación similar en la primera cena familiar hace cinco años, con los Hale. Cuando Talía y Melissa eran pareja y todo parecía una locura que nadie quería aceptar. Pero habían llegado a un acuerdo de que amaban a sus madres lo suficiente para soportar esa etapa de experimentación sexual retardada como la había llamado Laura. Algo que lamentablemente terminaría tres años en terminar.― Se que quizás no me lo creas, pero…,yo.
―Estas enamorado de él.
Scott miro a un costado y luego regreso su mirada al frente. ― Me gusta, me gusta mucho ― suspiro ― Demasiado, el hace que me sienta de una manera en la que nunca e podido sentirme con alguien mas.
―Desde hace cuanto te sientes así con el.
― Quizás desde que nuestras madres se juntaron, no lo se, al principio me sentía confundido, creí que tal vez, una parte de mi quería darle una cucharada de su medicina a mi madre, y Stiles estaba ahí… como siempre.
Siendo mi hombro, ese apoyo que siempre espero tener.
Derek aun tenia ese semblante endurecido ― Si es así, por que no se lo dijiste, o acaso lo hiciste.
― Por un momento, casi me lanzo en una confesión cuando ambos teníamos dieciséis, es mas… le ..yo le bese estando borrachos.
Derek toco su frente intentando evitar la migraña. ― pero…
― Stiles no recordó el beso, y si lo hizo… lo tomo como otra tontería que yo hacia estando borracho. Poco tiempo después, Lydia volvió al instituto y el empezó a seguirla como un cachorrito a un hueso, y eso me asusto. Al notar su absoluto interés en ella, entendí que me gustaba mas de lo que creía, y que quería tenerle, aunque sea como un amigo.
― espera, si es desde ese entonces… lo tuyo con Allison.
― Solo intente que Stiles no sospechara de mis sentimientos.
― Kira también.
― también…, Pero no es algo que quiera recordar. Ahora, tu… desde cuando…
― Yo nunca admití que me gustara ― Scott le dio un punta pies en su rodilla ― aunch , eso duele.
― Sincérate como, yo lo hice.
― Soy mayor que tú, no necesito hacerlo.
Soy el que interrogo.
Scott intento lanzarle otra patada por debajo de la mesa, pero Derek logro esquivarla aunque casi se cae al suelo. ― compórtate.
― Cuenta. Creí que te gustaban las chicas.
― ¿Cómo?, tu dijiste que sabias… acaso.
― Yo solo intuí, hasta que conocí tú reacción de esta mañana, jamás hubiese imaginado que te interesara Stiles. Pero nunca te había visto reaccionar así.
Y dado que no eres homo fóbico, por razones familiares. Solo me lance a lo mas posible.
― eres un maldito… ― su brazo cruzo sobre la mesa y sujeto a Scott del cuello de su camisa ―Vas a pagar esto.
― Derek!, Derek!
Recuerda mi brazo maldita sea.
― Lo siento, tú me exasperas ―, dijo soltándolo ― Y tienes razón, me gusta ese niño tonto, y no se desde cuando exactamente. Solo se que no puedo evitar sentirme atraído hacia él. Es algo mas fuerte que yo, cuando le veo, a veces siento ganas de besarle. Aun así, no me aprovecho de su estado o el mío inconciente para hacerlo.
― OK, me equivoque en eso. Pero, ¿Qué haremos ahora? Seguiremos escondiéndole a Stiles…,esto.
― No creo que sea lo correcto.
― Tampoco lo creo…, y aunque me gusta Stiles, no se si me agrada la idea de disputarlo contigo. Digo, también siento un gran respeto y cariño hacia ti, no podría hacerte daño, después de ser como un hermano para mi.
― Stiles también era como tu hermano, y eso no evito que te enamoraras de él.
Scott suspiro tomando un trago de café ― Supongo que no podemos evitar algunas cosas.
― Sabes….deberíamos volver. Stiles pudo aver despertado y no confío en Lydia.
―Puedes estar tranquilo.
―¿Por que?
―Lydia se me confeso hace una semana… y ahora esta esperando que acepte salir con ella.
― No la rechazaste.
― Me tomo por sorpresa.
― Dijiste que te gustaba Stiles.
―Y también dije que no puedo confesarme o pelear por el contigo.
―Stiles esta enamorado de Lydia, si sales con ella le romperás el corazón.
―Eso podría darte una oportunidad.
―No lo creo, no quiero ser un segundo plato de consuelo. Y tampoco, deseo tener que frenar una pelea entre ambos por esa chiquilla altanera.
―Puedes estar tranquilo, jamás le haría daño a Stiles.
― entonces.
―Lo que me preocupa es que Lydia salte hacia Stiles si yo la rechazo. Stiles no solo a sido mi pañuelo de lagrimas, también lo a sido de Lydia. No quiero darle razones para intentarlo con Stiles.
― Sabes…, ahora tengo mas ganas de volver a casa.
Scott río junto con Derek.
Para cuando subieron al taxi, para regresar a su departamento, Derek volvió a hablar.― La próxima consulta con tu doctor quiero que me avises. Ese sujeto no me gusta mucho, es demasiado simpático para mi gusto.
De acuerdo, para serte sincero, su sonrisa me dio escalofríos.
― Pues no se te noto. Parecías mas que amable con él.
― No quieras buscarme un remplazo para Stiles, Hale, no me gustan otros chicos. Solo él.
― No quise decirlo por eso.