-Yoongi hyung.- El príncipe se sobaba su mano mientras se acercaba más a Jungkook que parecía asustado.
-Lo siento príncipe pero su amigo no puede entrar al palacio. Si lo hace se comprometería a entregar su libertad a usted.-
-¿Qué quieres decir?-
Jimin aparece en frente de Taehyung y Yoongi sorprendiéndose del pequeño que estaba de más.- Un hijo del bosque.-
-Sera mejor si te lo explica Jimin.-
- Jimin, ¿Qué quiso decir Yoongi hyung con que Jungkook puede perder su libertad si entra al palacio?-
-¿Jungkook? Taehyung, ¿le diste nombre?-
-¡Respóndeme!-
Jimin estaba un poco atónito por el nuevo carácter del príncipe, sintiendo un poco de dolor.- Los seres que crecemos en la naturaleza somos libres si pertenecemos en aquel lugar. Sin embargo, una vez que pisamos el surco humano perdemos el derecho de hablar con la naturaleza, quedando completamente solos en aquel lugar. -
-En pocas palabras. Su comunicación con la naturaleza es intercambiada por la de los humanos.- Yoongi término la explicación.
Jungkook frunce su frente alejándose poco a poco de Taehyung.- ¿No podría volver a escuchar a mis padres?-
Jimin ve a aquel niño con algo de odio. Dentro de él aún quedaban rastros de querer volver a hablar con el entorno que lo rodeaba en aquella gran montaña.- Así es.-
Taehyung sabía el miedo que sentía Jungkook en ese momento acercándose nuevamente, tomando su mano con fuerza.- vendrás conmigo, ¿Verdad, Jungkook?
Jungkook cierra sus ojos escuchando lo que el cálido viento le decía- Aún eres muy joven para emprender tu vuelo, hijo mío.-
Tanto Yoongi como Jungkook habían escuchado las inertes palabras del ser.
-¿Qué deseas Jungkook?- Yoongi miro con seriedad al pequeño que cada vez se asustaba de lo que estaba pasando.
-No tenemos por qué preguntarle. Si el príncipe lo quiere con él, debe ir con él.- Yoongi niega ante la actitud de Jimin, haciéndole ver su enojo.- Eso es lo que quiere Taehyung. No me veas así.-
Jungkook suelta la mano de Taehyung empezando a retroceder.
Taehyung intenta acercarse pero un chasquido de dedos lo aposta a dormir poniendo nervioso a Jimin.
-¡Tae!- Jungkook grita al ver lo que pasaba con su nuevo amigo, sin embargo un capa de vidrio le prohíbe el paso.
Yoongi había hecho todo aquello para que las cosas empezaran a tomar el curso que era el comienzo de todo.- Vete Jungkook.-
-No puedo si Taehyung esta así.- El pequeño era un mar de nervios ante su impotencia de no poder acercarse a la persona que le dio un nombre.- ¡Esta bien! –Jungkook traga fuerte dejándose caer al piso entre lágrimas.- Renuncio al bosque, pero no me alejen de Taehyung.-
Jimin no podía creer lo que había escuchado de aquel pequeño.- ¿Estás seguro?-
-Maestro, no permita que nuestro pequeño se marche. Sí lo hace no sobrevivirá, necesitamos criarlo para que se convierta en un buen pilar para su rey.-
Yoongi escucho fuerte y claro el pedido que le daban los árboles, haciendo que la capa desapareciera.
Fue entonces que la convirtió en agua, la cual, envolvió a Jungkook dejándolo completamente dormido.- Borrare su memoria, de esa forma podrá volver sin dolor alguno.-
-Espere maestro. Permítale a nuestro pequeño conservar su nombre.-
Yoongi asiente.
Hace levitar a Jungkook dejándolo en algún rincón de ese inmenso bosque.
-¿Por qué hiciste eso? Él había aceptado la petición de Taehyung.-
- Y no la recordara.-
-¿Le borraste la memoria?- Asiente mientras Jimin ponía en su espalda a Taehyung.
Yoongi camino y Jimin lo empezó a seguir- ¿Y qué hay de nuestro Taehyung, también le borraras la memoria?-
-No, solo de diremos que fue un sueño.-
Jimin, por primera vez ve con odio a Yoongi mostrándole sus ojos azules.- Eres cruel con el príncipe.-
-Y tú muy consentidor.-
-La reina Yoona me lo dejo a su cuidado.-
Yoongi para su caminar encarando a Jimin, quien lo seguía viendo retadoramente.
En todos los años que vivieron juntos nunca se habían peleado. Esa era la primera vez.
Yoongi hizo aparecer sus ojos azul claro, haciendo que Jimin bajara la cabeza, ya que, si hablaban de poder Yoongi era mucho más fuerte que él.- A veces me pregunto si lo que sientes por Taehyung es otro tipo de amor.-
Jimin se sorprendió. Ahora se encontraba incomodo.- ¡Deja de decir estupideces!-
-Y si es así, ¿Qué hay de mí?- Yoongi dejo ver el dolor que sentía al nunca ser correspondido por Jimin.- Desde que tenía la edad de Taehyung me enamore de ti, pero, ¿Qué hay de ti? ¿Que sientes por mí?-
Yoongi sigue su andar dejando muy atrás a Jimin que seguía caminando lentamente con él príncipe.
-¿Amar? ¿Yo? ¿Pero a quién?- Taehyung se remueve en la espalda de Jimin, abrazándolo fuertemente asiéndolo sentir cálido y completo.- Yoongi, ¿Me odiarías si te doy una respuesta que no te va a gustar?-
Yoongi, al volver al palacio encuentra al rey Siwon de vuelta.- ¡Su majestad!-
El hombre se hallaba nervioso y alterado.- Yoongi, estamos en grandes problemas.-
Yoongi se acerca al hombre tratando de calmarlo, pero le fue imposible.- ¿Qué pasa?-
-Los pueblos vecinos se han unido para atacar a nuestro reino. Dentro de unos días seremos invadidos.-
-No si puedo evitarlo.-
-¡Yoongi!- El peli blanco, para su caminar volteando a ver al rey.- Tienen seres oscuros con ellos. Han oído hablar de ti, están preparados para todo.-
Yoongi permanece serio y calmado viendo cómo su rey se derrumbaba.- Su majestad, hace años usted me dijo que la fuerza era innecesaria para avanzar. Lo único que se necesitaba era confianza. Sé que gran parte de su confianza era la reina Yoona, y ella al irse lo dejo sin armadura.
Pero no se preocupe mi rey. Desde hoy yo seré su nueva armadura.-
Yoongi salió del palacio con la frente en alto, comandando los hombres que tenía siempre en su poder.
Desde entonces no lo volvieron a ver hasta que la mayoría de los pueblos habían cedido sus ataques.
Muchos de los que le enfrentaron lo nombraron Suga debido a su insípida, aterradora y fuerte neblina blanquizca que mataba aquello que era considerado enemigo.
Después de aquellos sucesos Yoongi cambio, su nombre cambio. E inclusive, Jimin había cambiado.
Esa cercanía que por años habían forjado se había enterrado.
Para Jimin, Yoongi había desaparecido y con ello nació Suga. El hombre frio y aterrador que no hablaba con nadie después de que su rey murió cuando estaba él en guerra.
El último mandato del Rey Siwon fue que Yoongi, ahora Suga, se volviera la mano derecha del nuevo rey, Taehyung. Por lo menos hasta que estuviera preparado para gobernar con sabiduría y honor en su mayoría de edad.
-Felicidades, eres un rey postizo.- Decía el rubio que veía a Suga de pie admirando el trono.- ¿su majestad desea algo?-
Suga voltea a ver a Jimin sin expresión alguna, haciéndolo sentir incomodo.- Yo no soy ningún rey.-al chasquear sus dedos hace que Jimin se acerque quedando unos centímetros de su boca.- ¿Qué hay de ti? ¿Qué es lo que deseas? -
Suga aprisiona los labios del rubio junto a los de él, besándolo con desesperación mientras Jimin luchaba por separarse.
Al lograrlo, mira con frialdad a Suga.- Podrás hacerme lo que te plazca, pero nunca tendrás lo que deseas de mí. Eso se lo daré a la persona que he decidido tomar como mi pareja.-
-¿Me pregunto si él lo aceptara?- Suga limpia sus labios alejándose de un Jimin que empezaba a sentir miedo del hombre que había visto el futuro del príncipe Taehyung.